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                             La cita de Claudia y Jackson 

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El plan era que me tenía despertar temprano para que Luther le diga a mamá y Pogo que estoy enferma mientras yo me arreglaba sin que nadie se de cuenta 

Ya eran la 7:30 y Luther tenía que venir a mi habitación a esta hora 

Oí que tocaron la puerta y fui a abrirla 

—que bueno que llegaste — dije mientras me hacia a un lado para que entrara 

—bien a las 8:00 es el desayuno y yo le diré a mamá y Pogo que estás enferma — dijo recordando el plan 

—y si ellos vienen sólo hablaré por detrás de la puerta y si quieren entrar les diré que estoy indispuesta — complete lo que quería decir 

—¿estás segura que va a funcionar? — preguntó inseguro 

—estoy segura como de que me llamo Claudia Hargreeves — asegure con una sonrisa en mi rostro 

—bien a qué hora era tu cita? — preguntó con un suspiro 

—es a las 12:00 — respondí 

—¿el vendrá a buscarte? — preguntó 

—si — respondí 

—¿y tocará la puerta? — preguntó un poco preocupado 

—no, ya le conté nuestro plan — dije 

—si te hace sentir más tranquilo puedes ver como me voy con el a mi cita desde la ventana — dije poniendo una de mis manos en su hombro 

—está bien — respondió un poco más tranquilo 

—quiero que vengas a mi habitación de rato en rato para que me ayudes y finjas que me estás cuidando para que nadie sospeche — pedí 

—está bien — accedió

—ya casi es la hora del desayuno así que me voy — dijo y estaba apunto de salir de la habitación — ¿quieres que te traiga el desayuno?

— no, ya desayune — respondí 

—¿en que momento? — preguntó — ¿sabes que? No importa 

....

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝙇𝙪𝙩𝙝𝙚𝙧 

Regrese a mi habitación y unos quince minutos después oí la campana del desayuno.

Baje y vi que estaban Cinco y Vanya 

—¿y Claudia? — preguntó Cinco

—¿que? — pregunte por la repentina pregunta 

—siempre bajan juntos y están todo el día de arriba a abajo juntos — respondió con seriedad 

—Claudia está enferma no va a bajar — respondí parándome en mi sitio 

—buenos días familia — dijo Klaus entrando al comedor junto a Ben y detrás de ellos venían Allison y Diego 

—Luther cariño — me llamo mamá — ¿sabes dónde está Claudia?

—ella está enferma — respondí 

—oh, iré a verla — dijo Pogo

—no — grite 

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘿𝙞𝙚𝙜𝙤

—¿por que no joven Luther? — preguntó Pogo 

—es que ella no quiere ver a nadie — respondió ¿nervioso? Aquí hay gato encerrado 

—pero tenemos que ver su condición — insistió Pogo

—solo tiene gripe, no te preocupes Pogo — dijo Luther 

—está bien — dijo rendido 

....

Ya habíamos terminado de desayunar 

Dentro de una hora será el entrenamiento, alístense — dicho esto Pogo se fue del comedor 

Sabia que Luther ocultaba algo así que decidí seguirlo 

—Claudia soy Luther — dijo tocando la puerta de su habitación 

Vi que se abrió la puerta y Luther entró así que decidí escuchar detrás de la puerta 

—¿te descubrieron? — la oí preguntar 

—no, pero me puse nervioso — respondió 

—Luther cálmate — le dijo 

—no quieres cancelar tu cita con Jackson? — preguntó 

—así que ocho tiene una cita — susurre para mi mismo. No se por que al oír eso sentí una presión en el pecho 

—no pienso cancelar mi cita — respondió 

—está bien — dijo 

—bueno, me ayudas a alistarme? — le preguntó 

—pero yo soy un chico — dijo Luther 

—quiero que me des tu opinión nada más — le respondió 

—está bien — dijo

Me aleje de la puerta y regrese a mi habitación 

Después de oír que tenía una cita me sentía raro, sentía una presión en mi pecho que no me gustaba para nada 

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘾𝙡𝙖𝙪𝙙𝙞𝙖 

Ya eran las 11:55 y estaba lista y esperando en la ventana junto a Luther a que llegue Jackson 

