【1/4】

El día siguiente

Los ojos de Hyunjin se abrieron mientras dejaba que su visión se ajustara a su habitación excesivamente iluminada.

Una vez que dejó que la realidad se asentara, vio que estaba de vuelta en su cama en su casa, o más como en la casa de Lee. Estaba terriblemente confundido sobre cómo llegó aquí.

Me recuerda haber vuelto a casa en absoluto.

El Príncipe giró la cabeza hacia un lado y vio su celular junto a su cara, enchufado al cargador. Se preguntó quién tendría la amabilidad de cargar su celular por él.

Alcanzando el dispositivo, el cuervo levantó su celular y lo encendió para ver la hora:

Martes, 1 de nov. - 7:25 a.m.

El mayor gimió cuando se dio cuenta de que era día de escuela, lo que significaba que tendría que prepararse ahora para no llegar tarde.

Sin embargo, cuanto más el temido pensamiento de la escuela permanecía en su cabeza, más dolor comenzaba a asentarse en sus sienes. Hyunjin hizo una mueca ante la punzada en su cabeza, experimentando una fuerte resaca.

Lo hizo sentir extremadamente cansado y agotado, demasiado débil para ir a la escuela hoy.

Estaba contemplando si debería decirle a Jihyo o no que no se sentía bien y se preguntaba si ella cuestionaría que él bebió anoche ya que sabía que habían salido de fiesta.

Pero él sabía que ella se enteraría, ¡entonces probablemente se lo contaría a sus padres!

Si eso no fuera suficientemente malo, apenas recordaba que hoy tenía un examen importante para el que estudió como loco.

No quiere que su arduo trabajo se desperdicie.

Al final, después de pensar en todos los pros y los contras, el Príncipe decidió que hoy solo debería ir y lidiar con el dolor de cabeza. Tal vez si tiene suerte, con algún medicamento, se sentirá mejor en poco tiempo.

Sentándose con cuidado de su colchón, el pelinegro estiró un poco los brazos mientras examinaba su entorno, todavía curioso por saber cómo había llegado allí.

Cuando miró por encima del hombro, vio que faltaba ¿Felix..?

Al mirar hacia el baño, vio que la puerta estaba cerrada, lo que indicaba que probablemente alguien estaba allí. Ese alguien probablemente era el propio chico pecoso.

El mayor obligó a su cuerpo exhausto a levantarse de la cama y se puso de pie, caminando hacia su armario para agarrar su uniforme escolar para hoy.

Una vez que vio la ropa limpia, rápidamente la sacó del armario y se la puso, notando que no tenía puesta una camisa cuando se despertó... lo que significa que alguien se la quitó antes de dormir.

Probablemente sabían que no le gustaba dormir con una camisa puesta... pero Hyunjin estaba demasiado agotado mentalmente para pensar en quién podría haberlo hecho.

Después de ponerse la ropa, perezosamente se retocó el pelo de la cama para que pareciera que puso algo de esfuerzo en ello.

Cuando en realidad, solo movió algunos mechones.

Una vez que completó eso, el Príncipe se asomó al baño y vio que el hombre de cabello plateado aún no había terminado allí. El cuervo suspiró pesadamente, trotando hacia la puerta ya que él también necesita usar el baño ¡o perderá el tren!

Sin siquiera dar un golpe suave, el mayor giró el pomo de la puerta y la abrió, haciendo que el joven se sobresaltara por su repentina aparición.

Hyunjin levantó una ceja cuando vio a Felix sosteniendo un tubo de brillo labial transparente, aplicándolo a sus labios color fresa. Junto con el maquillaje, tenía algunos rulos enrollados en su cabello plateado.

El Príncipe se preguntó por qué el hombre pecoso se ve más bien puesto que de costumbre.

Por lo general en la mañana el chico de cabello plateado no haría todo esto para ir a la escuela, solo haría algo rápido y simple.

Sin embargo, ahora se está tomando su tiempo mientras se arregla.

El cuervo pensó que algo importante podría estar pasando hoy, pero ¿qué? ¿De qué no es consciente?

El más joven se congeló cuando vio al mayor parado frente a él, mirándolo de arriba abajo con un poco de confusión en su rostro.

Felix no estaba seguro de qué decir o hacer, los eventos de la noche anterior inundaron su memoria como un tsunami.

Hoy, cuando se despertó en su propia cama, miró al hombre desmayado y recordó lo difícil que fue traerlo de regreso a casa sin que su madre lo sorprendiera en el acto. No necesitaba que ella los viera en su estado de ebriedad.

Toda la noche apenas pudo dormir, su mente daba vueltas en círculos cada vez que pensaba en cierta persona.

Estaba entrando en pánico porque ya no sabía cómo confrontar a Hyunjin después de su momento en la cama... sabía que sería terriblemente incómodo estar cerca de él ahora.

Cuando finalmente durmió, como una o dos horas, ¡sus ojeras eran tan obvias para todo el mundo!

Necesitaba deshacerse de ellos, así que se maquilló la cara y se peinó muy bien para que la gente no se fijara demasiado en su cara.

Sin embargo, todo el tiempo que se estaba preparando, solo tenía una persona en mente...

Haciéndole sentir que se puso bonito para esta persona...

¿De verdad cree que haría todo esto por él? ¿O realmente quería verse bien por sí mismo?

Él estaba perdido.

"Buenos días."

El Príncipe habló primero, entrando en el espacio reducido para agarrar su cepillo de dientes y la pasta de dientes.

"¿Por qué estás vestido tan bien? ¿Hay algo que me estoy perdiendo?"

