Cuando Jungwon despertó, se removió por toda la cama, comenzando a sentirse feliz de que por fin ese día era de descanso, estaba solo y...

Mierda, Daniel.

se levantó mareado ante tal repentino movimiento, tocándose la cabeza, viendo la hora, 11:30 am, cuando intentó bajarse la cama, sintió un olor a cítricos.

Doble mierda, Heeseung.

¿Dónde estaba él?

bajó las escaleras, sintiendo un olor delicioso, guiandose a la cocina se encontró con una escena que le paralizó el corazón, ahí estaba Heeseung con Daniel en brazos mientras revolvían algo en una olla y mientras eso sucedía, daniel estaba tranquilamente con su chupete mientras escuchaba a Heeseung hablar de no sabía qué.

—¿A qué horas trajeron a Daniel?—preguntó Jungwon sobresaltado levemente a Heeseung y a su cachorro.

—Despertaste—se acercó a él, dándole al pequeño con pena.—mas o menos a las ocho.

—Oh, ¿y por qué no me dijiste?

—Estabas durmiendo muy tranquilo, lo recibí yo, espero que no te haya molestado.

—No—Jungwon se apresuró a contestar—está bien, no me molesta, pero entonces eso significa que ¿hablaste con Jay?

—¿Él alfa? si, me dió recomendaciones sobre Daniel y bueno, intento decirme que si era que a mí me daba vergüenza tu cachorro, rápidamente le dije que me daba vergüenza no saber nada sobre un cachorro no de él.

A Jungwon se le apachurró el corazón.

—No tienes que tener vergüenza, como te dije, está bien, supongo, no es tuyo, no tendrías que responder por él como si fuera tu obligación.

—Y yo estoy seguro de que te dije a tí que si me interesabas tú, también me interesaba él.—Dijo serio, demandante y el Omega de Jungwon solo obedeció.

—Esta bien, ¿que es lo que preparas?—cambió de tema.

—Ah, sí, eso—río nervioso—busqué por internet información sobre los cachorros de los meses de Daniel y encontré una receta de colada de avena, de almuerzo.—se tocó la nuca avergonzado y Jungwon río, acariciandole un brazo y dándole un beso en la mejilla de atrevimiento.

—Daniel come colada de vez en cuando, no sería mala idea darle eso.

—La cosa es que no se cocinar, digo, soy un idol, tengo la vida ocupada y llegar cansado del trabajo a cocinar es algo que nunca hice.—Soltó el dato apenas vió a Jungwon acercarse a la olla con una cuchara.

—Pero para esta ser una primera vez está deliciosa —dijo mientras terminaba de probar.

—¿De verdad? muchas gracias—Los ojos de Heeseung brillaron, Jungwon pudo sentir hasta el alfa de Heeseung latiendo la cola, se veía como un niño pequeño ante tal cumplido.

Tal vez lo que necesitaba Heeseung era alguien quien lo acompañara, alguien que lo amara sin interés, lo que Heeseung necesitaba era un compañero, de vida.

—Tienes que contarme todo a detalle, ¿que está pasando?—Dijo Jay, Jungwon se encontraba tranquilamente en su casa solo con su cachorro y Jay, pues Heeseung tuvo que ir a su empresa a hacer algunas cuantas cosas, le dijo que volvería pronto con la comida.

—No ha pasado nada, el volvió a Washington hace poco, una semana tal vez, fue a la cafetería, hablamos, me pidió perdón por no volver conmigo y me contó que lo tuvieron presionado por las fotos de los dos que se filtraron saliendo del evento, hablamos más, me confesó que quiere cortejearme, incluso quiere ser una figura paterna para Daniel.—Jungwon jugó con su bebida, perdido en las palabras que repitió sin mirar a Jay.

—Confio en él Jungwon—el omega levantó la mirada.—O sea, no del todo, ya sabes.

—Si blah blah blah, alfa celoso.—Se burló Jungwon y Jay bufó.

—Has sido mi hermanito la mayoría de nuestras vidas, no confiaré en el primer alfa que se cruce por tu vida.

—Okay, continua—Rodó los ojos.

—Me da un buen presentimiento, se nota que es una alfa distinto, podría ser un buen papá para Daniel.

—Eso no está en discusión aún, apenas conozco a Heeseung, apenas me esta cortejeando, no puedo caer por él tan rápido.—Jungwon se mordió el labio.

"mentiroso" se burló su Omega.

era claro que Jungwon ya había caído, muy profundamente por Heeseung.

—Tienes razón, no te confíes tanto, es una figura pública, su imagen y su vida privada no es secreto de nadie, ten mucho cuidado.

—Si, tienes razón espero que—Las palabras de Jungwon se cortaron cuando alguien tocó la puerta.

—Supongo que es él.

—Si, puedo sentirlo—Jungwon se levantó abrió la puerta viendo la gran figura del alfa aparecer.

—Hola.—Saludó entrando, sin percatarse de la presencia del otro alfa tomo a Jungwon de la cintura y lo besó.

Jungwon al sentir el aroma y las manos de Heeseung encima suyo, se le olvidó que Jay estaba ahí hasta que escuchó un carraspeo.

—Ah sí, yo también estoy aquí, me vas a dar un beso o que, Heeseung —exclamó con humor, cruzándose de brazos.

—Si quieres —Heeseung bromeó de la misma forma y Jungwon solo río cuando Jay hizo cara de disgusto, luego volvió a mirar a su Omega.—¿Y Dani?

—Durmiendo, como se levantó temprano quiso dormir temprano, ya sabes.—Jungwon se encogió de hombros, viendo a Heeseung hacer un puchero.

—Le conseguí esto mira.—Sacó de su maletín un peluche de un oso, tenía un listón rojo y olía mucho a Heeseung.

—Ohh, Heeseung no tenías porque molestarte.—Jungwon lo tomó, viendo lo bonito que era.

—No, no, yo quería, y a tí te traje la comida, comida japonesa—pasó hacia la mesa a dejar las bolsas.—¿Jay te vas a quedar a comer?

Jungwon miró al alfa, quién miraba su celular.

—Si, está bien.

Los dos alfas y el Omega tomaron lugar en la mesa, Jungwon solo escuchaba como Heeseung y Jay comenzaron una breve conversación sobre la empresa y algunas cosas de Heeseung, el omega no estaba al pendiente de esa conversación, pues su mirada luego se fijó en el nuevo peluche de su cachorro.

Heeseung sería un gran papá, un orgulloso alfa de su manada.

de SU manada.

si se pudo actualizar 🥳.