── XIV ──

«Let Us go back»

   Tres largos meses habían pasado desde que los Pevensie empezaron a vivir en la casa de los Smith. Para Katherine no había sido ningún problema adaptarse a convivir todo los dias con ellos, no por nada había vivido por más de diez años con ellos en Cair Paravel. 

Susan y Lucy compartían habitación con ella mientras que los chicos debían de dormir en la habitación de invitados. Kath intentaba cada día que sus amigos se sintieran cómodos en su casa, llevándolos al patio trasero a ver las estrellas y hablar sobre Narnia era uno de los pasatiempos favoritos de los niños.

Los cinco tuvieron que cambiarse de escuela; Peter y Edmund se tuvieron que inscribir en la escuela de niños que estaba frente al de las chicas. Debían de tomar un tren desde la estación y viajar treinta minutos hasta llegar al establecimiento y volver del mismo modo.

Era un sábado a la noche cuando Katherine salió al patio y se sentó en las escaleras de la puerta para ver las estrellas. Tristemente no eran como las narnianas, quienes estaban llenas de vida y centelleaban todo el tiempo. Pero eran bonitas al fin y al cabo, eran estrellas muy lindas.

── ¿Tampoco puedes dormir? – susurró una voz detrás suyo. Aquella persona se sentó a su lado y observó junto a ella las estrellas.

── No... – respondió mirando a su amigo quien le sonrió – Extraño Narnia, y mucho Ed.

── Yo igual.

Ambos se quedaron viendo por un momento antes de fijar su vista en las constelaciones.

── No son las mismas – se apenó la chica.

── ¿Las estrellas? – ella asintió y el muchacho suspiró – Volveremos algún día y podrás verlas una vez más.

── Eso espero...

Katherine apoyó su cabeza en el hombro de Edmund mientras este la abrazaba y le daba un pequeño beso en la cabeza. Aquella noche se quedaron admirando las estrellas londinense aún con el corazón roto por haber dejado atrás las fantásticas constelaciones que brillaban en el cielo narniano.

ˏˋ 亗 ˎˊ

   Una de las cosas que no le gustaba era despertarse temprano, amaba dormir hasta altas horas de la mañana y arroparse en sus sábanas, pero no todo podía ser como ella deseaba. Madelyn despertó a Kath el lunes a la mañana, otro día donde tenía que ir al colegio. Mientras su madre despertaba a las otras chicas, ella empezó a cambiarse poniendose la falda gris y su camisa blanca, el saco rojo colgaba junto a su corbata en el perchero de su habitación junto a la de las demás.

Hacer el nudo de su corbata era una de las peores tareas que ella tenía que hacer, era muy complicado y aún no podía aprender a hacerlo.

──  Su... – llamó a su amiga quien estaba peinando su cabello – ¿Me ayudas?

Ella asintió antes de atarle la corbata, lo hacía ver tan fácil.

── Listo.

Kath se acercó hacia el espejo para hacerse una trenza del lado izquierdo de su cabeza. Ella había crecido, un poco, pero estaba más alta. Los que estaban cambiando físicamente eran los chicos, estaban creciendo muy rápido y sus facciones se volvían más masculinas. Pero las chicas no se quedaban atrás, estaban creciendo en estatura y su belleza se reflejaba cada vez más.

Las tres niñas tomaron sus sacos y bajaron al comedor donde tomarían el desayuno antes de ir al colegio. Té, café y galletas estaban en la mesa mientras ellas llegaban, los muchachos ya estaban sentados mientras comían unas tostadas.

── Buenos días – saludó Katherine.

── Buenos días Kath – saludaron ambos chicos.

Se sentaron y empezaron a desayunar mientras charlaban sobre la escuela. Ese día, Edmund parecía tener un examen importante de Física así que Katherine estaba ayudándolo y preguntándole cosas que de seguro estaría en su evaluación.

── Bien niños – habló Helen – Ya es hora.

Ella fue a la cocina y tomó cinco bolsas de cartón donde estaba el almuerzo de todos.

── Adiós mamá - saludaron los niños mientras tomaban la bolsa y le regalaban un beso en la mejilla.

── Hasta luego Helen – se despidió Kath tomando su almuerzo y guardándolo en su bolso.

Los cinco caminaron unas cuantas calles hasta la estación subterránea donde tomarían el tren para ir al colegio. Cuando llegaron a su destino, se despidieron y cada uno entró a su edificio correspondiente.

── Que te vaya bien Kathy – dijo Lucy antes de que ella entrara a su salón de clases.

── Igualmente Lu, y a ti también Su.

── Gracias Kath – las Pevensie se alejaron y la muchacha entró a su salón de clases.

