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• Chat Grupal •

LOS MEJORES PAPIS DEL MUNDO 😎💯

Mamá de Yugyeom: ¿Quién le cambió el nombre al grupo?
Hasta ayer éramos "Papás".

Mamá de Mark: Fue tu esposo.

Mamá de Yugyeom: Dios.

Papá de Yugyeom: ¿Pero somos o no los mejores papis del mundo? 😎

Papá de Jaebum: Sí somos 😎

Papá de Youngjae: Nadie como nosotros 😎

Papá de Mark: Los mejores 😎

Mamá de Jackson: Que bueno que aún no conocen a mi esposo.

Mamá de Bambam: Opino lo mismo.

Mamá de Jaebum: Si Jackson es así, puedo darme una idea de cómo es él 👀

Mamá de Jackson: Jackson es tranquilo a comparación...

Papá de Youngjae: ¿Y cuándo vamos a conocer a nuestro compi Wang?

Mamá de Youngjae: Espero y nunca. Sin ofender.

Mamá de Jackson: No ofendes, yo espero lo mismo.

Papá de Yugyeom: Están envidiosas porque somos más divertidos que ellas, pero cuando conozcamos a Wang y al papá de Bambam ya verás que seremos el mejor grupo de papis 😎

Mamá de Mark: ¿Por qué no llamas al papá de Bambam por su apellido?

Papá de Yugyeom: Aquí no le hacemos a los cultos satánicos. Este grupo es católico y cree en Dios.

Papá de Youngjae: Amén.

Papá de Jaebum: Amén.

Papá de Mark: Amén.

Papá de Jinyoung: Amén.
¿A qué le decimos "Amén"?

Papá de Youngjae: A que somos los mejores papis del mundo.

Papá de Jinyoung: Por supuesto 😎

Papá de Yugyeom: Intelectual, ven que te beso el cerebro 🌚

Mamá de Yugyeom: ¿Tú no estabas trabajando?

Papá de Yugyeom: Sí, mi amor 🥺❤️

Papá de Jinyoung: Domadoooo

Mamá de Jinyoung: Te envié por una cosa, y no la hiciste.

Papá de Jinyoung: 😶

Mamá de Jinyoung: Hablamos después.

Papá de Youngjae: Rip.

Papá de Jaebum: Que en paz descanse sus restos.

Papá de Mark: Fuiste bueno 😞

Mamá de Jinyoung: Ya que el inútil de mi esposo no lo dijo, lo diré yo. Jinyoung está enfermito y por eso no fue hoy a clases.

Mamá de Bambam: Con razón vi a los niños desanimados hoy.

Mamá de Yugyeom: ¿Qué tiene el bebé?

Mamá de Jinyoung: "Alguien" no controló lo que su hijo comía y no se dio cuenta de que muchas papitas con helado le iban a caer mal ☺️

Papá de Jinyoung: 👀

Papá de Jaebum: Que cagadazo.

Papá de Youngjae: Literal.

Papá de Jaebum: Basta, no me voy a reír.

Mamá de Jackson: ¿Y ya está mejor? ¿O aún sigue enfermo?

Mamá de Jinyoung: Está mejor, aunque ahora solo descansa.

Mamá de Mark: Los chicos deben de estar preocupado por él ☹️ Si le digo a Mark que Jinyoungie está enfermo no se quedará tranquilo.

Mamá de Jaebum: Igual con Jae.

Mamá de Yugyeom: ¿Pero tan mal está Jin? Porque podríamos llevar a los chicos a visitarlo. Si no es molestia, claro está.

Papá de Jinyoung: ¡Me agrada la idea! Así Jin se alegra un poco. ¿Qué opinas, cariño?

Papá de Mark: Igual te van a hacer dormir en el mueble por no hacerle caso a tu mujer, así que déjate de actuaciones.

Papá de Youngjae: 🤣🤣🤣

Papá de Jaebum: Que te calles un mes, dice.

Papá de Yugyeom: Volví para ver qué hablaban y me encuentro con esto. Cayó un grande.

Mamá de Jaebum: Creo que Park no será el único en dormir en el mueble.

Mamá de Yugyeom: Otros le van a seguir.

Papá de Youngjae: 🤐

Papá de Jaebum: 🤐

Papá de Yugyeom: 🤐

Papá de Mark: 🤐

Mamá de Jinyoung: Vengan a eso de las 3pm. No le diré nada a Jin para que sea una sorpresa 💖

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La mujer entró en la habitación del niño, apoyándose en la puerta para mirarlo jugar con la tablet en una aplicación que tenía el juego de las memorias y otros más a modo de niveles.

Se notaba lo aburrido que estaba, y es que Jinyoung probablemente estuviese en la planta de abajo mirando televisión, o jugando con el agua que salía de los aspensores del jardín, pero como aún no tenía la suficiente energía por su mañana delicada, no podía estar fuera de cama.

Primero empezó con dolores de barriga, luego le siguió una leve diarrea con algunas cuantas náuseas que terminaron en vomitos, y finalmente, —luego de remedios y alimentos para hacerle estómago— podía descansar del mal rato. A pesar de eso, su madre le había aconsejado quedarse en cama, y él no pudo hacer mucho en contra ya que se sentía algo fatigado. Sin embargo, no podía evitar sentirse aburrido, y dormir no era una opción ya que hace poco despertaba de un sueño reparador.

—¿Cómo te sientes, amor? —preguntó la mujer, tomando asiento al lado del niño, y comenzando a acariciar sus suaves cabellos.

—Me siento mejor, ya no me duele mi barriga —respondió, dejando la tablet a un lado, y girándose en la cama para abrazarse a su mami, recibiendo complacido las caricias que esta dejaba.

—Que bueno que ya no te sientas mal, ¿Quieres que te traiga papitas y helado para que comas?

Jinyoung se estremeció de asco y grima al escuchar esa combinación, y comenzó a negar desesperado. —No, mami. No quiero comer eso más nunca, ¡Es lo peor! —se quejó, y es que recordar lo que comió solo le traía de vuelta la sensación de malestar en su estómago, y las náuseas que sintió—. Me da mucho asco, iugh.

La mamá del niño solo rió por su actuar, y dejó un beso en la cabeza del infante. —No más papas con helado.

—Nunca más —se quedó un rato en silencio, antes de mirar a su mamá con tristeza—. Estoy aburrido. Por estar enfermo no pude estar con mis amigos hoy.

—¿Extrañas mucho a tus amiguitos? —el niño asintió—. Pero solo faltaste un día, y ayer los viste. Mañana, si pasas una buena noche, podrás ir y verlos.

Jinyoung se encogió de hombros. —A mi no me importa verlos siempre. Son mis amigos y los quiero mucho. No me aburro de verlos, y cada día es distinto porque siempre hacen cosas nuevas. ¿Ahora cómo sabré qué hicieron hoy? Si me lo cuentan deja de ser divertido porque es mejor estar con ellos.

La carita del niño se llenó de profunda melancolía, y la mujer sintió su pecho doler por eso. Jinyoung ya no era el mismo niño solitario de antes, que prefería leer libros a solas sin nadie que lo molestara. Ahora su hijo le gustaba más estar con sus amigos, y jugar con ellos. Incluso había dejado de lado sus libros, y solo los volvía a tomar cuando sus amiguitos le pedían que les contara una nueva historia, nutriéndose para hablarle de muchas cosas y complacerlos.

Y quiso llorar, porque ver a su hijo solo no era bonito, y saber que tenía a sus nuevos amigos, que estaba segura y permanecerían a su lado por mucho tiempo la hizo sentir dichosa. Porque no solo los niños eran amigos, sino que unieron también a un grupo de adultos en donde también se estaba forjando una amistad.

El timbre de la casa sonó, y la mujer espabiló en su lugar, sabiendo perfectamente de quién, —o más bien "quiénes"— se trataba.

—Uh, creo que la vecina Aerin llegó a verte —avisó, levantándose de la cama—. Le dije que eras más popó que niño y dijo que vendría de inmediato a traerte un remedio de plantas, tierra y pelo de un animal salvaje que no recuerdo su nombre.

Los ojos del niño casi salen de sus cuencas al escuchar a su madre decir tal cosa, y de inmediato se tapó con su frazada azul con dibujos de aviones de papel. —¡Bruja! ¡La señora Aerin es una bruja!

—¡Park Jinyoung, no seas maleducado! —regañó en broma, aguantando la risa. Sabía que su hijo le tenía cierto miedo a su vecina Aerin por su aspecto envejecido—. Esa mujer solo quiere ayudarte a sanar.

—¡Mami me va a matar! ¡No me quieres! ¡Te vas a quedar sin hijo!

Park no aguantó las risas, y las dejó ir con libertad, cerrando la puerta para bajar a la sala de su casa en donde se encontraban esos seis preciosos bebés que ya sentía como sus otros hijos, en conjunto con sus padres que hablaban entre ellos.

—Esa risa, ¿Qué maldad hiciste? —dijo su esposo, mirándola de manera curiosa pero riéndose al verla tan animada.

—No seas chismoso —movió la mano en su dirección, y se dedicó a saludar y besar las mejillas de los niños.

