Jimin tomó un suspiro y dejó que sus pulmones se llenarán de aire, las manos le sudaban y sus piernas estaban temblando, uno porque era su boda y dos porque sería transmitida en vivo en el programa de televisión que presentaba SeokJin.

Jin quiso hacerles un homenaje al amor que existía entre él y Jungkook, todos recordaban a Park Jimin el joven estrella de soccer de la universidad de Stanford al que sus sueños se vinieron abajo por culpa de un homofóbico, pero SeokJin quería mostrarle al mundo a Park Jimin el hombre que luchó por sentimientos, al Jimin que no se dio por vencido, al Jimin que sin importar lo que la sociedad dijera logro ser feliz con la persona que amaba, el Jimin con muchos sueños por delante y un brillante futuro al lado del amor de su vida.

- ¿Listo cariño? -Su madre le preguntó con los ojos acuosos.

Jimin asintió dando una última mirada al espejo, su impecable traje blanco se veía elegante y muy hermoso, tomó la mano de su madre y salió de la habitación, estaba a punto de casarse con Jeon Jungkook ese chico que llegó a su vida haciéndolo dudar de todo, poniendo su mundo de cabeza, cambiando forma de pensar y enamorándolo con su ternura.

La boda se estaba realizando en un hermoso salón en Boston, Jimin bajaría por las escaleras de la derecha y Jungkook por la izquierda cada uno con su madre.

Cuando llegaron a su encuentro al final de las escaleras, ambos sentían que sus corazones podrían salirse de sus pechos, latían acelerados por el nerviosismo pero también de la emoción.

Jimin se sonrojó cuando Jungkook le ofreció su mano -Te ves hermoso sonrojado- le susurró Jungkook con una radiante sonrisa.

-Tu también estas muy guapo
- Le concedió Jimin mirando a los ojos.

Este era su momento perfecto, juntos caminaron hacia el altar donde el juez los esperaba.

Tomados de las manos olvidaron la presencia de todos a su alrededor las cámaras los apuntaban, flashes destellaban, pero ellos ya no sentían temor de mostrar su amor.

Sus familiares y amigos les daban miradas cálidas, Minji se limpiaba las lágrimas mientras sonreía, cuando estuvieron frente al juez y este empezó a dar su discurso, Jimin estaba atento pero con la mente y el corazón llenos de tantas emociones, no todos los días te casas con el amor de tu vida, su mente viajó hasta el día de la graduación donde Jungkook le propuso matrimonio, apenas se estaba recuperando de los golpes, las dolorosas terapias, pero Jungkook estuvo allí para Jimin brindándole todo ese amor, apoyo y comprensión que lo hicieron sentirse más fuerte que todo.

Jungkook con una sonrisa y sus ojos cristalizados tomó la manito de Jimin entre las suyas, sintiéndose el hombre más afortunado del planeta -Yo, Jeon Jungkook, te tomo a ti Park Jimin como mi hermoso esposo, para amarte y respetarte todos los días de mi vida, delante de todos quiero decirte que mi amor por ti siempre será sincero, puro y sin inhibiciones, porque no habrá fuerza alguna que logre apartarme de tu lado más que la muerte y aún más allá de ella te seguiré amando, siempre serás el número uno en mi corazón y en mi mente, te doy las gracias por permitirme entrar a tu vida, por entregarme tu corazón y adueñarte del mío, por ser mi felicidad, prometo dedicar cada segundo de mi vida para hacerte el ser humano más feliz del planeta, ser el motivo de tus sonrisas, eres más de lo que pude soñar, tu eres el centro de mi universo, te amo con mi alma y te amare eternamente- el pelinegro deslizó el anillo en el dedo de Jimin.

En el momento de decir sus votos Jimin sonrió y miró a su prometido a los ojos, al principio no tenía idea de que decir pero ahora después de escuchar a Jungkook sintió que las palabras correctas llegaron a su mente -Yo Park Jimin, te tomo a ti Jeon Jungkook como mi amado esposo, mi compañero de vida, quisiera decirte tantas cosas pero creo que las palabras no alcanzarían para explicarte lo que siento, desde el primer momento en que te vi, mi mundo cambio, tu llegaste a mi vida trayendo un hermoso arcoíris llenando de colores mi existencia, enseñándome que podía amar a una persona sin importar su género, contigo aprendí a dejar mis miedos y dudas atrás, porque si estas a mi lado me siento seguro, me siento en mi hogar, te volviste mi todo, y quiero seguir compartiendo cada instante de mi vida contigo, te amo, te amo como jamás imagine llegar a amar a una persona -La voz de Jimin empezó a sonar temblorosa mientras sus ojos ya estaban llenos de lágrimas por cada palabra, sentía que no podía seguir hablado con tantas emociones recorriendo su ser así que deslizó el anillo en el dedo de Jungkook.

-Por el poder que me confiere la ley los declaro esposos, pueden besarse -ordeno el juez.

Jimin y Jungkook se miraron acercándose lentamente, compartiendo el tan anhelado beso, cuando sus labios se rosaron sintieron como si fuera su primer beso, sin presión sin esconderse.

Los aplausos llegaron con mucho furor y ellos se separaron sonrientes, sintiéndose llenos de felicidad extrema, totalmente eufóricos, caminaron por el pasillo recibiendo las felicitaciones de todos sus invitados y familiares.

Anna abrazó a Jungkook entre lágrimas, no podía creer que su hijo menor fuera el primero en casarse, Robert lo estrecho en un fraternal abrazo dándole palmaditas en la espalda y deseándole lo mejor.

-Cuida mucho a mi niño - Le dijo Anna a Jimin acariciándole el rostro.

-Lo haré se lo prometo- le respondió Jimin abrazándola.

Después fueron los padres de Jimin quienes se acercaron, Shin Hye los envolvió a ambos en un abrazo con lágrimas en sus ojos, mientras que MinHo le tendió la mano a Jungkook y le dio un asentimiento de cabeza -Hijo Deseo que sean muy felices -

-Jimin, Jungkook felicidades, casi me hacen llorar con todo lo que dijeron, sé que serán muy felices juntos - Benjamín les saludo alegremente.

-Gracias Ben- le dijo Jimin sonriendo.

-No tienes que agradecer y nunca olviden que mi casa siempre será su casa -

-No sabes lo feliz que estoy por ti hermanito- Minji se colgó del cuello de Jimin -Se feliz Jiminnie-

-Gracias, en realidad sin ti nada de esto hubiera sido posible - le dijo Jimin, porque era cierto, si Minji no se hubiera enfermado, Jimin nunca se abría vestido de chica y Jungkook no sería parte de su vida.

Jimin se sintió mareado ante esa idea, ya había olvidado como era su vida sin Jungkook, y ni siquiera quería imaginarlo.

-Esta fue la ceremonia más hermosa en la que he estado - Chilló Tae y junto a Jin abrazaron a Jungkook y Jimin juntos.

Uno por uno se fueron acercando deseándoles lo mejor para su matrimonio, cuando pasaron al salón donde los invitados tomaron asiento, los brindis no se hicieron esperar.

-Amor- Jungkook le habló.

- ¿Si bebé? -
-Tengo curiosidad sobre algo-

- ¿Sobre qué amor? -

-Pues es que Minji y tu son del sur pero ninguno de los dos tiene acento sureño como sus padres o Benjamín-

Jimin se sonrojo - Antes era muy prejuicioso tú lo sabes, me importaba mucho lo que la gente pensara de mí, y cuando gane la beca deportiva para la universidad de Stanford, creí que debía cambiar para ser aceptado, hay personas que les parece que nuestro acento es gracioso y yo no quería que se burlaran de mi o de mi hermana así que practicamos como hablar "normal" - le confeso Jimin.

-Yo me habría enamorado de ti sin importarme tu acento Jimin-

-Lo se cariño, tu eres un alguien increíble- le dijo Jimin hablando sureño.

-Oh woow, pero que sexy te escuchas hablando así cariño - dijo Jungkook en un intento de imitar el acento de Jimin.

-A ti no te sale citadino - se burló Jimin tomando el rostro de Jungkook entre sus manos para darle un beso.

-Ya dejen eso para la luna de miel- dijo Tae pícaro acercándose junto a Hoseok.

-Nos iremos de luna de miel mañana, queremos pasar nuestra primera noche de casados en nuestra casa -informo Jimin.

-Con que piensan estrenar su propia cama- Namjoon habló a sus espaldas su brazo alrededor de la cintura de SeokJin.

- ¡Amor! - lo regaño Jin riendo -Su luna de miel será de ensueño conociendo países Europeos-

-En realidad seguiremos los partidos de la Champions - Dijo Jimin.

-Aish que poco románticos son- Se quejó Jin.

-Tendremos tiempo para todo, deportes, cultura y romance - Le dijo Jungkook besando la mejilla de Jimin, haciendo sonrojar al rubio.

El primer baile de los esposos fue un momento mágico, Jimin escondió su rostro en el cuello de Jungkook dejándole un beso allí, sus movimientos lentos y sincronizados, en realidad ellos sentía que no existía nadie más en el lugar, como si estuvieran flotando en las nubes rodeados de un arcoíris, sentían mariposas en el estómago que revoloteaban sin parar, ese sentimiento de seguridad, el mundo se podía ir al carajo pero si Jimin y Jungkook estaban juntos nada malo les pasaría todas esas sensaciones eran producto del efecto del amor.
Un amor puro y sin reservas, un amor que ellos harían crecer día tras día.

-Te amo- susurró Jimin al levantar su rostro y fijar sus ojos en los de su esposo.

-Te amo más- le respondió Jungkook, con sus ojos radiantes de felicidad.

Jungkook juntó sus labios en un dulce beso, siendo aplaudidos por todos los invitados, no importaba cuantos obstáculos vinieran de ahora en adelante ellos estarían siempre juntos.

TaeHyung entre llorando y sonriendo les tomo una foto mientras se besaban, Jin le paso un pañuelo para que enjugara sus lágrimas.

-Misión cumplida alíen-

-Misión cumplida princesa - contesto Tae con la voz quebrada por la emoción y orgulloso de haber sido parte de la hermosa historia de amor entre Jimin y Jungkook.

Hola mis amores realmente estoy feliz, triste y emocionada, tengo muchos sentimientos encontrados

Quiero darle las gracias por todo su apoyo a este proyecto, al principio tenía muchas dudas, ya que la mayoría de los personajes serian americanos, pero ustedes los acogieron dándole mucho amor a la historia realmente muchas gracias.

No se imaginan lo mucho que los amo y lo feliz que me siento al ser parte de su vida mediante mis historias gracias por existir y darme tanto amor.

Espero leernos en mis historias a futuro todos y cada uno de ustedes tienen un lugar especial en corazoncito de NeRak su loquita Potter.