La japonesa estaba escondida en su armario junto a su gato Shiro, estaba cansada de aquellas dos híbridas revoloteando y haciendo todo tipo de travesuras en su casa, que alguna vez fue un lugar completamente pacífico y en silencio.

A Sana le gustaba la diversión pero no en exceso y este momento Jeongyeon y Momo se estaban pasando de la raya, tanto que la humana pasaba encerrada en su cuarto porque se había cansado por completo de la actitud de las híbridas.

Tenía que buscar una solución, pedir ayuda, y creía saber a quien recurrir.

Tomó su celular y llamó rápidamente a una de sus mejores amigas que por suerte le encantaban los animales, asi que no dudaría en dejar a la híbrida de mapache con ella.

El celular vibraba esperando ser contestado, hasta que por fin se pudo escuchar una voz medio adormilada.

ㅡ ¿Aló? ㅡ respondieron al otro lado de línea.

ㅡ Dubu, necesito tu ayuda ㅡ se le notaba su ansiosa voz

ㅡ ¿Qué pasó Sanita?

ㅡ Solo ven a mi casa, te espero en 10 minutos.

ㅡ ¿Es importante?

ㅡ Es de vida o muerte, créeme.

Sana cortó la llamada y decidió esperarla en la comodidad de su habitación.

El timbre se logro escuchar a lo lejos, y antes de que la híbridas pudieran oírlo y abrir la puerta, Sana salió corriendo de su habitación para avisar previamente a Jeongyeon y Momo que abría una visita y deberían transformarse nuevamente en animales.

Sana abrió la puerta y se encontró con Dahyun a quien abrazó y le ofreció el pase a su casa.

ㅡ ¿Qué pasó Sana? ¿Estás bien? ¿Te pasó algo? ㅡ le preguntaba preocupada mientras tomaba el rostro de la japonesa entre sus manos.

ㅡ Estoy bien Dahyun, no te llamé por eso ㅡ su rostro mostró una mueca ㅡ Te llamé por eso ㅡ dijo señalando el sofá donde se encontraba un adorable cachorrito durmiendo y un mapache a su lado.

Dahyun dirigió su vista hacia el sofá y soltó una risita por lo adorable que le pareció el gesto de la japonesa al adoptar a otra mascota nuevamente.

ㅡ Es adorable, ¿Cuándo lo adoptaste? ㅡ le preguntó la chica de tez pálida acercándose a los animalitos recostados. ㅡ Tu casa ya parece un zoológico.

ㅡ No la adopté, vino sola, y necesito tu ayuda

La coreana empezó a acariciar a la pequeña mapache mientras está sentía y se acomodaba a su tacto.

ㅡ ¿En qué te puedo ayudar?

ㅡ Me preguntaba si quisieras adoptar a la mapache, se llama Momo por cierto, pero no puedo tenerla tengo suficiente con Jeongyeon y Shiro ㅡ hizo un puchero rogando que su amiga accediera a su petición

Dahyun soltó un "Mmm..." como respuesta, mientras que las híbridas estaban completamente atentas a la conversación de las dos chicas, y Momo temía por su destino aunque percibió que aquella chica de tez pálida y ojos jalados era mas amable y amorosa de lo que se le veía, pero Jeongyeon no quería separase de Momo, aunque pensándolo bien volvería a tener la casa para ella sola.

Más bien, a Sana para ella sola.

ㅡ No lo sé Sana ㅡ empezó a hablar la coreana ㅡ No estoy segura si puedo cuidar a una mapache

ㅡ Porfiii ㅡ Sana le hizo ojito a Dahyun tratando de persuadirla.

Por otro lado, la mapache ya estaba acomodada sobre las piernas de Dahyun sin que la coreana se percate de esto, haciendo que Sana aproveche el momento para seguir con la persuasión hacia su amiga.

ㅡ Mira como te quiere, se subió sobre ti, le agradas Dubu ㅡ le sonrió

La coreana suspiró y admiró con ternura a la pequeña criatura que reposaba sobre ella, pasó su mano sobre su suave pelaje sintiendo como la mapache se acomodaba cada vez más, tal vez no sea una mala idea tener una mascota.

ㅡ Está bien Sana ㅡ le sonrió ㅡ Pero mañana vendré por ella, ahora tendré que comprarle todo lo necesario.

Sana dio pequeños con felicidad y por parte de Jeongyeon, su híbrida interna daba pequeños brincos, volvería a ser todo como antes; Sana y ella volverían a estar solas, con Shiro claro.

Después de que Dahyun se fue, la híbridas volvieron a tomar su aspecto humano, mirando fijamente a Sana la cual se asustó.

ㅡ Así que querías deshacerte de mí ㅡ dijo la híbrida de mapache alzando un ceja

ㅡ No te quejes Momo, que bien te encantaba las caricias que esa chica te daba

Momo rodó los ojos y se levantó para irse.

ㅡ ¿A dónde vas? ㅡ preguntó la japonesa.

ㅡ A empacar mis cosas, y terminar mi cereal con yogurt antes de la chica nieve venga a recogerme

ㅡ ¿Entonces no te molesta irte? ㅡ le preguntó Sana con timidez

ㅡ No realmente, Jeongyeon abruma mi paciencia y yo solo vine a advertirle sobre Suho, ahora me toca disfrutar de las comodidades de una casa como la pulgosa esta lo hace ㅡ dijo refiriéndose a Jeongyeon ganándose un gruñido de la cachorra

ㅡ Ojalá no te descubran pronto como a mi ㅡ habló Jeongyeon

ㅡ No soy tan tontita como tú ㅡ respondió con sarcasmo mientras se reía de Jeongyeon y se retiraba a la cocina

Jeongyeon y Sana compartieron miradas cómplices, sabiendo que la adopción de Momo las beneficiaba a las dos.

Lo iban a pasar bien.

Regresé después de cinco meses, espero les haya gustado el capítulo

Gracias por leer y por los 2.9k <3