Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

27

¡Personajes nuevos!

●●●

-¡Irse a la mierda! ¡Estáis locas si creéis poder tener una oportunidad con mi padre!-

La pelirroja que caminaba junto a su amiga rubia se giraron viendo a su amiga azabache discutir con un grupo de chicas aparentemente mayores que ellas. Rieron por lo bajo al ver cómo le sacaba el dedo de en medio, cargando una expresión de total molestia y frustración para al segundo suspirar e inspirar y dirigirse junto a su gupo de amigas.

Valerie estaba demasiado cansada que sobre todo chicas mayores se les acercaran para "tratar de ser amigas" cuando en realidad únicamente lo hacían por el simple hecho de conseguir información sobre su padre y cuándo veían que no funcionaba solían hacer lo mismo, esta vez con su mellizo.

Estaba que echaba humo.

Era consiente que ambos hombres Diggory eran muy atractivos, pero le asqueaba que simplemente se acercaran a ella por su familia. Más cuando su padre no estaba soltero, pues este seguía en una bonita y envidiable relación con su madre, Jessica Banes.

Pero claro, eso ellas no lo sabían.

Por otra parte estaba su mellizo, Erick Diggory. Tampoco le aconsejaría salir con esas chicas, pues por lo poco que habló con ellas se pudo dar cuenta que solo lo utilizarían por popularidad, y solo les interesaba por ser guapo. Ya ni siquiera la gente se tomaba el tiempo de conocerse, simplemente no veían mas haya de lo físico lo que la asqueaba. Muchas veces soñó con una relación, pero no cómo una cualquiera si no como la de sus padres; ambos se amaban más que nada. Valerie era tremendamente feliz cuando le volvían a contar la historia de como surgió su amor, y como su madre con ayuda de su padre fue capaz de encontrarse a si misma y como el Diggory la ayudó a verse con los ojos que el la observaba.

Ambos irradiaban de amor.

-¡Mis chicas favoritas!- Valerie llegó con una expresión ahora sonriente hacia estas dos, colocándose en el medio de ambas, rodeó sus cuellos pegándolas a ella.

-¿Harta del club de fans de los Diggory?- cuestionó la pelirroja mirando burlona a su amiga.

-No lo sabes tu bien.- soltó una pequeña risa por lo bajo, asintiendo a lo dicho.

-¿Acaso les pusieron nombre?

Preguntó esta vez la rubia, Merdith quien escuchaba la conversación algo desubicada sin entender mucho. Valerie e Hiraeth rieron por lo bajo, la inocencia de su amiga les resultaba tierna.

-Cómo explicarte Mer.., todas esas chicas están básicamente por los Diggory, y son demasiadas.-Alargó la palabra demasiadas riendo.- Así que es cómo un club de fans.

Explicó Hiraeth a su amiga.

-Oh.. entiendo

Asintió al comprender.

-Por ejemplo , tu estarías en el de los Lupin-Weasley

La burlona voz de la Diggory se escuchó, causando que Meredith tiñera sus mejillas de un color cobrizo.

-¿Qué?, No por Merlín

-Sabemos que vas por Remus, Mery

Pronunció un diminutivo de su nombre viéndola con una sonrisa burlona. A pesar de que no tuviera buena relación con este, Valerie quería que su amiga estuviera bien. Por ambos lados teníamos a Merdith, completamente sonrojada tratando de negar lo obvio y por la otra parte a Hiraeth, quien estaba callada en la conversación, pensando en su mente lo que sufriría su amiga si de verdad estaba enamorada de su hermano, pues con certeza sabía que este había dado su primer beso.

Lo que no sabía la pelirroja es que Meredith lo había presenciado incluso mucho antes que ella.

-Dije que no

El tono seco y cortante de la rubia sorprendió a las dos mujeres quiénes la miraron extrañadas pero prefirieron no sacar más la conversación. Meredith se encontraba devastada, odiaba volver a recrear en su mente la imagen de Remus besándose solo conseguía herirla aún más.

-Hablando del rey de roma.- Valerie tornó los ojos en blanco al ver cómo el recién nombrado que vestía la túnica de Ravenclaw se acercaba hacia ellas.

Remus se veía agitado y nervioso, jugaba con el cuello de su camisa dando una señal obvia de esto.

-¿Meredith podemos hablar?- preguntó jugueteando con sus manos , mirando hacia abajo tratando de no incomodarse ante la vista de las tres mujeres.

La rubia miró a sus amigas quiénes asintieron, indicándole que fuese con el de ojos grises por lo que esta asintió para dirigirse con el.

-Claro, vamos.

Todo el camino lo realizaron en silencio, no compartieron ninguna mirada. Meredith ni siquiera sabía a dónde se dirigía, pero optó por seguir los pasos del Ravenclaw que al parecer la dirigía hacia la sala común de su casa. Remus se veía extraño, no cargaba ningún aire de seguridad, no mostraban sonrisas en su rostro. Se le veía nervioso y preocupado. La llevó a su habitación dónde antes de sentarse en la cama el de ojos grises revisó si había alguien en su habitación.

-Toma asiento Mer, no tengo mucho tiempo pero me gustaría contarte una cosa, pese a que te considero ( y espero que hagas lo mismo conmigo) una gran amiga en la que puedo confiar, y necesito tu punto de vista y ayuda.

Habló demasiado rápido mientras jugueteaba con sus manos, ahí la rubia pudo imaginarse sobre que quería hablar. Meredith tomó asiento frente a él, dispuesta a escucharlo.

-Creo que soy bisexual, me gustan los chicos y las chicas.

Soltó sin más, creyendo que Meredith iba a ser la sorprendida pero en verdad lo fue él al darse cuenta que esta simplemente le dio una dulce sonrisa  característica de ella y apoyó una mano encima de la suya tranquilizandolo.

-Esta bien Rem, gracias por confiar en mi para contarmelo.

-¿De verdad que crees que esta bien? ¿No dejaras de hablarme ni ser mi amiga?- preguntó temeroso alzando la cabeza. En sus grises ojos se notaba su preocupación, y casi parecía al borde de las lágrimas.

-Para nada Remus, es algo totalmente normal. El amor es el amor y me alegro inmensamente por ti.

Se sintió tan cómodo hablando con ella, ni siquiera lo forzaba a contar toda la historia en sí, simplemente lo aceptó tal y como era. Se quedó la noche entera hasta el toque de queda, ambos conversando animadamente sobre cosas triviales, la clases, libros, planes para navidad..etc

Tal vez, el señor Darcy ya no le parecía un idiota.

•••

George salió del baño de su habitación, vestía un traje de color negro con una blanca camisa. Su cabello estaba desarreglado como de costumbre. Pudo observar cómo la rubia trataba de colocarse un collar en el cuello pero esta no podía. A paso firme se acercó tras ella quien logró mantener contacto visual con el hombre a través del espejo.

-Déjame ayudarte.- George hizo que Noa soltara las manos del cierre para poder engancharlo el, antes de eso tuvo que apartar el cabello de la mujer a un lado, dejando expuesto su cuello.- Oh ¿Te las cubriste? Es una verdadera pena, con lo que me gustaban.

Se burló el hombre al ver que las marcas que realizó la noche anterior ya no se encontraban, pues ahora era simplemente maquillaje. Noareth rió por lo bajo al escucharlo, desde su posición llegaban a sus fosas nasales el olor que George desprendía, una mezcla de pólvora, una esencia de melaza y canela junto a un varonil perfume que excitaban a sus hormonas nada más distinguir el olor.

-No pretenderás que mi abuelo y padre me vean con estas marcas ¿Cierto?- conectó mirada con él desde el espejo, sonrió cuando el Weasley terminó de colocar su collar.- Gracias.

-No, pero estoy ansioso por poder hacértelas de nuevo.- inclinó su cara contra el cuello de la mujer, emitiéndole escalofríos al sentir su cálido aliento y sus labios contra su cuello.- Eres tan jodidamente sexy Noareth, no sabes lo que deseo poder quitarte este blanco esmoquin de una vez para volver a tenerte desnuda encima o debajo mía.- susurró con un tono tranquilo pero con voz ronca, mientras sus manos se encargaban de amasar con firmeza su trasero, robándose un suspiro cargado de deseo  por parte de la rubia.

-Cuándo volvamos si te portas bien podré darte un premio.- giró para tenerlo frente a ella, serpenteó sus brazos hasta llegar a sus fornidos hombros para poder rodear su cuello.- Cariño

Pronunció de manera coqueta con un leve pestañeo, causando que el Weasley soltara un suspiro al escucharla y verla; tenía un jodido ángel delante suyo.

-Te tomaré la palabra mon ange.- le robó un corto besos a sus finos labios, tras pronunciar con un "acento francés" (pues este era una mezcla con el inglés al no dominar muy bien el idioma).- Vamos, no quiero hacerle esperar a tu familia, me gané el cariño y respeto de tus padres no quiero perderlo.

•••

-Os habíamos echado tanto de menos- murmuró algo melancólico Andrew Vance, el abuelo de los jovenes rubios, mirando a sus nietos

Estos sonrieron enternecidos, concordando con el mayor. Noareth quien portaba un esmoquin blanco, con algunos detalles negros en los bordes y unos pantalones campana del mismoo color, acompañados de una coleta alta que recogía todo su rubio cabello, se encontraba rodeando el brazo  de su abuelo sentada a su lado.

George no podía apartar la mirada de ella, estaba embelesado. Se encontraba sentado frente a la mujer al lado de Adriert y Matthew, en el otro lado Samantha, su madre junto a la tía de Noareth Agnes Vance y a su prima Freya.

-Todos lo habíamos hecho, sinceramente.- aseguró Freya, su prima mirando sonriente a sus primos con los que tenía una buena relación.

-Nosotros también a ustedes.- miró a ambos Noareth sonriente, para pasar después a su prima en concreto.- ¿Cómo vas con los preparativos de la boda Freya?

Esta se inclinó emocionada en la silla, sonriendo como una boba enamorada al escuchar sobre su próxima boda.

-Por fin va todo tomando sentido, entre que la abuela de Neville empeoró y todo tuvimos que pararlo.- soltó un suspiro.- Pero finalmente nuestros preparativos están en curso

George abrió los ojos con sorpresa y vio a la mujer escuchando su conversación. ¿Acaso se referían a Neville Longbottom?.

-Perdón por interrumpir vuestra conversación.- les disculpó a ambas rubias.- ¿Pero acaso te refieres a Neville Longbottom?.

La rubia que poseía una delicada y fina expresión se giró viendo al "novio" de su prima, ella asintió levemente con la cabeza con una tonta sonrisa de enamorada al recordar a su prometido, a quién amaba con todo su corazón. Era una pena que hubiera habido tantos contra tiempos de por medio, pues de lo contrario ya serían marido y mujer pero el destino por desgracia lo quiso así.

-Si, el mismo.-asintió con una expresión confusa.- ¿Lo conoces George?

El dueño de Sortilegios Weasleys asintió rapidamente.

-Claro que lo conozco por Merlín, estaba en mi misma escuela y es Gryffindor al igual que yo.-asintió recordando al pobre chico que había sido víctima de algunas de sus bromas.- ¿Así que se casará con una Vance? Vaya, el chico no ha sido tonto después de todo.

Freya soltó por lo bajo una leve risilla, apartando la mirada algo sonrojada ante sus palabras. No sabía bien si Neville era el afortunado de tenerla o ella de tener a un dulce y honesto hombre a su lado.

-Y a ti precisamente te encantan las chicas Vance ¿cierto?.- rodó irónico los ojos Adriert, quién no se encontraba de muy buen humor.

-Admito que tienen todas una gran belleza tanto interior como exterior.- aseguró mirando a las mujeres de la mesa.- Pero en especial estoy enamorado profundamente de una.

Le guiñó un ojo a Noareth, quién quitó la mirada furtivamente sonrojada a causa de las coqueterias de George. A veces llegaba a olvidarse que esto era una falsa y todo era actuado.

Pues para George lo era, sus palabras no eran ciertas, sentimientos por ella no existían, solo eran sexo. 

O no. ¿Tal vez estaría equivocada la rubia?.

-Me alegro que ambas hayan podido encontrar buenos hombres y recalco, al fin ambas.- insistió burlón mirando a Noareth, pues era de saber que a ningún miembro de la familia Vance le agradaba Zabini, al contrario que con George, al que habían adorado desde primer momento, uniéndolo como un familiar más.- Sé que ambos cuidaran a mis tesoros, son lo más preciado de este mundo para mi. Más te vale no herirla George Weasley, no quieres saber de que seré capaz

Amenazó, le caía extremadamente bien el hombre, le encantaba su sentido del humor, tenía un trabajo estable, era independiente y respetaba y amaba a su nieta, como había podido observar. Pero nunca podía confiarse del todo, por si acaso debía tener cuidado.

Andrew era una persona que le gustaba analizar a cada quién que conocía, para suerte del Weasley no vio nada malo en él.

-Tenlo por seguro señor Vance,  jamás heriré a su nieta y créame si alguna vez lo algo no sería capaz de perdonármelo nunca


¡hola a todxs!

Espero que os haya gustado el cap de hoy!

¿Que pensáis del nuevo cast?

¿Opiniones?

Nos leemos pronto! <3

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro