¿Cuándo fué la última vez que le vimos siquiera sonreír? ¿Cuándo fué el momento dónde su sonrisa se convirtió en una línea recta sin expresar aquella felicidad que transmitía? Dos muertes en un día puede cambiar a cualquiera, y sabemos que Øverwrite no era la mínima excepción; ya no hablaba con nadie, se había vuelto una persona distante, fría como el hielo y para rematar se alejaba de las personas que se angustiaban por él. Sus compañeros del colegio como Undyne habían notado ese comportamiento, algo totalmente inusual en él, pero tenían entendido que se debía a la perdida de su mejor amiga Brenda y de ese niño humano de nombre Alisson.  Y se habían enterado que, el Guardián de las Au's Ink, por petición del supuesto "tutor" del esqueleto, le pidió que se llevara a la hermana menor del niño fallecido.

      Alphys, Mettaton y la recién mencionada Undyne estaban sentados a solo una mesa del comedor del colegio de dónde se encontraba el de fragmentos, estaba solo. La lagarto amarilla suspiró mientras veía su bandeja de comida entristecida, querían hacerle algo especial a su compañero para que no se sintiera tan solo, es decir... Brenda literalmente era su mejor y verdadera amiga, ellas lo sabían perfectamente, y en ese momento la chica pez y la fantasma rosada estaban discutiendo sobre que hacer o darle a Øverwrite como regalo.

      Cómo era de esperarse, ambas tanto la chica pez y la chica fantasma no llegaban a un acuerdo, siempre peleaban por cosas tan minúscula como lo era un regalo, y más si es por una recomendación de la diva del grupo, y sí, si fue idea de Mettaton darle un obsequio un poco... Peludo.

—¿¡Una peluca!? ¿¡Por qué darle una peluca!? —preguntó molesta Undyne hacía Mettaton ¿De dónde sacaría esa idea tan ridícula.

—Pensé que si tuviera cabello se vería menos calvo y más guapo.

— ¡Pero ese no es el punto! —se acariciaba sus sienes suavemente intentando no desatar toda su ira y mandar al carajo la mesa—¡Hay que darle algo de todos nosotros! ¡No solo de ti fresitas!

— ¿Disculpa?

      De esa forma empezaron a pelear de manera irracional porque cierta diva no aceptaba que le llamarán "fresitas", gritos y jalones de cabello eran lo que hacía a esa mesa tan ruidosa, el escándalo acabó cuando dos maestras junto al Monitor de Pasillos fueron a separar a ambas amigas de su riña, dejando a la lagarto amarilla sola... Bueno no tan sola. Ahora tenía una buena excusa para poder acercarse al esqueleto de pañoleta rosada, se levantó de su ahora vacía mesa y se acercó al lugar donde se hallaba Øverwrite vestido de negro completamente exceptuando su reconocible pañoleta, tomó aire y juntó todo el valor que tenía, se quedó viéndolo unos segundos más mientras que se decía así misma que tenía que hablar ¿Quién sabe cuando volverá a tener esa oportunidad de hablarle con sinceridad y ofrecerle una mano para salir de aquel agujero donde ella había estado, el cual es llamado : “Depresión” ?

— ¿Quieres compañía?—preguntó amablemente la lagarto viéndolo— No está bien que te quedes aquí solito.

      Él no dijo nada, solo hizo un ademán con sus manos, invitandola a sentarse a su lado, Alphys se sintió feliz y se puso a su lado, le dedicó una sonrisa mientas tomaba su leche de chocolate y comía parte del almuerzo que su mamá le había preparado, mientras veía el rostro de su compañero: con ojeras, marcas de lágrimas y sus pupilas parecían blanco y negro y no se notaba casi aquellos distintivos colores que lo hacían especial.

—Hey, mis condolencias por lo que le pasó a tu amigo y a Brenda, de verdad. Se nota que de verdad los extrañas mucho.

—... ¿Tu crees que no los extraño? —indagó con cierta ironía en su voz, haciendo notar su molestia ante el comentario.

— Sé lo que es perder a alguien... Y pensé que podría ayudarte— que extraño ¿No? Ahora la tímida Alphys parecía que estaba muerta, dándole paso a una nueva versión de ella misma.