—¿ese no es Jackson? — preguntó Luther señalando un lugar 

—si, es el — dije mientras saludaba a Jackson con la mano 

—prométeme que te vas a cuidar — dijo Luther poniendo sus manos en mis hombros 

—te lo prometo — dije dándole una sonrisa para que esté tranquilo 

—¿a que hora regresas? — preguntó 

—no lo sé — respondí con una sonrisa nerviosa 

—como que no lo sabes — preguntó un poco molestó 

—bueno tal vez a las cuatro o cinco de la tarde — respondí 

—como que cuatro o cinco de la tarde — dijo alterado 

—Luther cálmate no va a pasar nada — dije mientras salía por la ventana 

Cuando llegue a bajo salude a Jackson 

—hola — dijo con una sonrisa radiante 

—hola — dije devolviéndole la sonrisa 

—Claudia — oí que me llamaba Luther 

—¿que? — pregunte alzando mi cabeza 

—no llegues tarde — me dijo — y tú cuídala — le dijo a Jackson 

—no te preocupes — le respondió Jackson 

—adiós Luther — dije yéndome junto a Jackson 

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖𝙙𝙤𝙧 𝙤𝙢𝙣𝙞𝙨𝙘𝙞𝙚𝙣𝙩𝙚 

Los dos chicos iban caminando por la calle muy nerviosos ya que era su primera cita 

—¿que te parece si vamos a la heladería? — preguntó Jackson mientras sus latidos se aceleraban debido al nerviosismo 

—me encantaría — respondí Claudia con una sonrisa. Aunque por fuera se viera tranquilla, por dentro estaba que se moría de los nervios. Nunca había tenido una cita así que no sabía que hacer o que decir 

—¿que hacen en la academia en donde estas? — preguntó el chico mientras se dirigían a la heladería

—¿que? — dijo volteándose a verlo. La pregunta la había tomado por sorpresa

—es que he oído de la academia pero me gustaría saber que es lo que hacen — explicó rápidamente — disculpa si te incomode 

—no me incomodaste, solo que la pregunta me tomó por sorpresa — respondí Claudia con una sonrisa ya que había notado su nerviosismo — normalmente entrenamos 

—su entrenamiento es como de boxeo — preguntó poniéndose en posición de boxeo mientras fingía pelear con alguien. esa acción hizo reír a Claudia. Era la primera vez que oía su risa y era encantadora 

—si pero también tenemos otro tipo de entrenamiento — respondió aún con una pequeña risa 

—¿como cuál? — preguntó interesado. Le interesaba saber sobre ella 

—si has oído de nosotros en la televisión, supongo que sabrás que tenemos dones especiales no? — preguntó. No sabía como tomaría Jackson el echo de que ella tenga poderes. Sentía que podía arruinar la cita y no quería eso ya que Jackson le agradaba pero a la vez sabía que si el la rechazaba era porque en el fondo ella no le interesaba 

—si, pero cuáles son sus dones especiales? — preguntó. Jackson había oído que en la academia umbrella habían chicos con dones especiales pero quería saber que era eso de dones especiales 

Claudia dio un suspiro y habló —tenemos poderes — dijo y vio que ya estaban por llegar a la heladería — hablemos de esto adentro — dijo tomándolo del brazo para entrar

.... 

Ya habían pedido sus helados y Claudia estaba muy nerviosa por la reacción de Jackson, sentía que le había asustado 

—así que tienen poderes — dijo Jackson mientras comía su helado tranquilamente 

—si, eso no te asusta? — preguntó Claudia ya que lo veía tranquilo 

—para nada, al contrario me parece genial — dijo sonriendo. La verdad es que Jackson siempre había sido fanático de historietas y superhéroes y le parecía genial conocer a una persona con poderes — ¿puedo hacerte una pregunta?

—claro — respondió mientras comenzaba a comer su helado 

—¿que poder tienes? — preguntó. Un poco emocionado por echo de saber sobre sus poderes pero trataba de ocultar esa emoción ya que no quería que se sintiera incómoda 

—puedo congelar el tiempo — respondió. Sentía que podía confiar en el 

—eso es genial — dijo con una linda sonrisa 

Mientras tanto en la academia.. 

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝙇𝙪𝙩𝙝𝙚𝙧 

Estaba en la habitación de Claudia fingiendo que la estaba cuidando para que nadie sospechara 

—espero que Claudia no se tarde tanto — me dije en susurro antes de salir de la habitación. Cuando abrí la puerta me encontré con mamá 

—Luther cariño, como está Claudia? — preguntó con la sonrisa que la caracterizaba 

—todavía se siente mal — dije lo primero que se me ocurrió 

—oh, entonces entraré a verla — dijo intentado entrar pero cerré la puerta 

—Claudia no quiere ver a nadie — dije intentando ocultar mi nerviosismo 

—pero tú estabas dentro junto a ella — dijo amablemente 

—si, pero Claudia dice que aparte de mi no quiere ver a nadie más — invente — ya sabes cosas de mejores amigos 

—oh, entonces puedes darle esta medicina? — preguntó mostrándome unas pastillas que tenía en su mano 

—claro madre — dije tomando las pastillas para luego guardarlas en mi bolsillo 

—Luther quiero pedirte un favor — dijo antes de irse 

—¿si? — pregunte 

—ya que Claudia no quiere ver a nadie puedes ser tú el que la cuide hasta que se mejore? — dijo con su sonrisa amble

—por supuesto madre — dicho esto me sonrió y se fue 

Di un suspiro de alivio cuando desapareció de mi vista 

—¿a quien quieres engañar Luther? — dijo alguien detrás mío que me hizo saltar del susto 

—me asustaste — dije cuando me voltee a verlo y lo vi recostado en el marco de la puerta de Claudia — y a que te refieres cuando dices a quien quiero engañar? 

—se que cabeza hueca no está enferma — dijo con una sonrisa que indicaba que tramaba algo 

—¿quien? — pregunte haciéndome el desentendido 

Rodó los ojos ante mi pregunta —ocho, se que no está enferma — dijo con la misma sonrisa de hace un momento 

—claro que lo está — dije. No podía permitir que alguien se enterara que todo esto es mentira, sobre todo el 

—entonces quiero entrar a verla — dijo con una sonrisa desafiante 

—no — respondí 

—claro que si — dijo intentando entrar pero me puse frente a la puerta impidiéndole el paso 

—¿por que no puedo entra Luther? O acaso cabeza hueca y tú tienen algo que ocultar? — preguntó acercándose mientras embozaba una sonrisa 

—no tenemos nada que ocultar, solo que no puedes entrar porque Claudia no quiere ver a nadie — respondí a su pregunta 

—Luther no sabes mentir — dijo alejando su rostro 

—no estoy mintiendo — dije empezándome a molestar su insistencia 

—oí cuando tú y ocho hablaban de una cita — dijo dejándome preocupado 

—Diego por favor no se lo digas a nadie — pedí. Porque si alguien se entera de esto Claudia y yo estaremos castigados un largo tiempo 

—mi silencio tiene un precio número uno — dijo con una sonrisa victoriosa. Típico de Diego, no puede cerrar la boca sin algo a cambio, sobre todo si se trata de Claudia 

—¿que quieres? — pregunte amargamente 

—ya que yo les voy hacer el favor de cerrar la boca, quiero que si yo necesito ayuda en algo ustedes me ayuden en lo que sea — pidió 

—espera, dijiste ustedes? — pregunte recalcando el ustedes 

—si tú y cabeza hueca — respondió 

—no podría ser sólo yo? — pregunte —Sabes muy bien que Claudia no te haría ningún favor 

—lo sé, por eso es mas divertido — dijo soltando una risa — adiós uno — dijo yéndose 

—maldita sea — dije para mi mismo 

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘾𝙡𝙖𝙪𝙙𝙞𝙖 

Ya habíamos terminado de comer los helados y ahora estábamos en la feria 

—¿quiere jugar algún juego en especial? — preguntó 

—siempre quise jugar ese juego donde tiras cosas para ganar un premio — respondí 

—bien, vamos — dijo tomándome de la mano para ir corriendo hacia el juego. Cuando me tomó la mano sentí esas mariposas en el estomago que todos dicen

—que asco sueno tan cursi — pensé 

—¿cual quieres? — preguntó cuando llegamos al juego 

—el de la zebra con una guitarra — dije señalando el peluche 

—da por echo que lo tendrás — dijo tomando la escopeta para derribar los bazos de plástico 

—¿que? Eres súper Jackson y me vas a conseguir mi peluche? — dije con una sonrisa divertida 

—exacto — respondió con una sonrisa mientras derribaba el último bazo 

—tome jovencito — dijo el señor entregándole el peluche 

—gracias — dijo tomando el peluche — tome señorita, súper Jackson le a conseguido su peluche — dijo entregándome el peluche 

—gracias — dije riendo 

....

