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Capítulo 28

Jungkook miro a Jimin con los ojos muy abiertos y cristalinos, como si no pudiera creer lo que acababa de escuchar, su novio estando en una situación de crisis como esa, le había dicho que lo amaba, Jimin soltó una risita - Ahora deberías decirme lo mucho que me amas también - le sugirió.

Jungkook le beso la nariz que estaba un poco roja por llorar tanto -Te amo Jimin te amo con todo mi corazón, mi alma, mi ser, con todo lo que soy-

Jimin rio sonrojado -Eres tan cursi, y eso me encanta- se acomodó sobre el pecho de Jungkook, escuchando el ritmo acelerado del corazón de su novio, levanto la cabeza preocupado.

Jungkook rio -Solo estoy emocionado, no todos los días Park Jimin me confiesa que me ama- Jimin le dio un golpecito en el pecho y sonrió para volverse a acomodar sobre su novio.

Teniendo ese sentimiento de paz y calidez invadiéndolo, allí protegido en los brazos de Jungkook, Jimin sentía que podía enfrentarse al mundo, porque con su novio estaba seguro, si definitivamente así se siente el amor, pero el amor real ese que no tiene condiciones que todo lo soporta, ese tipo de amor que la mayoría de las persona busca pero muy pocos son los afortunados de tener, y Jimin se sentía de maravilla al ser el, uno de los afortunados.

El rubio no supo en que momento paso pero se quedó dormido y cuando volvió abrir los ojos estaba solo en la cama, parpadeo un poco, las persianas estaban cerradas así que la luz no le molesto mucho, escucho el agua correr en el baño, Jungkook estaba tomando una ducha, entonces miro su ropa, aun tenia puesto el uniforme de práctica, no olía mal pero había corrido y ahora se sentía pegajoso por el sudor, se levantó con la intensión de unirse a su novio para la ducha pero desafortunadamente la puerta del baño se abrió dejando ver a Jungkook con una toalla envuelta en su cintura mostrando su apetecible torso y con otra secaba su cabello el cual ahora que estaba mojado se veía más largo.

Jimin se mordió el labio inferior, - ¿Hace cuánto no te cortas el cabello Jungkook? -

-Uh, no lo sé amor, es que he estado muy ocupado ¿se ve muy mal? -

Jimin negó con la cabeza -Te ves sexy-

-Entonces lo dejare crecer un poco más - dijo pícaro Jungkook - Minnie pensé en que querías tomar una ducha, así que te prepare la tina para que puedas relajarte mientras yo bajo a prepararte algo de comer-

Jimin hizo un puchero no quería estar en la tina solo -No tengo mucha hambre-

-El primer juego esta solo a unos días tienes que alimentarte bien, hermoso, ¿Qué se te antoja?-

Jimin suspiro feliz Jungkook siempre quería cuidarlo -Esta bien, puedes prepararme cualquier cosa bebé- el apodo cariñoso salió sin pensarlo, Jungkook sonrió con una ceja arqueada.

Jimin se sonrojo y rápidamente atravesó el cuarto y entro al baño antes de que su novio pudiera decir alguna cosa, realmente había llamado a Jungkook, ¿bebé?

Dejando salir el aire que estaba conteniendo, empezó a desvestirse, la tina era amplia, un baño bastante grande el de su casa era practicante la mitad de este y no tenía una tina, entro al agua dejando que su cuerpo se relajara, un singular olor a rosas y frutas lleno sus fosas nasales, cerró los ojos disfrutando justo esto era lo que necesitaba para deshacerse de todo el estrés, aunque también podía pedirle un masaje a su novio estaba 100% confirmado que Jungkook era el mejor cuando de masajes se trataba.

Todavía se sentía un poco desanimado por la actitud del equipo, pero tenía que reunir fuerzas para mañana enfrentarlos de nuevo, decidido a no pensar en eso, tomo un suspiro llenando de aire sus pulmones y lo dejo salir lentamente un par de veces, dejando su cabeza en blanco.