—Señora mamá de Jinyoung —llamó Jackson con atención—. ¿Ya podemos ver a Jinyoungie?

—Sí, etamos peocupados —le siguió Youngjae, teniendo esa mirada de cachorrito que derretía todo tipo de corazón.

—Lo estaño mucho —Bambam abultó sus labios tristemente.

Mark no dijo nada, pero en su rostro se mostraba lo preocupado que estaba por el bienestar de su amigo.

Yugyeom, por otro lado, no entendía muy bien lo que su sucedía, pero ese día en la guardería había sido diferente a los otros, y sabía que alguien le faltaba. —Ji...  —balbuceó interesado en que alguien respondiera su incógnita.

La madre de Jinyoung sonrió de lado, sabiendo que no solo su hijo la había pasado mal sin sus amigos.

—Jinyoung no sabe que ustedes están aquí, así que deben hacer silencio para darle una sorpresa. ¿Les parece?

Los niños asintieron entusiasmados, y fueron cargados por unos de sus padres para llevarlos a la habitación del pequeño enfermo en recuperación. La mujer abrió la puerta del lugar, y reprimió su risa al ver cómo su hijo temblaba bajo las sábanas al escuchar que entraban en el cuarto.

Sabía que estaba siendo una mala madre riéndose del miedo de Jinyoung, pero por los momentos iba a disfrutarlo.

Cada uno de los niños fue depositado en la cama, siendo Yugyeom quien gateó hasta el bulto que ahí se encontraba y sacó las sábanas de ahí, revelando al niño que todos habían extrañado. —¡Ji! ¡Aaahh!

Jinyoung abrió los ojos con sorpresa, mirando a cada uno de sus amigos. Abrazó a Yugyeom quien se había lanzado en sus brazos, y sonrió abriendo los brazos para los demás, quienes no tardaron en unirse en un enorme revuelo de brazos y piernas creando una montaña sobre Jinyoung.

—¡Te extrañamos, Jinyoungie! —exclamó Jackson, abrazando a su amigo con fuerza.

—¡Sí, no faltes más! —le siguió Jaebum, abultando sus labios a modo de súplica. 

—¡Me están plastando! —se quejó Bambam, quien tenía a Mark y a Jaebum encima.

Youngjae, —quien había quedado más cerca de Jinyoung— comenzó a dejar besos sobre su carita, alegando que así se curaría mucho más rápido, porque «el amor lo cura todo» según sus propias palabras.

—T-te queremos mu-cho, Jinyoung —dijo Mark, quien estaba arriba de todos—. N-no nos faltes o-tra vez.

—¡Aaaahh! —los gritos de Yugyeom los hicieron separarse, ya que el bebé estaba recibiendo todo el peso pero ningún tipo de muestra de afecto.

Se sentaron cerca de Jinyoung, mirándolo con atención. El niño simplemente sonrió avergonzado y se tapó hasta la barbilla con la cobija. —Estoy en pijamas. Me tengo que vestir bien.

—¡Estás perfecto! —dijo Jackson—. Hoy es tu día, así que acuéstate que vamos a cuidar de ti.

—Sipi, hoy seremos enfemeros —sonrió Youngjae, volviendo a acercarse a Jinyoung para seguir con sus besitos sanadores.

Yugyeom se acostó, apoyando su cabecita en la barriga de Jinyoung. —Ji.

—Y-yo traje es-to —habló Mark, sacando de su mochilita un peluche de osito—. Era m-mío, pero ahora es tu-yo.

—Y yo taje esto —Bambam le ofreció un libro que su madre había comprado para él—. Hay un píncipe como tú.

—Solo queremos que te sientas bien, así irás mañana y podemos estar juntos como siempre —el pequeño Jaebum se apoyó contra Jackson sin dejar de ver a Jinyoung—. Sin ti no es tan divertido estar. Es mejor cuando estamos todos.

Jinyoung sonrió. —Yo también los extrañé mucho. Los quiero.

Inevitablemente volvieron a unirse en un abrazo, pero nuevamente los gritos de Yugyeom los hicieron separarse. Ese día Ji era suyo, y no quería a nadie cerca de él.

—Siento que voy a llorar —dijo la madre de Mark al ver a los niños reír y hablar entre ellos desde la puerta.

Las otras mamás asintieron, mirando con adoración el enorme cariño que se tenían entre ellos. Un ruido se escuchó en la planta baja y la mamá de Jinyoung rodó los ojos. —Ustedes vigilen estos niños, que yo iré a ver qué hicieron los otros.

Rieron y negaron, sabiendo que ocasiones como esta se repetirían en más de una situación.

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¿Cuál es su bebé favorito? Me gustaría saber ʕっ•ᴥ•ʔっ