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HoSeok salió de la habitación principal y se detuvo frente a JungKook, YoonGi, Agust y Suga, no estaba seguro de cómo reaccionarían al enterarse, pero era mejor que lo supieran cuanto antes. No encontraba la manera correcta de decirlo, JiMin había recibido una herida en el abdomen durante la batalla y cuando llegaron a Transilvania esta seguía sin recuperarse, así que tuvo que revisarlo.

Era sumamente extraño porque era una clase de neonato distinto a los demás y aunque sabía mucho sobre ellos, no había muchas explicaciones para el caso de JiMin, después de todo era también el eternâ. Sin embargo, su habilidad de regeneración debía ser con la misma velocidad que la de los hermanos Min y no estaba funcionando correctamente, lo cual se debía a algo mucho más desconcertante.

—¿Qué saben sobre la unión de almas?— cuestionó el mago, mirando a cada uno de los presentes.

—¿Eso tiene algo que ver con que lleves cinco minutos frente a la puerta evitando que entremos para ver a JiMin? — bufó en respuesta Agust, estaba ansioso por ver que su pareja estuviera bien.

HoSeok asintió —Primero tenemos que hablar de esto, JiMin está durmiendo en este momento, su herida está bien, pero al chequear su cuerpo descubrí algo... nuevo.

—¿Nuevo?— dudo esta vez YoonGi, por la manera en que lo había dicho no era bueno.

—Dios, hablar con ustedes de temas serios es imposible, estoy tratando de explicarles todo esto porque ni siquiera yo sé cómo demonios pasó.

JungKook se rio por su reacción —Creo que deberías tranquilizarte primero, respira profundo y suelta lentamente. Luego comienza a decirlo justo como cuando no entendemos nada en general, será más sencillo.— recomendó, mirándolo sonriente.

HoSeok siguió obedientemente cada paso bajo la atenta mirada de los cuatro, estaban impacientes y él era un desastre porque esto no tenía pies ni cabeza. Bueno, en realidad sí, muy pronto, pero ese era el principal lío en todo el asunto.

—Cuando un alma es puesta en otro cuerpo, se dice que toma posesión, es normal que el cuerpo se acople para darle la bienvenida.— aclaró y se detuvo para procesarlo —Hilda era mujer, sus reencarnaciones siempre fueron mujeres, que JiMin fuera un hombre cambió completamente todo, su cuerpo tuvo que hacerlo también para lograr recibirla. Estuve hablando con él cuando estaba despierto y me contó algunas cosas que me dejaron sobre pensándolo. Es decir, SungRyung no veía bien la homosexualidad, pero lo preparo lentamente para serlo con psicología inversa. Ella realmente estaba obsesionada con el poder, que su hijo fuese un niño y no una niña alteraba el orden de todo su plan...

—¿Estás intentando decir que su madre lo hizo niña?— preguntó Suga confundido, algo que también pasaba con Agust, más no con YoonGi.

El mayor de los Min estaba más pálido de lo normal, pidiendo estar equivocado, pero estaba sospechando bastante sobre una idea bastante loca y con cada que HoSeok avanzaba parecía estar en lo correcto.

—Sí, JiMin interiormente es mujer y está embarazado.— confirmó el mago.

Ni siquiera JungKook esperaba algo como eso, la noticia fue tan inverosímil que todos olvidaron como respirar y eso ciertamente era algo bastante básico. Que JiMin esperara un bebé era bueno, claro que sí porque obviamente era un hijo probablemente de YoonGi, Agust o Suga y JungKook sonrió ante la idea de tener un hermanito o hermanita.

—Eso explica por qué tardaba tanto en despertar después de la conversión.— comentó YoonGi rompiendo el silencio —El bebé, al igual que JungKook con Hilda, estuvo alimentándose de nuestra sangre, tiene sentido para mí.

HoSeok asintió —Suponiendo que haya quedado en espera durante la luna roja, si podría ser la respuesta.

—YoonGi o Agust pueden ser los padres.— dijo repentinamente Suga, su tono era neutro, pero su rostro decía bastante, estaba decaído porque no era una posibilidad que el bebé fuera de él.

—No me suena nada mal tener un hermano o hermana.— opino JungKook hacía a su padre con una sonrisa de conejito, sus ojos destellando felicidad.

Agust lo rodeo por los hombros y asintió totalmente de acuerdo con él, la sola idea de tener un bebé nuevamente era algo hermoso, que incluso lo puso un tanto sentimental. En este instante solo quería ir hacia JiMin y besarle todo el rostro, agradecerle todo lo que ha traído a sus vidas y lo que continuaría trayéndoles con el pasar del tiempo.

