Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

⤹ · .˚🐉 ༘⋆。˚ 05. ❛ 𝖲𝖾𝖽𝗎𝖼𝗍𝗂𝗈𝗇 ❜









v. SEDUCCIÓN 💚

King's Landing, 141 d.C.
La Fortaleza Roja
Narra Aegon III Targaryen

── Debes tomar el té de luna, Sarra ── susurré mientras me levantaba de la cama para recomponerme y salir de la habitación. Sarra se levantó rápidamente detrás de mí.

── Mi rey, tanto té de luna me matará... ── La miré de reojo, relamiéndome los labios sin mostrar mucha emoción.

── El té de luna no mata; mata al bebé que puedes tener dentro. No quiero hijos bastardos, Sarra. Te lo he dicho miles de veces ── No me importaba tener bastardos, ni lo que los demás dijeran. Simplemente no quería un niño por ahí que no sería mi hijo legítimo y que viviría toda su vida siendo atacado por eso.

Sarra pasó sus manos por mis hombros, y mi espalda se tensó. Nunca quise que esto pasara, pero como muchas mujeres dicen, solo soy un hombre. La única mujer que me sedujo y en la que caí fue alguien que no era amable en absoluto, pero no entendí lo que ocurrió. Me solté del agarre de la loba y caminé hasta la puerta para salir, ya vestido. Al abrirla, me esperaba Viserys con una sonrisa burlona y pervertida.

── ¿Acaso pasaste una linda noche con la lobita? ── hizo un puchero burlándose mientras caminaba a mi lado.

── Es arrogante y desagradable, pero seguramente tuve mejores noches de las que podría pasar con Jaehaera ── murmuré tomando la espada que él me entregaba. Viserys y mi hermana eran lo que me motivaba a seguir; siempre fue así. Cuando ocurrió lo de mi madre, caí en un abismo que parecía infinito. El dolor me ardía, y Visenya llegaba con sus dulces manitas a acariciar mi mejilla, diciéndome que todo estaría bien. Viserys siempre me protegió; me dijo que una espada sería siempre mi mejor amiga y que, si no me gustaba, simplemente pensara en que a él le gustaría.

── Nadie está hablando de Jaehaera, dioses. Es muy temprano para hablar de la reina verde ── rodé los ojos irritado ante ese apodo. Cuando caminamos frente a la habitación de Jaehaera, pude ver a Visenya y Daenera en la entrada. Ellas me miraron con pánico antes de disimular hablando entre ellas, algo raro ya que cada vez que Visenya me miraba, salía corriendo a abrazarme y adularme.

Daenera pareció tocar varias veces la puerta mientras su rostro estaba rojo de nervios. ── ¿Qué sucede? ── pregunté, quedando a unos metros de ambas chicas. Ellas me miraron y sonrieron nerviosamente. Viserys levantó una ceja y me miró con gracia; yo volví a rodar los ojos antes de fijar mi mirada en ellas.

── Nada, solo que la reina está cambiándose ── entrecerré los ojos. Ella se veía nerviosa, pero su voz no temblaba en absoluto.

── Siempre la ayudan a vestirse. ¿Por qué saldrían? ── posé mi vista en mi hermano, quien las miraba con arrogancia. Daenera rascó nerviosamente su cabello rizado.

── ¿Por qué tocaron la puerta así?

── No lo sé, desde hace rato estamos afuera; por eso tocamos la puerta... ── Visenya forzó una mueca/sonrisa antes de volver a tocar la puerta más fuerte, a propósito. Unos ruidos y luego un golpe se oyó dentro, antes de que Jaehaera saliera unos segundos después.

── Creo que esta vez sí me rompí la nariz ── su nariz sangraba un poco más que la otra vez; sus ojos se cruzaron con los míos momentáneamente antes de que ella cayera al suelo. La princesa pasó las manos por su cabeza con preocupación mientras veía cómo Lady Velaryon la ayudaba. Viserys se inclinó y tocó con cuidado su nariz. Yo no sabía qué hacer.

Saqué un pañuelo de mi bolsillo y presioné su nariz; ella soltó un quejido y tomó mi muñeca, separándola un poco. ── Me duele ── sus ojos no se abrieron al decir esas palabras; llegué a pensar que podría estar mintiendo, si no fuera por la sangre imparable que salía de su nariz.

── Vamos, levántala, hermano ── lloriqueó Visenya mientras se cubría la boca. Jaehaera se levantó antes de que pudiera agarrarla; parecía borracha, seguramente por el dolor de cabeza que le debía causar esto.

── Estoy bien ── Su voz sonó apagada e incluso ahogada, parecía a punto de desvanecerse. Nunca aceptaba ayuda; me sorprendía cómo estas jóvenes eran capaces de manipularla. No era tonta; no se trataba de grandes cosas, sino más bien de caprichos, pero siempre lograban persuadirla. Jamás conseguí hacerlo.

Como el día en que Aekar reclamó a Syrax, el dragón siempre se mostró distante ante cualquiera que intentara domarla. Nunca estableció conexión con nadie después de mi amada madre. Muchos en el consejo recomendaron que lo matara; después de todo, es un bastardo. Sin embargo, jamás me molestaron los bastardos. Pero Rivers siempre fue difícil de descifrar; todos temíamos que en cualquier momento pudiéramos ser traicionados. Esa propuesta pronto llegó a los oídos de Jaehaera, quien se manifestó en el consejo acompañando a su esposo, donde persuadió a todos y me dijo que, después de todo, era el dragón de mi madre: "¿Acaso deseas que se desvanezca el último recuerdo de ella?" Dijo, y quise matarla en ese instante.

Siempre fue persuasiva; es difícil verla de esta manera tan vulnerable. Su peso se inclinó y la sostuve antes de que cayera. Tomé su cintura e inconscientemente Visenya levantó una ceja.

── Deberías llevarla, hermano; el consejo aún no comienza.

Sus manos se posaron en mis antebrazos y los apretaron con fuerza, apartándome. Ella asintió sin mucho interés. Solté un suspiro pesado y la ayudé a caminar hasta la enfermería.

── ¿Cómo demonios te caíste, Jaehaera? ── Le cuestioné mientras avanzábamos por los largos y fríos pasillos. Ella me miró de reojo y habló en voz baja.

── Tropecé con este vestido extraño y me golpeé contra una mesita ── La peliblanca cerró los ojos con esfuerzo mientras caminaba; aún presionaba el pañuelo de Sarra contra su rostro para detener el sangrado, mientras con la otra mano se aferraba a mi brazo para no deslizarse completamente.

── Visenya y Daenera parecían sospechosas. ¿Es cierto lo que afirmas? ── Inclinó la cabeza y me miró con ironía.

── ¿Crees que yo misma me rompería la nariz? Me exasperas, Aegon ── Volteó los ojos. Ahí estaba de nuevo su actitud petulante, discutiendo por cualquier mínimo detalle.

── De ti esperaría cualquier cosa ── Ella soltó bruscamente mi brazo, desorientándose. Parecía dar vueltas mientras caminaba. Sus pasos se arrastraban mientras intentaba recorrer el breve trayecto que quedaba hasta la enfermería. Me gustaba verla sufrir; ella creía que era intocable, que jamás experimentaría dolor físico.

── ¿Acaso soy la mala? ── Ella me miró unos segundos sin expresión, nuestros ojos violetas profundamente. Ella asintió lentamente y se volteó.

Recuerdo el día en que casi me degolla; mis gritos aterrados y su expresión nerviosa durante unos momentos antes de mirarme sin emoción. La defendieron y trataron de justificarla diciendo que ella era la paz de la casa, a pesar del odio que sentía toda la corte hacia ella. También cuando intenté divorciarme, Lord Cregan Stark afirmó que si me separaba de ella, sería como declarar la guerra. Su fría mirada mientras estaba sentada en el otro extremo de la mesa, Baela y Rhaena siendo parciales pero a favor de mantener el matrimonio.