       Øverwrite se quedó callado, iba a hablar pero se retractó de ello, simplemente se quedó escuchando los consejos para superar la depresión y también contar lo que había sucedido minutos atrás con Undyne y Mettaton, soltó unas risas al oír aquello, ¿Una peluca? ¿Una tonta peluca? Y de paso le querían dar una peluca rosa , suponían que ese era su color favorito y vaya que sí habían acertado, el resto del período escolar del día estuvo con Alphys, aunque siendo sinceros, él no hablaba solo escuchaba; Hell le había dicho que escuchar era la mejor manera de entender a las personas a su alrededor, saber más sobre alguien es aprender lo que hicieron y lo que no. ¿Y la chica pez y la fantasma rosada? Estaban en detención el resto del día y al mismo tiempo intercambiando miradas fulminantes. Lo más gracioso es que todo inició por una peluca.

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      Al salir de clase se dirigió a su casa por el mismo sendero de siempre, recordando no tomar atajos mal calculados para evitar problemas con Susie y su pandilla, se puso la capucha negra que venía junto con la chaqueta y miraba su collar con tristeza ¿Por qué el corazón si en vez de amor la vida le daba falsas ilusiones y tontas esperanzas? Nunca entendería el concepto y la razón por la cuál el de mancha negra en la mejilla , Ink, le había obsequiado tal regalo tan ... ¿Tonto? Y hablando del Diablo, lo esperaba pacientemente sentado en la entrada el pintor con sus manos recargando su cara con cansancio. Levantó sus heterocromáticas pupilas y vio llegar a quien esperaba con ansias ocultas. Øverwrite no estaba de muy buen humor para recibir al artista, la última vez que estuvo así fue a los tres años, Ink terminó vuelto papilla mientras él estaba desmayado.

—¡Mi Rosa! —el pintor fue corriendo hacia él, solo pensaba en consolarlo. No pudo hacerlo aquel día gris cuando se llevó a la humana pequeña consigo.

— Hola ... Ink

— ¿Qué tienes? ¿Quieres hablar?—preguntó acercándose a él con cuidado, sabía que cuando estaba muy pero muy molesto, sin querer podría llegar a lastimar a alguien sin pensar y por experiencia propia decidió que lo mejor es preguntar antes de tomar malas decisiones.

      Solo recibió silencio, un profundo e incómodo silencio, el artista se acercó y notó la cara deprimida y desilusionada, nunca había visto tal mirada en el rostro tan tierno y feliz del niño, le acarició la cabeza dulcemente y lo tomó de la mano para luego llevarlo a sentarse con él en el pequeño jardín que el esqueleto de estatura mediana había cultivado por cuenta propia, lo sentó en frente suyo, y tomó unas flores y le hizo una corona y se la puso. Le hacía muchas preguntas entre ellas eran preguntas sobre su bienestar emocional, ahí el de pañoleta rosada dejaba de hablar o sonreír. Eso también lo notaba con facilidad Ink, si él conocía los pequeños detalles que arruinan una pintura bien elaborada, podía notar con detenimiento los problemas del esqueleto.

—¿Qué sucede, Øverwrite?—Ink le llamó por su nombre y no por su apodo

       El mencionado no quería hablar de nada, solo desvío la mirada levemente, pero eso sí, sabía que el pintor era muy insistente y no se detendría hasta saber la raíz de sus problemas, suspiró mientras sentía que le masajeaban los hombros y oír un "De verdad estás tenso" de parte del pintor. <<¿Y si le cuento sobre mi pesadilla reciente? Tal vez eso lo calme un rato>> pensó indeciso; hace ya un día después de la muerte de Brenda y posteriormente la de Alisson, tuvo una pesadilla extraña y abstracta, su sueño consistió en que era un esqueleto negro con algunas partes rojas y amarillas, llevaba una capucha negra con partes azules y pantuflas negras, recordaba que estaba en el centro de todo, en el sitio donde cara hoja , cada Au estaba, y con solo un jalón de un hilo azul que colgaba del cielo, destruyó todas las hojas sin remordimiento, sin lamentaciones de por medio.

— No solo que yo... Tuve una pesadilla... Soñé que destruía todo el Multiverso, todo lo que te importaba, lo que cuidabas. ¿Y si se vuelve realidad?

