── V──

«Welcome to Narnia»

   A pesar de los sucesos de la noche anterior, aquello no fue impedimento para que los cinco niños fueran a jugar al gran patio. Pero hubieron consecuencias. Lucy estaba enojada con todos, excepto con Kath, claro, quien estaba sentada con ella mientras leía los últimos cinco capítulos de su libro «Mujercitas». Kath se negaba a hablarle a Edmund por su actitud de la otra noche, este por su parte lucía frustrado por aquello y muy distraído.

Tan distraído que no se había dado cuenta que Peter había lanzado la pelota de criquet.

── ¡Auch! – se quejó el sobándose la pierna. Escuchó la risa de su mejor amiga y la miró ofendido. ¿No podía hablarle, pero si reírse de él? ¿Acaso estaban todos en su contra ese día?

── ¡Ups! ¡Despierta bella durmiente! – se burló Peter.

── ¿Por qué no jugamos a las escondidas? – sugirió el ignorando su comentario. Peter lo miró confundido.

── Tu dijiste que era un juego aburrido... – le respondió su hermano volviendo a la "base" mientras jugaba con la pelota en sus manos.

── Además, podemos tomar un poco de aire – le dijo Susan de manera positiva.

── No es como si no hubiera aire en la casa... – espetó sarcásticamente él. Kath soltó una carcajada al escucharlo, pero cuando recibió una mirada asesina de parte de Susan carraspeó y volvió a su lectura.

── ¿Estas listo? – inquirió Peter.

── Siempre lo estoy – le respondió mientras golpeaba el bate contra el suelo y luego se preparaba – lanza.

Lo que sucedió luego pasó como si fuese en cámara lenta. Ella vio como Peter lanzaba la pelota con una fuerza impresionante; Edmund tomó el impulso necesario para batearla con agilidad y fuerza descomunal. La pelota voló por todo el jardín de la mansión antes de chocar contra una de las ventanas y que después se escuche algo romperse.

Todos se vieron asustados antes de correr hacia la mansión y entrar a la habitación que habían roto. Una armadura, quizás de la era medieval, estaba completamente desarmado, el vidrio estaba en todos lados y parecía que la pelota había hecho mucho más desorden de lo que ellos creían.

── Bien hecho Ed – le dijo Peter irónicamente.

── ¿Por qué me hechas la culpa? ¡Si tú me lanzaste la pelota!

── Cállense – ordenó Katherine – Macready nos oirá.

── ¿Que fue ese ruido? – se escuchó la voz de la recién nombrada.

Todos se miraron asustados.

── Corran... – exclamó Peter tomando la mano de Lucy.

Los cinco niños corrían tan rapido como podían, Kath estaba detrás de Edmund, quien, en vano, intentaba buscar un escondite dentro de los cientos de dormitorios de la mansión; más todos ellos estaban cerrados con llave. Peter estaba detrás de la fila, intentando buscar la sombra de la ama de llaves y apurando a todos para que fuesen más rapido.

── ¡Al ático! – ordenó Susan. 

Edmund, quien lideraba la fila, fue corriendo rápidamente a la puerta del ático, esta se abrió fácilmente y todos corrieron hacia el interior. Rápidamente pudieron ver al tan famoso armario que les había traído cientos de problemas. 

El muchacho abrió la puerta del armario y los miró.

── ¡Vamos! ¡Entren! – dijo.

── Debes estar bromeando – musitó Susan antes de que todos girarán atemorizados al escuchar los pasos de Macready en el pasillo.

Kath no lo pensó dos veces y se metió rápidamente en el armario, los abrigos sirvieron como ayuda para que no se cayera al suelo. Algo dentro suyo se removió con emoción ¿Y si volvía a Narnia?. Deseó que así fuera. ¿Y si se encontraba con aquel león una vez más? Ojalá estuviese dispuesto a salvarla de las garras de la histérica señora Macready.

Escuchó a lo lejos las quejas de los cuatro Pevensie, pero ella caminó hasta que sintió como sus pisadas crujían en la nieve. Con esperanza buscó aquella melena dorada, pero se entristeció al no encontrarla.

── ¡Susan! ¡Cuidado! – se escuchó la voz de Peter para luego ver como ambos caían sobre la nieve. Estos se voltearon para ver lo que estaba frente a ellos, incrédulos de que estaban en un bosque nevado.

Ambos salieron con expresiones de asombro en su rostro.

──  Es imposible – susurró Susan, embobada por el paisaje.

── No te preocupes – le dijo Lucy a sus hermanos mayores – Seguro es su imaginación.

Kath río al escuchar como usaba sus mismas palabras contra sus hermanos.

── Creo... – murmuró Peter con pena – Creo que con un perdón no será suficiente ¿verdad?

── No, no lo es – le respondió la niña antes de tirarle una bola de nieve a la cara – ¡Pero quizás eso si!

Rápidamente una guerra de bolas de nieve se creó entre los niños, Kath se rio con burla de Susan cuando golpeó su cabeza con una gran bola de nieve. Ella estaba tan contenta de haber vuelto a Narnia que no se había dado cuenta de que se había resbalado y seguía riéndose a pesar de que su trasero se estaba congelando.

Todos se divertían, menos Edmund, quien los miraba aburrido por su actitud y buscaba algo entre los arboles. Kath dejó de jugar al notar como su amigo no emitía ningún sonido o emoción. 

Susan, en un intento de incluir a su hermano en la batalla, le lanzó una bola de nieve que golpeó de lleno su brazo. Este se quejó y la miró mal.

── ¡Auch! ¡Basta! – le espetó malhumorado. 

Aquel comentario detuvo toda emoción y diversión. Kath lo miró mal por aquella actitud, nadie se moriría por una bola de nieve.

── Tú,  pequeño gran mentiroso – exclamó con enojo Peter.

──  ¿Qué? Tú tampoco le creíste en primer lugar – respondió con sorna Edmund.

── Discúlpate con Lucy – le ordenó. Al ver que él no decía se acercó más, el enojo se reflejaba en su mirada – ¡Discúlpate!

── Ya, ya oí... – dijo malhumorado – lo siento.

── No te preocupes  – calmó Lucy – A veces los niños no saben cuando dejar de pretender cosas.

── Muy graciosa... – masculló mirándola mal.

La nieve caía sobre ellos, haciendo que el frío calara hasta los huesos. Kath se abrazó, no estaba abrigada, llevaba uno de sus vestidos de verano, de esos que son bastantes ligeros para que no te sofocaras y apenas un suéter que ni siquiera retenía el calor corporal.

Vio la mirada preocupada de Susan sobre ella al tiritar, le sonrió en un intento de tranquilizarlo. Lucía como la hermana mayor que siempre quiso, y como tal, ella se acercó y la abrazó de lado.

── Ya... creo que deberíamos irnos – comentó Susan refregando su brazo para brindarle algo de calor.

── ¿Por qué? ¿No quieren explorar? – inquirió Edmund.

──  Creo que Lucy debe decidir que debemos hacer – sentenció Peter mirando a su hermanita, quien sonrió y sus ojitos brillaron de emoción.

── ¡Quiero que conozcan al Señor Tummnus!

Kath río al ver su entusiasmo. Ella estaba feliz, al fin conocería a aquel agradable fauno del cual Lucy le había hablado tanto.

── Entonces iremos con el Señor Tummnus – sentenció el mayor de los Pevensie antes de entrar una vez más hacia donde estaba la puerta del armario.

── ¿Pero cómo? – le dijo Susan – Hace frío, y no tenemos ropa.

── Pues, usaremos esto – le dijo Peter y le entregó un hermoso abrigo de piel que con tan solo verlo parecía que era súper abrigado – Creo que al Señor Kirke no le importará que tomemos algunos abrigos.

Kath río ante aquello. El muchacho le tendió un abrigo de color marrón el cual, al ponérselo, el calor la envolvió al instante. Suspiró al sentir que el frío la abandonaba poco a poco.

── Además – siguió – si lo piensas con lógica, no saldrá de este armario.

Los demás rieron y Peter se acercó a su hermano, tendiéndole un abrigo gris y gigante.

── ¡Pero si es de niña! – se quejó Edmund.

── Lo se – le respondió antes de que este tomara el abrigo y se lo pusiera.

Kath se acercó hacia el en cuanto Peter se fue para abrigarse.

── Oye, amigo mío... – le comentó con una sonrisa burlona mientras acariciaba la piel del abrigo de Edmund – veo que no te sienta tan mal la ropa de niña, ¿eh?

── Cállate.

── Pero si es verdad... – siguió ella con una sonrisa divertida – Si necesitas consejos sobre moda, aquí me tienes – le dijo regalándole un guiño a lo que este solo puso los ojos en blanco.

── Si te callas, te compraré un libro

Kath enarcó una ceja al escuchar aquello.

── Lo haré, pero recuerda Pevensie, tu irás conmigo a comprar ese libro.

¡Hola Hola amores! ¿Cómo andan? Que felicidad poder traer un nuevo capitulo de WARRIOR :D Espero que les haya gustado muchísimo y no se olviden de comentar que tal estuvo y su opinión aquí mismo 👉

Lamento muchísimo la tardanza con el nuevo capitulo, pero digamos que Marzo ha estado bastante entretenido. Pero obviamente nunca desocupé mis historias :) Solo quería recordarles que los nuevos capítulos de WARRIOR se estarán publicando todos los domingo, por lo que les recomiendo estar bien atentos.

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RiderStilinski ── 14/05/2020 - edición: 27/03/2022