Se sentó en su escritorio correspondiente, uno que estaba algo alejado, pero estaba junto a la ventana con vista a la calle. Se fijó en el edificio de enfrente y vio como un niño se sentaba en un escritorio; Edmund había descubierto que podían verse a través de la ventana, así que ambos habían decidido sentarse junto a esta para poder verse.

Habían descubierto una forma para estar cerca, incluso cuando una calle los separaba.

La clase de biología empezó, pero Kath estaba muy perdida. Desde que habían vuelto de su aventura en Narnia, la relación que ella mantenía con Edmund parecía ser cada vez más fuerte conforme pasaba el tiempo; aquellos sentimientos estaban allí, intactos. Ed podía lucir como un niño ahora, pero actuaba y se comportaba como el hombre que ella se había enamorado.

Su corazón latía descontroladamente cada vez que él la abrazaba y besaba su cabeza, las mariposa siempre aparecían cada vez que le miraba y se sonrojaba cada vez que él le sonreía.

«Carajo, sí que estoy enamorada» pensó.

Y era cierto, ella deseaba ir y correr hacia sus brazos para besarlo y confesar sus sentimientos. Pero una malévola voz en su cabeza le recordaba siempre que, para él, ella era solo una amiga.

Apoyó su rostro en su mano e intentó prestar atención a la clase, el señor Chester había dicho que en poco tomaría un examen, así que ella lo apuntó en su cuadernillo antes de que la campana suene, dando fin a su hora y que debía ir a otra clase.

ˏˋ 亗 ˎˊ

   Los cinco niños estaban hablando de cómo les había ido cuando salieron de la estación. El camino se pasó entre risas y bromas entre ellos; Edmund abrazó por los hombros a Kath y ella le correspondió rodeando su cintura con su brazo.

Él estaba hablando con Susan cuando Peter tocó el hombro de la chica, ella se giró y el rubio levantó las cejas de forma pícara. Kath rodó los ojos ante eso y le dio un pequeño golpe en el pecho haciendo que el riera.

Tocaron el timbre de la casa, y mientras esperaban pacientes en la puerta un hombre les abrió. Era castaño que rondaba por los cuarenta, con gafas circulares y ojos cafés, el corazón de Katherine paró por un segundo mientras lo veía y sus ojos se llenaban de lágrimas.

── ¡Papá!

La niña corrió rápidamente hacia su padre y lo abrazó con fuerza, este rio y la acercó mucho más hacia él mientras soltaba unas cuantas lágrimas.

── Mi mujercita... – susurró mientras besaba su cabeza.

La chica se separó y entró a la casa tomada de la mano de su padre. En la sala de estar, otro hombre rubio estaba junto a Helen, llevaba una camisa blanca y ojos celestes.

── ¡Papá! – gritaron los Pevensie soltando sus mochilas y corriendo hacia aquel hombre.

── ¡Mis niños! – gritó su padre mientras los chicos lo abrazaban al mismo tiempo. Todos lloraban de la felicidad, estaban todos juntos al fin.

Madelyn se acercó hacia su esposo y lo besó antes de abrazar por los hombros a Katherine.

── Celebraremos esta noche.

ˏˋ 亗 ˎˊ

   Ya había pasado seis meses desde el regreso del regreso de los padres de los niños. Estaban todos sentados en el comedor mientras tenían la cena de pascuas. La cena estaba llena de conversaciones y de risas, Katherine se sentía en casa; era hermoso poder estar con sus padres y con los Pevensie.

Estaban los cinco niños sentados en el patio mientras veían las estrellas, Peter estaba contándoles una anécdota de cuando estaban en Narnia, haciéndolos reír ya que era algo gracioso.

Edmund estaba junto a ella mientras reía de las estupideces que su hermano decía. Katherine a veces lo veía y su corazón se enternecía al verlo feliz; cada vez se enamoraba más de él.

── ¡Miren! ¡Una estrella fugaz! – señaló Lucy emocionada – ¡Rápido! ¡Pidan un deseo!

Kath vió la estrella y cerró los ojos.

«Déjanos volver» deseó ella.

¡Holis holis! ARRANCAMOS YA CON LA SEGUNDA TEMPORADA LOCOOOOOOO*seponelocaxd* ¿Quién más está emocionado de esta segunda parte? 

Aquellos que leyeron la segunda temporada antes de que se editaran los capítulos sabrán lo que va a pasar, por lo que les pido que mantengan en silencio futuros capítulos con posibles spoilers, para que todos podamos disfrutar de la historia ;D

Este capítulo es más dedicado a lo que se convirtió la vida de nuestros niños pos Narnia y pre Narnia2, por eso no tiene mucho contenido como usualmente tiene, a pesar de que pudimos conocer al papá de Kath. Les prometo que el siguiente va a estar buenisimo.

SIn nada más que decir ¡Nos leemos pronto!

RiderStilinski ── 25/06/2020 - edición: 22/01/2023