Miró a lo lejos a Minho adentrándose al edificio, quien conversaba y caminaba junto con una chica de la misma clase. Caminó más rápido, acercándose a ellos. Su inesperada presencia llamó la atención de ambos y sonriéndoles leve cuando ellos hicieron lo mismo antes.

⏤Hey, Felix.

⏤Hola. ⏤miró a la chica y después a él. ⏤¿Podemos hablar?

Ya que encontró a Minho entrando a la escuela, aprovecharía a preguntarle por la tal llave que estaban buscando los del consejo estudiantil, o específicamente Jake. De ahí, sería su último trabajo que le dieran para el asunto de la llave. Eso creía él.

⏤Claro. ⏤asintió. ⏤Nos vemos, Ryunjin. ⏤se despidió de la otra chica.

Ryujin también se despidió de ambos, alejándose de ellos para tomar otro pasillo para cuando ya habían entrado.

⏤¿Y? ¿De qué querías hablarme?

⏤Bueno, ayer en la reunión del consejo estudiantil abrieron una nueva investigación. No escuché demasiado, pero entendí que alguien estaba entrando sin permiso alguno a la sala diez. ⏤subió sus anteojos.

Continuó hablando cuando comprobó si Minho le estaba escuchando.

⏤Supusieron que tú eras el otro encargado de las llaves de las salas a parte de Jake y el profesor Choi me hicieron preguntarte por aquella llave.

Minho se rascó el cuello, tragando fuerte al escuchar las palabras de Felix. En cambio, Felix se cuestionó la razón por la que se puso nervioso, pudo notarlo por sus expresiones corporales.

⏤¿De la sala diez? Pero esa sala es del edificio clausurado, ¿no?

⏤Sí, pero Jake dijó que cada vez que cerraba la puerta esta aparecía sin seguridad al día siguiente. Por eso llegó a la conclusión de que alguien estaba escabulléndose ahí.

Llegaron al salón de clases, entraron y se detuvieron en los pequeños casilleros para dejar uno que otro material escolar que ocuparían más tarde.

⏤Umm, no creo que la tenga, ya que me dieron únicamente las llaves de las salas de este edificio. De igual manera, la buscaré en la sala de maestros, Felix, gracias por contármelo. ⏤le dió un apretón en el hombro después de cerrar la puerta del casillero y se fue a su asiento.

Felix disimuló el dolor que le había causado aquella acción, después hizo lo mismo que Minho. Colgó su mochila detrás del respaldo del asiento, luego sacó un libro sobre literatura prehistórica y se puso a leer. Su compañera de asiento, Miyeon, llegó unos minutos después. Para su mala suerte, las amigas de Miyeon llegaron junto a ella a su lugar a conversar, como lo era todos los días.

⏤¡Miyeon-ah~! ¡Chica! Eres valiente. ⏤le felicitó una rubia que saltó alrededor del asiento de Miyeon. ⏤¡Estoy muy segura de que te aceptará!

⏤¿Le hiciste esos deliciosos dulces de café qué te recomendé? ¡Ojalá le gusten! ⏤la otra dió un pequeño grito de felicidad. ⏤Sin duda, le gustarás. Tan solo mírate, wow, me quedo sin aliento. ⏤dramatizó al ver la imagen de Miyeon.

⏤Chicas, están siendo exageradas. ⏤Miyeon intentó callarlas al ponerse tímida por sus comentarios.

⏤¡Oh! Te va ser suya en... ya sabes donde. ⏤levantó sus cejas con picaría, poniendo más roja a la pelinegra.

⏤¡Basta Yuqi! ⏤rió nerviosa. ⏤Además, Hyunjin no haría algo así de un momento a otro, ¿verdad?

Felix le interesó aún más la conversación de sus compañeras cuando Hyunjin fue mencionado destro de esta.

Sus amigas la miraron no muy seguras, diciendo todo lo contrario de lo que Miyeon pensaba de Hyunjin.

