Capitulo 10
—Hoy te ví hablando con un chica.
Esta mañana en la escuela, Eric había visto que su hermano menor estaba charlando muy amigablemente con una chica de su curso, supuso que por había se había decidido a socializar.
Ahora ambos estaban en la habitación del mayor, teniendo una de sus tantas charlas.
—Sí, Momo es buena—habló—Siempre me buscaba en los recesos así que decide hablarle.
—Me pone contento que ya vayas teniendo amistades.
Jisung soltó una risa nasal mirando a su mayor, Eric siempre le daba la sensación de tener a un papá a su lado, es decir, su hermano lo cuidaba desde que tenía ocho años, estuvo cuando fue su primer día de escuela, recuerda perfectamente cuando caminaron por la vereda mientras Eric tomaba fuertemente su manito y recibían miradas raras de las personas grandes que pasaban en la calle y eso causó que muchas veces se les acercaran para preguntar si estaban perdidos. También recuerda cuando lo regañaba y después de unos años su mamá había dado a luz a Mark y entre los dos lo cuidaban, le gusta mucho cuando a su mente vienen esos recuerdos de ellos haciendo la tarea junto a la cunita de Wonwoo.
Les preparaba la comida que él podía preparar y para el bebé calentaba leche y se la daba.
¿Aún así era tonto que lo sintiera más como un padre que como un hermano?
—Hablas como un padre orgulloso.
—Soy un hermano mayor orgulloso—corrigió.
El menor, quién estaba acostado a los pies del mayor, lo miró directamente y se reincorporó.
—Eric —lo llamó y su hermano lo miró desde su lugar—¿Cuándo veremos a mamá?
Esa pregunta hizo que su sonrisa se borrara por completo, se quedándose sin ninguna sola palabra que decir.
—Quiero verla, Eric, la extraño.
—Won...—hizo una mueca dudando si decir lo que estaba en su mente o no—¿No crees que estamos mejor así?
—¿Por qué lo dices?—no se dió cuenta cuando empezó a formar su característica expresión seria, siendo sus ojos como cuchillos para el mayor.
—Jisung ¿En serio preguntas?—se cruzó de brazos—Míranos, a tí y a mí nos va mejor en el colegio, Dino ya no tiene sus ataques de ansiedad, San está comiendo y Mark ya no le teme a la gente—le explicó al ver esos resultados en los meses que estuvieron conviviendo con sus padres sustitutos.
—Eso explica que ya estamos mejor para volver con ella.
—¿Qué estás diciendo?—lo miró con una mueca demostrando su desagrado—Las personas que estaban mal eran ese hombre y esa mujer, no nosotros.
Y ahí estaba a punto de iniciarse otra discusión, con el tema de sus padres siempre terminaban en esas circunstancias, se gritaban hasta que se quedaban sin voz para que cada quién se vaya por su lado.
—Suenas como si quisieras reemplazarlos.
—No voy a reemplazar nadie porque ellos no son nada nuestro y nunca hicieron nada por nosotros, Jisung, nos dejaban a nuestra suerte en esa horrible casa, se drogaban y literalmente nos pudieron haber matado en varias ocasiones.
—Es como si los odiaras—rió sarcásticamente—Es nuestra madre, Eric, tenemos que ayudarla.
—No quiero, no mi entereza esa mujer ni su marido—habló como si fuera ajenos a ellos—Y tines razón, los odio, por todo el daño que nos hicieron—confesó y su hermano lo miró molesto-Estamos bien con Wonwoo y Mingyu, sin tan sólo le dieras una opor...
—¡Ellos no son nuestro padres!—le gritó ya harto de escuchar esa maldita frase.
Al ser de noche, el mayor lo miró de mala manera porque era ya una hora cuestionable como para que estén gritando.
—No, pero se han comportado más como unos en cuatro meses que los nuestros en años.
—No puedo creer que digas eso, creí que tú me entendías—Jisung miró a su hermano y al parecer se mantenía firme con lo que decía.
Le lastimaba un poco que su hermano esté hablando así de su propia madre, él la amaba demasiado pero no comprendía porqué su hermano no.
Las personas no saben sabiendo como ser madres o padres, no era del todo si culpa, sólo necesitaba una segunda oportunidad y así todo iba a salir bien.
—Y yo no puedo creer que quieras volver con las personas que más daño nos hicieron ¿En serio estás bien, Jisung?
Por insistencia de Mingyu y Wonwoo, los siete ahora estaban en una plaza llena de juegos, a penas habían pisado el lugar salieron disparados hacia los juegos grandes para ver si conseguían a alguien para jugar.
Hoy iba ser una salida sólo con los pequeñines porque Eric había ido a la casa de un compañero para hacer un trabajo de la escuela y Jisung se juntó con su ahora amiga Momo.