El chico pecoso no podía pronunciar una palabra por la cantidad de shock que tenía, ¿cómo podía el cuervo mirarlo y hablarle como si la noche anterior no hubiera pasado?

Ni siquiera parece desconcertado por eso...

"Hola... u-um... oh, no hay razón. Solo me apetecía..."

El mayor tarareó, colocando una cantidad de pasta de dientes del tamaño de un guisante en su cepillo y comenzando a lavarse los dientes, haciéndolo incorrectamente al ir rápido.

Después de que Hyunjin se aclaró la boca de la pasta, se volvió hacia el hombre de cabello plateado con una expresión pensativa, como si estuviera a punto de preguntarle algo al joven.

Cuando Felix vio esto, pudo sentir que el Príncipe lo confrontaría sobre su... tiempo juntos...

No estaba seguro de estar listo para hablar de eso todavía, sin embargo, ¡todo estaba sucediendo tan rápido!

Necesitaba prepararse incluso si no lo estaba.

"Entonces, ¿qué pasó anoche? No tengo ni idea de cómo llegué a casa. Era la primera vez que me emborrachaba, así que me golpeó bastante fuerte... je".

El hombre pecoso se detuvo en seco cuando el cuervo mencionó que apenas recuerda nada... ¿Esto posiblemente significa...?

¿El lo olvidó?

¿Olvidó cada beso, caricia y afecto mutuo?

Qué demonios...

"... ¿Cuánto r-recuerdas...?"

"Hmm, bueno, lo último que recuerdo fue después de que esas chicas nos dieron nuestras bebidas. ¡Todo después de eso es borroso!"

"¿Un borrón? ¿¡BORROSO?! ¿¡Tener sexo con tu amienemigo es un MALDITO BORROSO?!?"

El chico de cabello plateado se burló y miró hacia abajo cuando el mayor no mencionó una parte de todo lo que hicieron juntos. Ni siquiera recordaba su primer beso frente a todos... ¡¿cómo se le OLVIDÓ?!

El más joven puso los ojos en blanco por la molestia, apartando agresivamente su brillo y quitándose los rulos, sintiéndose tan estúpido en este momento.

No podía creer que se enganchó con Hyunjin solo para que él lo olvidara justo después de que terminara.

Le entrego su virginidad...

Se sentía como un perdedor.

Sin retocarse el cabello todavía, Felix empujó bruscamente el brazo del Príncipe para que pudiera pasar, sin hacer ningún tipo de contacto visual con él.

"Woah, ¿qué dem-?" exageró el cuervo cuando el chico pecoso tuvo un repentino estallido de emoción, empujándolo fuera del camino sin siquiera decir disculpas. Se preguntó, ¿qué presionó sus botones en este momento?

El hombre de cabello plateado comenzó a agarrar su bolso y abrigo del suelo, moviéndose tan rápido que el mayor casi no lo vio salir de la habitación.

Hyunjin estaba estupefacto por esto, confundido sobre por qué el joven se enojó tanto al azar.

Tratando de averiguar qué podría haber sucedido, el Príncipe trató de terminar rápidamente de usar el baño, además de agarrar algunas cosas antes de salir de la habitación.

Necesitaba ir a buscar a Felix y preguntarle qué estaba mal. No se sentía tranquilo al saber que el otro no está de buen humor.

Ahora son amigos, ¿verdad? deberían poder hablar entre ellos.

Cuando el cuervo bajó corriendo las escaleras, fue recibido por todos los que esperaban junto a la puerta con aspecto impaciente. Junto con el resto de los chicos, estaba el hombre pecoso mirando fijamente a una pared al azar.

No parecía importarle nada más.

Al ver que estaba solo, el mayor caminó hacia el chico de cabello plateado y aprovechó esta oportunidad para hablar con él, para preguntarle cuál es la razón de su ira.

Sin embargo, cuando el joven notó que Hyunjin venía hacia él, inmediatamente se volvió y comenzó a hablar con la persona más cercana a él.

Jisung.

"Oye, ¿estás listo para ir?"

"Sí, estoy listo. ¿tú?"

"Sí, vamos. ¡Vamos, Minho!" Felix habló en voz alta a su hermano, indicándole que abriera la puerta y se fuera.

Minho entendió y gritó un breve "adiós" a su madre, abriendo el frente y saliendo de su casa para dirigirse a la escuela.

El Príncipe estaba completamente confundido por toda la situación y no podía entender por qué el chico pecoso lo ignoraba por completo.

Estaba molesto porque el otro simplemente actuaba como si no estuviera... allí.

Se sentía como si pudiera haber hecho algo malo para que actuara de esa manera.

¡Pero no podía pensar en lo que podría haber hecho!

El cuervo recordó cuando empezó todo esto, en el baño. Parecía que después de que el mayor trató de recordar los eventos de la noche anterior, el hombre de cabello plateado se convirtió en este pequeño enojado.

¿Significa esto que está molesto por algo que sucedió en la fiesta? ¿Mencionó algo que al joven no le gustó?

O tal vez, ¿él... no... mencionó algo?

Sin embargo, por mucho que Hyunjin hizo todo lo posible por recordar, parecía que no podía comprender los eventos que ocurrieron anoche.

Odiaba no poder recordar.

Odiaba haber bebido en exceso hasta el punto de que no puede recordar nada.

Pero, tan frustrado como estaba, el Príncipe no iba a dejar de intentar recordar. Haría todo lo posible para recordar sus pensamientos y recuerdos de la noche anterior.

Iba a llegar al fondo de esto.