Sariatu estaba arreglando la habitación mientras el Rey hacía otras cosas. Estaba barriendo cuando chocó de espaldas con la espada de Némesis,intentando agarrarla, la tomó de la hoja pero aún así no pudo evitar que se cayera. Némesis iba caminando por el pasillo cuando escucho el estruendo y corrió a la habitación, al llegar vio a Sariatu levantando la espada

-¿Estás bien?- se acercó a ella

-Si,solo estaba limpiando un poco y tiré la espada por accidente- el Rey tomó la espada de sus manos y la puso en la caja de cristal que tenía ahí

-Ten más cuidado amor, podrías cortarte, cuando esté afuera, dime para guardarla- la tomo delicadamente de los brazos

-De acuerdo- cuando iba a poner su mano izquierda en la mejilla del mech, este se dio cuenta de una cortada

-Ay amor- tomo su mano y la examinó, tenía una cortada que iba desde en medio del pulgar y el índice hasta el otro extremo de su mano en forma horizontal -Ven, vamos a lavarte-

busco una venda en el buró y fueron al baño, Némesis abrió el grifo y empezó a enjuagar la herida para después secarla, se puso la pinza en la boca mientras vendaba la herida y le puso la pinza

-Listo, ten más cuidado- acaricio su mejilla

-Lo siento, soy algo torpe- bajo la cabeza

-No te preocupes, solo se más cuidadosa, cuando la espada no esté guardada, mejor espera a que venga, no quiero que te vuelvas a lastimar- le dijo de una forma dulce

-Esta bien, tendré más cuidado- le dio una sonrisa

Más tarde, un soldado entró al castillo, tenía una mala reputación pero aún así Némesis lo aceptó en sus filas. El soldado entró a la habitación real, debido a que no había estado dentro del castillo, no sabia que habitación era, cuando entro por completo vio a una femme blanca acostada en la litera bocabajo, tenía un vestido rojo puesto y eso hacía resaltar más su color.
El soldado se acercó sigilosamente empezó a recoger sus brazos sin saber quién era, paso sus manos por sus muslos, Sariatu despertó pensando que era Némesis pero al ver al soldado se sentó exaltada y con sus rodillas casi pegada al pecho, asustada

-Calma, no te voy a hacer nada, solo portate bien y listo- se subió un poco a la litera

Némesis caminaba por pasillo encontrándose con Arcee, no había visto a Sariatu desde hacía casi una hora

-Arcee, ¿sabes dónde está Sariatu?-

-Esta dormida, dijo que se sentía algo cansada-

-De acuerdo, gracias- subió por las escaleras para ir a las habitaciones.

Mientras tanto, Sariatu seguía con la espalda recargada en la cabecera de la litera, aquel mech no le daba la más mínima confianza, estaba paralizada del miedo, le hacía recordar lo que Cyborg le había hecho. Aquel soldado tomó con cuidado sus tobillos

-Se buena para mi, así no te pasará nada- la jalo hacia él y comenzó a besarla mientras ella intentaba separarse

Némesis escuchó una voz en su habitación, abrió la puerta y vio al soldado encima de su reina

-¿¡¿Qué está pasando aquí?!?- por el grito el soldado se separó un poco de la femme

Némesis lo tomó de los hombros y lo separó por completo de ella quien se bajó de la litera y lo abrazó mientras él le devolvía el abrazo de forma protectora, sentía como temblaba, tenía su rostro oculto en su pecho. El mech se sentó mientras lo miraba

-Calma amor, calma, no pasará nada, aquí estoy- intentaba calmarla pero estaba muy asustada.

El soldado entendió todo, estaba acosando a la esposa del Rey.
Estaban en el salón del trono, Sariatu estaba sentada mientras el Rey hablaba con el soldado

-Fui muy claro, te dije que no quería que te acercaras a ninguna de las femmes que están aquí- hablo con un tono fuerte, denotando su ira

-Pensé que era una doncella solamente, no sabía que era su esposa-  hablo con temor

-¡Lo sea o no, debes respetarla, a ella y a las demás! Lo siento pero no puedes seguir aquí, no es la primera vez que pasa- miro a los dos caballeros -Escoltenlo a la salida-

Los caballeros escoltaron al soldado, Némesis se giró para ver a su femme y se acercó para apoyar sus manos en el descanso de los brazos

-¿Te encuentras bien?- la femme lo miró

-Si,por suerte no pasó nada malo-

-Arcee me dijo que te sentías cansada, ¿quieres qué te lleve con Ratchet para verificar que todo está bien-

-Claro, solo no je podido dormir bien estos días-

Ya con Ratchet, el médico le reseto unas pastillas para dormir, Sariatu tenía una duda que solo él le podría responder, iba a aprovechar que Némesis estaba hablando con Stormreing

-Ratchet, ¿crees qué pueda llegar a quedar embarazada?-

-Bueno, es poco probable, una Valkiria no esta diseñada para tener descendencia realmente-

-Escuché que solo pueden concebir una vez-

-¿Por qué preguntas?- trató de evadir un poco el tema

-No lo sé- respondió

-Creo que tu instinto materno está saliendo a flote-

-¿Crees que él quiera un cachorro?- preguntó intrigada

-Tenia la ilusión de tener una cría- ambos lo miraban por la puerta de la bahía hablando con el caballero -Audrey quedó embarazada de él, pero esa femme, no tenía instinto materno-

-¿El Rey tiene un cachorro?- preguntó sorprendida

-Sera mejor que él mismo te lo cuente- pensó un momento antes de preguntar -¿Cómo ha sido la intimidad entre ustedes dos?-

-Bueno... no se, él fue muy delicado, lo que me sorprendió fue que se viniera soltando su semilla en gran cantidad- no le gustaba hablar de eso,pero pensó que era algo de rutina

-Lograste lo que Audrey nunca logro, ella jamás pudo hacer que él se viniera de esa forma, eres muy especial, bueno, tal ves haya oportunidad de que quedes embarazada con lo que me dices, pero no es nada seguro- la femme estaba toda azul, lo que le dijo Ratchet la había puesto nerviosa

Ya era de noche, Sariatu estaba saliendo de bañarse con su bata puesta cuando el Rey entró a la habitación, se veía bastante cansado. Sariatu colgó la toalla y se acercó a él

-Mi Señor-

-Sariatu, ¿qué te dijo Ratchet?-

-Nada, solo me dio unas pastillas para el insomnio- el mech la atrajo hacia él y la abrazó -Se ve muy cansado-

-Lo sé- la miro -Algo te inquieta, ¿qué es?- preguntó amablemente

-Es solo que Ratchet me dijo algo que no me deja de dar vueltas en la cabeza-

-¿Sobre qué?- estaba confundido

-Dijo que usted y una tal Audrey tuvieron un cachorro- eso fue un golpe seco, no había mencionado nada de esto en años

-Creo que... es momento de decirte lo que paso- ambos se sentaron en la litera -En realidad, no tuvimos un cachorro, hace un tiempo atrás, Audrey quedó embarazada, me hacía tanta ilusión tener un cachorro, pero unas semanas después lo perdió- su voz se oía algo quebrada, pero firme a la vez -Paso como tres veces en total, pero ninguna se logró-

-¿Por qué?-

-Ella misma los abortaba, ella me lo confesó, dijo que una femme tan bella como ella no tenía porqué cambiar solo por un embarazo- dijo con rabia -Después de eso, perdí la ilusión hasta... que tu y yo nos casamos, pero aún así, no era la misma.... eso me lo confeso unos días después de elegirte como mi esposa-

-Madre desnaturalizada, no puedo creer que ella misma haya... hecho eso a sus cachorros- el Rey solo miraba al piso -Quisiera poder darle un cachorro, pero Ratchet dijo que no se puede-

-Mi amor,no es necesario, yo te amo, y nada va a cambiar eso- la miraba de forma cálida

Sariatu estaba recostada cuando salió el Rey de la ducha con su gabardina puesta y se acostó junto a ella, igual que otras noches, la abrazó, ahora que estaba a su lado, no podía estar más feliz y tranquilo, su reina estaba con él y no dejaría que se la arrebataran.