Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

❍ Capítulo 14

Estúpida.

Era la palabra que más resonaba en mi cabeza mientras me intentaba levantar de donde sea que estuviera en ese momento. Mis manos podían sentir el suelo algo húmedo, lo que me haría sentir extraña y gruñiría molesta, movería la mano para sentir que el suelo era como tierra y que lo que estaba tocando era hierba.

Abrí los ojos de golpe para ver que estaba en el exterior, con mis piernas atadas, sin poder moverme, a mi derecha estaba Elena que aún estaba inconsciente y totalmente atada, capaz Flowey consideraba más peligrosa a ella que a mí.

Giraría la cabeza a otro lado para ver aquella flor dándome la espalda, mirando la luna y respirando con total calma como si nada hubiera ocurrido, gruñí de vuelta con un poco más de fuerza y molesta, lo que lograría llamar su atención y que me mirara algo molesto también.

-Te tendrías que haber callado la boca - Fue lo primero que me dijo nada más verme despierta. Que molesto. -, ahora por tu culpa todos ellos saben que sigo vivo, eres una desagradecida.

-¿¡Desagradecida yo?! - Pregunté sorprendida

-¡¡Podría haberte hecho daño en cualquier momento, pero preferí dejarte con vida!! ¿¡Y qué es lo primero que haces ante esto?! ¡¡Vamos a decirlo a todos, que buena idea!! ¡¡Maldita humana, solamente miraba por el alrededor de este barrio que había, nada más!! - Me contesto molesto.

-¡¡Eso es mentira!! - Grité molesta, intentando levantarme, pero él me lo impediría.

- ¿¡Solo porque te crees la palabra de dos idiotas que no olvidan el pasado?! ¡Maldita sea, las almas humanas son imposibles de conseguir a día de hoy a no ser que mates gente y yo ya no hago eso! - Me volvería hablar, muy molesto.

-¡Eso es más que mentiras!

-¡¡No tienes ningún derecho de hablar de que es verdad y mentira si apenas sabes quienes somos!! - Me gritó molesto y me callaría, razón no le falta. -. ¿¡Quieres saber la verdad?! ¡Sin problema! ¡He sido un monstruo y he jodido mucho el camino a Frisk cuando estaba en el subsuelo! ¡Pero a decir verdad me he dado cuenta que es mejor así a que fuera de otra forma, otra en la que TODOS estaríamos muertos! - Cuando me dijo esto, podría sentirme ciertamente mal y preocupada.

-¿A qué te refieres...?

-¡¡No todo está tan bien como tu piensas!! Si bien somos libres, aún hay varios problemas de por medio y algunos sí son un maldito problema, pero claro, ellos piensan que solo YO soy el maldito problema, es mencionarme y ya todos me tienen miedo - Explicó con rencor en sus palabras, como odio. -. Y ni siquiera vieron lo que vio ese niño, solo son unos malditos cobardes, al único que respeto es Frisk y es por ello que me abstengo de todo y, si puedo ayudarle, LO HARÉ.

Ciertamente me quedaría en shock al escuchar esto, era algo que no me esperaba que iba ocurrir, creí que a iba hacerme daño, pero al ver esto, pensaba de una forma ligeramente distinta, aunque no quitaba la opción de que me hiciera daño.

-Y antes de que digas nada, aquel niño, no está muerto, está inconsciente, me he asegurado de que esté con su familia de vuelta y he intentado ayudarle con cosas que le gustan, pero era mi forma de llamar tu atención de forma sutil, ya que tus padres son... Bastante estrictos... Lo que no me esperaba era la agresiva de tu amiga.

-Creíamos que nos harías daño - Le contesté con calma.

-Iba, pero me visteis como un monstruo porque esos seres ya os hablaron mal de ti... Y a saber de qué más cosas os habrán dicho... Maldita sea, cuando quiero ayudar es cuando más desconfían de mi - Gruñó molesto.

-Hombre, si hiciste algo malo, es normal que desconfíen - Le expliqué con calma, logrando poco a poco sentarme en el suelo.

-Le pedí perdón a Frisk, en su cara, pero al niño no le interesa eso, no, prefiere decir que le hice mucho daño.

-¿Le pediste perdón? - Mi pregunta hizo que la flor se pusiera pensativa.

-No... Del todo... Lloré y me marché, arrepentido... Luego fue cuando quería volver atacarle, porque le tenía cierto odio, pero ahí saldría Asriel - Me explicó con calma. -. Sí, no he sido trigo limpio, pero lo que digo ahora es la verdad.

-¿Cuál es tu verdad? - Pregunté algo desconfiada de él.

