«𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝗇𝗎́𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗌𝗂𝖾𝗍𝖾»... [𝖮7]

❝𝗧𝘂 𝗖𝗼𝗺𝗽𝗮𝗻̃𝗶𝗮❞

Después de la emotiva conversación en el parque, Jimin sugirió que fueran a disfrutar de unos helados para relajarse y cambiar un poco el ambiente. La idea fue recibida con entusiasmo por Min, quien sentía que una simple actividad como esta podía ser una buena forma de distraerse y endulzar el día. Ambos se dirigieron a una heladería cercana que Jimin conocía, un pequeño local con un encanto rústico y una amplia variedad de sabores.

El sol ya comenzaba a inclinarse hacia el horizonte, y la luz dorada de la tarde se reflejaba en las vitrinas del establecimiento, creando un ambiente acogedor. El lugar estaba decorado con tonos cálidos y detalles vintage que invitaban a los clientes a sentarse y disfrutar con tranquilidad. El aroma dulce de los helados recién hechos y las sonrisas de los empleados daban la bienvenida a los visitantes.

Jimin y Min entraron al local, siendo recibidos por un suave murmullo de conversación y el tintinear de cucharas contra los vasos. La amplia selección de helados estaba dispuesta en vitrinas de cristal, ofreciendo una tentadora variedad de sabores, desde los clásicos como vainilla y chocolate hasta opciones más exóticas como mango con maracuyá y té verde con matcha.

━ ¿Qué sabor te gustaría probar, Yoongi? ━ preguntó Jimin, mirándolo con una sonrisa amable mientras señalaba los diferentes sabores.

Min, aún procesando las palabras de Jimin y los eventos del día, se acercó a la vitrina para examinar los helados. Sus ojos se iluminaron al ver el helado de fresa, que le recordó un poco a su infancia. Decidió que ese sería el elegido.

━ Creo que probaré el de fresa ━ dijo Min, señalando el sabor con una mezcla de nostalgia y deseo.

Jimin asintió y se dirigió al mostrador para hacer el pedido. Mientras tanto, Min observaba el local, notando cómo el ambiente se volvía más animado a medida que la gente entraba y salía, disfrutando de sus helados y charlando alegremente. Jimin volvió con dos conos en mano, uno de fresa para Min y otro de chocolate para él, y ambos se dirigieron a una pequeña mesa junto a la ventana.

Se sentaron y comenzaron a disfrutar de sus helados mientras conversaban sobre cosas triviales y experiencias recientes. Min se dio cuenta de que, a pesar de los momentos difíciles, estaba empezando a relajarse y a disfrutar de la compañía de Jimin. La conversación fluyó naturalmente y las risas se hicieron más frecuentes.

De repente, un ruido estruendoso interrumpió su conversación. Min miró hacia la ventana, donde pudo ver que el tráfico en la calle se había detenido. Una multitud de personas se había reunido alrededor de un par de coches que estaban involucrados en un accidente. Los vehículos estaban aparentemente chocados y los conductores estaban discutiendo acaloradamente.

━ ¿Qué está pasando allá afuera? ━ preguntó Min, frunciendo el ceño y señalando hacia la ventana.

Jimin miró también y sus ojos se llenaron de curiosidad. A medida que observaban, la situación parecía volverse más caótica. Los conductores de los coches, ambos visiblemente agitados, estaban intercambiando palabras fuertes, y la multitud que se había formado parecía dividida entre observar el espectáculo y tratar de intervenir.

━ Parece que hubo un accidente y ahora se ha convertido en una especie de pelea ━ comentó Jimin, levantándose de la mesa para acercarse a la ventana y obtener una mejor vista de la situación.

Min se unió a él, su atención totalmente absorbida por el bullicio fuera del local. La escena era desordenada, con los coches parcialmente bloqueando la calle y la gente gritando. La policía y los servicios de emergencia aún no habían llegado, y el caos parecía descontrolado.

━ ¡Mira! ━ exclamó Min, señalando a un grupo de personas que se estaban empujando y gritando entre sí. ━ Parece que la situación está empeorando.

Jimin asintió con preocupación, observando cómo la tensión aumentaba en la escena. Los conductores estaban cada vez más encolerizados, y los transeúntes estaban tratando de intervenir para calmar las cosas. La situación se estaba saliendo de control, y la posibilidad de que se produjera una confrontación física era evidente.

━ Es un desastre ━ dijo Jimin con desánimo, mientras se retiraba de la ventana. ━ Es triste ver cómo algo tan trivial puede escalar hasta convertirse en algo tan violento.

Min estaba igual de afectado por la escena, su mente reviviendo momentos difíciles de su propia vida. El caos en la calle parecía un reflejo de sus propias emociones internas, y se sentía inquieto y perturbado por la situación. La sensación de inseguridad y desorden que experimentaba ahora se mezclaba con los recuerdos de su propio sufrimiento y el control asfixiante de su madre.

━ ¿Por qué la gente no puede simplemente resolver las cosas pacíficamente? ━ preguntó Min en voz baja, mientras volvía a sentarse en la mesa, sintiéndose abatido.