⏤La verdad, sí. De hecho, ¿recuerdan a la chica japonesa que hacía su servicio en la escuela?

⏤¿Sana Minatozaki?

⏤Ella. ⏤asintió. ⏤Estaba enamorada de Hyunjin, se le declaró y él la aceptó pero escuché que en su primer día de noviazgo Hyunjin ya quería follar con ella. ⏤hizo una pausa para observar las reacciones de sus demás amigas. ⏤Como ella estaba locamente enamorada de Hyunjin, le entregó su virginidad y al día siguiente Hyunjin la ignoró y nunca jamás le volvió a dirigir la palabra.

Que estupidez. Pensó Felix.

⏤¡Aaah! Cierto, lo dijo Nayeon.

⏤¿Entonces solo seré su juguete sexual? ⏤hizo un puchero, decepcionada.

Felix hizo un gesto de desagrado por la tonta expresión de la chica Miyeon. No era porque le molestaba aquella expresión, lo que le molestaba era la persona quien lo hacía. Pues conocía la actitud de Miyeon que sus propias amigas.

Todavía recuerda la vez que Jake le contó sobre haber visto una chica siendo tocada descaradamente por un chico en los solitarios pasillos. Después de una semana, Felix también había visto a Miyeon siendo tocada por un chico diferente pero esta vez en los baños. ¡En los baños!

Bufó al recordar la absurda escena.

⏤¿Aún no llega Minho? ⏤preguntó Jake por quinta vez.

⏤Ya preguntaste lo mismo cinco veces. ⏤dijó aburrida Danielle.

⏤¿Y? Tengo que manifestar la presencia de Minho.

⏤Que estúpido.

El pecoso que, una vez más, se encontraba archivando unos documentos que el maestro Jeon le ordenó acomodar, respingo al escuchar otra vez las discusiones de los menores.

⏤¡YA! ¡Ustedes parecen perros y gatos peleando cada que se ven! ⏤reclamó Jihyo estresada.

Ambos se quedaron en silencio cuando su noona los miró con amenaza. Ya casi sería sábado, tal vez era por eso que su noona Jihyo estase tan molesta por sus peleas, comúnmente se quedaba observando sus discusiones sin decir algo.

La puerta se abrió, llamando la atención de los del consejo estudiantil. Minho entró a la sala, sonriendo felizmente a los chicos presentes.

⏤¡Hola! ⏤saludó de buen humor. Sin embargo, se puso serio al ver los rostros de los demás. ⏤¿Por qué estos rostros? ¿Pasó algo? ⏤cuestionó, sentándose en el asiento de siempre.

⏤¿Felix ya te lo dijo?

⏤...¿Sobre qué?

⏤Sobre la llave de la sala diez.

⏤Aah, sí. Pero, ¿cuál es la situación? ⏤frunció el ceño.

⏤¡Alguien está entrando sin permiso! ⏤exclamó Jake. ⏤Se supone que yo cierro la sala en cuanto salgo y al día siguiente que regreso, ¡está abierta!

⏤¿Y tú por qué entras a esa sala si está en el edificio abandonado? ⏤preguntó Danielle.

⏤Como presidente del consejo estudiantil, tengo el deber de llevar y traer papeles de información de esa habitación por órdenes del profesor Yeonjun. ⏤hizo un ademán de obviedad con su dedo índice. ⏤No estarán sospechando de mí, ¿verdad?

⏤No, aunque suena algo sospechoso de que sólo tú puedas tener autoridad de ir a ese cuarto. ⏤habló por primera vez Felix.

Todos lo miraron, sorprendidos de que el de anteojos formulara una frase dentro de la conversación de la sala. Él también los miró extrañado, sintiéndose confuso por la expresión que le estaban dando.

