Habían pasado los días y Felix había aprovechado que él aroma de JeongIn aún estaban en sus sabanas para lograr dormir con seguridad. No entendía porque tenía tanta necesidad de estar con los alfas, pero aun así buscaba él momento justo para lograr al menos el más mínimo contacto con ellos.

Sabía que ellos se repartían los días para llevarle la comida, por ende podía verlos a todos al menos por dos segundos.

Los alfas estaban felices de que al menos Felix dejara que lo vieran cuando ellos le llevaban la comida.

No era exactamente él contacto que ellos querían tener con el omega, pero los convencía ver que estaba bien.

Felix aun no entendía que le sucedía, no entendía la necesidad de ver a todos los alfas.

Él estaba dispuesto a dejar de tomar los supresores para el simple hecho de saber que alfa vendría si el necesitaba ayuda, pero no quería fallarle a sus mayores. Y mucho menos correr el riesgo de que ellos no estén en casa y alguien más entrase.

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— Debes hablar con ellos Bummie —Habló JinYoung mientras era abrazado por el alfa

— Lo sé, pero hable con los ancianos y dijeron que era mejor que ellos mismos descubran esto —JinYoung asintió y no dijo nada más con respecto a eso

— ¿Piensas que Felix se sentirá mal por ellos? —Habló luego de unos minutos en silencio el omega

— Tal vez, él los quiere y se encariño mucho con todos ellos —Suspiró— A demás, todos tienen la esperanza de que esa marca sea de sí mismo —JinYoung hizo un pequeño puchero, haciendo que JaeBum lo abrace un poco más fuerte

— Felix si recuerda lo que sucedió —Murmuró JinYoung, como si alguien más lo pudiese oír— Pero sigue con la esperanza de que no sea así —Suspiró

— Jinnie —Murmuró esta vez JaeBum— Yo lo sé, pero todo esto pasó por algo. —Suspiró y se acomodó un poco en el sofá— Por algo ellos no me escucharon cuando les advertí, ni tampoco luego del primer celo de Felix viviendo con ellos, tampoco cuando sus padres se los dijeron y mucho menos cuando aseguraron que ninguno sentía algo por él como para marcarlo —JinYoung solo asintió y volvió a acomodarse en los brazos del alfa