━ A veces es difícil para las personas controlar sus emociones ━ respondió Jimin, regresando a su asiento y tratando de animar a Min con una sonrisa tranquilizadora. ━ Todos tenemos momentos en los que nos dejamos llevar por la ira o la frustración. Lo importante es aprender a manejar esas emociones de manera constructiva.

Min asintió, agradeciendo el intento de Jimin por consolarlo. Aunque el incidente en la calle era perturbador, sentía que la presencia de Jimin y su actitud comprensiva le ofrecían un refugio en medio del caos. La calma que Jimin trataba de transmitir a través de su discurso era reconfortante, y Min intentaba aferrarse a esa sensación de paz en medio del tumulto exterior.

Mientras observaban el espectáculo desde el interior de la heladería, Min no pudo evitar pensar en lo que había sido su vida hasta ahora y en lo que le depararía el futuro. El contraste entre la tranquilidad del local y el caos en la calle le hizo reflexionar sobre la necesidad de encontrar un equilibrio en su propia vida. El helado que estaba comiendo, aunque delicioso, no podía enmascarar por completo el impacto emocional que había experimentado a lo largo del día.

Jimin, percibiendo la melancolía en el rostro de Min, decidió cambiar de tema para mantener la conversación ligera y distraerlo de la situación exterior.

━ Oye, ¿te gustaría que probáramos otro sabor? ━ sugirió Jimin, sonriendo mientras miraba el cono de helado de Min. ━ Creo que sería divertido probar algo nuevo.

Min levantó la vista, agradecido por el intento de distracción. Sonrió levemente y asintió, dispuesto a seguir el consejo de Jimin. Aunque el caos afuera seguía siendo una preocupación, la compañía de Jimin y la oportunidad de disfrutar de un buen helado le brindaban un respiro momentáneo de las tensiones de la vida.

━ ¡Sí, claro! ━ dijo Min, su tono más animado. ━ ¿Qué sabor recomiendas?

Jimin pensó por un momento y luego propuso probar el helado de café, que había sido uno de sus favoritos durante años. La idea fue recibida con entusiasmo por Min, y ambos se levantaron para hacer el pedido. La experiencia de compartir ese momento sencillo pero placentero ofreció una pequeña pero significativa escapatoria del estrés y el caos que habían enfrentado durante el día.

Mientras caminaban de regreso al mostrador de la heladería, Min se dio cuenta de que, a pesar de las dificultades, había encontrado un amigo en Jimin que estaba dispuesto a estar a su lado en los momentos más oscuros. La certeza de que no estaba solo en su lucha le daba una renovada esperanza y fortaleza para enfrentar lo que vendría.

Después de disfrutar de los helados y distraerse con la peculiaridad del tráfico, Jimin propuso una salida que Min encontró especialmente atractiva: ir al cine. La idea de ver una película, un cambio de escenario que prometía ser relajante, parecía justo lo que Min necesitaba para despejar su mente y alejarse de los recientes desafíos emocionales. La noche había llegado con un cielo despejado y una brisa ligera que prometía una velada agradable.

El cine al que Jimin llevó a Min era uno de esos lugares que evocaban una sensación de nostalgia. El edificio era antiguo pero bien cuidado, con una fachada de ladrillo rojo y una marquesina iluminada que anunciaba la película del día. Al entrar, Min notó el aroma familiar de palomitas de maíz y el suave murmullo de conversaciones en el vestíbulo. Jimin compró los boletos y, tras una breve espera, ambos se dirigieron a la sala.

El ambiente en el cine era acogedor, con butacas cómodas y la luz tenue que predispuso a los espectadores para el inicio de la función. La película que habían elegido era una romántica, una de esas historias llenas de emociones y sutilezas que solían hacer que los espectadores se sintieran parte de la narrativa. Jimin y Min se acomodaron en sus asientos, y Min se sorprendió al notar lo cercanos que estaban, casi como si el destino hubiera diseñado el espacio para que se sintieran más conectados.

A medida que las luces se apagaron y la pantalla se iluminó con las primeras imágenes, Min se sumergió en la trama de la película. El romance entre los personajes principales era intenso y conmovedor, y la atmósfera en la sala estaba cargada de emociones compartidas. Min se encontró absorbiendo cada escena con una mezcla de entusiasmo y melancolía. La historia estaba llena de momentos tiernos y conmovedores que resonaban profundamente con él.

Durante una de las escenas más emotivas, Min sintió un toque sutil en su mano. Miró hacia abajo y vio que Jimin, con una expresión concentrada en la pantalla, había tomado su mano de manera tímida. Min, sorprendido pero no incómodo, sintió una oleada de calidez. A pesar de la timidez y la novedad del gesto, el contacto fue reconfortante. Se entrelazaron los dedos con una naturalidad inesperada, como si siempre hubiera sido así.

