—Estoy dispuesta a olvidar y perdonar lo que hicieron y el hecho de que entraron a mi habitación cuando claramente no quería que lo hicieran si hacemos como que aquí no pasó nada, ¿Está bien?

Dos, tres, casi diez segundos de silencio procedieron a la pregunta y propuesta de T/n. Ninguna de las tres mayores estaban tan... Contentas por así decirlo. Rosé bufó y negó, seguida de Jennie que imitó su acción y Jisoo con su mirada desaprobatoria negó.

Lisa solo rió, al menos ella había logrado algo más.

—¿Si saben que lo que están haciendo va en contra de las reglas? -preguntó Jennie, las menores negaron- Eso...

—¿Cuales reglas? Yo no conozco esas reglas -expresó Lisa, muy inocente- Nadie nos impuso reglas de ese motivo, ni la empresa , ni nuestros padres ni los señores Minatozaki, de hecho, prohibir o negar el curso normal de los instintos naturales entre un alfa y una omega a punto de formar un lazo es un crímen, duh.

T/n pensó que era una broma, pero Lisa tenía una sonrisa que claramente le decia que aquello podría ser una realidad.

—No entiendo...

—Que es un crímen evitar que me marques como tu Omega, T/n. -dijo Lisa, un tanto frustrada y un tanto feliz por decir aquello en voz alta.

La alfa estaba frustrada. Rápidamente las omegas compartieron una mirada entre si, y, casi utilizando una especie de poder o señal ya sabían que eran lo que tenían que hacer. T/n, oír su parte, además de no estar entendiendo nada de lo que las omegas decían también tenía una mirada llena de confusión, ¿Por qué ellas estaban sonriendo de esa manera?

Las omegas se sentaron una seguida de otra frente a ella, aquella sonrisa malévola no desapareció del rostro de ninguna y T/n dudó seriamente sobre si estás no estaban en su celo.

¿Qué acaso ninguna de ellas tomaron los supositorios que les dieron para su celo?

No había ningún aroma dulce en el ambiente, pero aún así, sin aquellos dulces y deliciosas fragancias está podía sentir levemente la emoción de las cuatro mayores.

Tal vez su celo era el próximo a llegar.

—¡Eres nuestra alfa!

Si, tal vez su celo le hacía imaginar ese tipo de cosas que...

—¿Qué dijeron?

...le hacían dudar de su estabilidad mental.

—¿¡Están locas!? -preguntó T/n, está se puso de pie en un salto a la par que tenía sus ojos bien abiertos- Yo... No... ¿Qué? Es que, no... Ustedes... ¿¡Su alfa!? ¡Por qué...!

El dedo de Lisa se había posado en sus labios, callandola abruptamente. La sonrisa de la omega era una bastante socarrona, casi imperturbable por sus gritos anteriores. Rosé, Jennie y una tímida Jisoo se acercaron a la más alta, rodeándola.

—Es que... En mi corazón siento que T/nnie es mi alfa, y mi loba... Me lo dice en todo momento -musitó Rosé, su actitud enojada había desaparecido por completo, ahora solo estaba timida- T/n, tú eres mi alfa predestinada...

T/n comenzó a sentirse nerviosa. Una confesión de tal magnitud...

—Y no solo de ella -dijo Jennie- Desde la primera vez que te ví supe que tú serías mi alfa, así lo siento, mucho más allá de lo que me dice mi loba, es el destino...

—No diré nada más, todas lo hemos sentido así, sin dudas eres nuestra alfa -dijo Lisa, luego miró a Jisoo- ¿No es así?

La mayor asintió efusivamente. —T/nnie me gusta mucho...

Inevitablemente, su corazón comenzó a latir fuertemente, al igual que su loba, aquella alfa malhumorada que solo le tenía cierto rencor por ser tan lenta y tan estúpida estaba demasiado emocionada. Su animal interior aullaba de alegría al saber que tan lindas omegas eran sus predestinadas, si le parecía un poco raro que las cuatro chicas estuvieran ligadas a ella, pero no le puso demasiada atención.

Ella solo era una loba, y T/n solo era una simple humana, ninguna de ellas iba a cuestionar los deseos y motivos de la diosa luna.

Luego de unos segundos en los cuales estuvo muy callada, T/n se sonrojó violentamente, su mente era un mar de pensamientos y emociones descontroladas; emoción, felicidad, deseo... Una jodida locura.

—T/n, tú eres nuestra alfa -dijeron las cuatro- y nosotras somos tus omegas... Si nos rechazas... Moriremos de dolor -agregó Jisoo, bajando su rostro y tomando la mano de la maknae- Por favor...

T/n estaba acorralada, entre la espada y la pared sobre sí seguir sus instintos -ya que si, su loba confirmó lo que ellas decían- o hacer lo correcto para no lastimar a ninguna.

¿Qué podría hacer?

—Chicas yo... -musitó T/n suavemente- Yo no sé que decir o hacer -dijo- Ustedes son... Mi familia -esta apretó la mano de Jisoo con suavidad- No soportaria el hecho de lastimarlas con mis decisiones... -luego suspiró- Todas son hermosas, e inteligentes, y me gustan mucho... Pero no sabría hacer cuando tenga que elegir a una de ustedes.

Finalmente alzó la vista.

—No lo soportaria.

Las omegas, sabiendo que T/n tenía razón solo asintieron. Ellas tampoco sabrian como reaccionar cuando llegará ese momento.

—Por ahora no haremos nada que las pueda lastimar, ¿Si? -preguntó- Primero buscaremos ayuda, no creo que esto sea algo común...

—Lo haremos -dijo Rosé- Después de todo... Somos tus omegas, obedeceremos cualquier cosa que nos pidas.

—Y, pues, digo, todas compartimos un lazo contigo, y no cualquier lazo, es el lazo del destino -agregó Jennie pensativa- Buscaré la forma de que nos marques a todas -dijo- O solo a mi, ni creo que haya problema alguno.

—¡Si lo hay!

Y mientras una pequeña riña se desataba entre las omegas, T/n solo suspiró levemente, ella esperaba encontrar a su pareja predestinada algún día, y tal vez con una omega diferente a sus compañeras de grupo, pero aún así... ¡Las cuatro se le habían confesado y al mismo tiempo!

Y si su loba lo confirmaba al estar tan feliz si o sí tenía que ser verdad.

Entonces, con una sonrisa cansada está se volvió a sentar en el sillón, negando suavemente ante la acalorada discusión entre las omegas.

¿Ella debería de intervenir antes de que las cosas se salgan de control?

—¿¡A cual de todas prefieres T/n!?

Mejor no. Después de todo casi nunca pudo evitar que sus unnies no pelearán, y si intervenía casi siempre salía perdiendo.

—Ella obviamente me prefiere a mi, después de todo le causé una erección que aún tiene -T/n escuchó a Lisa.

—¿¡Ah, si!? ¡Pues ella me tocó los senos la otra vez cuando la desperté! -y esa fue Rosé.

Nah, mejor no hacia nada por su seguridad.

—¡Yo la ví semi-desnuda! -Jennie no estaba dispuesta a quedarse atrás.

Ellas podrían manejar sus asuntos entre si, igual, T/n no creía que se hicieran daño.

—¡Y yo la bañé y limpié todo su cuerpo desnudo en el hospital cuando se enfermó! ¡Y debo de decir que T/n tiene el cuerpo jodidamente ardiente!

Y particularmente el comentario de Jisoo solo aumentó la batalla. Tal vez... Si podrían lastimarse.

—Yo casi me la cogia antes de que nos interrumpieran. Así que gané.

Nada sería igual después de ese día.

—¿Y si mejor vemos una película las cuatro? Antes de que se hagan daño -opinó T/n, y milagrosamente detuvo la pelea.

—¡Yo me haré a su lado!

O tal vez no.