YoonGi también se encontraba de la misma manera, pero no podía estarlo tan fácilmente, sabiendo que Suga estaba carcomiéndose la cabeza y como hermano mayor intentó tranquilizarlo, apoyándolo con total sinceridad.

—Sea quien sea el padre, saben de antemano que JiMin nos ama a los tres por igual y nosotros a él, por eso debemos apoyarlo y ser fuertes.

—¿JiMin ya lo sabe? — curioseo JungKook mirando al mago.

—Se lo comenté y fue bastante shockeante para él por lo que pude ver, pero con tantas cosas paranormales que le han pasado durante este tiempo parece ya no sorprenderse tan fácilmente. En cambio, parecía contento al saber que podía darles un hijo, preguntó sobre si el bebé estaba bien, cuando supo que si solo me pidió que les dijera y se quedó dormido mientras lo curaba con mi magia.

—La luna roja fue hace más o menos quince días ¿Estás seguro de que está embarazado? — insistió Suga.

El mago guardó silencio unos momentos y miró sus manos, aún podía sentir la formación dentro de JiMin, la cual sin duda pensó tenía más tiempo, por lo menos uno o medio mes. De acuerdo a eso, no había ninguna posibilidad que fuera de los hermanos Min, a menos que el bebé estuviese creciendo de una manera demasiado apresurada.

—¿Cuánto tiempo duró Hilda embarazada? — interrogó HoSeok a los tres mayores, aunque más precisamente a Agust.

—Por lo que recuerdo fueron menos de cuatro meses.

—JungKook nació cuando ella murió, los bebés vampiros se desarrollan más rápido que los normales, en la mitad del tiempo, si no es que más pronto. Según lo que sentí, JiMin tiene un bebé de un mes o menos en el vientre, el cual pudo haberse puesto en cualquier momento de septiembre, con eso presente, creo que los tres son candidatos.— concluyó HoSeok, ladeando el rostro y mirando la expresión que el menor de los Min realizó.

Suga al escucharlo sintió un burbujeo en su estómago, una sonrisa tonta apareció en su rostro y aunque la posibilidad era mínima para él, quiso imaginarse que definitivamente había una esperanza para que fuese suyo.

—¡Gracias!— grito el peli azul, tomándolo por las mejillas y besándole la frente, era bastante obvio lo emocionado que estaba.

YoonGi y Agust solo pudieron sonreír por sus acciones, esperaron a que dejara al mago en paz para abrazarse entre todos, la felicidad había llegado a sus vidas justo cuando JiMin apareció.

¿Cuántas cosas no habían pasado? Hilda logró el descanso, JungKook fue encontrado, acabaron con el vaticano, los tres hermanos recuperaron su humanidad y lo mejor de todo es que les volvió a dar la oportunidad de saber lo que es amar.

Este era su primer bebé por el momento, no sabían cómo funcionaria la reproducción de su pareja, pero ciertamente ya fuera uno o más, ellos recibirían todos los hijos que JiMin pudiera y quisiera darles.

—De haber sabido que estarían tan felices, me hubieran mantenido despierto.— reprocho la suave voz de JiMin, proviniendo de la puerta semiabierta.

Todos se separaron y giraron a verlo, los rostros de cada uno lo hicieron sonreír porque desbordaban emociones positivas. Llevó sus manos a su vientre y lo acarició, estaba realmente curioso de lo que el mago le había dicho y aunque aún no podía sentir a su bebé se encontraba feliz.

—No debes estar de pie.— le dijo HoSeok con tono agudo, llamando su atención.

YoonGi al escucharlo se acercó rápido a JiMin y lo cargo para llevarlo a la cama, tanto Agust como Suga le siguieron y JungKook junto a HoSeok se retiraron para darles su privacidad.

—Desde ahora tendremos que cuidarte mil veces más.— señaló el mayor, acomodándolo delicadamente sobre el colchón.

Suga fue a la par y lo cubrió con la sábana hasta el pecho, Agust no encontró con que ayudar, así que simplemente se sentó a su lado para acompañarlo. Los tres estaban realmente emocionados y JiMin quería carcajearse por ello, pero no podía hacerlo, su vientre dolía y temía lastimar al bebé.

—Descansa, Minnie, estaremos aquí.— aseguró Suga, dándole un beso en los pomposos labios y otro más en la frente.

—¿Dormirían conmigo?— pregunto JiMin tímidamente, entrecerrando sus ojitos, ya que muy apenas podía mantenerlos abiertos.

Agust asintió —Estaremos aquí, sueña tranquilo, amor.

JiMin murmuró un suave "gracias" a la vez que Suga y YoonGi se acomodaban a su alrededor, Agust se mantuvo en su posición, por si despertaba y requería su ayuda.

Estoy muy emocionada kyyyyy~