Min miró a Jimin de reojo, notando la ligera sonrojada de sus mejillas a la luz de la pantalla. Jimin, al darse cuenta de que Min lo había notado, sonrió suavemente y apretó un poco su mano en señal de afecto. Aunque no dijeron una palabra, el gesto compartido fue un lenguaje en sí mismo, una forma silenciosa de expresar comodidad y cercanía en medio de la historia romántica que estaban viendo.

Cuando la película llegó a su fin, y las luces se encendieron nuevamente en la sala, Min y Jimin se levantaron de sus asientos, aún sintiendo el eco de las emociones que la película había suscitado. Salieron del cine, y el aire fresco de la noche les recibió con un cambio agradable de ambiente. La ciudad, aún vibrante con las luces nocturnas, parecía ofrecerles un telón de fondo perfecto para el final de su día.

Mientras caminaban hacia la salida del cine, Jimin notó que Min estaba pensativo, su mente claramente influenciada por la película que acababan de ver. La historia de amor había dejado una impresión duradera, y Min parecía estar procesando los sentimientos que había experimentado durante la función.

━ ¿Te gustó la película? ━ preguntó Jimin con una sonrisa curiosa, tratando de iniciar una conversación ligera después de la experiencia compartida.

Min asintió lentamente, todavía un poco absorto en sus pensamientos.

━ Sí, realmente me gustó ━ respondió Min, su tono reflejando una mezcla de reflexión y gratitud. ━ Fue... conmovedora. A veces, las historias de amor pueden ser tan profundas y resonar de maneras inesperadas.

Jimin sonrió, notando la profundidad en la voz de Min y apreciando el momento de conexión emocional que habían compartido.

━ Me alegra que te haya gustado ━ dijo Jimin, mientras comenzaban a caminar hacia la salida. ━ A veces, una buena película puede hacernos reflexionar sobre nuestras propias vidas y relaciones.

A medida que avanzaban por la acera, el bullicio de la ciudad parecía disminuir un poco, dando paso a un ambiente más tranquilo. La noche estaba clara, y las estrellas se podían ver parcialmente entre las luces urbanas. De repente, Jimin y Min se detuvieron al ver una escena conmovedora frente a ellos.

Un anciano estaba ayudando a una mujer mayor a cruzar la calle. El hombre, con una expresión amable y pacientes movimientos, guiaba cuidadosamente a la anciana, que parecía frágil y un tanto temerosa. La escena era una de esas pequeñas muestras de bondad que a menudo pasaban desapercibidas en la agitación de la vida diaria, pero que en momentos como este podían ser profundamente significativas.

Min observó la interacción con una mezcla de admiración y melancolía. La imagen del hombre ayudando a la anciana le recordó el tipo de compasión y cuidado que anhelaba en su propia vida. Jimin, notando la mirada de Min, también se detuvo para observar la escena, apreciando el gesto desinteresado del anciano.

━ Es bonito ver cómo la gente puede ser tan amable ━ comentó Jimin, su tono reflejando una sincera admiración por el acto de bondad que estaban presenciando.

Min asintió, sus ojos fijos en la escena.

━ Sí, realmente lo es ━ dijo Min, su voz cargada de una profunda reflexión. ━ A veces, en medio de todo el caos y las dificultades, pequeños actos de bondad como este pueden ser un recordatorio de lo que realmente importa.

Jimin asintió en acuerdo, compartiendo el sentimiento. La imagen del anciano y la mujer, y la manera en que él se preocupaba por ella, les ofreció un momento de introspección en medio de su propia vida tumultuosa. Mientras los dos observaban en silencio, el ambiente sereno que emanaba de la escena parecía brindarles un respiro del tumulto interno que ambos habían estado enfrentando.

Una vez que la anciana y el hombre se alejaron, continuaron su paseo por las calles de la ciudad. La noche avanzaba, y la tranquila atmósfera les ofreció un espacio para reflexionar sobre sus propias vidas y experiencias. Aunque las palabras se hicieron menos frecuentes, la compañía mutua y el entendimiento compartido crearon un lazo aún más fuerte entre ellos.

Finalmente, cuando llegaron a un punto en el que decidieron separarse, Jimin miró a Min con una expresión de cariño y comprensión.

━ Me alegra que hayas podido disfrutar de la película y de nuestra salida ━ dijo Jimin con sinceridad. ━ Espero que, aunque sea por un momento, te hayas sentido un poco más en paz.

Min sonrió, sintiendo una calidez en su pecho al escuchar las palabras de Jimin.

━ Lo hice ━ respondió Min, agradecido por el tiempo y la compañía de Jimin. ━ Gracias por todo. Ha sido un día realmente especial.

Ambos se despidieron, conscientes de que la conexión que habían compartido durante el día había creado un vínculo significativo. Mientras Min se dirigía de regreso a la casa de Jimin, sintió una mezcla de esperanza y gratitud. El día había sido un recordatorio de que, a pesar de los desafíos y las dificultades, había momentos de belleza y bondad que podían ofrecer consuelo y fortaleza en tiempos difíciles.

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Ⓒ︎𝖧𝖨𝖲𝖳𝖮𝖱𝖨09