Abrir los ojos y encontrarse con el rostro de la persona que amas junto al tuyo ocupando la misma almohada era lo mejor que le podía pasar a una persona pensó Jungkook al despertar, había compartido la cama con Jimin, había hecho el amor con su novio, y saber que el había sido el primer hombre en explorar el cuerpo de Jimin de esa manera lo hizo sentirse demasiado afortunado.

Jimin era precioso en todo el sentido de la palabra, sus ojos, su nariz, su boca, mejillas abultadas, su cabello sedoso y brillantes como hebras de oro, decir que estaba enamorado era poco Jungkook estaba total e irremediablemente loco por Jimin sentía que cada fibra de su ser adoraba Jimin.

Para algunas personas amar de esa manera en tan poco tiempo era inconveniente, pero no para Jungkook, el pelinegro estaba seguro de que Jimin era la persona correcta para entregarle su corazón, con delicadeza acaricio el rubio cabello.

Jimin arrugo la nariz y abrió los ojos poco a poco encontrándose con la bonita sonrisa de Jungkook —Hola — Dijo con la voz ronca por el sueño.

—Hola tu— respondió Jungkook acercando sus labios en un beso de buenos días.

Jimin se permitió disfrutar de los labios de su novio antes de separarse y sonreír amplio, sentía una leve punzada en su parte trasera pero sólo era el recordatorio del acto íntimo de la noche anterior.

— ¿Que deseas para desayunar? — Pregunto Jungkook dulcemente.

—Cualquier cosa estará bien — respondió Jimin sonriente

—Duerme un poco más prepararé  el desayuno — le dijo Jungkook de forma tierna

Jimin asintió sonriendo y se acostó boca abajo envuelto entre las suaves sabanas, sintió un beso de Jungkook en su espalda desnuda que lo hizo sonreír.

Jungkook fue a la cocina a preparar la comida de su lindo novio, panqueques con miel, una tasa de chocolate caliente, ensalada de frutas con yogurt y estaba listo.

Regreso a la habitación con la bandeja, dejo la comida en la mesita y acaricio el cabello de su novio, este iba a ser el primer desayuno que compartirían juntos —Bebe hora de comer— susurró

—Mgmm—  gimió Jimin bostezando, abrió los ojos de a poco

—Hice un enorme panqueque para ti— Dijo Jungkook sonriendo.

Jimin sonrió y sentó en la cama siseo entre dientes le dolía — se ve delicioso — Dijo mirando la charola.

Jungkook la puso en la cama — ¿Te duele mucho? —Pregunto.

— ¡Cállate! —  Le gruño Jimin con una risa avergonzada.

Empezaron a comer tranquilamente, alimentándose el uno al otro y robándose besos dulces por la miel.

—No puedo creer que esto te parezca romántico, ella se enamora del zombi que se comió el cerebro de su novio — Dijo Jimin —¿además que el virus o lo que sea que tengan se cure con amor?, eso sí es demasiado — se habían quedado acurrucados  después del desayuno y Jungkook hizo funcionar el viejo televisor frente a la cama poniendo una película “Mi novio es un Zombi"

Jungkook también rio — Jiminnie, yo pienso que está película no hay que tomarla tan literal, porque un zombi no se puede curar con amor, es  más metafórico creo que nos enseña sobre el efecto del amor en una persona, por ejemplo el amor puede hacer que un deportista que se creía completamente heterosexual, le diera una oportunidad a un chico para salir juntos y darse cuenta que podía ser feliz con alguien de su mismo sexo — le dijo Jungkook con mucha convicción.

Jimin sonrió y escondió su rostro en el cuello de Jungkook totalmente sonrojado — sí que eres romántico y sensible chico Crepúsculo— le dijo a Jungkook sin mirarlo.

