Dieciséis.
Todo estaba transcurriendo normal, o eso podría decir yo. Porque Namjoon y yo no habíamos tenido más problemas,nada de peleas y si teníamos indiferencias eran cosas simples cómo decir que él quería poner una chimenea en la sala de mi departamento y yo simplemente quería hacer un estante para libros o películas.
No habían dramas.
O eso creía.
Porque, yo me consideraba una persona que le gustaba escuchar a la demás gente, poderlos ayudar con algún consejo o simplemente servirles cómo apoyo. Me gustaba serlo porque por lo menos no me sentía tan inútil en ese aspecto.
Aunque a mi nadie me ayudara en mis momentos difíciles,a excepción de Namjoon, yo sabía lo que era sentirse solo, así que no quería que alguien más lo estuviera.
Pero realmente nunca me imagine ser aquel pañuelo de lágrimas para la ex novia de mi ahora novio.Aquella mujer que llorando se veía tan frágil.
Roseanne me había contactado, supuestamente, para hablar un poco y dejar claras algunas cosas.
Al principio no quería aceptar, ¿qué haría yo, o qué diría?, las películas me enseñaron que cada que la ex novia se encontraba con la nueva pareja, cosas malas pasaban.
Pero a comparación de eso Roseanne era una chica madura, al principio me extraño ya que no se supone que sea así.
Nos encontramos en un bar decente, ella ya estaba cuando yo llegué y fue educada al pedirme una cerveza, platicamos de nosotros cómo si ella quisiera ser mi amiga, aunque obviamente no,yo no quisiera ser amigo de la nueva pareja de Namjoon si es que terminamos con la nuestra.
Pero tiempo después,cuando las cervezas empezaron a aumentar, para ella porque a mi no me gustaba beber mucho,Roseanne empezó a contarme toda su vida con NamJoon.
El cómo lo seguía queriendo,que vivieron juntos por dos años y cuando supo que Namjoon le iba a proponer matrimonio se fue sin ninguna explicación o una nota de por medio.
Ella tenía miedo del compromiso porque aún era joven como para casarse y que quería hacer muchas cosas antes de madurar al completo. Pero que ahora se arrepentía, porque estaba sola y el corazón se le partía al saber que Namjoon ya me pertenecía.
Vaya, nunca lo había pensado así, más bien sentía que yo le pertenecía a él pero ahora las cosas cambian.Siento que nos pertenecemos el uno al otro y eso me gusta.
Pero ése no es el tema ahora.
La verdad es que no sabía cómo llegué al punto de tenerla a un lado mío, recargada en mi hombro manchando mi camisa con su maquillaje y lágrimas, y lo peor era que nonsabia que hacer para calmarla.
-De verdad lo tienes que cuidar.-Habló ella y eso me hizo pensar que más bien él me cuidaba a mi.-Namjoon es genial, él se merece el mundo y cielo entero.
-Por Dios.-Murmure sujetándola bien para que no cayera de su asiento.-Rose,¿si tanto te duele ver a Namjoon con alguien más por qué te encontraste conmigo?.
-Porque te quiero pedir un favor.
-¿Qué favor?.
-Devuelvele esto por mí.-Del bolsillo de su pantalón sacó un anillo plateado con un diamante pequeño. No era la gran cosa pero me hizo sentir mal de cierta forma.
Toda la noche,después de que regresé a mi departamento,estuve pensando en lo que realmente sucedió con ellos.
Porque había la posibilidad de que Namjoon siguiera sintiendo cosas por ella, estaba aquella posibilidad de que finalmente Namjoon dijera que no quería estar conmigo y le diera una oportunidad a ella.
Guardé el anillo en el cajón del buró a lado de mi cama y me voltee para encontrar a Namjoon dormido a un lado mío,sacaba pequeños roncidos y Ren estaba a un lado suyo igual en los brazos de Morfeo.
¿Qué tendría que hacer ahora?.
...
-Te noto un poco raro, ¿te sientes bien?.-Escuché a Namjoon hablar mientras manejaba.
Yo iba de copiloto pero la verdad es que no puse mucha atención.
Habían pasado tres días desde que me encontré con Rose y no había probado bocado alguno,ni fruta o barras nutritivas y tampoco café o té.
Lo único que consumía era agua natural y al parecer eso ya me estaba afectando.
-Estoy bien.-Contesté en un suspiro,mi estómago dolía al igual que mi cabeza y empecé a sentirme sin fuerzas.
Incluso juraba que empecé a sudar frío y el pecho comenzó a dolerme.
Pero Namjoon no dijo nada más.
Llegamos a la empresa y salimos del auto, por mi parte sentía que el piso se movía y mis brazos y piernas dejaban de funcionar.
-Cariño.-Volví a escucharlo pero ahora en un eco.-¿Estás seguro que te sientes bien?.Estas pálido,
Quise contestar pero cuando menos lo espere todo se volvió negro.
El cuerpo se sintió ligero y di mi último respiro.
...
Todos tenían un cuerpo hermoso, delgados o bien marcados.
Siempre me juzgue por eso, por ser alguien que desde joven fue impulsivo con la comida y no sabía cómo controlarse.
Nunca supe, o más bien dicho si pero no le vi mucho interés, los peligros que había al ser una persona con algún desorden alimenticio.
Siempre pensé que aquellas personas eran felices de tener el cuerpo que siempre quisieron y soñaron,¿pero por qué yo no estaba feliz? Por qué me sentía insuficiente aún sabiendo que mi aspecto era atractivo y más aún con "curvas".
No sabía en donde estaba, aún veía negro y tal vez era, o porque estaba muerto, o porque aún no abría los ojos.. Y tal vez era la segunda porque escuchaba voces lejos y el sonido de una máquina de hospital funcionar.
Pero los ojos los sentía pesados, sin fuerzas cómo antes de desmayarme.
¿Habría ocurrido cómo en los libros o noticias?, tal vez yo no me desmayé para despertar horas después, ¿y si caí en coma y sigo creyendo otra cosa?.
Aquello me asustó y de inmediato abrí los ojos tratando de acostumbrarme a la luz pestañeando varias veces.
Volteé a todos lados encontrando a Namjoon sentado a un lado mío y Taehyung y JungKook en el sillón un poco más alejados.
Apreté la mano que Namjoon sostenía y de inmediato volteó a verme.
-Por fin despertaste.-Susurró llamando la atención de los dos menores quienes se acercaron a mí rápidamente.
-¿Cómo está hyung?.
-¿Le duele algo?.
-¿Tiene hambre?.
-¿Frío?.
-¿Calor?.
Sonreí sentándome en la cama con la ayuda de los tres.
-¿Cuánto tiempo estuve inconsciente?.-Pregunté.
-Sólo seis horas hyung.-Taehyung contestó.
-El doctor dijo que debía reposar todo el fin de semana, le dio una dieta específica para tener fuerzas y estar sano. Namjoon dijo que se encargaría.-Siguió JungKook, empezando una plática con Tae quienes decían harían todo por verme recuperado.
Aunque yo sólo me enfoque en la pequeña,muy pequeña, sonrisa que Namjoon trataba de hacer.
Cuando finalmente fui dado de alta Taehyung y JungKook nos acompañaron a mi departamento y después de una rato se despidieron diciendo que me verían el lunes y esperaban verme mejor.
Y cuando mi novio y yo nos encontramos finalmente solos lo seguí a la sala, él se sentó en el sillón más largo, y antes de que pudiera hablar o explicarle cualquier cosa escuché cómo empezaba a llorar.
Yo había hecho llorar a la persona que más amaba.
Y eso me hizo odiarme más de lo que ya me odiaba.
Porque si, Namjoon se merecía el mundo y cielo entero.Pero yo no podía dárselo, así que lo dejaría ser libre con alguien más.
Finalmente...
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