Mingyu cargaba a Dino mientras que con Wonwoo estaban sentados en una banca mirando a los niños jugar y controlando que estén bien.
Por coincidencia se encontraron con Junmyeon que venía acompañado de sus niños quienes también fueron corriendo desesperados hacia Wonwoo y Mingyu al verlos después de mucho tiempo, les tenían un cierto cariño entonces se les arrojaron encima peleando para ver quien los abrazaba primero.
Y Dino miraba con desagrado a los niños ¿Por qué abrazaban a sus papis?
—Oh, Dios, déjenlos—los retó Junmyeon mientras lucía unos lentes de sol—¿Cuántas veces les tengo que decir que respeten el espacio personal de la gente?
Los siete niños ignoraron por completo a su padre por querer darle afecto sus otras personas favoritas. Para cuándo se calmaron, se quedó cada quién encima de los mayores con un Dino mirando indignado la situación sobre el regazo de su papá Mingyu.
—Ah—suspiró mientras recibía las risas de los demás—Lo lamento, ya saben cómo son-rodó los ojos.
—Tranquilo, está bien, son encantadores—dijo Wonwoo dándole atención al chico mientras su esposo vigilaba a sus niños.
—Aw, hola—le habló a Chan, sacándose sus lentes—Tú debes ser Chan ¿No?—el menor asintió sonriente—¿Viniste los demás? Me gustaría conocerlos después—dijo con una sonrisa mirando a la pareja.
—Los más grandes fueron a la casa de unos amigos y los pequeños están todos jugando en...Oh, ahí vienen—dijo al ver que sus niños se acercaban corriendo hasta ellos.
Mark fue el que llegó primero y abrazó a sus dos papás.
—¿Quienes son?—les preguntó a los niños desconocidos.
Cada uno se presentó amablemente y los infantes al no ser rencorosos por no tener ni un gramo de maldad en sus tiernos corazoncitos, se llevaron bien al instante y todos fueron a jugar en manada.
—Son una ternura—habló Junmyeon.
—Sí, lo son-rió Mingyu —Hasta Kyunsoo y Chan se hicieron amigos.
—Espero que los míos no los enloquezcan.
—Ni te creas Hyung, Mark es tremendo-rió Wonwoo.
—Entonces hay que mantenerlo lejos de Chanyeol porque...¡Minseok, no le pegues a tu hermano!—soltó de la nada asustando a los dos presentes—Perdón, es que estos niños se la pasan...¡Baekhyun, devuélveme mis lentes! ¿En qué momento los agarraste?
El niño empezó a hacerle amagues a su papá para que lo corriera pero el mayor ya estaba muy cansado.
—Baekkie, dales los lentes a papi, ven—lo llamó dulcemente mientras se acercaba lentamente—Ven cariño ¡Oh, Kim Baekhyun ven para acá!
La pareja carcajeó al ver como el chico corría a su pequeño retoño quién traía puestos sus lentes y para cuándo por fin logró alcanzarlo en vez de molestarse empezó a jugar con su niño mientras lo hacía girar tomándolo entre sus brazos y ambos reían, los demás hijos se unieron acorralando a su papá para que terminara en el piso siendo abrazado por sus siete hijitos.
Ante eso la pareja sonrió, esperaban tener eso algún día con sus niños.
Porque sí, eran sus niños.
[...]
—Ya dilo ¿Qué te pasa?—le preguntó Mingyu a su esposo.
Tantos años de matrimonio no fueron en vano, Mingyu conocía a su esposo más que a la palma de su mano y no pasó de a ser percibido cuando notó que Wonwoo hacía días que lo notaba algo ansioso, como si quisiera decirle algo pero que no se atrevía.
—¿De qué hablas, cariño?—rió y siguió levantando los juguetes de los niños que estaban esparcidos por toda su habitación.
—Has estado raro durante semanas, algo hiciste o algo te pasa—se sentó en la cama esperando por su esposo—¿Me fuiste infiel a caso?—bromeó para hacer un ambiente menos pesado y recibiendo una risa de su pareja.
—No digas eso, tonto—le mostró su linda sonrisa y se sentó al lado del mayor—Hay algo que no para de darme vueltas.
—¿Y qué es ese "algo"?—preguntó.
—Estuve pensado que...—no terminó cuando Mingyu comenzó a reír—No te rías, ésto es algo serio, Son—le reprochó pero aún así estaba mostrándole una sonrisa.
—Perdón, pasa que la última vez que me dijiste eso terminamos aquí pero no me quejo.
—Mingyu —lo llamó y ya los dos se pusieron serios, mirándose y como siempre Wonwoo se calmó al ver a su esposo quién le brindaba tanta comprensión y cariño como siempre—Quería saber que pensabas tú sobre...adoptar.
—¿Adoptar?—preguntó nervioso.
—Sí, en estos meses hemos experimentado ese sentimiento de ser papás y a mí sinceramente me encantó, sí hubo subidas y bajadas pero no pude evitar caer por completo por ellos—sonrió—Quiero que hagamos felices a esos niños y que ellos nos hagan felices a nosotros. Ahora no me puedo imaginar un día sin estar con ellos—confesó y suspiró—Quiero adoptarlos.
El mayor no pudo evitar sonreír, él se sentía como Wonwoo, amaba mucho a esos niños y él quería que los siete formaran una linda familia.
—¿En serio lo dices?—sonrió.
—Nunca hablé más en serio en toda mi vida—rió al sentir sus ojos un poco húmedos.
El mayor agarró las manos de Wonwoo y lo besó en la mejilla—Hablaremos con Bae para ver qué podemos hacer ¿Bien? Para serte sincero...yo también quiero adoptarlos.
Ambos se sonrieron dándose un pequeño abrazo que fue interrumpido por el celular del menor. Sin darse cuenta siquiera que un pequeño niño estaba espiando atrás de la puerta a penas abierta para que no lo descubrieran.
Mark había tenido una pesadilla, no quiso ir con Jisung porque él siempre lo echaba pero terminaba por aceptar y no quería molestar a Eric así que optó por ir con los mayores pero al escuchar que estaban teniendo una conversación y al ser un niño curioso o chismoso como solían decirles sus hermanos. Sin querer había escuchado que iban a adoptarlo a él y a sus otros hermanos, para no soltar su grito de emoción, de pronto se olvidó de su mal sueño y fue corriendo emocionado a su habitación, cerrando delicadamente la puerta.
—¡San, San!—llamó al menor y saltó sobre él mientras lo despertaba a samarrazos de su sueño—¡Despierta, esto es importante!
El menor a penas abrió los ojos enojado porque lo habían despertado de la peor forma posible, encima de que aún era de noche y había más horas para dormir.
—¡Tengo sueño!—trató de empujarlo pero recibió una luz en su rostro encandilando sus pequeños ojitos—¡Aah, no molestes!
—San, nos van a adoptar—dijo sonriente—Nuestros Hyung's nos van a adoptar, van a ser nuestros papás.
—¿Qué?—preguntó confundido con sus ojitos aún cerrados—¿De qué hablas?
—Despierta, tonto—lo tomó de los hombros y la cabeza de San estaba tambaleando—Wonwoo y Mingyu nos van a adoptar—esta vez lo dijo más claro para que el menor entendiera pero terminó por dormirse nuevamente—¡San!
[...]
Wonwoo cortó la llamada que había recibido de la trabajadora social, la principio le pareció extraño que lo llamara tan tarde pero cuando contestó pudo entender la urgencia.
—¿Qué pasó?—preguntó Mingyu al ver la expresión seria de Wonwoo.
—Era Bae, me llamó porque había recibido una llamada de Jisung.
—¿Qué le contó?
—Le dijo que quiere ver a su mamá, le pidió que si por favor se podía hacer algo para que vaya a visitarla—explicó—Le dijo que por ahora no podía hacer nada para que esté tranquilo pero me dijo que tiene que hablar con nosotros pero no me dijo qué porque es algo que se tiene que hablar en persona.
Ambos se miraron nerviosos y ansiosos por lo que el menor había contado.
—¿Y si es algo malo?
—No, cariño, no digas eso, tal vez...no lo sé, no nos precipitemos a crear teorías erradas, mañana iremos a la reunión y hablaremos con Bae ¿De acuerdo?
—No lo sé, tengo un mal presentimiento de ésto.
Ante esa frase ducha con inseguridad y al ver a su lindo esposo tan inestable se acercó para abrazarlo, Wonwoo podía tener carácter fuerte pero cuando algo le afectaba se hacía muy pequeñito.
Se acurrucó contra el pecho de su esposo mientras era rodeado por los brazos ajenos.
—No te estreses, todo va a salir bien.
—Al última vez que dijiste eso terminamos en el medio de una carretera sin señal y con las ruedas del auto pinchadas—reprochó recordando el tiempo en el que eran novios.
El mayor soltó una risa al recordar esos tiempos de su juventud con su pareja—Bueno, esta vez espero acertar.
—Igualmente tengo miedo.
—Yo también pero lo enfrentaremos, juntos, como siempre lo hemos hecho.
El menor no contestó, sólo se aferró más al igual que su esposo, con ambos deseando que ese mal presentimiento que tenía Wonwoo y que secretamente Mingyu también sea sólo un producto de su imaginación.
Ay Jisung que hiciste T-T
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