Taehyung casi estaba a punto de querer
morderse las uñas. Miró entre el publico,
allí estaban sus padres, escuchando la
exposición de uno de sus compañeros.
Sentía que podía darle un infarto de los
nervios que tenía, no lograba calmarse, pero al menos agradecía que Jungkook cuidase de Nayeon.

—¡Maldición, maldición, no puedo hacerlo!

Quería arrancarse los cabellos, pero se
olvidó de hacer esa acción en cuanto un
aroma muy conocido para él, y además una mano que había tocado su hombro, fueron los que lo sacaron de sus pensamientos,

Miró detrás de él, y allí estaba Jungkook
sonriéndole mientras cargaba a la bebé.

—¿Qué haces aquí? Se suponía que tenías que estar en el departamento cuidándola de que no la vieran mis padres.

—Lo has dicho, "se suponía", pero no me perdería tu presentación por nada del mundo.

—Jungkookie, no deberías estar aquí.

El alfa soltó una risa y se acercó al omega para después darle una leves palmadas en la cabeza.

Taehyung sintió como su respiración y su corazón dejaban de estar tan acelerados, Jungkook parecía un tipo de medicina que lograba que toda su ansiedad se fuera en un santiamén. El omega a veces se sentía demasiado mal por Jungkook, pues sentía que aquél alfa merecía a alguien que fuera más atento hacía él, y sentía que lo había enclaustrado a él por el simple hecho de
cuidar de Nayeon. Y sabía que eso no era lo correcto.

—Gracias—el omega le sonrió para así decirle que se encontraba más tranquilo.

—Cuando termines, ¿podemos salir? Ya
sabes, a algún lugar a celebrar.

—Por supuesto.

Jungkook sonrió feliz al escuchar aquello, en verdad quería pedirle a su precioso omega que salieran como pareja oficialmente, y esperaba que aceptara.

Los aplausos se hicieron presentes sacando a ambos de la pequeña burbuja que habían formado, Taehyung respiró profundamente. Estaba preparado, tenía que estarlo.

—En verdad te lo agradezco mucho, Jungkookie.

—No hay de que, TaeTae.

Y así fue como Kim fue a dar inicio a la
presentación de su tesis.

—¡Pensé que me desmayaría!

Jungkook soltó una risa cuando escucho las palabras del omega. Claro que le creía, parecía que se estaba poniendo pálido, y más cuando pensaba que
sus padres no lo felicitarían, pero la realidad fue otra. Taehyung había sido felicitado por sus dos padres, quienes se encontraban felices por haber visto como su hijo daba fin a la universidad, ahora era todo un profesional.

Jungkook y Taehyung habían regresado a su departamento, se arreglarían para salir a comer algo, pero primero a descansar. Taehyung verdaderamente lo necesitaba.

—Felicidades, TaeTae.

—Gracias, y también felicidades a ti, ambos lo logramos, ahora me siento más tranquilo al respecto.

—Lo mismo digo—el alfa soltó un suspiro—, ¿a dónde quieres ir a comer?

—Algo sencillo, quiero que Nayeon vaya con nosotros.

Taehyung había aprendido la lección; no dejar a Nayeon a cargo de Kim Namjoon y Kim SeokJin.

Ambos estaban tan cómodos en el sofá, pero escucharon como unos toquidos se hacían presentes, alguien estaba detrás de la puerta principal. Los dos se miraron, pensando que podría ser alguna visita que ambos esperaban, pero no.

—Seguramente es Namjoon, le gusta felicitar a todos—mencionó Jungkook.
Taehyung dio un asentimiento y se acercó a la puerta, no sabía porqué de repente sintió cierto miedo, pero de todas formas decidió ignorar aquello y abrir la puerta.

—¡Sorpresa!—allí estaban sus padres, soonriendo traían en sus manos regalos
que claramente eran para él.

Pero Taehyung no se sentía para nada
emocionado, como pudo logro sonreirle
a sus padres. Lo cierto es que estaba  asustado, no les había dicho absolutamente nada acerca de Nayeon, y aún menos de Jungkook.

—¿Q-qué hacen ustedes aquí?—no quería sonar grosero.

—Cariño, te queríamos dar una sorpresa, hay que celebrar esto—respondió su madre, se veía muy entusiasmada.

—Claro, Taehyung, tenemos que celebrar que mi pequeño hijo ahora es todo un profesional, eres un gran orgullo para está familia.

Su padre estaba feliz, pero Taehyung de nuevo era un manojo de nervios, Jungkook estaba distraído jugando con Nayeon, pero al escuchar como su omega seguía hablando, no pudo evitar acercarse.

—TaeTae, ¿quién es?

Taehyung palideció.

Jungkook se acercó a él y aunque al menos no tenía a Nayeon en sus brazos, era un problema. Sus padres se quedaron sorprendidos ante aquel alfa que se había detenido al verlos, ahora Jungkook sabía que no era momento perfecto para acercarse tanto al omega.

—¿Quién es él, Tae?—preguntó su madre, que no se veía tan feliz ahora, pero trataba de disimularlo, la verdad era que estaba emocionada, ¿sería aquel el alfa de su hijo?

Pero su padre no estaba feliz para nada, y no estaba emocionado, ese era un alfa, ¡un alfa en el departamento de su hijo!

Sabía que no podía ser un compañero, porque Taehyung siempre les decía que no había nadie más con él.

—Él e-es Jeon Jungkook—Taehyung apenas y había logrado articular esas palabras.

—Qué bien, hijo, y ¿es tu alfa?

Eso había puesto en alerta su padre.

—Hola, señor—Jungkook se sentía solo un poco (por no decir mucho) atemorizado por la mirada del padre de Taehyung.

—¿Te ha marcado?—preguntó su padre,
estaba molesto.

—N-no, papå.

Jungkook estaba a punto de acercarse, pero las risas de Nayeon se hicieron presentes, y es que la bebé le pareció divertido ver como Jungkook casi temblaba.

Así fue como el padre de Taehyung entró
primero y claro después su madre, quien
se cubrió la boca asombrada al ver a una bebé jugando con un peluche de Pikachu. El señor Kim también estaba sorprendido, pero enfureció, y su mirada fue directo al alfa que se encontraba casi a su lado.

Y es que la bebé tenía un gran parecido a ambos, ¿cómo no iban a confundir las cosas?

—¡Tú!—Jungkook sintió que estaba por morir, al escuchar al padre de su omega dirigirse hacía él—. ¡¿Cómo es que te atreviste a tener un hijo con mi pobre Taehyung!?

—N-no, yo no...

—¡Silencio!

—Pero es que...—Jungkook no sabía como explicarse, y tal vez lo mejor hubiera sido no hacerlo—. Vea el lado bueno, aún no lo he m-marcado.

Eso si había hecho enfurecer al señor Kim, y no pudo evitar soltarle un puñetazo en la nariz al menor. El golpe había sido con algo de fuerza, haciendo que Jungkook de inmediato se desmayara, cayendo al suelo.

—¡Papá!

—¡Kim Seungjung!

Tanto la señora Kim como Taehyung estaban alarmados, no creían que algo así pasaría. Nayeon solo comenzó a reír al ver a Jungkook caer al piso, eso había sido muy divertido para la bebé.

©ʏᴏᴏɴɴɪᴇxᴊɪᴍɪɴɪᴇ5