El pelinegro martillaba la madera a la ventana que el vampiro salido de la tumba junto a su compañera (ya asesinada por Damon) habían destruido anoche, irrumpiendo en la casa Salvatore, atacando a Stefan y a su hermano

Ya Stefan le había contado todo a su novia quien había llamado a Elena, sobre todo porque esta podía ser confundida por su doppelganger.

Potencial peligro

── Yo digo que vayamos con Pearl, tumbemos la puerta, y aniquilemos al idiota que nos atacó anoche ── Pronunció el pelinegro

── ¿Si? ¿Luego volvemos con todos los demás vampiros y decimos perdón? ── Ironizó su hermano

── No puedo creer que hicieras un trato con ella ── Acotó la Gilbert

── Fue más un útil intercambio de información ── Explicó Damon

── Muy útil ── Habló con sarcasmo Olivia

── No tenía opción. Ella me da miedo ── Alegó ── Además, me ayudará a que Katherine vuelva

── Claro que si ── Ironizó Elena ── Damon obtiene lo que quiere como siempre, sin importar a quien lástima

── No tienes que ponerte de malas ── Reprochó Damon ── Cuida tu tono

── Desperté esta mañana y supe que todos los vampiros de la tumba, salieron ── Recalcó ── Tengo derecho

── Todas tenemos derecho, Elena, pero no nos sirve pelear con Damon cuando pueden estar ahí afuera acechando ── Habló Olivia

── Hace tanto quería decir eso ── Susurró Damon guiñándole un ojo a Olivia ── ¿Hasta cuando vas a culparme por convertir en vampiro a tu madre biológica?

── No te culpo, Damon. He aceptado el hecho de que eres un psicópata egoísta sin cualidad alguna ── Ironizó

── Auch

── De acuerdo, esto no es muy productivo ¿Pueden dejar de pelear? ── Olivia entró en el medio de los dos mientras que su novio la señalaba dándole la razón

── Necesitamos encontrar una manera de enfrentar a los vampiros ¿No? ── Apoyó Stefan

Damon se levantó del sofá retirándose de la sala

── Lo siento, solo me enloquece ── Elena miró a su amiga

── Enloquece a todo el mundo, es un idiota ── Señaló Olivia ── ¿Qué vamos a hacer? ── Su novio la tomó de la cintura abrazándola

── Damon y yo nos encargaremos, lo prometo

── No, no puedo quedarme sin hacer nada ── Señaló la Gilbert

── Es justo lo que vas a hacer. Justo lo que van a hacer ──Corrigió Stefan ── Lo que las mantendrá a salvo ── Acarició el cabello de Olivia

── Eso no sirve de nada si tu no estas a salvo ── Reprochó esta vez su chica

── ¿De qué hablas? Estoy muy a salvo. Tengo a Damon, el psicópata asesino idiota egoísta, de mi lado ── sonrió haciendo referencia a los nombres que Olivia y Elena le habían puesto a Damon

── Muy reconfortante ── Ironizó abrazándolo de nuevo

── ¡Oh, Dios! ── Elena sonrió cuando Olivia tomó uno de los cojines de su cuarto y se lo lanzó ── Hey, déjame alegrarme. Mi amiga al fin alivió la tensión sexual que tenía con su novio de hace semanas

Olivia sonrió recordando esa noche, aunque el timbre de la casa sonó distrayendolas

── ¿Puedes abrir? Mi cremallera no sube ── Murmuró Olivia desde el baño

── Voy a la puerta ── Elena se levantó de la cama para bajar la escalera y abrir la puerta ── Sí, Damon puedes pasar ── Rodó los ojos cuando le pasó por al lado

── Ya me habían invitado a entrar ── Sonrió

── Se llama educación ── Cerró la puerta

── No sube ── La castaña hizo un puchero hacia Elena pero reprimió su rostro cuando vio al Salvatore

── Te ayudo... ── se acercó a ella mientras subía el cierre del vestido que se probaba rozando con la piel de su espalda desnuda observándola a través del espejo

Subió el cierre lentamente quedándose más de lo que debería para luego dar un par de palmaditas en su hombro

── Lindo vestido, Livie ── Expresó el pelinegro ── Me ignoraste

Damon estaba a un lado del comienzo de las escaleras, ligeramente mojado por la lluvia que hacia afuera, junto a Ellie a su lado

── ¿Las seis llamadas perdidas? Lo siento mi teléfono no sirve ── Ironizó

── ¿Stefan está aquí? Seguro es muy bueno bajando las cremalleras de esos vestidos que te pruebas ── Alzó las cejas irónicamente

── No, Damon, no está aquí ¿Por qué? ── Rodó los ojos

── Iba a ir al bosque y no volvió ── Respondió pensativo ── Tal vez funcione contigo ── Señaló su teléfono

── Va directo al buzón ── Negó tratando de llamarlo ── ¿Dónde puede estar?

