Ahí estaba ella, frente a la cámara con las piernas abiertas y cada uno de sus espectadores viéndola.

Llevaba puesto un traje de lencería negra de encaje, y las bragas hechas a un lado para que el vibrador tenga total acceso a ella.

Mientras más grande era la donación la vibracion y velocidad de aquel objeto iba aumentando cada vez más.

Los gemidos inundaban la habitación, sus espectadores veían su lindo cuerpo ser adornado por el sudor y como se arqueaba la espalda de la chica.

Con una respiración irregular, sus manos sujetaban las sábanas con fuerza.

Pedía a gritos liberar todo ese extasis y correrse para la cámara.

Su mano se guiaba hacia su clitoris haciendo movimiento circulares con el pulgar y presionando levemente.

Esa acción la hizo estar más deseosa de llegar a su máximo punto de exitacion.

Le llegó una donación de 15k de bits, soltó un gemidos perfectamente audible al sentir el repentino cambio de nivel.

Su espalda se arqueo, sus ojos se pusieron en blanco y sintió como por sus muslos corrían sus fluidos.

Se quedó recostada en la cama después de sentir aquella descarga eléctrica por su cuerpo.

Pará luego quitarse aquel juguete y ver hacia la pantalla de las donación y agradecerle a aquella persona.

— ¡Muchas gracias YutaOkkt! —dices con una sonrisa viendo el nombre de usuario — Un fiel seguidor del canal

Yuta, un joven que desde la adolescencia entró en la escuela de hechicería de Tokyo.

Y ahora, próximo a ser profesor de la escuela siendo un hechicero clase especial.

Yuta frente a la computadora con los pantalones hacia abajo y su mano manchada por el reciente semen que acababa de ser derramado.

A través de la pantalla lograba ver tus senos totalmente perfecto, tus pezones totalmente duros, gracias a aquel conjunto de encaje.

No le molestaba verte mucho menos darte su dinero, después de todo ya llevaba un mes desde que te conoció y ya había sido reconocido por ti.

No era un secreto tu rostro para la cámara, y Yuta tenía grabado en su mente cada una de tus facciones.

Y estaba deseoso por ver más.

— ¡Nos vemos la próxima semana! —exclama ella enviando un beso a la cámara y luego cerrar stream.

Yuta se limpia la mano y se acomoda los pantalones para luego ir a dar clases con los nuevos estudiantes.

Se sentía mal sí, pero prefería sentirse mal a perderse un stream tuyo.

Mientras tanto, tú que estabas terminando de apagar todo tu equipo te metiste a bañar para luego arreglarte e ir a hacer las compras necesarias.

Así mantenías tu día, como cualquier persona normal y cuando hacías streams estabas a la merced de tus espectadores.

Y luego volvías a tu vida ordinaria.

Así fueron los últimos meses y así seguirían, al llegar a tu casa empezaste a revisar tus redes sociales.

Y viste que estabas a menos de 2 mil seguidores para alcanzar los 200 mil seguidores.

Y querías hacer algo especial, y se te vino una idea a la cabeza tal vez un stream con un seguidor.