- ¡te digo que el humor de padre de familia es una porquería, estupido Judío!

- ¡oh vamos! ¡Solo porque a ti no te guste no significa que sea malo, puto gordo!

- ¡QUE NO ESTOY GORDO! - chilló alcanzando a fastidiar tus tímpanos - ¡tengo huesos gruesos, judío de mierda!

- ¡VUELVE A CRITICAR A MI GENTE UNA VEZ MÁS!

Ambos se quedaron en silencio, desafiandose con la mirada.

Jurabas que aquella tensión se podía cortar con un cuchillo.

Cartman estaba por decir lo inevitable, pero por instinto quisiste parar aquello.

– Yo creo que padre de familia es bueno, pero como todo tiene sus ligeros fallos

Ambos chicos se te quedaron mirando ante lo declarado, mientras que Stan y Kenny se miraban asustados por lo que pudiese pasar.

- ¿que putas dijiste? - preguntó un ofendido castaño - ¡por supuesto que tiene fallos!

– pero también tiene cosas buenas - reiteraste tú opinión -

- eres una—

Sabias de antemano que Eric no aceptaría tu opinión del tema, sin embargo no querías que Kyle siguiera enfadado.

Cuando Cartman molesta al pelirojo, sus hermosos ojos verdes pasan de ser alegres y llamativos a oscuros y sombríos; simplemente era algo que no te gustaba.

Justo cuando el rellenito del lugar te iba a golpear, algo detuvo su puño.

- suficiente Cartman - mencionó un enojado Kyle - ella tiene razón, dejemos el tema así

Tú te le quedaste mirando perpleja.

Kyle Broflovsky... Dejó en empate una discusión... ¿¡Con Cartman!?

Sin dudas no eras la única sorprendida del lugar.

- awww ¿le vas a hacer caso a la puta que tenemos por "amiga"? - burló para volverle a sacar de sus casillas -

Ibas a insultarlo por haberte dicho puta, pero el hermoso pelirojo se te adelanto dandole una bofetada fuerte en la cara.

- ¡te he dicho miles de veces que (t/n) no es una puta, culon de mierda! - regaño mirándolo en el suelo - ¡respeta carajo!

Antes de que Eric pudiera decir algo, el pelirojo se fue rápidamente malhumorado de allí.

Tú simplemente suspiraste enamorada, no pudiste ver sus divinos y brillantes ojos.

Pero te había defendido de Cartman.

Incluso cuando no estabas del todo de acuerdo con su opinión.

- ¡ME LAS PAGARÁS JUDÍO!

– oh, ya callate gordo