Kim Jennie sintió un escalofrió al mirar su
prueba de embarazo, ahora ¿qué es lo que
iba a hacer? Si sus padres se enteraban
estaba perdida, había sentido por toda una semana demasiados mareos y además de que apenas y podía retener los alimentos en su estomago, estaba algo atemorizada, y más cuando fue a ver al medico, y allí fue donde sus sospechas de tener solamente una infección del estomago se fueron.

A pesar de que el medico la había felicitado, ella no estaba nada feliz, había salido del consultorio y en cuanto llegó a su casa lo único que hizo fue llorar, no debió haber pasado algo como eso, y estaba muy triste por aquello, pero ¿qué podía hacer?

A su mente lego solo una palabra, abortar, pero simplemente no podía hacerlo. El pequeño o pequeña dentro de ella no tenía la culpa de su descuido, no podía hacerle algo como eso pero aún así no podía quedárselo, ¿qué le diría a Kai?

—No, no puedo decirle.

No es que le tuviera miedo, Kai no era un alfa malo, de hecho era uno de los más encantadores y lindos, ni siquiera podía creer que alguien como él, se había fijado en ella. Pero, el problema era que Kai estaba interesado en otras cosas, como en no perder nada de su beca para estudiar su maestría, además de que podía darse la casualidad de que pudiera convertirse en un excelente jugador de fútbol si es que los patrocinadores estaban al pendiente de él, y Jennie era consciente de que aquellos lo estaban, sabían del talento de su alfa, y por supuesto que no desperdiciarían el momento para poder llevárselo al extranjero.

¿Qué hacer? Ni siquiera ella lo sabía, pero... tenía que pensar rápido, no podía dejar esto a la deriva.

De inmediato algo cruzo por su cabeza, era
perfecto, nada podría salir mal.

—Kai...

El mencionado la miró, sonrió al instante
al ver a su novia, se alejo de sus amigos y
se dirigió hacía ella, para recibirla con un
abrazo.

—¡Hola!—la omega le sonrió débilmente—.
¿Qué ocurre?

—He recibido al fin una respuesta de la
escuela de arte.

Kai se vio emocionado, sabía cuanto es lo que su querida novia se había esforzado por conseguir estar en aquella escuela, siempre mandaba una solicitud cuando eran las convocatorias.

—¿Qué fue lo que te dijeron?

—Fui aceptada—a pesar de que sabía que su novia quería entrar allí, no vio felicidad en
su rostro, sino tristeza.

—¿Por qué pones esa cara? ¡Deberías estar
feliz! Te han aceptado...

—No lo estoy, tengo que irme lejos de
la ciudad, tengo que ir a la provincia de
Gyeonggi... será por unos meses.

El alfa apretó sus labios, podía soportar estar lejos de Jennie, pero no por tanto tiempo.

—¿Cuántos?

—Unos diez... espero.

—Con tal de que seas feliz, lo aceptaré, pero... te extrañaré como no tienes idea.

Jennie abrazó a su novio. La historia era otra, no se iría a una escuela de artes, iría con una amiga suya, allí se quedaría a vivir hasta que el bebé naciera, su amiga era una de sus confidentes más grandes, y había aceptado de inmediato.

—¿Qué?—fue lo único que dijo Kai cuando Jennie termino de relatar aquello—. Es broma, ¿verdad?

—No lo es—ella suspiró.

Agradecía que la biblioteca estaba casi vacía y solo ellos podían estar en aquel lugar tranquilo, hablando de lo sucedido.

—¿Por qué no me lo dijiste desde un principio?

—No quería que esto arruinara prácticamente todo lo que tenías... además, era obvio que mis padres me hubieran matado si se enteraban de esto.

—No, Jenn... debes comprender que estos
cambios de planes no me afectan en lo absoluto, me hubiera gustado que me hubieras dicho la verdad y que no hubieras escapado así como lo hiciste.

—Lo lamento—la chica bajó la mirada.

Kai tragó grueso y aparto la mirada, ¿así que tenía una hija? Pero, ¿en dónde estaba? ¿Acaso Jennie lo había regalado? ¿Se lo habrá quedado su amiga? ¿Quién era la persona responsable alhora de cuidar a su hija?

—¿Y dónde está?

La pregunta de Kai hizo que Jennie volviera a mirarlo.

—La dejé en buenas manos, no debes estar
preocupado.

El silencio reino de nuevo entre ellos, pero aún así Kai no apartaba la mirada de su novia, quería saber en dónde se encontraba aquella bebé.

» —Se lo dejé a Kim Taehyung—Kai se vió algo sorprenido.

—¿Por qué a él? ¿Por qué no cuidarla nosotros?

—Sabes muy bien que no podemos hacerlo.

—¿Y crees que él tiene también el tiempo
suficiente para hacerlo?

En eso Kai tenía toda la razón, Jennie había actuado demasiado precipitada, y más por dejarle al bebe de esa forma a Taehyung, quien era uno de los mejores alumnos de toda la universidad.

—Kai...

—Jennie, no debiste hacer eso, ¿estás consciente de que pudiste arruinarle la vida a ese chico?

—No lo hice.

—¿Cómo puedes estar tan segura?

—¡Lo he visto!—exclamó—. ¡Sé que no se la arruiné  porque lo veo y está feliz!

Ambos se miraron a los ojos por unos segundos.

—Y... ¿por qué decidiste decirme esto ahora?

—Porque quería que lo supieras, no podía seguir guardándolo.

No sabían que alguien entre las estanterías
de libros los estaba ꒰ ❣︎ ꒱, pero cuando escuchó eso ultimo, y después ya no había oído más nada: fue cuando salió de su escondite para irse, tenía que decírselo a Taehyung, y puede que Jungkook prácticamente le diga que se largue, pero tenía que contárselo.

→ ¿Qué creen que va a pasar con Nayeon?👀

Nos leemos mañana, cuídense (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)⁠❤

©ʏᴏᴏɴɴɪᴇxᴊɪᴍɪɴɪᴇ5