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— Tengo muchas inseguridades con nosotros últimamente. — Fue lo primero que dijo Jungkook al sentarse junto a su esposo en el sofá de su casa. — No es por que tú hagas o estés haciendo algo malo mimi, siento que todo es culpa mía, me he concentrado mucho últimamente en los comentarios de la gente hacia nuestra relación, prometimos que no nos afectarían, pero hay algunos que en verdad me hacen pensar muchas cosas. — Jungkook en verdad sentía una gran molestia consigo mismo por dejar que comentarios de personas externas a su relación le estuvieran afectando, pues se ponía mal él y ponía mal a su esposo.
— ¿Hay algún cometario en especial que te moleste? ¿Una persona? ¿Nuestros amigos? — Le preguntó el rubio cruzándose de piernas y mirándolo de frente.
— No me gusta que me comparen con Namjoon, no me gusta que digan que tú algún día tú podrías dejarme por él, que él es mucho más maduro que yo, que es más lindo, que tiene mejor físico, que tiene esto y lo otro y...
— ¿Sabes que nada de eso es verdad, no?
— Se que si te gustara ya me lo habrías dicho.
— Y no me hubiera casado contigo si no me gustara tu inmadurez, lo guapo que eres y que nadie te gana en nada Jungkook. — Le aclaró. — Tu eres mi esposo, el hombre que yo siempre quise, tú tienes todo lo que busco, ¿Estos seis años no son suficientes? Casémonos otra vez, por mi no hay problema, pero si es mi problema ayudarte con esto, no quiero que estemos mal. Una relación larga y sana no es solo amor. Es una construcción diaria de cuidado, conversaciones incómodas, de detalles, tiempo de calidad, apoyo incondicional, desacuerdo y crecimiento. Lo bonito cuesta y se construye, siempre te he dicho que las relaciones son de dos, y esto lo resolveremos juntos, ¿Te parece?
Jungkook asintió.
— ¿Namjoon aún es un problema para ti? ¿Quieres que hablé con él?
— Es tu amigo y...
— Hablaré con él si te molesta. — Repitió.
El castaño nuevamente asintió.
— ¿Hay algo más que te moleste? ¿De mi? ¿Algo que yo haga? ¿Alguna actitud mía?
— Que no me prestes tú cuerpecito cuando yo quiero. — Dijo con tono triste y con un puchero en su boca, su esposo solo optó por golpearlo mientras soltaba una pequeña risa. — Te amo, no sé qué haría sin ver esa linda sonrisa todos los días de mi vida.
— Morirte.
Ambos rieron.
— También te amo. — Contestó mientras se sentaba en el regazo de su esposo. — Estoy tan orgulloso de ti mi cielo, valoro mucho el
esfuerzo que haces cada día, nunca te rindas, te mereces lo mejor, y sobre todo nunca dejes de sonreir, recuerda que siempre estaré aquí, ¿Si? Soy tu compañero de vida desde hace seis años, y lo seré toda la vida si es posible.
El castaño no evitó soltar algunas lágrimas junto a una pequeña sonrisa, pues aún no caía en cuenta al hombre que le había tocado, definitivamente era muy afortunado de tener a Jimin a su lado.
Pues a pesar de todo, era el que siempre estaba a su lado y lo apoyaba en todo.
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— ¿Como es que chocaste? — Le preguntó Jungkook mientras revisaba el auto.
— Estaba lluviendo y...
— Lloviendo won. — Le corrigió el castaño.
— Estaba lloviendo y el señor frenó de repente, frené desde antes pero el auto se resbaló y lo choqué. — Contestó. — ¿Es muy grave?
— No mucho, ¿El señor donde está?
— Llamando a su seguro. — Apuntó hacia el auto que estaba en frente y en donde estaba el hombre.
— ¿Hablaste con él?
— No pude, solo me gritó apenas se bajó.
— Quédate aquí, trataré de hablar con él.
— Si te golpea gritas y le pego con mi tacón.
Jungkook soltó una pequeña risa y se dirigió hacia el hombre, quien al parecer escribía algo en su teléfono.
— Hola señor, soy Jeon Jungkook, soy amigo de la chica con la que tuvo el accidente. — Se presentó el castaño.
— Suho. — Dijo mientras estiraba su mano y la estrechaba con la del castaño. — Lamento no haber hablado con ella, la rabia me ganó y solo le grité.
— Es completamente entendible, ¿Cree
que podamos llegar a un acuerdo?
— Llamé a mi seguro y ellos verán lo de mi auto, mi mejor decisión es que cada uno arregle por lo suyo.
— Genial, muchas gracias, espero que esté bien.
Jungkook volvió a estrechar su mano con la del hombre y se fue junto a won.
— Dijo que su seguro verá el tema de su auto, quedamos en que cada uno arregle lo suyo, así que no habrá problema. — Le dijo a la chica. — ¿Segura que estas bien? ¿No te duele nada?
— Nada de nada. — Contestó. — Gracias por ayudarme.
— No hay de qué.
— ¿Me dejas invitarte una hamburguesa? Los nervios me dan hambre.
— A mi también.
Luego de decidir a donde irían a comer, Jungkook manejó hacía el restaurante.
— ¿Puedes escribirle a mimi que iré a comer contigo? — El castaño le pasó su teléfono a la chica.
— ¿Tu contraseña?
— uno, tres, cinco, uno y seis.
— ¿Es tu aniversario con Jimin?
Jungkook asintió.
— ¿Mimido? — Preguntó al ver como Jungkook lo tenia agendado.
— Es por mimi y por que en su foto de perfil está dormido, mimido. — Explicó.
— Son muy tiernos. — Dijo con un pequeño puchero. — ¿Que quieres que le diga?
— La fea de won me invitó a comer.
Won lo miró seria a lo que el castaño rió.
— Amor, iré a comer con won, ¿Quieres que te lleve algo?
Ustedes tienen gatitos?
Y si es así, como se llaman y cuántos tienen?
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