𝕮𝖆𝖕 9 ❱ 𝖒𝖔𝖒𝖊𝖓𝖙𝖔 𝖉𝖎𝖛𝖊𝖗𝖙𝖎𝖉𝖔 🌷༉
Unos niños de unos cuatro años aproximadamente estaban jugando en un hermoso patio lleno de flores. Era una tarde soleada y un poco fresca, y ambos niños jugaban a la pasadita con sus dos balones de fútbol, mientras un hombre pintaba un cuadro de unas plantas a unos metros de ellos, y una mujer tendía ropa en la cuerda.
─¡Jajajaja! Mi balón va más lejos que el tuyo─ rio uno de los niños, el cual no se podía ver claramente cómo lucía.
─¡No es eso, es que tú pateas más fuerte que yo!─ le reclamó el otro niño.
─Ya, niños, paren de jugar un poco, y vayan a adentro que está comenzando a hacer frío─ les dijo la señora, con ropa seca en sus brazos─. Recuerden que tienen galletitas y mi chocolate caliente especial.
─Está bien, mamá, ya vamos─ tomó su balón con uno de sus brazos, y con la otra ayudó a su amigo a levantarse─. ¿Vamos, Tsubasa?
─Sí─ dijo el pequeño con una gran sonrisa.
Tsubasa finalmente despierta luego de ese sueño. Pero no fue un sueño cualquiera, de esos en los que ocurren cualquier cosa ajena a la realidad, sino que fue como una especie de... ¿dèjá vu? Le dejó la sensación de que eso pasó alguna vez.
Quizás sí llegó a tener un amigo verdadero a muy temprana edad, pero por culpa del accidente automovilístico no logra recordar cosas que ocurrieron a ese edad. Debería preguntarle a su mamá.
Pero hay otra cosa que no entiende: ¿qué pasó? ¿Por qué apareció en su cama como si nada hubiera pasado? Lo último que recuerda es que estaba en la casa de Misaki, y de la nada todo se oscureció. ¿Acaso fue un sueño también? Pero se sintió tan real...
─Oh, Tsubasa, ya despertaste, hijo. Me tenías un poco preocupada─ Natsuko está a su lado, con una bandeja que contiene su desayuno, la cual deja en la mesa de luz de su hijo─. Estuviste dormido desde la tardecita de ayer hasta las nueve de la mañana de hoy, como quince horas. Ni de bebé dormías tanto.
─¿M-mamá? ¿Qué fue lo que pasó?─ pregunta, un poco adormecido.
─Fuiste a esa casa, y yo te llamaba al celular para preguntarte a qué hora pensabas volver, porque eran casi las ocho de la noche y no recibía mensajes tuyos, en una de esas llamadas atendió una señora que era dueña de la casa, me dijo que te había encontrado durmiendo ahí, y hasta te trajo en su auto hasta aquí después de que le dije por teléfono dónde vivías. Fue muy generoso de su parte.
─¿Acaso una de las niñeras de Misaki fue la que atendió?─ piensa─Tiene sentido, pero... ¿por qué me habré dormido de la nada? Yo estaba hablando con Misaki... Hoy en la tarde lo voy a ir a ver de nuevo. Oye, mamá, en todo este tiempo que estuve dormido soñé con algo que me hizo sentir que ya lo viví antes.
─¿Ah, sí? ¿Qué soñaste?
─Soñé que estaba en una casa llena de flores, con un señor que pintaba un cuadro, una mujer que tendía la ropa, y con un niño que jugaba conmigo y un balón, pero no le pude ver bien la cara, aunque tengo el presentimiento de que todo eso lo viví antes...
─¿Será que fue algo que pasó en esos años que no puedes recordar bien debido al accidente?
─Eso parece, pero necesito saber si realmente sucedió o no, porque ese niño pudo haber sido mi único amigo real en toda la vida... ¿Tú recuerdas que haya jugado con un niño cuando tenía cuatro o cinco años?
─Pues... la verdad es que no, hijo, lo siento. Soy una madre terrible, debería recordar eso, pero fue hace mucho tiempo.
─Ya, no te preocupes, lo voy a averiguar por mi cuenta─ estira su brazo para tomar el vaso de leche chocolatada para comenzar a beber de él─. Mamá.
─¿Qué cosa?
─Olvidé decirte que ayer estuve con un niño en esa casa, es un niño que le encanta jugar fútbol como a mí, y me invitó a jugar con él en su barrio hoy en la tarde.
─¿Estuviste con un niño? Pero me pareció entenderle a la mujer que te encontró durmiendo solo ahí...
─¿En serio? Todo esto es tan extraño.
─Bueno, hijo, puedes ir, pero trata de no dormirte, por favor, jaja.
─Gracias, mamá─ toma de la chocolatada.
Mucho misterio detrás de esa casa, detrás de esos sueños, detrás de ese niño. Tsubasa tiene muchas preguntas, y necesita las respuestas ya.