Cuando salió del baño se sentía realmente bien, busco algo en el closet de Jungkook para ponerse, tomo un suéter negro de la inmensa colección que tenía su novio, y se lo coloco le llegaba a la mitad de los muslos y solo con eso se dejó caer en la cama, olía a Jungkook, apretó una almohada contra su pecho, inhalando ese aroma varonil que se sentía delicioso.

-Desearía ser esa almohada- Jungkook tenía un puchero, y en sus manos una charola con comida, unos sándwiches con jugo de naranja.

Jimin solo rio y dejo la almohada a un lado -Si vienes aquí podrías tomar el lugar de la almohada,

Jungkook no lo dudó ni un segundo, dejando la comida en la mesita se metió en la cama con su novio, el rubio de inmediato enterró su rostro en el pecho de Jungkook, el pelinegro lo envolvió en un abrazo - ¿Amor? - lo llamo Jimin.

- ¿Si? -

-Podrías darme un masaje, por favor- Jimin pidió sin levantar su rostro.

-Claro que si bebé, quítate el suéter y ponte boca abajo-

Jimin dudo un poco, él estaba completamente desnudo debajo del suéter, pero se deshizo de la prenda Jungkook ya lo había visto desnudo más de una vez, la mirada apreciativa que le dio el pelinegro lo hizo sonreír estaba claro que Jungkook estaba encantado de poner sus manos sobre el cuerpo desnudo de Jimin.

Las manos de Jungkook eran mágicas se deslizaban por su espalda de forma agradable, sobre sus hombros y omoplatos, haciendo a Jimin jadear de gusto.

Con los ojos cerrados disfrutaba de la atención hasta que las manos de Jungkook fueron remplazadas por unos labios que conocía bastante bien, Jimin suspiro encantado, los besos húmedos bajaron por su espalda baja, a sus glúteos haciendo que cada poro de su piel reaccionara creando un estremecimiento en su cuerpo.

Entonces algo que no se esperaba pasó, una lengua húmeda recorrió su entrada -Ahh- jadeo Jimin abriendo los ojos y apretando las sabanas.

Otro lamida y Jimin se sentía en las nubes, -Jung-Jungkook- gimoteo Jimin, la traviesa lengua de Jungkook jugueteaba en el borde de su entrada.

Jimin sentía que no era suficiente, ¡diablos! Jamás pensó que se sintiera tan bien hacer algo así, su cuerpo reaccionaba siempre a las caricias de Jungkook, su miembro llenándose necesitado, - ¿Te gusta bebé? -

-S-si, ahh Jung-Kookie necesito más- Jungkook abrió un poco más amplio a Jimin empujando su lengua contra la entrada de su novio, presionando, Jimin empezó a empujarse contra el rostro de Jungkook queriendo más, exigiendo más, el placer que estaba sintiendo era casi irreal, pero sólo esos roses no eran suficiente, cuando Jungkook alejo su lengua de su rosado agujero Jimin chillo protestando estaba tan caliente.

Unos segundos después la atención de Jungkook volvió a su entrada pero ahora con deseo a resbalosos llenos de lubricante, uno entró despacio paredes internas de Jimin envolviendo su dedo se sintió tan excitante que Jungkook casi quería correrse sólo con esa sensación, diablos quería estar dentro y muy profundo en su novio, pero debía prepararlo bien no quería hacerle daño.

Jimin gimió queriendo sentir otro dedo, que no se hizo esperar para unirse al primero tocando su próstata, frotándola y haciéndolo gemir sin pudor, Jungkook ingresó un tercero disfrutando del todo el placer que le daba a su novio.

Jimin mordió la almohada para ahogar sus jadeos, no sabía si había alguien más en la casa y que los escucharán sería vergonzoso,

- ¡Mierda Jungkook! - grito sin poder contenerse -Necesito más -Casi suplico.

Jungkook lo hizo voltear alejando sus dedos quedando entre sus pierna, sonrió amplio, era una vista preciosa, su novio con una gran erección totalmente excitado, el cabello aun húmedo por el reciente baño.