     Ink se quedó paralizado un segundo, podría creer en muchas cosas pero nunca algo cómo eso : ¿Su Rosa? ¿Destruir la única cosa que ah deseado conocer? ¡Ja! Tonterías, esas son puras tonterías que su mente le hace pensar.

— No te preocupes... Si algún día llegas a caer , te juro que te ayudaré a salir de allí.—le dijo mientras lo abrazaba protectoramente mientras se repetía mil veces en esa mente hueca que tenía sobre sus hombros <<Eres mi Rosa, eres Mi Rosa y soy responsable por ti.>>

  <<Entrada 04, Línea Temporal número 12>>

<<No tengo nada en contra de *** pero su presencia solo disminuye las posibilidades de llegar a dónde quiero.>>

<<Si es necesario jugar sucio, jugaré sucio. Todo por mi individuo perfecto.>>

<<Todo por la perfección, y eh notado que ya estamos muy cerca de que el experimento llegue a ese punto tan deseado. Su Punto de Quiebre.>>

      Una mancha de tinta apareció de la nada a unos centímetros de dónde los dos se encontraban, Ink no quería darle importancia, pero luego de 30 minutos tuvo que entrar al portal hecho de tinta ¿Qué locura había pasado esta vez que necesitan tanta urgencia su ayuda? Al cabo de una hora , el pintor regresó con algunos moretones pero nada grave, se acercó a Øverwrite y le explicó la gravedad del asunto; al parecer el Multiverso mostraba varias fallas tanto en códigos como en estética, y que necesitaban su ayuda junto a un amigo suyo llamado "Anti-Virus", le juraba que de verdad que no quería abandonarlo pero era su deber cuidar de las Au's. Øverwrite entendía aquello, después de todo si el pintor no hacía su deber posiblemente no exista un Multiverso el cual el de pañoleta rosada quisiera ver.

     Ink le dio un abrazo fuerte le dijo un "Volveré te lo prometo" y se fue atravez del portal de tinta. El esqueleto albino suspiró con cansancio, se levantó y se quitó la corona de flores que aún tenía en su cabeza, fue adentro de su casa y le pasó de largo a X!Gaster y a X!Chara, el último mencionado estaba sospechando del supuestamente mayor de todos, conocía y sabía que el Multiverso no se ponía de esa forma como lo dijo el pintor ¿Qué? No lo juzguen, ya que como buen "hermano" debía de estar al tanto de las cosas de su pequeño hermanito esqueleto. Además tenía en mente que el ególatra tenía sus propios planes guardados.

      Al pasar una hora, el esqueleto bajó la escaleras para poder salir ya que terminó sus actividades que le habían mandado para realizar en el hogar, decidió dar un pequeño paseo por el pueblo, aunque ya estaría previsto que los aldeanos le empezarán a molestar o algo por el estilo, era seguido por Hell quien para sus ojos en esos momentos al salir de la vivienda era un gatito negro. Empezó su recorrido cortando paso por el pequeño parque que había en la aldea, veía a los niños volar sus cometas y a las madres hablar, y a lo padres ayudar a sus hijos a montar en bicicleta. ¡Ay! Cosas que no podrá hacer ya que bueno... No tiene esa suerte.

—Hola mijito.—habló con cariño una señora mayor que estaba detrás suyo.

      Øverwrite giró su cabeza para ver quién lo llamaba y era la señora Cherry, la abuela de Brenda, se veía que la vejez aún no le alcanzaba, parecía más joven que vieja, claro no está demás decir que tenía lentes de morados a causa de tener miopía desde hace tiempo.

—Hola señora Cherry—devolvió el saludo con una sonrisa fingida.

        La de mayor edad se acercó a él y le tomó de la mano y le quitó la capucha que cubría su rostro, le dio una suave sonrisa y murmuró algo como "No ocultes tu cara" y lo llevó a pasear por el pueblo, le compró un helado aunque el propio esqueleto rechazara tal cosa, mas la insistencia de la coneja de mayor edad aceptó, ahora estaban sentados detrás de la fuente del pueblo comiendo helado, se miraban de tanto en tanto compartiendo anécdotas sobre Brenda la cual se volvió un gran tema de interés, ella sabía que Øverwrite le tenía un afecto que un hermano le tiene a su hermana, al terminar de comer el helado se iban comiendo la galleta del cono. Al terminar el esqueleto estaba dispuesto a retirarse, pero Cherry interrumpió su acción.

