Volví a decaer, no era la primera vez y sabía que no sería la última,pero creo que de todas la veces hasta ahora esta era la peor.

Se suponía que Namjoon vendría esta tarde a mi departamento,veríamos varias películas o programas de entretenimiento, así que me asegure de comprar algunos snacks para él, sabía cuales eran los que les gustaba (todos).
Pero,en mi momento de desesperación, sólo fui capaz de tomar todo y comerlo.

Pasó cómo la última vez, a veces ni siquiera masticaba bien las cosas, lloraba en silencio y Ren seguía a mi lado tratando de entender que era lo que realmente pasaba y como todo aminal queriendo quitar alguna golosina.
Me veía egoísta porque,a parte de que no era correcto que los perros comieran dulces (a excepción del helado), no dejaba que él se acercara, pensaba que todos era mío.

Y antes de darme cuenta de lo que estaba ocurriendo a mi alrededor, escuché la puerta abierta para después tener a Namjoon parado frente a mí, viendo expectante como era que tenía la boca llena de desgracias.
Así que cuando voltee a verlo me sentí realmente mal, su cara estaba sorprendida y tenía un sonrojo.

Finalmente me levante del suelo y salí corriendo a la planta de arriba para encerrarme en el baño de mi habitación. Estaba lleno de vergüenza, la pena me consumía y no sabía como verlo a la cara después de esto, no quería que me tuviera lastima pero tampoco que siguiera como si nada hubiera pasado.
En cierta forma eso me ponía realmente mal, quería que Namjoon me tomara y me abofeteara tratando de convencer de que dejara de hacer eso.

Pero no, Namjoon no tenía la culpa de nada, él mismo dijo que respetaría mis desiciones y que si alguna vez quería cambiar aquel mal hábito lo buscará par que me ayudara... Y eso me hacía sentir peor.

Cuando mi estómago estuvo vacío seguí tratando de vomitar hasta que lo único que vomite fue sangre.
Mierda,nunca había ocurrido esto, nunca había llegado a aquel límite donde mis órganos estuvieran tan dañados que lo único que salía era sangre. Era grave, así que decidí levantarme asustado, baje la palanca y me fui a lavar las manos y los dientes.

Finalmente salí del baño, quería refugiarme en los brazos de Namjoon así que corrí y antes de dejarlo decir algo lo abrace. No sabía que estaba haciendo antes pero segundos después concluí que jugaba con Ren ya que estaba sentado en el sillón y mi mascota sólo saltaba en busca de cariños.

Quedamos abrazados por un rato, yo estaba sentado en sus piernas con mi rostro escondido en su cuello y él me rodeaba desde la cintura con sus largos brazos.
Sentía sus labios dar leves besos en mis mejillas y cuello y cuando me sentí seguro me enderece y fije mi vista en la suya.

Namjoon era tan hermoso, atractivo, que lo único en lo que podía pensar era que él realmente era un ángel.

-Namjoon.-Empecé, viendo como él solo subía sus cejas esperando más de mí. - Lo siento, no quería que me vieras así. Yo... No sé qué pasó, no sé qué decirte, estoy tan avergonzado que no encuentro algo concretó para defenderme.Tal vez creas que soy un monstruo, alguien raro.

-O tal vez no. - Sonrió y beso mis mejillas.Aunque suspiró después de eso. - ¿Cómo quieres que te demuestre que eres lo más perfecto,SeokJin?. Todo de ti es bonito, no hay que cambiar nada porque no hay ningún defecto en ti para hacerlo.Dime.

Cerré mis ojos cuando su rostro se acercó al mío y me beso, comenzando con algo lento.
Como si quisiera protegerme, incluso de mí.

Nos separamos sólo para conectar de nuevo nuestras miradas y en menos de dos segundos volvimos a besarnos ahora con más brusquedad, nuestras lenguas empezaron a conectarse y hacer una danza de amor, jugando entre ellas.