Suspiré sacudiendo mi cabeza, sacando esos pensamientos. Me dí la vuelta cuando la ví entrar a la sala, caminé hasta el pequeño consejo mientras tomaba la empuñadura de "Blackfyre", acariciándola nerviosamente.

Unos minutos después llegué a la sala donde se encontraban varios lores, entre ellos mi hermano que los miraba indiferente, sus hombros parecían relajados. Viserys es sabio para tener su edad, pero siempre ha sido promiscuo e impulsivo, muchas casas alegan que es igual a Daemon Targaryen, nuestro padre. Solo que una versión mejorada, según las palabras de la casa Tully.

── Su gracia ── Los consejeros del pequeño consejo se levantaron e hicieron una reverencia respetuosa mientras me miraban. Mi expresion era estoica como siempre había sido. Camine hasta la punta de la mesa y tome mi esfera para colocarla en su sitio. Ellos se sentaron luego de mi y empezaron a hablar.

── Lady Baela ha informado al consejo que dentro de las últimas embarcaciones hay al menos 100 personas que vienen de las ciudades libres... ── Informó el Gran maestre mientras de veía incómodo, fruncí las cejas e incliné la cabeza posando mi atención en él.

── ¿Eso que tiene de malo?
── Preguntó mi hermano por mi, el gran maestre alternó su mirada entre nosotros dos.

── Todas esas personas estaban muertas...

Voltee a ver a Viserys que parecía sorprendido ── ¿Que quieres decir? ¿Ni uno solo vivo? ── Los demás se veían tensos, mirándose entre sí.

── Ni uno solo ── Me enderecé en la silla, más tenso que antes. Respiré profundamente ── Fueron asesinados como las criadas del palacio...

Las respiraciones agitadas de la sala empezaron a oírse ── Definitivamente alguien nos están traicionando ── Habló Viserys mientras me miraba con ironía.

























King's Landing, 141 d.C.
La Fortaleza Roja
Narra Jaehaera Targaryen

── Las mataré. No sé porque les hice caso ── Sollocé mientras apretaba mi nariz, estaba tan hinchada, uno de los maestres me dijo que estaba dislocada, asi que la acomodó, haciendo que doliera horriblemente.

── Vamos, Jae. Lo sentimos ── Visenya me miró como un gatito mientras se acercaba con un té, Daenera acomodaba mi almohada mientras yo me recostaba.


── No, no lo sienten. Si lo sintieran nada de esto estaría pasando ── Jadeé cuando me pegué en la nariz con la taza, por andar molesta. Ella me miraron como gatitos regañados.

── Tu aceptaste ── Susurró Visenya mientras se sentaba a mi lado en la mesa. Apretó sus labios y hablo ── Bueno, fue drástico. Pero lo siento si, hablaré con ella para que la próxima vez no queden solas.

── Me besó, Visenya ── Apreté mis labios después de hablar. Tratando de no estar tan molesta, ella abrió los ojos con sorpresa.

── Discúlpame ── Ella tomo mi mano y la culpa se apreciaba en sus ojos, Daenera acaricio mi cabello.

── No sabíamos que algo así pasaría. Solamente queríamos que ella te ayudara a saber las cosas básicas. No lo especificamos bien.

── Después de todo somos una niñas ── Murmuró la princesa haciendo que me molestara, algo que había pasado un poco. La miré a los ojos.

── ¿Ahora sí son unas niñas? No eran unas niñas cuando se escaparon del palacio para buscar una prostituta. ¿Saben lo peligroso que es el desembarco? No me vengan con eso, ustedes son mujeres grandes ── Siseé con rabia para luego voltear mi rostro hacia otro lado. Mi cuñada besó el dorso de mi mano y luego lo apoyó en su rostro.

── No te enojes conmigo ── Sentí como el dorso de mi mano se humedeció, ella estaba llorando. Estaba tan molesta, muy molesta, pero me molestaba más verla llorar. La morena se apoyó atrás suyo y acaricio su espalda, yo no la volteaba a ver, pero sentía como lloraba aún más ── Es algo estúpido... Si no lo quieres hacer no importa, pero no te enojes...