Bueno, pero si se ponían a pensar que únicamente Jake podía entrar a esa habitación que les estaba causando lío, sonaba sospechoso. Confiaban en el presidente del consejo estudiantil, pero ya saben, por si las dudas.

Si pudieran decir quiénes son los que han entrado a la sala diez, inmediatamente dirían que Jake y el maestro Yeonjun. Y muy pronto descubrirían quién más tenía acceso.

⏤No sé si el señor Choi también le dió el permiso a otra persona de entrar y esté entrando cada que terminan las clases del día.

⏤Ya me perdí... ⏤comentó Danielle.

⏤¿Y? ⏤observó a todos. ⏤¿Qué vamos hacer respecto a esto? ⏤preguntó Jihyo, algo irritada por el tema que aún no se podía resolver.

⏤Bueno, ⏤procesó. ⏤estaba pensando en asignar tareas para descubrir fácilmente quién es el que se sale con la suya al entrar sin permiso. ⏤quiso sonar amenazante, pero para el punto de vista de Felix fue ridículo.

⏤¿Cómo haremos eso?

⏤Tal vez podemos dividirnos en dos personas. ⏤opinó la menor.

⏤Me parece buena idea. ⏤chasqueó los dedos, señalando al final a la australiana. ⏤¡Elijo a Minho! ⏤tomó del brazo al mencionado.

⏤¡Yo con Jihyo! ⏤abrazó a su unnie.

Se quedaron en silencio al notar algo.

Felix no tenía pareja.

⏤Pero, Felix no-

⏤Tú te puedes encargar de vigilar la zona de la puerta y Danielle y Jihyo la parte trasera del edificio. Yo y Minho preguntaremos a sospechosos principales.

⏤¿No será difícil para Felix por si atrapa a la persona detrás de esto? ⏤preguntó Minho.

⏤Felix tiene una personalidad dura. ⏤miró al australiano, quien le miraba indiferente. ⏤Sin ofender.

⏤DECIDIDO. ⏤con la palma de su mano golpeó contra la mesa, indicando que la reunió ya había llegado a su fin.

Increíble, Felix estaba tan amargado porque trabajaría en una de las misiones más difíciles -a su parecer- y para acabarla trabajaría individual. Aunque le gustaba un poco lo último. No quería que sus deberes fueran retrasados por otras personas, era mejor trabajar solo.

Después de llegar a su casa y haber comido un rico postre hecho por su madre, comenzó a estudiar y hacer sus tareas para tener al menos un poco de tiempo libre.

Siempre solía hacer su tarea en cuanto llegaba ya que, al horario en el que solía salir del instituto; le dejaba sin mucho tiempo. Tenía al menos dos horas para hacer sus trabajos y hacer sus deberes o hacer algo a su gusto. Debido a eso, hace todos sus trabajos en clases para que no tenga tanto apuro en su casa, ya que también quería pasar tiempo con su madre y leer libros.

Al terminar de escribir el último párrafo, guardó todos sus materiales y útiles en su mochila de inmediato, siempre y cuando procurando que algo importante no se haya quedado fuera de su mochila. Se puso de pie, estirando sus extremidades que se le adormecieron mientras estaba sentado en el escritorio. E iba salir de su habitación, si no fuera por un estruendoso ruido que provenía de afuera por los arbustos del jardín trasero de la casa.

Miró al instante la ventana, para ver si lograba alcanzar a notar algo extraño a lo lejos, pero al no tener ningún resultado no tuvo más opción que acercarse y abrir por completo las persianas.

Recorrió el jardín con los ojos, pero al no tener tanta iluminación en el lugar no había muchas esperanzas de que lograse captar algo. Bajó su mirada a los rosales que su madre tenía bien cuidados y que estaban a los costados de la puerta que daba hacia la cocina.

Y fue ahí cuando pudo ver a una persona de ropas negras escalando por la construcción de la casa, exactamente hacia su habitación. Frunció el ceño, intentando de descifrar como estaba logrando trepar la casa sin dificultad alguna y, lo más importante: ¿por qué demonios estaba haciendo eso en su casa?