-Quiero ayudar a Frisk - Arqueé la ceja sorprendida. -, ese niño ni nadie podrá hacer frente lo que posiblemente pueda venir si esa persona logra hacerse fuerte y no solo eso, es posible que los magos vuelvan una vez que sepan de los monstruos, capaz los humanos vayan a torcer el brazo, pero los otros no - Podría ver cómo me miraba de arriba abajo con cierta desconfianza.

-¿Los magos? ¿Y de qué persona hablas?

-Los magos son seres que no desaparecen realmente, son como humanos, pero ocultos, podría serlo cualquier persona, pero que lo sabe ocultar y hasta que no sea el momento, actuar para que ocurra de nuevo lo mismo - Me explicó con seriedad. -, me sorprende mucho que humanos o monstruos no sepan esto, están cegados de que no volverán nunca más - Y tras explicarme bien todo, respiraría hondo. -. Y sobre la otra persona, es un ser que controla la determinación, realmente no está muerta ni desaparecida, simplemente elegirá a la persona correcta y la controlará a su gusto para atacar.

-¿Chara?

-Parece que te hablaron de ella - Contestó sorprendido.

-Ella - Señalé a Elena. -, ella fue quien me informó, te pido que la liberes, no es agresiva, estaba asustada, pero si lo explicas todo podrá entender.

-Lo dudo que lo entienda, ahora que todos están en mi maldita contra porque decidiste hablar de mí, será muy difícil poder moverme por vuestro barrio, muchas gracias querida Ursula - Soltó con ironía esto último.

-Mira, no fue a posta, no pensé, ¡demonios ni te conocía! ¡No conocía a nadie ni a nada! Esto es totalmente nuevo para mí y créeme que cada vez que me explican más del tema ¡solo siento miedo y confusión! ¡Aun deberías agradecerme de que tenga la intención de escucharte! - Contesté molesta, casi rabiando.

-E hiciste bien, si hubieras hecho otra cosa me habría pensado si atacarte o dejarte inconsciente - Me contestó molesto.

-Ibas a matarme - Contesté de forma borde y seria.

-No, estúpida, hacer eso solo me causaría más problemas, como ya te he dicho, no quiero matar a nadie a no ser que sea un gran peligro, tu no supones uno, por no decir que tienes un corazón demasiado bueno del cual me da pena de solo verte - Se sinceró conmigo, aunque sus palabras no me gustaron del todo.

-Si ser buena persona significa sufrir, lo sería mil veces si hace falta - Hablé con seriedad mientras le miraba algo molesta. Este me observó, curioso.

-No podría identificarte si me dijeran que eres - Susurró a lo que me dejaría bastante confusa. -. Sea como sea, por lo que entiendo, confías en mi palabra ¿o no?

Era difícil, si bien lo que decía era algo lógico por las personas que mencionó, entre ellas Chara, por otra parte, su manera de actuar no me gustaba para nada y algunas de las cosas que decía no me eran lógicas. ¿Cómo que ahora es bueno porque vio cosas de las cuales quiere impedir ahora? ¿Se cree que ve el futuro u otras líneas temporales?

-Si quieres que confíe y te ayude... - Me pensaría bien las palabras. -. Quiero que liberes a mi amiga, Elena.

-Hecho - Al decir esto, podría ver como las enredaderas dejarían libre a mi amiga. -. ¿Qué más?

-Que... Uhm...

-Puedo asegurarte la protección si quieres, que nunca más te hagan daño, para que confíes en mi - Sugirió.

-Sí, eso - Me quedaría en blanco un poco, era un poco estúpida esa idea ya que no sufría muchos problemas. -. Y quiero que nos digas toda información del subsuelo, sobre los monstruos, todo.

-¿Puedo saber por qué? - Preguntó arqueando la ceja.

-Queremos saber un poco sobre las almas humanas, nos compararon con ellas y tuvimos algo de curiosidad, también queremos explorar el subsuelo - Le expliqué.

-Puedo hacer que tu seas la guía del subsuelo y darte toda la información, acepto ese trato - Al escuchar esto me sorprendería. ¿Tanto confiaba en mí? -. Lo que no acepto es que me vean por ahora, no hasta que sea el momento u ocurran ciertas cosas que confirmen mis sospechas.

-Me parece bien... Creo - Susurré esto último insegura.

-¿Entonces hay trato? - Una de sus enredaderas se mostraría enfrente mía.

-Trato.

Decidida le daría mi mano hacia la enredadera para moverla con cierta delicadeza, mirándonos de forma seria y decidida ante nuestro trato. Capaz, el pacto que había hecho era con el mismísimo demonio o la mismísima salvación a nuestro pueblo, pero fuera lo que fuera, estaba muy asustada.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro