Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 13: ¿Mis padres se van?

KISUGI'S POV

La comida estuvo deliciosa. Mamá hizo unas nuggets de pollo ¡muuuuy ricas!

─Estuvo delicioso, Ritsuko─ dijo Izawa.

─Muchas gracias, Mamoru─ sonrió─. Ahora vayan a dormir que ya es tarde, y además hace frío.

─Sí, mamá─ le di un beso en la mejilla, a ella, a Mei y a papá, y nos fuimos a dormir. 

─Oye, Kisugi.

─¿Sí?

─Estuve pensando...

─Dime.

─Algún día quisiera tener una familia contigo─ me tomó de las manos y me miró, totalmente sonrojado.

─Por supuesto que sí, Izawa. Vamos a adoptar un lindo niño y...

─Sí, sí, adoptar... 

─¿Hay algo malo con eso?

─No, para nada... Es que... quisiera que tú tuvieras un hijo propio─ acaricia mi vientre.

─Yo también, pero hoy un hombre, Izawa, y desgraciadamente la vida no quiso que los hombres pudieran quedar embarazados─ me quejé.

─Sí... Aunque...

─¿Aunque qué?

─He visto que los hombres pueden hacer un transplante de útero (porque se necesita que el feto crezca en el útero) y un óvulo para que se cree el feto con el espermatozoide. Puedes hacer eso.

─Se nota que estudias en Biología─ dije realmente sorprendido.

─Tengo diez, ¿qué esperabas?

─Tendrías doce pero todavía no ponen esa nota en las calificaciones.

─Exacto.

Entonces golpean la puerta. Por lo suave que se escuchó, supongo que debe ser Mei.

─Onii-chan.

Es ella.

─Pasa.

Ella entró, vestida con su piyama.

─¿Puedo dormir con ustedes? 

─Por supuesto que sí. Ven─ dejamos un espacio en el medio de la cama para ella. Se metió ahí y la abrazamos para que entrara en calor.

─Mañana quiero ir a la heladería, onii-chan.

─Por supuesto, no tenemos nada que hacer. Ya entregamos la cartelera.

─Es verdad─ dice Izawa.

─¡Síiii!

─Bueno, a dormir se ha dicho─ dijo Izawa bostezando─. Buenas noches, Mei─ le da un beso en la frente─. Buenas noches, Kisugi─ me acaricia la cabeza.

─Buenas noches, chicos─ cierro los ojos, y me pongo a pensar en esta escena: Mei en el centro de la cama, con nosotros... Parece nuestra hija... Quiero que nuestro futuro bebé duerma con nosotros así como duerme Mei. 

Al final logré conciliar el sueño tomando la mano de Mei.


Al día siguiente, nos despertamos luego de nueve horas de sueño. Era una linda mañana de sábado: soleada, un poco fría, pero para eso nos abrigamos y ya, y siento un delicioso aroma a panqueques viniendo de la cocina.

─Qué rico aroma─ dice Mei.

─Sí. Ya me agarró hambre─ dije babeando.

─Oye, solamente puedes babear si ves mi cuerpo─ dice Izawa, poniéndose frente a mí.

─Lo sé, cariño, pero es que los panqueques de mamá son deliciosos.

─¡Tengo hambreee!─ Mei sale de mi habitación corriendo.

─¡Espéranos, Mei!─ la seguimos hasta la cocina, donde en definitiva había cinco platos de panqueques en la mesa.

─Buen día, niños─ dice mamá apagando la hornalla.

─Hola, mamá─ dijimos Mei y yo.

─Hola, Ritsuko─ dijo Izawa.

─¿Y papá?

─Fue al almacén a comprar fruta. El desayuno ya está listo...

Apenas nos sentamos, devoramos el plato de panqueques que había sobre la mesa. Si nos da mucha hambre, podemos comer un plato entero en diez segundos.

─¿Les gustó?─ se ríe. Se ve que se sorprendió por la rapidez en la que comimos los panqueques. Estamos llenos de sorpresas, jeje.

─Nos encantó─ levantamos el pulgar.

─Se nota.

Los cuatro nos reímos.

Entonces entra papá con la bolsa de frutas.

─Buenos días─ dijimos los tres.

─Hola. Veo que ya comieron─ deja la bolsa sobre la mesada.

─Síp─ me relamí los labios.

─Niños, escuchen, esto es importante─ dice mamá, con un semblante un poco serio.

─¿Es algo serio?─ pregunté un poco preocupado.

─No, no─ interrumpe papá─. Sólo les vamos a decir que nos vamos a Estados Unidos por un mes.

─¿A Estados Unidos? 

─¿Por qué se van?─ preguntó Izawa.

─Es que el abuelo Kotaro se lastimó la espalda, y no podrá ayudar a la abuela Maya a realizar la mudanza de Seattle a Los Ángeles. Por eso iremos nosotros allá.

─Está bien, ¿pero nosotros nos quedaremos solos?

─¡Obvio que no, mi niño! ¡No somos unos brujos!

─La tía Nagisa los va a cuidar hasta que volvamos.

─¿Quién?─ preguntó Mei.

─Mi hermana, Mei. Tú no la debes recordar porque eras una bebé de un año cuando nos visitó por última vez.

─Yo sí la recuerdo─ dije.

─Bueno, ella se hará cargo de ustedes dos.

─Okey. Los voy a extrañar mucho.

─Yo también─ dice Mei, un poco triste.

─Sólo será un mes, Mei. Estaremos de vuelta antes de que te des cuenta─ dice papá, acariciando su cabeza.

─Te divertirás mucho con ella y con Teppei, Mei─ dice mamá.

─Síp─ esboza una sonrisa.

¿Sin mis padres por un mes? Eso significa: el delicioso con Izawa sin que nadie se dé cuenta, ñaka ñaka ñaka.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro