Prologo
Correr... era su prioridad, su anhelada vision de ver un futuro de nuevo...
Corrio mucho mas mientras sentia la escalofriante y juguetona voz de un hombre, rubio de ojos mil colores... a su lado un ser de cabello negro y ojos rojos la miraba burlon, esperando su deceso
"(Un Demonio)" paso por su mente de manera rapida, escucho de los cuentos sobre aquellos seres, nunca penso que fuesen reales, queria a su Mama en ese momento, queria que su Hermano le protegiera de aquel satanico ser de ojos mil colores... colores... su ojos eran bi colores, quizas fue su culpa... ella lo atrajo...
Tropezo y con ello el demonio la ataco, grito un fuerte grito de dolor al sentir un fuerte tajo en su ojo
"Oh pequeña niña... creo que no seria buena opcion comerte" se burlo en su cara y siguio tajando la acanelada cara de la niña la cual gritaba de dolor y sollozaba intentando escapar... al rato aquel ser la dejo, pensando que ya estaba muerta, el otro, se acerco... tajo su dedo y rocio la sangre que salia del mismo sobre la pequeña
La niña de 5 años, inconsiente, tenia su rostro con la mitad lleno de sangre, esperando una muerte por el desangrado, mientras era rociada por aquel liquido carmesi
A la noche
Una gotita del rocio nocturno toco su nariz despertandola suavemente, ante la adrenalina de no ver al demonio y que era de noche, salio corriendo con un poco de sus fuerzas, su pequeña yukata blanca con detalles en cian totalmente manchada de sangre y algunas rasguñaduras resaltaba en su piel, corrio mas rapido queriendo llegar a casa
"Mama..." llamo al llegar a su hogar, de donde habia salido corriendo del demonio, su pequeña cabellera pelirroja brillo sutilmente en la entrada de esa pequeña cabaña "Izayoi-Nee" llamo de nuevo, su pequeña nariz, sensible a los nuevos olores, la espanto
Se adentro en el oloroso lugar lleno de sangre y tenia leves arcadas, su felicidad se habia ido con ese olor, o mejor dicho, Lo que PENSABA que era felicidad
"Mama" miro el cadaver de una mujer pelinegra, ojos de color azul, vacios y sin vida, llena de sangre como ella, solo que las prendas estaban destrozadas, acerco su manito y empezo a sacarle el Ahori azul que traia, lo necesitaria para el frio que haria, estaban cerca del invierno y no queria resfriarse, tenia que ser fria... por que su mama la regañaria si lloraba, ya que su mebte no asimilaba todo aun, solo pensaba que estaba Dormida, como los hombres colgantes en el resto del bosque
Se coloco aquel 'abrigo' con detalles en turquesa, le quedaba grande, podia caminar, tropezandose pero podia, pero bueno, era algo
"Izayoi-nee? Nee?" llamo a su hermana menor por unas horas, identica a su madre, pero con un ojo azul y el otro negro, piel blanca y palida, vio que estaba tapada por trapos y su cuerpo totalmente destrozado, sollozo y toco la frente de su hermanita mientras la culpa la carcomia inocentemente, se tomaba las cosas mejor de lo que ella misma esperaba, a pesar de entender minimamente a la desdichada muerte, ni siquiera entendia que pasaba, solo sabia que no 'jugarian' juntas de nuevo, su ojito tenia una gran costra de sangre sin dejar que su ojo rojo se abriese, su ojo negro miraba todo a medias pero ayudaba
Volvio a sollozar y lagrimear gruesas gotas saladas que caian por su ojo negro de pupila blanca y redonda, camino hacia un pequeño mueble con cajones y abrio el primero, saco un kimono suelto y mas grande que ella de color marron, tenia una flor de Sakura en tonos mas claros del mismo y se lo empezo a colocar, sacandose la yukata y quedando en paños menores claramente, empezo a vestirse como habia aprendido a hacerlo, se termino de colocar el kimono por su cuenta y miro la casa por ultima vez para salir corriendo de alli, posiblemente otro demonio llegaria a devorarse los restos, luego tendria tiempo para llorar mas
Corrio y corrio, en su camino, encontro una pequeña cesta de bambu donde entraba perfectamente y le sobraba mucho espacio, estaba rota de abajo pero la podia arreglar, agradecia que sus hermanos le enseñaran sobre eso
"Hermana..." murmuro al recordarla y se echo a llorar sutilmente, levanto el cesto el cual era liviano y camino con este mismo hasta una cueva, cerca habia un pequeño bosque de bambu, entonces corrio a sacar uno pequeño y duro, lo arranco y se lo llevo empezandolo a trenzar con el mismo canasto aunque de manera desprolija, se lastimaba mas sus pequeñas manitos de pequeña niña, sollozaba por lo bajo al terminar y se escondio dentro de la cesta su (ahora suyo) Ahori salia de la cesta y funcionaba de frazada, se acurruco y se durmio
Olvidandose de todo
2 ᗩᑎ̃OՏ ᗪᗴՏᑭᑌᗴՏ
Un hombre rubio con las puntas rojas, ojos dorados de pupila roja con blanco, con cejas negras en forma de flecha, traía una capa blanca con degrade amarillo y las puntas rojas simulando fuego, con un uniforme negro, caminaba y entro en una cueva algo cansado
"Fiu... que larga noche" murmuro cayendo al suelo sentado y agotado, miro hacia algunos lados revisando que no hubiera nada escondido en aquella oscuridad
"Quien?" Pregunto una pequeña voz infantil de una niña
"Eh? (O mierda... ya me estoy volviendo loco!)" Miro a su alrededor viendo solo aquella cesta rota y vieja con un trapo fuera, estaba algo asustado, se levanto sutilmente
"Quien?" Volvió a preguntar moviéndose en la cesta, el supuesto trapo se movió alertando a el joven "quien eres?" Saco su cabeza de manera tímida
"Eh? Pequeña que haces aquí?" Pregunto acercándose y viendo una escena que lo helo de pies a cabeza
Una gran costra negra estaba en la cara de la niña, con preocupación se acerco corriendo a revisarla
"Pequeña estas bien?!" Pregunto asustado
"Quien eres?" Le respondió, el chico rubio suspiro, la niña si se podía comunicar al menos
"Kyojuro Rengoku, Pilar de la Llama, ven conmigo si? Confía en mi" pidió agarrando la cesta y llevándola hacia la finca mariposa donde se encontraba Shinobu Kocho y su hermana Kanae Kocho
"Señor... donde vamos?" Pregunto bajito la menor pelirroja agarrándose de la cesta sutilmente mirando a su mayor
"Vamos donde una amiga, a curarte esa herida" dijo el chico de 16 años
"Herida" señalo su costra "fue un demonio" murmuro
"Sabes de los demonios?" Pregunto anonadado
"De mala manera supe de ellos" se escondió en la cesta la cual la hacia sentirse protegida
"Bueno... venga tenemos que tratarte" le sonrió y con gracia empezó a correr por todo el bosque, habilidad y agilidad demostraban los pasos, rapidez también, la niña se quedaba mirándolo de manera fría y algo triste, el mayor dándose cuenta sonrió como sabia tranquilizando a la pequeña
"(Mama)" miro a Kyojuro de reojo, durmiéndose, recordando sutilmente a su madre
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Bueno, reinicie toda la historia, ya que ni tenia inspiracion y no me gusta como quedo asi que se me esperan y no me maten
//es la ropa que usa Lia y aviso, me gusto diseñarla//
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