Namjoon me tumbo en el sillón quedando encima mío, enterré mis delgados dedos sobre las hebras de su cabellos mientras sentía los suyos adentrarse en mis suéter azúl.
Sus besos bajaron hasta mi cuello haciendome jadear instintivamente, para así finalmente sentir como el comienzo de mi pantalón iba bajando.

Me asusté más.

-Namjoon. - Hablé empujandolo un poco.-Por favor, basta.

De un momento a otro pude verlo separase de golpe, su rostro estaba sonrojado y sus labios hinchados tal vez como los míos.

-Yo.-Susurro apenado.-Lo siento, me deje llevar.

Asentí mientras volvíamos a acomodarnos en el sillón, el silencio que se creó fue incómodo, bastante incómodo a mi parecer.

Y no es cómo si no quisiera tener ese tipo de contacto con NamJoon, lo deseaba bastante como para dejar que me tome a la hora que quiera y en donde sea.
Pero me avergonzaba de mí mismo, de mi cuerpo, pensando que tal vez a Namjoon no le gustaría.Tal vez me diría que estoy horrible y me dejaría sólo por eso.

Hace algún tiempo había visto una película de una chica la cual estaba casada pero nunca tuvo relaciónes con su esposo,tiempo después él le confesó a ella que le daba asco simplemente ver su cuerpo, y que tal vez incluso tener hijos seria el mayor error que cometería.
Lloré todo el día con el pensamiento de que aquellos sujetos con los que estaría de relación dirían los mismo de mí.

Por eso debía bajar más de peso,para así poder gustarle físicamente a alguien.
Porque sabía que en la vida, en las personas, habían estándares y no siempre eran lo sentimientos.

Y sinceramente no creo encontrar a alguien que se fijará más en eso.
Estaba seguro que en cuanto Namjoon me viera desnudo huiria.
Y eso lastimaba mi corazón.

Después de un rato Namjoon se retiro, era tarde y mañana teníamos trabajo temprano,no nos podíamos permitir faltar con todo el trabajo que teníamos encima.

Namjoon nunca se quedaba, podía irse incluso hasta las tres de la madrugada, pero nunca pasaba la noche.
Éramos pareja pero no lo suficientemente cercanos para llegar a tal intimidad.

Me sentí solo cuando me acosté em la cama matrimonial, Ren se acomodo a un lado mío, casi pegado y eso me hizo recordar.

Cosas que quería olvidar pero que aún así agradecía.

...

En la mañana siguiente no hubo ningúna novedad, me levanté como de costumbre y desayune un simple yogur natural y sin azúcar. Llene los tazones de Ren con croquetas y agua y después de arreglarme salí de edificio para dirigirme a la empresa.

Había sido un martirio todo, Yoongi y Jimin seguían lleno después de la primera sesión. Habían sido tan tendencia en Seúl que los fanáticos empezaron a exigir más fotos de ellos y, claramente, las ventas subieron.

Así que si pensé que solo sería un tiempo definido el que estaría con ellos, pues me equivoque.
Ellos habían firmado un contrato con la empresa de mínimo dos año, así estaría viéndolos todo ese tiempo.

Jimin no me afectaba tanto ya que aunque tuviera un cuerpo delgado, era más cacheton y sus piernas eran un poco más gruesas.
El problema era realmente Min, pero no podía quejarme del todo porque me caía bastante bien.

Hoseok desgraciadamente no siguió yendo, rechazo el contrato del Ceo y empezó a promocionar para más empresas.
Me sentí mal por un momento, Taehyung se veía decaído y sin muchas ganas de hacer las cosas.

Últimamente no tenía tiempo para mis compañeros, prácticamente me la vivía en la oficina de Namjoon, desayunabamos juntos y nos íbamos igual juntos. Así que me vi sorprendido cuando le pregunté a Tae qué ocurría y él me contestaba diciendo que Hoseok le gustaba y que después de que se fuera de la empresa empezaron a distanciarse.

Me sentí afortunado de saber que Namjoon tenía un trabajo fijo al igual que yo en la misma empresa.

Pero, increíblemente,no lo había visto en todo el día,mando un mensaje diciendo que tuvo algo urgente que atender de última hora y que estaría de regreso un poco tarde.
Aún así fue lo único que dijo, le contesté el mensaje pero su respuesta nunca llegó.

Me sentía mal, tal vez se dio cuenta que era un caso perdido y decidió que no saldría más, que no tenía sentido si a la hora de intimar sería tímido o inseguro.

Trate de no pensar en aquellas cosas y seguir con mi trabajo, hasta que las puertas corredizas del lugar se abrieron dejando ver a Namjoon entrar con pasos apresurados. Llevaba lentes de aumento y checaba algo en un folder de color negro mientras su ceño estaba fruncido.Y en cuanto se encerró en su oficina y cerró las cortinas, Taehyung se dirigió hacia mí.

-Este hyung a estado estresado, ¿no se supone que usted le ayuda en su trabajo?.

Asentí despegando mi vista del gran ventanal hecho de vidrio.

-Un poco.

-¿Un poco?, pero si esta todo el día en su oficina.Creo que esta sexualmente tenso.

Negué un tanto avergonzado, Taehyung era un caso perdido ante eso.

Después de un largo tiempo, o así lo sentí yo ya que no podía concentrarme en nada debido a lo mismo y dicho de Tae, el teléfono de mi escritorio sonó y atendí de inmediato sabiendo que era el número de Namjoon.
Así que trate de sonar lo menos emocionado.

-¿En qué puedo ayudarle?. - Contesté como si fuera otra persona, como si realmente no estuviera esperando la llamada de mi novio.

-¿Puedes venir a mi oficina?.

-Jefe Kim. -Sentí la mirada de Taehyung en cuanto dije aquello.-¿Qué papeles necesita?.

-Los tengo justamente aquí,mejor apúrate.

Sonreí por lo tierno y desesperante que se escuchó, voltee hacia mi menor quien me observaba con una sonrisa... ¿triunfante?, no sé como interpretarla.

Me levanté de mi silla cuando colgué y subí los pequeños escalones para adentrarme al lugar sin pedir permiso.

Sinceramente pensé que entraría y me encontraría a Namjoon en su escritorio inundado de trabajo,pero en cambio fui recibido por sus suaves labios en un beso tranquilo y tal vez ansioso.
Enrolle mis brazos sobre su cuello y hombros después de poder seguirle el movimiento y sentí como me cargaba.

Me llevó hasta su escritorio y me sentó en este para después meterse entre mis piernas, todo sin dejarnos de besar.

-Lo siento. - Susurro separándose un poco, acabando con el beso pero dejando aquella cercanía para empezar otro.-Estuvo mal lo que hice ayer, pero sólo estaba pensando en lo hermoso que eres y creo que me altere. No quise presionarte sabes que te esperaría toda la vida y las siguientes si son necesarias, por favor no me dejes.

Sonreí emocionado y mi corazón volvió a latir con rapidez. Namjoon era el hombre más cursi que eh conocido en mi vida.

-Tranquilo.-Le di un beso rápido.-No pienso, y no quiero, dejarte. Yo estaba nervioso. - Como ahora.-Así que me asusté,deberías disculparme tú a mí.

-Primero tú a mí.-Hizo un puchero que lo dejó ver como un cachorrito.

-Está bien,aceptó tus disculpas. Ahora acepta las mías.

-No tengo nada que aceptar. El que se quiso sobrepasar fui yo.

Negué con la cabeza mientras reía, Namjoon se acercó de nuevo a mi y empezó otro beso.
Duramos así por lo menos, calculando en mi mente y reloj imaginario,veinte minutos. Besándonos con cariño mientras Namjoon decía lo mucho que me quería y yo por lo avergonzado que estaba sólo acariciaba sus mejillas.

-Bien.-Interrumpí porque si seguíamos así no íbamos a hacer nada. -¿Para qué necesitas mi ayuda?.

-Oh, realmente en nada, todo está bajo control. Si te llame fue para reclamarte ¿Porqué no sabía que el cumpleaños de mi novio es justamente mañana?.

Oh,mi maldito y jodido cumpleaños.