Se quitó la ropa que lo cubría en tiempo récord, Jimin se veía precioso y necesitado, por alguna razón eso lo excito demasiado, tomo un condón que había sacado junto al lubricante.

-No- la voz de Jimin fue casi un susurro- sin condón amor- pidió

Jungkook lo miro con sus ojos muy abiertos - ¿Estás seguro bebé? -

Jimin asintió con la cabeza - Te amo, y confió en ti, ambos somos deportistas nos hacen exámenes todo el tiempo, además sé que jamás me pondrías en peligro-

La confianza en la voz de Jimin hizo que Jungkook sintiera que su pecho explotaría de la emoción, Jimin se sentó en la cama y el mismo tomo el lubricante y lo esparció en toda la extensión erecta de su novio haciendo a Jungkook sisear, sus pupilas dilatadas.

Jimin volvió acostarse con las piernas abiertas entregándose por completo a Jungkook, que lo penetró de inmediato, dando embestidas llenas de energía y certeras

Las piernas de Jimin se envolvieron de inmediato en su cintura mientras veía el rostro lleno de placer de su novio, ¡diablos! Jimin necesitaba esto, sentirse unido a Jungkook siendo penetrado hasta lo más profundo de su ser, sentir que se pertenecían el uno al otro, Jungkook lo amaba tanto como Jimin lo amaba a él Pelinegro.

-Ji-min oh cielos bebé- gruño Jungkook con voz ronca mientras sus dedos se clavaban en la cintura de Jimin para mantenerlo en su lugar.

-Ah, Mhg Jungkook, -los jadeos de Jimin eran cada vez más altos, sus manos sosteniendo las sabanas apretadas con fuerza, el sudor baño sus cuerpos de nuevo sin importar que acaban de bañarse, sus cuerpos fundiéndose como uno sólo, el sonido que hacían sus pieles al chocar inundó la habitación.

La lujuria y excitación llevándolos a su propio paraíso, cada jadeo, cada respiración y latido de sus corazones mezcladas, creando una ola de placer en sus cuerpo, susurros, palabras inteligibles, y embestidas.

Jimin sentía corrientes en todo su cuerpo, la sensación de estar llegando lo invadió, un órgamo que lo hizo estremecerse apretando el miembro de Jungkook en su interior, Pelinegro gruño, descargándose en su interior llenándolo por completo de su esencia cálida y espesa.

El cuerpo de Jungkook cayó sobre el de Jimin, estremeciéndose los espasmos del orgasmo aun haciendo efecto, se unieron en un beso delicioso, que terminó con ternura una sonrisa cómplice, Jungkook escondió su rostro en el cuello de Jimin dejando besitos allí, mientras el rubio le acariciaba el cabello con ternura.

-Sé que sólo me pediste un masaje pero no pude contenerme, tenía tu cuerpo desnudo bajo mis manos - se justificó Jungkook

Jimin sonrió pícaro- En ningún momento pedí que te contuvieras Kookie, es el mejor masaje que he recibido -confesó Jimin.

Jungkook salió de el con cuidado se acomodaron con sus piernas entrelazadas sin importarles estar pegajosos y sudado - En ese caso puedo darte masajes más seguido- sugirió el Pelinegro con voz pícara.

Jimin le dio un golpe en el hombro a Jungkook pero dijo: -Me encantaría-

Jungkook sonrió acaricio las mejillas de Jimin -Te amo-

Jimin poso su mano sobre la de Jungkook - y yo a ti- contesto sin dudar.

Ellos sabían que mañana deberían enfrentar a todas las habladurías de la Universidad, al equipo de Jimin, y al mundo entero si era necesario, pero ahora en ese momento estando desnudos y abrazados después de hacer el amor, todo eso, poco les importaba mientras estuvieran juntos podrían hacerle frente a lo que sea.

Holi precioso bebés míos de mí, no se imaginan cuanto los amo, lo digo enserio puede que no los conozca pero ustedes todos y cada uno es una parte importante de mi corazoncito de pollo.

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