Los chicos querían hacer una pijamada para ver películas, comer comida chatarra y chismosear cosas, pero no podían ponerse de acuerdo. Hoseok quería que fueran a su casa, Jungkook y Taehyung lo mismo, mientras que Seokjin pretendía que fueran cada uno con su pareja. La cabeza de Jimin era un lío, pues él no podía aportar nada más que la bebida y comida ya que su casa era pequeña para tantas personas, y no sabía cómo ayudar a la causa.

—No me parece justo que vengan sus novios, es una pijamada de amigos Jin hyung—Jungkook no se encontraba de acuerdo en que invitaran a sus parejas, los viernes siempre habían sido noche de amigos desde que se conocieron. Y no tenían porqué ser modificadas.

—Es irónico, porque yo soy tu novio y con eso que estás diciendo me dejas fuera—el peli-castaño habló bajito haciendo reír al resto, la profesora de física los miró por sobre sus anteojos pero no dijo nada.

—Además, no todos tenemos alfa, por ejemplo Jiminie no tiene—el nombrado dejó de copiar las actividades en su cuadernillo en seco. No les había dado la noticia aún.

—¡Yo si tengo alfa, hyung!—todo el curso en ese momento se quedó en silencio, por lo que la voz del omega se pudo oír en toda el aula. Avergonzado bajó la cabeza, ahora todos sus compañeros sabían.

—¿En serio?

Jimin timidamente asintió, aunque a decir verdad no había hablado con su mejor amigo ni lo había visto desde el día en que hablaron por WhatsApp, por lo que no quiso contarles por el momento.

Se sentía pequeño e inferior ante la mirada curiosa o asombrada de sus compañeros. No le gustaba.

—¿Qué tanto miran? ¡metanse en sus asuntos, chismosos!—Jungkook soltó con fastidio, gruñendo al terminar la oración. No le agradaba que ni Jimin, ni ninguno de sus amigos se sintiera menos, porque nadie lo era.

La profesora les llamó la atención porque "estaban haciendo mucha bulla" para así colaborar con el grupito de chicos-en su mayoría omegas-. Una vez cada uno volvió a sus asuntos, sus amigos voltearon a verle.

—¡No nos comentaste nada!—fingió enfadarse, pero no era algo que se le diera bien.

—Jiminie, no es por presionarte pero—el beta no dejó que acabara de hablar.

—No digas eso, porque es exactamente lo que los cuatro están haciendo.

El omega suspiró, dejando el bolígrafo azul a un lado; pues no podía concentrarse en la clase, pensar en qué y como decir para no cagarla, y escuchar las mini-peleas de sus amigos.
No le daba el cerebro para procesar tanta información junta.

—Tengo alfa, y se llama Min YoonGi. Ahora, ¿puedo hacer la tarea, chicos?

No estaba enojado, pero por el momento iba a aparentar que sí para que lo dejaran en paz hasta salir de la escuela. A diferencia de Hoseok si sabia mentir y actuar.

Durante la clase nadie volvió a tocar ese tema, y por fin se habían puesto de acuerdo que irían a la casa del mayor de todos el día Viernes al dar por terminada las clases del día.

Siendo acompañado por Jungkook hasta cierto lugar, el omega llegó a su casa. Cuando cerró la puerta tras él, sintió el aroma de algo que su padre estaba preparando provocando que una sonrisa se formara en sus labios.

—¡Papá, ya llegué!—dejó la mochila en el sofá de la sala, tenía mucha hambre y cero ganas de subir hasta su cuarto y cambiarse de ropa. Se le hizo raro el que el hombre no le respondiera, por lo que se apresuró en ir a la sala contigua—, ¿pap- oh, ¡hyung!

La cara de preocupación que tenía cambió a una de sorpresa y alegría, su lobo sacudió la cola y chilló cuando corrió hasta el chico que lo miraba en el otro extremo de la cocina. Los largos brazos del mayor rodearon sus hombros mientras los suyos un poco, muy poquitito más cortos, se aferraron a su cintura, cada uno hundiendo la nariz en la curvatura del cuello contrario.

—Te extrañé—dijo bajito el alfa.

—Yo también, hyung.

Por el trabajo del mayor y el colegio de Jimin se les dificultaba verse, las videollamadas no eran suficientes para ese par de chicos, no cuando habían crecido prácticamente juntos.

—Jiminie—lo empujó suavemente para verle la cara. El chico asintió, sin soltar a su mejor amigo todavía—, Minnie...

—¿Si?

—Tenemos que hablar.