Abrió la ventana y se recargó en el marco con los brazos cruzados, observando con la cabeza ladeada al otro ser humano acercarse cada vez a lo que Felix le llamaría: "objetivo".

La persona subió su mirada cuando ya estaba por tocar el marco de la ventana, pero se detuvo al ver al chico de anteojos que ya llevaba rato observándolo.

⏤Já. ⏤pronunció con sarcasmo.

Felix alzó ambas cejas al mismo tiempo que cruzaron miradas. Descubrió que se trataba de un chico por su tono de voz, pues llevaba una mascarilla negra y tenía puesto el gorro del suéter, permitiéndole a Felix ver solo sus ojos oscuros y rasgados.

⏤¿Qué crees que estás haciendo? ⏤le preguntó.

⏤Dijo que no tenía novio...

Felix logró escuchar aunque el contrario lo murmuró.

⏤¿Umh?

⏤¿Eres novio de Yuna?

Le miró confundido.

⏤¿De Yuna? ¿Hablas de Shin Yuna?

La conocía, pues la familia Shin había llegado al vecindario al mismo tiempo que ellos y desde ahí los padres de la chica y de Felix se hicieron unidos.

⏤Sí.

El desconocido estaba tratando de sostenerse fuerte de la pared de la casa.

⏤Ella vive en la otra casa. ⏤señaló con sus ojos la casa que estaba al lado de la suya.

El otro la miró, suspirando y rodando los ojos por su error.

⏤Por eso no me gusta hacerlo en casas ajenas. ⏤volvió a murmurar, sin embargo, de nuevo fue escuchado por el de anteojos. ⏤Mierda, ¿ahora como bajó?

⏤Igual como lo hiciste al subir. ⏤respondió de lo más normal.

⏤Que sarcasmo, pero no me ayuda en nada. ⏤le miró mal.

⏤No lo dije para ayudarte, solo para darte lógica.

⏤Entonces no hables. ⏤pidió.

Felix se alzó de hombros.

Se escuchó como abrían la ventana de la otra casa de a lado. Una chica de cabello rojizo se asomó y sonrió al ver al chico de negro, saludándolo feliz.

⏤¡Oye, por aquí!

⏤Haa... ese tenía que ser mi destino, no este. ⏤volvió a mirar mal a Felix,

No obstante, el chico de anteojos ya había cerrado la ventana y las persianas sin ver la expresión del desconocido. Apagó las luces de la habitación y salió.

Luego de conversar con su madre y terminar de hacer su rutina de noche -que consistía en bañarse y aplicarse algunos productos de limpieza y cuidado de piel en su rostro-, regresó a su habitación y se acostó sobre la cama.

Pero no duró mucho.

Le llamó la atención el crujido que se escuchó de afuera, de nuevo proveniente del patio trasero. Se levantó y acercó a la ventana, levantando dos persianas con sus dedos que le permitían ver hacia afuera.

Miró al chico de hace rato, saliendo del jardín de la casa de los Shin y vistiendo solo el pantalón, dejando al descubrirlo su espalda. Al parecer lo descubrió observándolo, porque volteó a dirección suya mientras se reacomodaba la mascarilla. Después comenzó a caminar entre el pequeño camino que separaba las dos casas, poniéndose el suéter.

Aún sin apartar su vista de la ventana donde se encontraba Felix, lo último que hizo fue mostrarle el dedo del medio, insultándolo.

El pecoso lo ignoró por completo, volviendo a su cama cuando el desconocido se perdió entre el camino.

Pensó en lo mucho que, por un momento, había reconocido esos ojos.

⚊ • . ˚ ᯓ★ ˖ ۫ ִSé que no son de los mejores primeros caps, peeeero, prometo que meteré el trama principal de esta historia en los siguientes caps. Espero que les guste ! ♡