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝙇𝙪𝙩𝙝𝙚𝙧 

Ya eran las 17:00 de la tarde así que estaba en la ventana de la habitación de Claudia esperando a que llegara 

—¿por que tarda tanto? — me pregunte a mi mismo 

—y cuando esa cosa se cayó — oí que alguien decía 

—eso es inolvidable — dijo alguien para que luego se oyeran risas 

Cuando vi bien quienes eran vi a Claudia y a Jackson 

—Claudia hasta que al fin llegas — dije con tono de voz un poco alto para que me oyera ya que no paraba de reírse junto a Jackson 

—oh, hola Luther — dije levantando su cabeza para verme 

—oh, hola Luther — dije imitándola — ¿sabes que hora es?

—umm, no se — dijo sonriendo 

— son las cinco — dije un poco molestó 

—¿y? Yo te dije llegaría a las cuatro o cinco — dijo relajada 

—¿sabes que? Da igual — dije rendido

𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘾𝙡𝙖𝙪𝙙𝙞𝙖 

—bueno creo que ya es hora de despedirnos — dijo Jackson con su linda sonrisa 

—creo que si — dije con una pequeña sonrisa 

—me la pase genial contigo — dijo 

—yo también me la pase genial — dije recordando todo lo que habíamos hecho hoy 

—espero verte otra vez — dijo con una pequeña sonrisa. La luz del sol apuntaba a su cabello y se veía simplemente lindo 

—no te preocupes, cuando pueda te llamaré — dije poniendo una mano en su hombro 

—eso espero — respondió — adiós Claudia — dicho esto me dio un beso en la mejilla 

—adiós Jackson — dije mientras lo veía irse 

Me dispuse a subir por el tubo hasta llegar a mi habitación 

—Luther ayúdame — le dije ya que le veía sentado en el marco de la ventana 

—no lo sé, déjame pensarlo — dijo simulando que pensaba 

—no seas idiota quieres — dije fastidiada 

—bien — dijo y entró a la habitación para luego tomar mi mano para ayudarme a subir 

—gracias — dije cuando estábamos en mi habitación 

—¿y que tal tu cita? — preguntó sentándose en mi cama 

—bien — respondí dejando mi saco en mi silla 

—¿solo bien? — preguntó 

—solo te voy a decir que hoy pase toda la tarde con un chico espectacular — dije con una sonrisa 

—creí que habías salido con Jackson — dijo pensativo 

—a el me refiero idiota — dije tomando una almohada que estaba en mi mueble para luego lanzársela el cara 

—¿Claudia cariño puedo pasar? — oímos la voz de mamá detrás de la puerta 

—es mamá — dijo Luther con nerviosismo y verlo nervioso me ponía nerviosa a mi 

—¿que hago? — pregunte alterada 

—ponte tú pijama — respondí 

—bien, pero voltéate — dije y Luther me hizo caso 

—un segundo madre — le dijo Luther 

Termine de cambiarme y me solté el cabello para luego meterme en mi cama 

—adelante madre — dijo Luther sentado en la silla 

—hola cariño, te sientes mejor? — preguntó entrando 

—si ya me siento mejor — dije con una sonrisa un poco fingida 

—debe ser por las pastillas que le diste madre — dijo Luther mirándome 

—si, es gracias a las pastillas — dije siguiéndole el juego — la medicina de hoy es una maravilla 

—madre, que tal si dejamos a Claudia descansar un rato mas? — le dijo levantándose de la silla 

—claro, descansa cariño — dijo mamá mientras Luther salía de la habitación junto a ella 

—gracias — dije sin voz, solo moviendo los labios 

—no hay de que — dijo Luther de la misma manera 

Hola :) 

He estado ocupada estos días pero al fin pude actualizar esta historia. 

Si les gusto este capítulo dejen su voto por favor, nos vemos en el siguiente capítulo 

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