Durante el resto del día estuvo ayudando a su mamá a limpiar la casa, jugó un rato con su balón de fútbol en el patio, fue a hacer unos mandados, y se puso a hacer su primer apunte random para aprender algunas cosas. Un tema que le llamó la atención fue la Segunda Guerra Mundial, que la dio en clase de Historia, el año pasado, pero entendió solamente algunas cosas, y a medias, entonces quiso hacer su primer apunte de eso, para refrescar la memoria. Encontró un video corto que lo explicó muy bien, Tsubasa escuchaba atentamente, pausaba el video para ir escribiendo tranquilamente unas notas sueltas de lo que escuchaba en un papel aparte, también retrocedía unas cuantas veces para escuchar algo dos veces y que le quedara claro, y luego hizo el apunte final en una hora. Hasta él mismo se sorprendió al ver que le quedó tan bien.
─Wow, ¿cuándo aprendí a hacer esos títulos? Jaja, quedó genial. Lo voy a guardar en una carpeta junto con los futuros apuntes que haga, para asegurarme de que no se me pierdan, y así tener la mente alimentada. La verdad es que esto es divertido, hacer estos apuntes así realmente dan ganas de hacer tarea─ ríe levemente─. Creo que el próximo va a ser de la Primera Guerra Mundial, tuve que haber hecho al revés y primero empezar por esa, pero bueno, de cualquier forma voy a terminar haciendo los dos.
Tsubasa está yendo a la casa de Misaki con su balón de fútbol. Ahora sí le va a sacar foto a la casa para mostrársela a su mamá.
─Hoy no me puedo olvidar─ se dice a sí mismo─. Balón, hoy va a ser un día muy divertido, voy a poder jugar fútbol con alguien que me cae bien después de tanto tiempo.
Luego de correr unos cuarenta y cinco minutos, llega a la casa de Misaki, ubicada al lado de otras casas tan hermosas como la suya.
─Antes que se me olvide─ saca su celular y le toma una foto─. Enviar a mamá─ se la envía por mensaje─. Listo. ¿Misaki estará aquí?
En eso, ve que alguien se acerca caminando hacia él, del otro lado de la calle, trae consigo una canasta y un balón de fútbol. Es Misaki.
─Hola, Tsubasa, veo que estás bien─ es lo primero que dice─. Es que ayer estábamos hablando y tú te me desapareciste.
─¿Eh? No es cierto, me quedé dormido antes de poder responder tu pregunta... ¿Cuál era?
Misaki ríe.
─No importa, lo importante es que ya estás aquí. Ven, vamos, el lugar que te quiero mostrar es precioso─ comienza a caminar.
─E-está bien─ lo sigue─. Oye, ¿qué traes en la canasta?
─Algunas galletas y un jugo de frutas frescas que yo mismo preparé. Estoy seguro de que te va a encantar.
─Eso espero, porque tengo mucha sed, jaja.
─No te preocupes, ya falta poco, es solamente doblar a la izquierda y seguir por unas cinco cuadras.
─¿Tan cerca? Pero yo nunca vi el mar desde aquí...
─Tú vienes aquí por un camino que no queda tan cerca de la costa, y hay muchas casas que bloquean la vista al mar, pero ya lo vas a ver, en tres, dos, uno...─ al dar vuelta en la esquina, se puede apreciar un horizonte azul oscuro, está parcialmente bloqueado por árboles y casas, pero ahí está el mar.
─Wow... se ve increíble...─ dice Tsubasa con asombro─Cómo quisiera vivir en un vecindario así.
─¿Verdad que es muy lindo? Cuando era niño me encantaba correr por las calles, e ir de la mano con mis padres a la playa por esta misma bajadita.
─Extrañas mucho a tu mamá, ¿no, Misaki?
─Sí, bastante, la verdad, pero aun así soy muy feliz─ le muestra una amplia sonrisa.
─Me alegro─ le corresponde la sonrisa.
Por fin llegan al lugar, es un espacio verde que está rodeado por arbustos con flores y una cerca blanca, y ofrece una hermosa vista al mar. Tsubasa observa fascinado y totalmente sin palabras.
─Puedo decir por la expresión de tu rostro que te gustó.
─Sí... ¡Me encanta! Cómo me gustaría vivir en este vecindario. Creo que le voy a decir a mamá que me inscriba a la primaria Nishigaoka, que queda mucho más cerca de aquí que la Nankatsu, jaja, es broma, ya me anotó a la escuela Nankatsu, y voy a empezar el lunes.
─Espero que seas feliz en esa nueva escuela, Tsubasa, yo confío en que podrás hacer nuevos amigos y sentirte más cómodo con las clases.
─Eso me gustaría mucho. Oye, por cierto, hoy hice un apunte random de un tema de interés.
─¿Ah, sí? ¿Me quieres contar más?─ se sienta en el césped con la canasta─Podemos comer primero y luego jugar si quieres.
─Me parece bien─ se sienta al lado de Misaki y saca una galleta de la canasta─. El apunte es de la Segunda Guerra Mundial, que es un tema que ya había dado antes en la escuela, pero no lo había entendido muy bien, entonces quise buscar videos que explicaran el tema, e hice este apunte─ le muestra una foto que le tomó al apunte─. Sinceramente hasta yo me quedé sorprendido al ver que podía hacer esos títulos tan padres.
─Vaya, tienes talento, Tsubasa─ dice, fascinado─. La verdad es que esto es una buena idea para aprender, ¿qué temas te interesaría saber?
─Quizás la historia de Brasil, algo de la historia de Japón porque hubo unas partes que no recuerdo, jeje, algo de matemáticas, biología, muchas cosas, si te digo de a una no termino más.
─Interesante, si le pones ganas a apuntes como estos, puedes aprender cualquier cosa que ninguno de tus compañeros sabe.
─Eso es lo que quiero.
─Oye, tú quieres ser futbolista profesional, ¿no?
─Sí, y quiero ir a Brasil, ¿por?
─Deberías aprender a hablar portugués, te va a servir mucho, es uno de los idiomas que más se quiere aprender a hablar.
─De hecho tienes razón, no lo había pensado. Quiero aprender a hablar portugués.
─Quizás le puedas pedir a tu mamá que te lleve a clases particulares de portugués, o algún curso online.
─Me gusta tu idea, Misaki, me parece fantástica. Estoy buscando algo que me guste para hacer durante las tardes, pensaba en anotarme en el club de fútbol del Nankatsu, pero también quiero hacer otra cosa, y me acabas de dar una idea genial.
─Me alegro─ sonríe─, para eso son los amigos─ lo toma de las manos.
─¿Nosotros... somos amigos?
─Supongo, sólo si quieres.
─¡Sí, claro que quiero! Es sólo que no pensé que ya me considerabas amigo.
─Pues sí, jaja.
─No sabes lo bien que me siento estando a tu lado, Misaki, eres mi primer amigo en años, eres una persona tan cálida que me provocas ganas de estar contigo todo el tiempo.
─Tus palabras me hacen feliz, Tsubasa, ya estoy acostumbrado a que me digan eso, pero de todas formas me encanta que me lo digan.
─Debe sentirse genial que te digan eso muchas personas, ¿no?
─Sí, siento que soy una persona muy querida, y eso es algo que hay que apreciar, a las personas que te quieren.
─Por eso aprecio a mis padres, a mis abuelos, y a ti, que son las únicas personas que me quieren...
─No por mucho, Tsubasa, vas a ver que en tu nueva escuela vas a ser bien recibido─ lo toma de los hombros.
─Gracias, esas palabras significan mucho para mí.
─Siempre recuerda que eres amado por muchas personas, no estás solo.
Tsubasa siente que va a llorar, por eso decide cambiar de tema:
─Oye, ¿no íbamos a jugar fútbol?
─¡Es cierto! Lo había olvidado─ se pone de pie y le da la mano a Tsubasa para ayudarlo a levantarse─. Arriba, Tsubasa.
─Muchas gracias, jaja─ agarra su mano y se levanta.
─Tratemos de no patear muy fuerte para que no se vaya el balón al agua.
─Está bien.
En un lapso de media hora, ambos niños jugaron a pasarse el balón con maestría, y tuvieron mini duelos para quitarse el balón entre sí. Hubo risas y hubo algunas caídas, pero se divirtieron mucho, tanto que quedaron tendidos en el césped, mirando el cielo azul con nubes amarillentas, que indicaban que el sol se escondería pronto.
─Eres muy bueno en el fútbol, Misaki.
─Tú igual, se nota que quieres mucho a tu balón.
─Es mi mejor amigo, además de ti, claro.
─Mi balón también es muy importante para mí, es un amigo que me cuida en casa y a donde quiera que voy. Cuando estoy solo me gusta jugar con él, y también leer muchos libros. Mi madre tenía una biblioteca en casa, llena de libros, y me he leído todos y cada uno de ellos, no son solamente novelas y cuentos, son enciclopedias, libros de geografía, de todo. Uno de esos libros tiene las capitales de todos los países del mundo, es algo que es muy interesante y que no todo el mundo sabe.
─Oh, vaya, me gustaría aprenderme todas las capitales del mundo.
─También puedes buscar videos en YouTube, y así hacer apuntes con eso.
─Cielos, Misaki, ¿cómo es que se te ocurren esas ideas tan buenas?
─Soy un genio, jaja.
─Se nota─ se levanta del suelo y saca su celular─. Ya me tengo que ir a casa, fue un placer haberme reunido contigo hoy, Misaki...
─Espera, quiero darte esto─ le da una flor, o mejor dicho, se la coloca en el cabello, detrás de la oreja.
─E-esto es...
─Una flor─ ríe levemente─. La arranqué de uno de esos arbustos, es mi obsequio de hoy para ti, el de ayer fue una merienda, y el de hoy una flor, el de mañana será distinto, jeje.
─Vaya, muchas gracias, Misaki. Mamá va a quedar fascinada.
Tsubasa se va de ahí con una alegría inmensa. Oficialmente ya tiene un nuevo amigo con quien reír y compartir sus alegrías y sus penas, algo que toda su vida quiso. Ya puede empezar una nueva etapa en su vida con un objetivo tan anhelado cumplido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro