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Namjoon aún bufaba, no molesto con SeokJin,más bien con él mismo.
El mayor seguía con sus dos brazos abrazándolo mientras el aire golpeaba su rostro, y eso era algo a lo que nunca estuvo acostumbrado, sentir sus pelos ponerse de punta cuando SeokJin respiraba cerca de su oreja y apretaba su agarre en alguna vuelta.

Era algo ridículo, porque él era Kim Namjoon, era el hijo de un multimillonario que si le decían que alguien no hizo lo que quiso,lo castigaría.

Suspiró pesado estacionando la moto frente a una heladería, hizo que Jin lo soltara y esperó a que bajara.

-¿Helados?.-Preguntó Jin.-Pero qué romántico Nam, pensé que serías de esos que me llevarían a un callejón y me golpearian.

-Ganas no me faltan.-Murmuró el moreno y el mayor rió,entrando de una vez al local junto al contrario.
Los trabajadores le sonrieron, pero podía darse cuenta que era una sonrisa más forzada para no perder sus trabajos.

-Bienvenido, joven Kim.-Saludó la chica del mostrador cuando estuvieron frente a ella.SeokJin rió tierno al verla tan asustada.-¿En qué puedo ayudarle?.

-Un helado de chocolate.-Habló viéndola con el ceño fruncido.

-¿Para su acompañante qué puedo ofrecerle?

-Sólo una malteada de fresa, por favor.

Contestó el mayor sonriendo y acercandose más a NamJoon para entrelazar su brazo con el del moreno,quien se quejó por aquello.

-No le tengas miedo.-Siguió Jin hacia la trabajadora.-Su aspecto da miedo pero es igual a un cachorrito, ¿cierto?.

-Te juro que estoy a punto de pasar las llantas de mi moto por encima tuyo, así que cállate.

SeokJin rió al ver la expresión de la chica algo aterrorizada.
Si,NamJoon daba miedo,si,a él también le daba miedo. Pero se la aguantaba, porque a pesar de que quería salir corriendo para salvar su vida,le gustaba mucho.NamJoon le gustaba porque a él si le gustaban los tipos malos, esos que se leen o se ven en las películas que hacen bullyng a medio mundo, su padre es millonario y hacía lo que quería cuando quería.

Jin no era de esos "únicos y diferentes" que se hacían del rogar,porque él no haría cambiar a NamJoon. Bueno tal vez si, no le gustaba ver cómo golpeaba a gente inocente que cometió el mínimo error cerca del mastodonte que tiene en frente suyo.

Porque NamJoon parecía un lobo enorme,alfa de alfas,pero justamente ahora, mientras comía el helado a lengüetasos,parecía un niño pequeño.

-¿Por qué eres tan tierno?.-Habló SeokJin haciendo que de inmediato el contrario volviera a su postura seria. Suspiró alejando de su frente varios cabellos.

-Dices que soy tierno pero tú lo eres. - Murmuró el moreno desviando su vista a la pared de vidrio.

-¿Qué dijiste?.

-Nada.

-Por qué haces eso.-Jin tomó una de las manos contrarias para empezar a entrelazar sus dedos y jugar con estos.NamJoon guardó silencio aguantado las ganas de alejarse y golpear al mayor.-Eres una persona totalmente diferente a esa máscara de chico malo.

-Tú no sabes nada.-Contestó.

-No, pero si me dejaras.-El mayor se acercó, levetandose de su asiento, acercándose más al moreno hasta que finalmente junto sus labios.

Incluso alguien que pasaba cerca de su mesa y la chica que atendía en la barra empezaron a murmurar.
Y para cuando SeokJin se alejó, NamJoon se levantó de su asiento caminando hacia la salida.

Obviamente siendo seguido por alguien.

-Deja de ser tan malditamente molesto y déjame.-Expresó desesperado NamJoon cuando los dos estuvieron afuera.

-Y si no quiero qué.-Retó Jin.

-Te romperé el cuello.

-No es cierto.-Se acercó de nuevo a NamJoon y volvió a besarlo obligandole a abrir los labios e introducir su lengua de inmediato.

Namjoon trató de safarse,vaya que no quería, tener el cuerpo de ése chico junto al suyo mientras sus manos delicadas y suaves se posaban detrás de su nuca,no,él no quería eso.

Pero quería probar.

Así que con una de sus enormes manos tomó de la cintura curvada a su mayor y con la sobrante empezó a bajar hasta una de su nalgas.

Jin sonrió entre el beso haciéndolo más despacio y segundos después se separó.

-Si sigues así,conseguirás mucho más que esto.

Namjoon relamio sus labios apretando la carne de Kim mayor.

-Lo quiero ahora.

-Tranquilo grandulon.-Rió.-Tienes que dejar de alejarme.¿De acuerdo?.

-Dije que lo quiero ahora.

-No me hables así.-Jin fingió estar molesto y cuando vio a NamJoon suspirar y dejar de tocarlo, sonrió para acercarse de nuevo y besarlo rápidamente,de nuevo.-Ahora llévame a mi casa.

- Bad -

Al día siguiente, bueno, para todos iba perfecto, NamJoon por alguna extraña razón no había hecho algo malo.O eso pensaba JiMin,porque cuando entró a la universidad escuchaba a todos hablar tan asombrados.

-¿Cómo puede ser que esté con él?.

-Es tan loco,ése tipo sólo le hará daño.

-Pobre Jin,sólo lo están utilizando.

-Sinceramente soy mejor partido.

JiMin frunció el ceño y para cuando llegó a su casillero abrió más los ojos con asombro junto a su boca y dejó caer sus libros.
¿Qué mierda estaba viendo?.
¿Cómo por qué Jin estaba besando a NamJoon?, no,besando no,¡comiéndose a NamJoon!

¿Qué día era? ¿El día de los idiotas?.

Inmediatamente el ruido que los estudiantes hacían a su alrededor desapareció e If You de Big Bang empezó a sonar en su mente.

Pero se vio interrumpido cuando JungKook llegó a su lado y de nuevo volvió a la realidad.

-¿Qué ocurre?.-Preguntó Jeon.

-¿P-por qué Jin hyung está con ese idiota?-Contestó el más bajo sin dejar la vista en los dos mayores,mientras tanto JungKook recogía sus libros y los cargaba entre sus brazos junto a los suyos.

-Al parecer están saliendo.

-¡Pero si llevan tres días de hablarse! ¡¿cómo mierda pueden salir?!.

Jeon frunció el ceño, más sin embargo se encogió de hombros, y seguiría con la platica de no ser porque vio a cierto chico acercarse.

-Quítate.-Escuchó hablar a YoonGi,no se veía enojado, ni siquiera le gritó.
Y JungKook sabía que le estaba cerrando el paso, porque el casillero de Min estaba junto al de su amigo JiMin.

Pero JungKook no pudo hacer nada,su mente se quedó en blanco,y con una sola frase en mente recalcada con letras grandes.

"Min YoonGi me acaba de hablar".

Jeje...,tienen suerte de que tenga todos los capítulos de esta historia ya escritos como para hacerles un maratón tan largo.

Cuídense y nos leemos pronto.