Solté un suspiro pesado antes de voltear lentamente hacia donde estaba ella, me miraba con sus ojitos azules llenos de lágrimas, rojizos. Apreté mis labios en una mueca y me acerque a abrazarla, acaricié su cabello mientras ella lloraba. La chica Velaryon apretó sus labios y me sonrió en forma de disculpa antes de salir de la habitación.

── No llores más, Visenya ── Susurré tratando de tranquilizarla.

── No... Soy una estúpida, solo quería venganza. Una venganza que no es mía, me lo has enseñado miles de veces y cada vez que creo que ya pasé esa etapa, vuelvo con otra estupidez... ── No se entendieron unas palabras por sus sollozos, pero se entendió perfectamente lo que quiso decir. Hice un puchero y me separé ligeramente aún tomando su cara entre mis manos, acariciando sus mejillas y quitando sus lágrimas.

── No te culpes. Yo misma quiero esto, tú solo el diste una idea que yo acepte. Tu eres la niña y yo soy la adulta, estoy siendo infantil. Pero quiero esto, solo querías ayudar, es algo genuino que siempre has tenido esa cualidad pura. Aunque en situaciones cuestionables.

── ¿Lo harás igualmente? ── Me preguntó intentando no llorar más. Miré hacia otro sitio pensativa.

── Creo que sí. Solo no quiero más lecciones así, ni más en unas semanas ── Ella me sonrió y se acercó a abrazarme de nuevo. Tocaron la puerta y entraron, estaban Aegon Jaehaerys y Viserys. Me dió un escalofrío, ellos no se juntaban mucho. Maelor entro tropezandose atrás de ellos.

La princesa se separó y miró a sus hermanos para levantarse de la cama, camino hasta Viserys y se colocó a su lado secándose las lágrimas.

── ¿Por qué lloras, hermana? ── Preguntó Aegon mirando a su hermana, ella negó con la cabeza y sonrió.

── No me gusta ver a Jaehaera así ── Aegon encogió sus hombros y desvío su mirada hacia mí. Sabía que era un gesto irónico, a él no le importaba verme sufrir, incluso le gustaba.

Relamí mis labios y los miré ── ¿Que sucedió? No es normal que vengan todos juntos ── Jaehaerys se acercó y se sentó a mi lado mientras Maelor me miraba con los labios apretados y la mandíbula tensa.

── Nosotros estábamos en la puerta y ellos llegaron, así que entramos todos juntos ── Murmuró Maelor mirando de reojo a los otros hermanos Targaryen. Asentí y tome un mechón de Jaehaerys mientras miraba los demás, era una manía que tenía desde pequeña.

── Nosotros si vinimos a decirte algo ── Entrecerré los ojos y lo miré confundida. Viserys apretó el agarre en la empuñadura mientras dirigía la mirada hacia su hermano. Aegon tenía dudas al decirlo ── Jaehaera, sí hay un espía...

La sala quedó en silencio por unos momentos, mordí nerviosamente las uñas de mi otra mano mientras guardaba silencio, mirada bajó pensativa. Visenya fue la primera que habló, su tono era tembloroso y asustado.

── ¿A qué te refieres, hermano? ── Murmuró tropezandose con sus palabras. Viserys tomó en brazo de su hermana acercándola, ella lo miró entendiendo.

── Han matado a más de 100 personas, las han metido en la embarcación de Driftmark. Todos tienen el viejo uniforme y han sido asesinados igual... ── Dijo Aegon, su expresión parecía tensa, aunque siempre sería. Solté un jadeo sorprendido.

── Yo los mandé a quemar luego del último incidente... ── Aegon asintió y se encogió de hombros, parecía preocupado.

── ¿Y sabe que es lo peor? ── Levanté la ceja hacia Viserys que me miraba con su sonrisa de suficiencia ── Aekar no está en el palacio desde hace dos días ── Canturreó con un tono burlón mirando de reojo a su hermano. La princesa abrió los ojos con sorpresa y me miró.

── El está arreglando unos asuntos ── Dije firme mientras le daba una mirada matadora a mi cuñado, el sonrió y me guiño un ojo. Sentí como Jaehaerys gruñó a mi lado.

── Exactamente, Aekar está en el valle arreglando algunas cosas, Syrax está con él. Su majestad, ¿Cree que el mataría a cien personas, que se daría el tiempo de matar cien personas? ── Habló Jaehaerys mirando a Viserys que le sonrió antes de voltear. El acarició mi espalda

── Puede ser un loco, después de todo su padre es un Matasangre desquiciado ── Se encogió de hombros el principe, mi hermano rechinó los dientes. Visenya y Maelor se miraron con sus ojos se preguntaron que sucedía.

── Si van a pelear me iré ── Dijo Maelor apartando la mirada de Visenya, ella soltó un suspiro de alivio y ambos se acercaron a besar mis mejillas antes de salir juntos sin cambiar palabras. No sabía que decir o hacer, ví como salían ambos pequeños príncipes, sintiendo la mirada de los tres hombres. Solté un suspiro y los miré.

── No se que podría ser... Aekar es el principal sospechoso aún, después de todo ── Susurré, volví a morder mis uñas mientras respiraba pesadamente. Me dolía la cabeza, la nariz y no poder descansar ── Aekar me informo que volvería en 3 días, así que posiblemente vuelva mañana. ¿Está bien eso?

El rey me miró unos segundos con su expresión seria, antes de asentir tratando de relajar sus hombros. Respiró profundo y miro a ambos príncipes haciendo una seña con la cabeza, quería que ambos salieran. Quise en ese mismo instante pegarme a la espalda de Jaehaerys y que me sacará de esa habitación que es mi lugar seguro, ahora invadida por las cabezas del consejo.

Viserys miro a Jaehaerys, este ni siquiera le dirigió la vista antes de pasar por su lado, el principe siguió a mi hermano con una sonrisa. Yo voltee los ojos antes de posar mi mirada en mi marido. El se acercó con las manos detras de la espalda.

── Jaehaera ── Soltó, su voz sonó seca y fría. Mi espalda hizo con un resorte, tensandome al instante. El relamió sus labios y subió la mirada a mis ojos ── ¿Estás encubriendo al sucio búho?

Mis ojos alternaron en los suyos que parecían más oscuros de lo usual, el sol se estaba escondiendo mientras nosotros estábamos en esta habitación. Tragué el pequeña nudo que se había empezado a formar en mi garganta ── No cubriría algo así, es inhumano.

── Bien... Porque si me entero de que sabes algo... ── Murmuró con un rostro impasible, mientras se acercaba lentamente a mi rostro. Sentí como la sangre me hirvió de rabia, según yo, jamás le había dado razones para que tuviera esta desconfianza

── ¿Que harás? ¿Me matarás? ── Gruñí entre dientes, mis piernas temblaron ligeramente ── ¿O me quemaras con tu dragón?

Sus ojos se nublaron de la rabia y el dolor, fue automático, instantáneo. El suelto un suspiro pesado y se separó. Me miró con impotencia y desagrado, yo aparte mi mirada y actúe indiferente.

Oí como la puerta se cerró de un portazo y como el peso bajaba a mi garganta, había sido cruel, y por algo insignificante. No había pasado a mayores. Me fui muy personal; pase mis manos por mi cabeza y cabello. Estresada por la situación, no podría dormir en varios días. Tenía que descubrir que estaba pasando, teníamos que hacerlo. Sino esto va a pasar a mayores pronto.





















HOLAA, ¿les gustó? Les juro que pronto subiré el fic de Viserys y Jaehaerys, pero no lo he terminado. Estoy bastante estresada. Espero que les guste, recuerden votar y comentar, no sean fantasmas <33

๋· .˚ ༘🦋⋆。˚ ▋࣭Dedicatoria del capítulo: ellie0706 DariannyCastro9, amo sus comentarios, me hacen reír mucho. El próximo cap también se lo dedicaré a otras seguidoras, las quiero mucho, gracias por el apoyo

── CAMI <3


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro