Había pasado un día desde esa tarde de nuestra parejita. Jeongin estaba entusiasmado, iban de camino al parque de atracciones junto a un par de amigos de su novio. El rubio tenía un parche donde escondía la marca que le dejó su hyung hace un día, Bin no se queda atrás, este portaba una sudadera cuando él prefería utilizar ropa pegada a su cuerpo pero ese no sería el día.

Ambos ya habían entrado al lugar, donde muchas personas transcurrían, desde lejos Changbin logró localizar a sus amigos y arrastró a su novio hasta ellos.

—Chang hyung —saludo un chico peliazul, semejante a una ardilla según Jeongin, que ocultó una sonrisa al imaginarse a ese chico con una cola peluda y orejitas pequeñas.

—Les presento a Yang Jeongin mi novio —lo tomó por los hombros.

—Cuantos años saliendo... y recién vemos al conocido Innie que sale de tus labios, pensé que era algo falso para evitar las chicas que te le acercaban "Perdón, tengo novio" se hizo realidad, ¡Ay! —un codazo en sus costillas lo silenció de golpe.

—Lamento eso, totalmente mi culpa. Bin me invitaba pero yo me negaba y si me contaba las declaraciones de las chicas —río contagiando a Jisung.

—Me llevo por un momento a Jeongin, necesito su opinión, con permiso —así dicho arrastró a Yang hasta perderse de la vista de los mayores.

—Y... cuéntame, últimamente pasas mucho tiempo con Seungminnie o ¿No? —pasó un brazo Changbin por los hombros de Jisung, mirando como ambos menores se alejaban.

—Uhm, nada —se encogió de hombros desinteresado.

—¿Seguro? Note que Seungmin te miraba de una forma... extraña o no sea extraña si no de una forma ilusionada... ¿Han hecho algo que haga a Seung estar así? —Jisung negó —. Tal vez la esquizofrenia me esté jugando en contra o quien sabe, y espero que sea solo eso —carcajeo cambiando su expresión a una neutra—. ¿Vamos a comprar algodón de azúcar para los chicos?

—Un maní confitado para Minnie —camino primero dejando atrás a Changbin que le había dado un escalofrío.

Seo quedó mirando un poco a Jisung, algo ocultaban y eso no era bueno. A pesar de que ambos chicos eran sus amigos, Han solo lo conoció hace un par de años atrás, y a Seungmin lo conoce más tiempo, sabiendo que era un chico fácil de manipular.

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Por otro lado estaban los menores en una tienda donde vendían diademas con diferentes diseños, o muchas cositas lindas que le llamaban demasiado la atención a Jeongin.

—Se que, te costó muchísimo querer conocer a los amigos de Changbin... y si, te entiendo. Han, Bin, Minho y HyunJin pueden ser un caos, el único acorde de allí es Changbin Hyung. Dime Jeongin ¿Te trata bien Bin? —quiso saber el mayor.

—Si, si un día la relación llega a su fin, porque puede ocurrir, diría que yo sería el problema. Bin es bastante irreal como el tipo ideal de muchos y no se —contestó carcajeando y encogiéndose de hombros buscando algo que le combina a él y a su novio —. Y de conocerlos a ustedes, fue por muchos problemas pero, vamos acá estamos.

—Entiendo.

—Cuéntame ¿Eres algo con ese Hyung? —preguntó mirando al mayor.

—Sinceramente, solo son ilusiones. Han es igual que HyunJin hyung o Minho hyung, solo ven las cosas sexuales de una relación y si he estado con Han de esa forma, y... no me siento como yo mismo, me siento diferente —Suspiró haciendo que Jeongin se sintiera mal por el castañito, era dulce y se nota que el de verdad necesita algo mejor.

Segun Seungmin, su hyung Changbin era el cordero blanco entre corderos negros, sus amigos ven las relaciones solo en el ámbito sexual y Bin, simplemente como algo dulce, tirando a lo hostigoso y cuando se da el momento lujurioso es cuando el siente la necesidad pero, antes no.

—Has pensado ¿Decirle? —quiso saber tomando unas orejitas de conejo rositas y una de un zorrito así que ya tenía lo que buscaba —. Simplemente, siento que lo mejor sería hablar y si no lo toma bien, solo sale de su vida.

—Quizás tengas razón, pero no estamos acá para deprimirnos, estamos acá para pasar una tarde tranquila y entretenida, vamos a ver como sufren los chicos por las atracciones —le resto importancia.

Changbin y Han estaban discutiendo si es mejor lo dulce o lo salado, o si el frío o el calor, dichas discusiones solo ocurren cuando el chico de apellido Han saca sus debates innecesarios, ya que es muy probable que pierda con su hyung ya que este en su secundaria y prepa estuvo en debates incluso internacionales. Changbin con una sonrisa de victoria en su rostro volteó para buscar a su novio y amigo, así encontrándose a Jeongin con una diadema de unas tiernas orejitas de zorrito.

—Si está bien tierno tu novio —comentó sacando de sus pensamientos a Bin.

—Oh, pero Seung no se queda atrás —fulmino con su mirada a su Dongsaeng.

Changbin tenía razón, Seungmin se veía tierno, pero Han se negó a decir algo.

—¡Hyung! Mire, encontré unas orejitas que combinarán perfectamente con usted —abrazo de repente Jeongin a Bin —. ¡Ta-ra!

—¿Qué es eso? —mostró su preocupación, Han estalló en carcajadas logrando que su estómago doliera.

—No te rías, no quedó atrás, Minnie le trajo unas orejitas —se enojó Jeongin.

Mientras que Yang logró convencer a su novio de portar dicha cosa vergonzosa, Seung a la fuerza logró que Han se colocara eso.

—Dios, última vez que hacemos algo como esto.

—Hyung se ve bonito, aparte, ¿a quien se le ocurrió la maravillosa idea de venir? Yo hubiera preferido quedarme editando algunas fotos para mis clases —se defendió Seungmin —. Yo los invité y tú diste la idea, míralos son tan Agh, lindos.

—Son un par de hostigosos —habló bajito el chico peliazul.

—Nel, es mejor así, que a estar pensando en puras cochinadas como otros —sin más que decir se fue con la parejita pasando sus brazos por los hombros de ambos, recibiendo la sonrisa cálida de Jeongin y una sonrisa de comodidad por parte de Seo.

Han, suspiro sacando las orejitas de ardilla de sus hebras para seguir caminando detrás de ese trío. 

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