── No te va a gustar lo que estoy pensando...

── ¿Qué sucedió? ¿Dónde está? ── Olivia salió del auto con una sombrilla mientras Damon se acercaba

Lograron adivinar dónde se encontraba Stefan: la casa donde se quedaba Pearl con los otros vampiros de la tumba, lo habían secuestrado para hacerlo "sufrir" por hacerlos estar encerrados a gracia de Katherine

── Lo tienen, no puedo entrar ── Subió a la castaña al auto junto a Elena

── ¿Por qué no? ── Indagó

── Porque la dueña de la casa está hipnotizada para no dejarme entrar

── Yo puedo entrar ── Afirmó Elena tratando de salir del auto

── Tu no vas a ir ── Negó el pelinegro mientras que Olivia la tomaba de los hombros

── Claro que si

── No vas a entrar ahí ── Reclamó la Beumont ── ¿Por qué están haciendo esto? ── Indagó ── ¿Qué quieren con el?

── Venganza, quieren venganza ── Respondió

── Tenemos que hacer algo ── Acotó Olivia

── Lo se, lo se. Pero no se como sacarlo ── Entraron nuevamente al auto mientras pensaban en un plan antes de mandarlo todo al diablo

── Bueno, luces bastante...vivo ── Ironizó Damon al acercarse al profesor

Habían decidido buscar al unico que podía hacerse pasar por alguien (humano) para entrar a la casa y buscar a Stefan

La única ayuda disponible además de Killian quien solo le dijo a Damon que buscará a Alaric.

Killian se encontraba fuera del pueblo, dijo que tenía "asuntos que resolver"

── No puedes herirme ── Pronunció este

── Oh, claro que puedo

── No tenemos tiempo para esto ── Olivia se acercó ── Señor Saltzman ── llamó su atención ── Lo necesitamos

── Stefan está en la casa ── Explicó Elena ── Damon es un vampiro, no puede entrar. Ayúdenos, por favor

── Yo iría pero...── El pelinegro interrumpió a Olivia

── Su vida si es valiosa ── Agregó Damon ── La tuya, por otro lado...

── Stefan me dijo de su anillo ── La Beumont detuvo al Salvatore antes de que dijera otra cosa

── ¿Qué saben? ── Indagó Alaric

── Vamos a recapitular. Quisiste matarme, yo me defendí, moriste ── Enumeró el ojiazul ── De acuerdo con mi hermano, tu anillo te devolvió la vida ¿Se me olvidó alguna cosa?

── Si, la parte en la que trato de matarte de nuevo, solo que esta vez no fallo ── Se levantó para acercarse

── O la parte en donde nos quedamos tranquilos y ayudamos al hermano bueno ── Olivia se posicionó entre los dos ── Señor Saltzman, por favor ── Suplicó ── Es Stefan

── Los siento, Olivia. No es mi problema ── Negó

── Qué lástima ── Expresó Damon con falsa tristeza ── Porque la mujer a cargo de todo puede encontrar a tu esposa

── Mientes

── ¿Lo hago? ¿Por qué no le preguntas tu mismo? ── Murmuró ── Cobarde ── Tomó a ambas chicas de los brazos ── Vamos, niñas

── Bien, esperen ── Señaló antes de que cruzaran la puerta ── Iré

El hombre sacó un estuche con varias armas de madera, entre otras cosas, que podían utilizar para matar o atacar a los vampiros de la casa en la que retenían a Stefan

── Profesor de día, cazador de vampiros de noche ── Habló Damon con sarcasmo

── Eso te lo debo a ti ── Respondió Alaric

── ¿Qué son estos? ── Señaló Elena

── Dardos tranquilizantes llenos de verbena ── Explicó

── Tu haz que entre, y sacaré a Stefan ── Pronunció el Salvatore

── ¿Ese es tu plan? ── Reclamó Elena ── ¿Vas a atacarlos a todos?

── No es como si uno de ellos necesitara redención, Elena ── Ironizó Olivia

── Por eso cada vez me caes mejor, Livie ── Bromeó el pelinegro ── Al menos piensas. Voy a ser un poco más discreto, espero

── Oh ¿Qué estás haciendo? ── Reprochó Alaric al ver como la Gilbert tomaba uno de los dardos

── Iremos con ustedes ── Respondió Elena

── 'Iremos' suena a plural ── Señaló Olivia - No, no iremos. Suelta eso ── Tomó el dardo en su mano

── Podemos servirles, Olivia ── Alzó las cejas

── No, no, no, no, nunca ── Damon rodó los ojos

── Me necesitan. Entraremos, tu los distraes y sacamos a Stefan

── Nos matarán ── Sentenció la castaña ── No tenemos la fuerza necesaria, Elena, nos matarán, y servimos menos muertas

── Voy a ir ── Insistió

── Así que, cuando esté yo adentro, sal lo antes posible. Porque puedo escabullirme. Tu solamente vas a estorbar ── Explicó Damon hacia Alaric

── Damon, no es momento para jugar al héroe ── Reclamó la Gilbert

── Efecto rebote ── Murmuró Olivia

── ¿Qué?

── Efecto rebote ── Se encogió de hombros ── No es momento de jugar a la heroína, Elena...

── Es tu novio quien está allá adentro ── Frunció el ceño

── Si, y si entramos ahí, no solo será su vida la que esté en riesgo. Créeme, Elena, me pican las manos por hacer algo, y me desespero de solo pensar en lo que Stefan está pasando allá adentro, pero no podemos hacer nada ── Acotó

── Escucha a la señora Salvatore ── Señaló el pelinegro ── Tu conducirás el auto. Tu te asegurarás que ella no se mueva del auto ── Habló hacia las castañas ── No entrarás a la casa -

── No puedes detenerme

── De acuerdo, me harté ── sentenció la Beumont ── Al auto, ahora ── Demandó tomando las armas del escritorio del profesor ── Estableceremos el plan en el camino, así que vamos ── Señaló la puerta ── Dije ahora

── Ahí vamos ── El pelinegro Alzó las manos guiando a la otra castaña hasta la puerta

── Hay que hacer algo ── Reprochó Elena desde el asiento del piloto

── Lo se, Elena, no podemos. Ahora, mantente quieta porque juro que mi paciencia llega a un límite ── Olivia Habló en el asiento trasero ── Es mi novio, Elena... Lo amo, y estoy muy, créeme, bastante, preocupada. Pero se que si el estuviera justo aquí, me diría que no entrara a esa casa y tratara de sacarlo, porque, cuando rompen mi cuello, no revivo, Elena, así que es mejor...quedarnos aquí y esperar a Alaric y Damon ¿Bien? -

── Aun tenemos la jeringa ── Susurró sacándola de su bolso

── Elena... ── Reprochó cansada

Hasta que ella decidió correr fuera del auto

── No puede ser ¡Elena! ── salió del vehículo igualmente corriendo tras ella, quien iba camino a la casa ── ¡Elena! ¿Qué demonios haces? ── Se apoyó de una de las paredes

──Tómala ── le extendió el dardo ── Trataré de entrar, sígueme

── Elena, no ── Trató de susurrar pero esta ya se había acercado a la puerta

Cada vez se iban acercando más adentro, entre pasillos oscuros y ruidosos por la tormenta

Un hombre salió de una de estas a paso lento observando a las chicas y Olivia, por instinto, se acercó aún más dándole con uno de los dardos que también tenía en su chaqueta, el cual le había quitado a Elena en el salón

── Buen golpe. Ahora ¿Están locas? ── Damon salió asustando a ambas

── Necesitan a alguien a quien culpar ── Escucharon al otro lado de la puerta hasta que la abrieron con fuerza

── Olivia ── Habló con debilidad Stefan ── No deberías de estar aquí

── Lo se, me iba a quedar en el auto. ── Reprochó mirando de reojo a Elena, mientras se acercaba a tomar su rostro

── El no ── Señaló cuando Damon trató de atacar al tipo que lo había ayudado

── Como digas, voy a bajarte ── Señaló las cuerdas que lo sostenían

── Tienen verbena ── Expresó

── Elena, sirve de algo ¿Quieres? ── el pelinegro apuntó hacia las cuerdas ── Muy bien, vamonos ── Demandó una vez que lo bajó ── Vístete. ¿Pueden llevarlo al auto? - Indagó

── Si ── Respondieron ambas

── Bien, llevenlo

── ¿Qué hay de ti? ── Indagó Elena

── Ustedes rescatan, yo distraigo. Vayan ── Demandó

── ¿Estás bien? ¿Puedes seguir? ── Olivia llevó el brazo de Stefan a sus hombros para que se apoyara, mientras que Elena iba al frente guiando el camino

── Si, si ── Habló con dificultad hasta que ambos cayeron debido al peso

Olivia se cortó la mano. Estaba sangrando

Mucho

── ¿Están bien? ── Elena miró hacia todos lados apresurada

── Si, si. Levántate, debemos seguir ── Agregó hacia su novio ayudándolo a levantarse

── Vengan, está por aquí ── La Gilbert Señaló el auto a unos pasos

── Bien ── La castaña ayudaba a Stefan a subir en el asiento del copiloto con algo de dificultad

Hasta que uno de los vampiros los encontraron. Rompieron el vidrio sacando a Stefan del auto de nuevo golpeándolo contra el suelo

Golpeaba una y otra vez su rostro

── Esto es por Bethanne ── Murmuró clavando su mano en el, tomando su corazón ── Y esto es por la tumba

Olivia sacó la última jeringa de su chaqueta, clavándose al vampiro por la espalda dejándolo inmovil por el tiempo que les quedaba

── Stefan ── Se acercó a su novio ── Stefan, por favor ── Trató de levantarlo pero este ya no tenía fuerzas ── Stefan ── Sollozó ── Por favor

── Sangre ── Elena Señaló la mano de su amiga

── ¿Qué? ── La castaña siguió llorando

── Hay que darle sangre ── Explicó apresurada, ya que el vampiro se estaba comentando a despertar

── No, el no...── Negó observando que no despertaba

── Lo haces tú, o lo hago yo, Olivia, pero hay que hacerlo y rápido ── Señaló al hombre detrás de ellas

── Elena...── Lloró

── Hazlo, ahora

── Stefan ── Tomó su cara renegando ── Aquí, toma ── Pasó su palma en sus labios sabiendo que sólo de esa forma sobrevivirian tanto ella como el

── Olivia, por favor, corre ── Susurró retomando la conciencia

── No voy a dejarte aquí ── Reprochó

── Stefan, su muñeca. Toma de ella ahora ── Elena se agachó al lado de ellos ahora tomando la chaqueta de Olivia ── Necesitas sangre

── No... Olivia, corre. Huyan

── Por favor ── Suplicó la Gilbert mientras que Olivia dejaba su muñeca al aire para que su novio pudiera tomarla

La mordió

Jadeó un poco quejándose del dolor y Stefan gimió ante el sabor mientras recuperaba fuerza

'Esto no deja de estar mal'

Pensaba la Beumont ante la resistencia de su novio de tomar sangre humana, Al querer alimentarse de la forma más "sana" posible

La manera en la que arriesgaba su vida, por no lastimar a los humanos. Lo hacia débil, pero lo hacía bueno. Y justo ahora, ella le había quitado esa cualidad

Cuanto se arrepentiría...

Se levantó, atacó al vampiro detrás de ellos quien también pensaba atacarlos

Y lo mató

Clavó una rama en su corazón múltiples veces, hasta que se volvió gris, y volvía a clavarla ── Stefan, déjalo, ya está...── El castaño se giró hacia su novia en defensa con el rostro lleno de venas y sus ojos rojos

La había asustado. Se dió cuenta de ellos y miró hacia otro lado tratando de calmarse

Y volvía a mirarla, tratando de encontrar paz

El hombre ya estaba en el suelo, muerto.

── ¿Seguro que estás bien? ── Indagó la castaña cuando el chico entró a la habitación

── Yo... estoy bien, si ── Miró al suelo ── Las heridas casi se curaron

── Bien ── Habló con incomodidad

── ¿Liv? ── Se acercó

── ¿Si?

── Lo que hiciste hoy, venir ayudarme... pudiste haber muerto ── Expresó

── Lo se y lo siento, pero Elena entró a la casa y yo no podía dejarla ir, y luego ver como estabas... cada vez que pensaba lo que te estarían haciendo...── Habló rápidamente

── Y lo que hice, lamento que tuvieras que verlo ── Murmuró

── Fue algo... eras otra persona. Y es mi culpa, yo no debí...

── ¿Qué? No, no, no. ── Negó y se acercó a ella ── No hiciste que hiciera daño, me salvaste la vida...Y yo salvé la tuya ── con una mano tomó su rostro acariciándola ── Todo va a estar bien ── Susurró