— Øverwrite aguarda.—dijo rebuscando algo en su bolso, mientras el recién mencionado se acercaba a ella— Brenda quiso darte esto.

        Sacó de su bolso un sombrero de copa negro, tenía una cinta blanca y con un broche de un trébol de cuatro hojas verde casi parecido a un broche de esmeralda con delineado en oro, la coneja mayor se lo dio en sus manos con una sonrisa en su rostro— Su último deseo sé y conozco que era darte su posesión más preciada. Bueno, me voy mijito, quisiera que podamos hablar mañana, se ve que necesitas ayuda.

       Dicho esto se retiró a su casa, el esqueleto también iba tomando rumbo a su hogar, no se había dado cuenta que se estaba haciendo de noche ¡Vaya que cuando hablas el tiempo vuela! Iba caminando por otro camino mientras estaba perdido en el objeto recién dado; era hermoso, sus cuencas parecían recuperar aquel color que lo caracterizaban y luego miles de recuerdos , momentos que compartió con su primer mejor amiga en todo el mundo, de verdad la extrañaba bastante y luego vino un golpe de ansiedad, un sentimiento extraño lo invadió por completo, reflexionaba sus acciones, sus decisiones... Todo, incluso esa voz en su cabeza que sonaba apenas despertaba de su pesadilla. Y en menos de que se diera cuenta estaba en un callejón, <<Vaya en dónde me eh metido ahora.>> pensó mientras se rascaba la nuca con nerviosismo, sintió unos pasos resonantes acercarse a su posición, miró de reojo al grupo de Susie, ella estaba liderando el grupo mientras los demás estaban a un lado de ella.

—Mis amigos quieren cobrar venganza por las bromas que les hiciste.

       No entendía nada hasta que sintió un batazo en las piernas, después sintió que alguien lo agarraba del cuello y lo lanzaban al muro del callejón, el mounstro del grupo vino y con la tapa de un basurero se la lanzó a su cabeza , el golpe lo dejó aturdido, notó que se le había caído aquel sombrero de copa que le había dejado en herencia Brenda y veía como ellos lo tomaban, escuchaba preguntas como "¿Quién te lo dio?" No sabía que hacer, estaba tildado. En ese momento vio lo que nunca quiso ver y eso lo enfurecía: Rompieron parte del regalo de Brenda. Susie se acercó a él con una sonrisa lasciva, superior y sintiéndose invencible. Lo agarró de sus ropas y lo golpeó contra el muro varias veces, para acto seguido darle un puño en el rostro. Un hilo de aquel líquido carmesí con sabor a metal le cayó mal en su paladar, el esqueleto cayó de rodillas sintiendo que lo habían abandonado ¿Y dónde estaba Hell cuando lo necesitaba? ¿Y que pasó con lo de cuidarlo? ¿De verdad no haría nada?

—Vayamonos de aquí, es demasiado débil.

  <<Cuando dije que despertarás, no me refería a algo "físico".>>

  <<¡ME REFIERO A QUE HAGAS ALGO YA ØVERWRITE!>>

       Cuando el grupo se iba a retirar, un tentáculo negro salió de la nada y agarró a uno de los dos humanos, para acto seguido lanzarlo contra el suelo con fuerza bruta, los presentes vieron al esqueleto que se levantaba, limpiando con su manga la sangre que había salido de su boca, su boca parecía alargarse hasta donde se supone que estaban las orejas y mostró una hilera de dientes puntiagudos, sus orbes había desaparecido dejando presente a una orbe en forma de corazón rosa en su cuenca izquierda mientras un líquido oscuro salía de sus cuencas , una risa desquiciada salía de su boca como una melodía que pensarías que estaba un psicópata a tu lado y tú ni cuenta te hubieras dado ya que sería un buen actor.

     Los tentáculos desaparecieron y un montón de huesos negros con un delineado rosado opaco aparecieron en su lugar, con solo un movimiento de dedos aquellos huesos filosos como daga fueron a  parar a las piernas, tórax y brazos de el otro humano y el mounstro, se teletransportó cerca de ellos y clavó aún más el hueso en el tórax del humano, murmurando algo como "¿¡Así o más fuerte, basura!?" Su sonrisa no desaparecía para nada en el mundo, sabía que estaba mal, pero en el fondo le encantaba , sentía algún tipo de sentimiento nuevo, al hacer sufrir a personas como ellos. La dinosaurio morado se alejó por un momento, notó un hacha oxidada pero con filo cerca de su lugar, su padre le había enseñado usar ese tipo de herramienta, la tomó del mango y se lanzó al ataque logrando darle a la pierna izquierda del esqueleto. El mencionado se alejó sin borrar su sonrisa.

—¿Así qué con que esas tenemos, Susie?~ —malicia, su voz estaba llena de malicia mientras su pierna se curaba con una velocidad increíble— ¡Bien juguemos así Susie! ~

       Al escuchar aquello, sintió un corte en su mejilla y era que el chico esqueleto tenía un cuchillo negro con delineado rosado opaco, se iba alejando para evitar cortarse con aquella hoja blanca, no entendía como es que ese chico tenía un gran manejo de armas blancas como lo era el cuchillo, le daba golpes que esquivaba con facilidad, los brazos de su contrincante se estiraron para agarrarla y tirarla al otro lado del callejón, intentó ponerse de pie pero se percató de un peso sobre sí, era Øverwrite quien tenía su cuchillo elevado listo para darle un cuchillazo por la yugular, pero aquello no sucedió ya que el humano lanzado anteriormente le tiró un ladrillo con todas sus fuerzas al cráneo ajeno haciéndolo caer de espaldas. Rápidamente y aprovechando el descuido se levantó tomando su hacha. El de pañoleta rosada chasqueó los dedos y dos calaveras que parecían las de un animal (Gaster Blasters) negras con un delineado rosado, cuyas cuencas en el fondo eran rosadas y pupilas negras con un corazón rosa invertido en la frente, se acercaron al humano y lo agarraron para lanzarlo lejos.

      Øverwrite se acercó a su enemiga y con sus tentáculos la agarró por el cuello ¿¡Por qué rayos seguía sonriendo!?

<<¡Ya la tienes! ¡Acaba con ella ya!>>

<<¡Sí hazlo! ¡Mátala! >>

       Cuando estaba apunto de matar a su víctima, un sable árabe apareció de la nada y cortó el tentáculo, seguido de una patada en el estómago, lanzando al esqueleto menor lejos, ¡Era Hell! Se puso en frente de Susie para poder protegerla. Se acercó al esqueleto albino con cautela sin bajar la guardia, de verdad se veía que era un soldado en la guerra de Afganistán, el niño afiló sus manos cuan garras y le propinó zarpazos que eran bloqueados por los sables, hasta que logró darle uno en la cuenca dónde estaba la orbe azulada del esqueleto de mayor edad, el grito de dolor fue callado gracias a que se mordió el labio inferior y se alejaba.

—¿Estás bien, Susie?—preguntó suavemente recibiendo una débil afirmación— Quiero que te lleves a todos tus amigos de aquí, y no le cuentes nada de esto a nadie. ¡Ya!

       Susie hizo lo ordenado teniendo una cicatriz que ganó en batalla en su brazo, se llevó a sus compañeros lejos del callejón dejando a ambos esqueletos solos, el menor no quitaba esa sonrisa de su rostro mientras el mayor lo veía, se acercó a lo que quedaba del sombrero y lo mostró al esqueleto, de la nada Øverwrite se tranquilizó y su sonrisa despareció, cayendo al suelo rendido. Hell se le acercó, lo cargó y se lo llevó lejos de allí.

  <<Entrada 05, Línea Temporal número 12>>

      El de huesos oscuros llegó a la parte delantera de la casa, dejó al niño sentado en el suelo mientras este tomaba consciencia, no sabía que pasaba, la cabeza le dolía y el estómago igualmente, miró al mayor y solo encontró una mirada preocupada, el ambiente era asfixiante, tenso, pesado. Øverwrite miraba a todos lados buscando alguna excusa, algo alguna palabra que lo haga recordar algo de lo que pasó anteriormente. Hell suspiró mirando al aire, murmuraba palabras en latín mientras tomaba aire, la luna estaba en su punto exacto mientras el frío y el viento de la noche tocaba los huesos ajenos de ambos.

—Escucha, Øverwrite. Tranquilo, ya pasó ¿Okey?—dijo con voz dulce mientras se acercaba al esqueleto y le limpiaba la mejilla con sus falanges— Le diré a Kriss que cosa el sombrero ¿Estás de acuerdo?—recibió una afirmación seguido de un abrazo.

     Se adentraron a la vivienda mientras el pequeño se aferraba al mayor, justo en ese momento un golpe certero le dio en dónde estaba el alma del esqueleto de humo haciendo que cayera, el menor se acercó al esqueleto de mayor edad y revisaba su alma;  estaba quebrándose mientras que los experimentos de X!Gaster todos desde el primero hasta el noveno re ponían en círculo en torno a ambos . El de pañoleta rosada no sabía que pasaba ¿Qué querían? ¿Qué hizo?

<<¿Qué hará?>>

—Øverwrite, descuida... En un futuro estarás bien solo... Solo no dejes que-... —antes de si quiera terminar su frase Hell se volvió humo y desapareció ¿A dónde fue? Nadie lo sabe.

       El esqueleto albino se quedó traumatizado y se sentía solo, sintió las manos de X!Toriel agarrándolo con fuerza y arrastrándolo por el suelo, gritaba pataleaba y suplicaba que lo dejarán ir, en eso llegó el hermano del esqueleto, el chico de cabello castaño casi morado oscuro se acercó y abrazó a su hermano, poniendo resistencia para poder separarlo del agarre de la cabra de monocromáticos colores, sin embargo X!Asgore se acercó y jalaba a Kriss para que soltara a Øverwrite, pero el último mencionado no quería soltarse, era como el juego de tirar de la cuerda solo que esta vez era para separarlos. Los llantos de ambos menores se hicieron notar, el humano albino quería ir y ayudar al humano menor, pero una daga lo amenazaba por atrás, solo podía mirar el desastre que tomaba lugar.

       Ahora solo las manos de ambos infantes eran lo único que los unía, X!Mettaton y X!Muffet jalaban a Kriss, mientras X!Papyrus e X!Undyne jalaban a Øverwrite, un último tirón y lograron separarlos.

—¡Øverwrite!

—¡Kriss! ¡Sálvame!—un grito desgarrador sonó desde donde estaba el esqueleto menor.

      Era jalado a la fuerza al sótano de la casa, abrieron la habitación que quedaba a la izquierda y era nada más que un laboratorio improvisado y en el fondo había un muro de metal con una puerta sin ventana la cual estaba abierta , allí esperaban X!Alphys y el ególatra el cual le dictaba a la recién mencionada todo lo que sucedía sin importarle la seguridad o bienestar del menor, el cual fue lanzado bruscamente al cuarto de metal y automáticamente cerraron la puerta con llave, el niño se levantó y le dio varios golpes a la puerta y gritaba que le abrieran mientras lágrimas caían como una cascada, su voz se quebrantaba empezó a cansarse y se puso de rodillas a llorar, mientras se hacía bolita mencionaba el nombre del esqueleto de huesos negros para luego decir "Papá" como si de verdad el esqueleto mayor hubiera sido un padre para él, también mencionaba el nombre de su hermano, de Brenda , el de Alisson, Nathalie, Undyne, Alphys, Mettaton... Todos sus amigos.

<<Por favor... Ayúdenme>>

<<Que la fase dos del experimento "Fragmentado" de comienzo.>>

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     ♡ Hola mis criaturas, solo quería advertir que a partir de aquí las cosas se pondrán un poco más turbias . ((NO AL NIVEL DE LAS MÁGICAS AVENTURAS DE INK PERO SI TURBIAS))

     ♡ Dato especial para la Dinosaurio amiga mía OwO : Hell es Inferno e Inferno es Fallacy de una línea temporal alterna dónde está fue contaminada por un virus que destruyó todo menos a Fallacy y Macabre, que luego fueron encontrados por una Deidad de otro Multiverso que con ayuda de un Guardián Omniversal los renombró y les cambió la apariencia. Ahora Fallacy es Inferno y Macabre es Vitaly :)

   ♡ Chao ~ <3