Sus fosas nasales se encendieron ante su insolencia. No sólo le estaba desobedeciendo, sino que lo hacía a propósito, para irritarlo. La señorita Granger tenía que aprender una lección. Esto era inaceptable y sólo había una manera de enseñárselo. "¿No quieres?" Preguntó, con la voz elevada por la ira. Su pequeña mano seguía burlándose de su bulto, siendo la alborotadora que él no sabía que era.

"Esperaba más de usted, señorita Granger". Sus fuertes brazos la agarraron de las muñecas y prácticamente la llevaron a la cama. Todavía parcialmente vestido, Severus se sentó en el borde de la cama y tiró de ella sobre su regazo. Se mordió el labio, sintiendo un placer que no debía sentir. "Me la has vuelto a poner dura. Espero que arregles ese error, pero primero, tu castigo". Su mano recorrió el trasero de ella, sintiendo la suave piel de las mejillas de su culo. Su mano la agarró, sus dedos se clavaron en la piel suave y acolchada de su trasero.

El primer golpe de la palma de la mano fue duro, y todos los que siguieron fueron igual de dolorosos. No la azotó por placer... la azotó para degradarla, hasta que su culo estuvo rojo e hinchado, el contorno de sus dedos roncheó una y otra vez en su piel hasta que se agotó, su respiración áspera y dificultosa. "Ahora - ¿Tienes algo que decir y no te atreves a mentirme?" Exigió, dándole un último golpe con la palma de la mano para acentuar sus palabras. "¿O estás dispuesta a darme placer con tu boca para limpiar tu desastre?"

Ella esperaba que le doliera. Claro, eso estaría bien. Podía soportar un poco de dolor. Incluso mucho. ¡Era una heroína de guerra, por el amor de Merlín! Lo que no esperaba era que le doliera tanto. Cada golpe escuece. Y no un dolor rápido. No, este era del tipo que era blanco y caliente al principio y luego estallaba. Y él seguía dándole azotes. Fue humillante. Hermione lloró, con la cara roja de indignación y vergüenza. ¿Quién se creía que era? Se suponía que ya estaba por encima de esto. Ya no era su alumna.

Pero al final le dolía demasiado el culo. Se sentía pequeña, muy pequeña y mal preparada. ¿Y él quería .... que se la chupara después de eso? Hermione no tenía ganas de hacer casi nada, salvo cuidarse el trasero dolorido. "Lo s-siento.... No sé si estoy preparada para esto", tartamudeó ella zafándose de su agarre.

Probablemente pensó que ella había hecho este tipo de cosas antes. Era una tontería actuar con tanta confianza y sensualidad con él. Hermione lo sabía ahora. Snape estaba fuera de su alcance. No importaba cuánto lo deseara. O lo malo que fuera. Además, eso le dolía mucho. Probablemente tendría moretones por esto. Una lección permanente para no sobrepasar sus límites. Se cayó de su regazo, sus lágrimas saladas le nublaron la vista.

Severus sintió una punzada de culpabilidad en el pecho. Ver a Hermione caer de su regazo hecha un desastre le hizo lamentar lo brusco que había sido. Tragó saliva al sentir un escalofrío por la espalda. Se levantó, sus ojos pasaron de la ira a la pena. "Yo..." Se quedó sin palabras después de lo ocurrido. Parecía que estaba demasiado atrapado en el momento, la ira había sacado lo mejor de él y no estaba seguro de que lo que había hecho pudiera olvidarse alguna vez.

Se inclinó y la ayudó a ponerse en pie. Su toque contrastaba con sus acciones anteriores. "¿Estás bien?" Era una frase llena de ironía. Acababa de azotar su trasero por ser sexual con él. Sin embargo, aquí estaba preguntándole si estaba bien. "Lo siento..." Dijo en voz baja, mirando su trasero dolorido. "Merlín... no sé qué me ha pasado". Ayudándola a levantarse, le cogió la cara con las manos, mirando profundamente a la mujer de ojos llorosos.

"Perdóname... Mi temperamento ha sacado lo peor de mí". Dijo suavemente. La atrajo, rodeándola con sus largos brazos y dejando que se acurrucara en su pecho. Aunque quería que ella aprendiera una lección, parecía haber ido demasiado lejos. En su interior sólo estaba proyectando, la lección realmente era para él. Tenía demasiado miedo de vivir su sexualidad. Para cubrir a esta joven. Para querer hacer tantas cosas con ella. Y lo que eso decía del tipo de hombre que era. Así que su miedo le hizo arremeter contra ella, esperando que esto le ayudara a lidiar con el suyo propio.

Nueva historia de Sevmione🌿
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