Seo no pensó que eso fuera a ser fácil, sabía que Jeongin no tenía resistencia alguna y lo lograba entender, por ello solo pudieron trotar mínimo veinte minutos y frenando cada tanto tiempo, pero era un avance. Hace un par de minutos habían vuelto al departamento, que por cierto, Seungmin había viajado donde sus padres a resolver unos asuntos como siempre que desaparece.

Bin ya había finalizado de preparar el desayuno para ambos, preparó el café de Jeongin quien se estaba duchando y también empezó a ver las últimas cosas de los maestros quienes debían de entrar en un par de semanas. Las vacaciones se le hicieron tan cortas que ya deberá empezar de ahora ya a tener ganas, porque por suerte le tocó ser nuevamente profe de jefatura del mismo grado que el año pasado.

—¿Qué haces? —pregunta Jeongin entrando a la cocina con su cabello húmedo después de bañarse.

Changbin paso su lengua por su labio para limpiar el rastro de café tras beber de este, así volteo a ver a Jeongin quien estaba con unos shorts y una playera de su pertenencia, cosa que le gustaba robarle las cosas.

—Solo miraba algunas cosas que habían mandado los supervisores de la vuelta a clases, nada importante —cerró su laptop.

Yang asintió, percatandose de que su novio portaba sus lentes de descanso y su cabello alborotado, cosa que lo hizo acercarse para acariciar los anchos hombros.

—¿Ya te matriculaste en la Uni? —quiso saber acariciando las manos de Jeongin.

—Si, lo hice junto con Seungmin —acercó su rostro al rostro del contrario.

—Está bien —sintió como el menor empezaba a dejar besos por sus mejillas —. ¿Qué tienes?¿por qué estás tan cariñoso?¿Despertar temprano te hizo algo en tu cabeza?

—Uhm, supongamos que hoy estás más atractivo que otras veces Hyung —sonrió sentándose a un lado de Bin.

Changbin corrió un poco para atrás la silla de la mesa para hacer que Jeongin se sentará en su regazo, atacando inmediatamente los labios de su novio sacándole un gemido al degustar el sabor a café de los labios de Bin.

—Rico —pasó su lengua por sus labios sintiendo el café.

Seo negó para abrazar al menor sintiendo el aroma de la esencia que este utilizaban al salir del baño, sintiendo como las manos del menor se paseaban por su espalda hasta llegar a su hebras para acariciarlas.

[♠️]

La pareja al fin, después de meses, desde esa cita donde Jeongin se compró su juego para la consola no han tenido una cita por sus diferentes razones. Changbin después de esa mañana planeo una cita algo rápido y sencillo. En corea no es muy normal salir de vacaciones a otro lugar, si no que suelen pasar un par de días en un hotel para relajarse, y eso será una parte de lo que harán. Jeongin, después de desayunar estuvo pegado a él como chicle, no lo negara, le gustó y le gusta mimar a su novio. Ahora lo tenía sentado en su regazo mientras que este miraba su celular y el se dedicaba a divagar por su mente.

Hasta que decidió hablar con Jeongin.

—Sabes que nosotros no somos de ir a citas y, antes de que entremos a nuestras ocupadas vidas, hoy cenaremos afuera y también iremos por un par de días a un hotel, de verdad debo dejar de preocuparme si hay gas o no, solo por un par de días —bromeó haciendo reír a su pareja, pero no duró tanto ya que el menor se preocupo.

—¿Eso no sería muy caro Hyung?

—No te preocupes de eso amor, tómalo como un regalito, ¿Okey?  —lo atrajo a él para abrazarlo y besarlo.

Jeongin cerró sus ojitos sintiendo los cariños que deposita el mayor en su cabeza o en su espalda. Le daba pena recibir pero no dar, y entendía que Changbin era alguien quien daba cosas materiales ya que siente que dando su amor no es mucho, incluso la madre de éste lo siente así, pero a Jeongin solo le basta pasar tiempo con su novio ya sea sin hacer nada o cocinando, aunque el solo este para estorbar más que ayudar. 

—Hyung, ¿a que hora iremos a cenar? —preguntó besando la mandíbula del mayor justo donde se encontraba dicha cicatriz que amaba.

—Uhm, dentro de unas horas —sonrió al sentir los besos de Jeongin.

Sus manos se fueron a parar en las caderas de Yang, jadeando cuando los besos empezaron a bajar por su cuello, especialmente trazando la cadenita de su collar que luego se convirtieron en mordidas o chupones. Las manos de este empezaron a desabrochar los primeros botones de su camisa para adentrarse en ella para tocar como quiso su pecho.

—¿Por qué te gusta tocar mi pecho? —quiso saber al sentir como su novio estimulaba su pezón.

Jeongin se separó del cuello para besar a Changbin sin darle una respuesta, desde hace mucho tiempo tenía algo planeado para hacer con Changbin, pero siempre se retenía al pensar que Bin se negaría tras oír lo que quiere hacer. Sin querer, por su molestia al pensar aquello había mordido los labios de Bin que se había quejado al respecto y también lo había separado rápidamente, cosa que apretó muy fuerte de su cadera. 

—¿En qué andas pensando? —pasó su pulgar por su labio viendo cómo salía un poco de sangre, eso le había dolido y mucho.

—Perdon, no fue mi intención —se disculpó sacando la mano de Changbin de la zona afectada para ver, no había sido tan grave pero si le dolió al ser separado y apretado de esa forma se percató de ello.

—Pues no lo demostraste mucho, ¿Que te he dicho de morderme los labios? —gruño molesto pasando su lengua por el lugar.

—Que no lo haga… pero fue sin querer, estaba pensando una cosa que me molestó y sin querer me quería desquitar con algo —bajo su mirada al sentir la penetrante de Changbin sobre la de él.

—Ah, ¿Y te desquitas conmigo?

—Pues sí ¿No? —se encogió de hombros.

—¿Qué te molestó para que mordieras así?

—Quiero hacer algo…

[...]