Jungkook soltó una carcajada — ¿cuándo dejaras de hacerme bullying porque mi película favorita es Crepúsculo? —

—Hasta que yo quiera soy tu novio y me aguantas— Jimin lleno de besos el rostro de Jungkook, dándose cuenta de que las apariencias realmente engañan, porque todo el que mirara físicamente a Jungkook sólo vería a un chico alto musculoso, que vestía con chaquetas de cuero y sobre su motocicleta tenía un aura de chico duro y malo incluso podría pasar a ser visto como un busca problemas, pero la personalidad de Jungkook era tan diferente, su novio era tierno, siempre tenía algo bonito para decirle, apasionado, dulce, paciente, y a pesar de que se notaba que su familia era muy adinerada Jungkook era sencillo siempre fijándose en los pequeños detalles.

Y aunque era  mucho más alto y fornido que Jimin, el pelinegro no era el típico machista, que se creía superior en la relación, porque no se trataba de quien de los dos era más dominante, lo que realmente les importaba era ser felices juntos, sentir que se pertenecían el uno al otro y Jimin nunca había sido tan feliz en una relación y adoraba los efectos que Jungkook con su amor había causado en él, en el último par de meses.

Jungkook miro a Jimin y le beso las mejillas, el rubio le sonrió de  forma adorable — Quiero decirle a los chicos del equipo sobre lo nuestro — le susurro Jimin

Jungkook lo miro a los ojos  — ¿estás seguro amor? — Pregunto Jungkook, salir del closet no era algo fácil para muchas personas, y sabía lo complicado que sería para un deportista de la talla de Park Jimin.

—Sí, Creo que si ellos se van a enterar en algún momento quiero ser yo quien se los diga, soy su capitán—

—Te apoyaré sin importar lo que decidas, estamos juntos en esto —Jungkook tomo la mano de Jimin y la entrelazo con la suya, Jimin afirmó el agarre y le robó un beso a su novio.

—¿Para ti fue fácil decirles a todos? — pregunto Jimin curioso.

—Bueno, como ya te lo había dicho mis padres me criaron con la mente abierta a todas las posibilidades, así que nunca me importó lo que los demás pensaran sobre mi sexualidad, en la universidad no muchos saben que soy bisexual, no porque sea un secreto simplemente nunca había salido con otro estudiante.

—O sea que prácticamente en la universidad saldremos del closet juntos— dijo Jimin.

Jungkook asintió — Siempre Juntos—

Jimin soltó una risita burlona.

—Realmente… ¿Crees que soy demasiado cursi? — pregunto Jungkook arrugado su nariz.

—Claro que no, así eres perfecto yo no soy muy del tipo romántico pero creo que juntos nos compenetramos muy bien como el Yin y el Yang -- Jimin tomo los dijes que adornaban sus collares.

—También eres romántico a tu manera — Dijo Jungkook riendo — Eres demasiado adorable, me encanta cuando sonríes y tus ojos desaparecen, tus pequeñas poquitas son preciosas, cuando estás enojado te vez encantador y que decir de sexy -Jungkook pasó una de sus manos por el bien formado trasero de Jimin.

El rubio sonrió pícaro y le robó un beso rápido a Jungkook – Quiero una ducha—

—Vamos por una ducha entonces — Jungkook se levantó primero estaba muy desnudo mostrando su sensual cuerpo, Jimin se mordió el labio inferior mirándolo de forma descarada.

— ¿Vamos? — pregunto

Jungkook le mostró una sonrisa coqueta — claro amor hay que ayudar al planeta ahorrando agua —

Jimin rio y se levantó también, mostrando su desnudez, su cuerpo era menos musculoso que el de Jungkook pero estaba en muy buena forma al ser un deportista, caminaron juntos al baño, la ducha era pequeña pero cabían los dos, Jungkook abrió la ducha dejando mojar sus cuerpos.

Jungkook tomo el shampoo y puso un poco en sus manos pasar pasarlas por el cabello de Jimin y  Jimin lo imitó, lo que comenzó como un inocente toque, se tornó en una caricia sensual cuando las manos de Jungkook se posaron en la nuca y de Jimin atrayéndolo a un beso.

Un beso arrebatador que los dejó sin aliento las manos enjabonadas de Jimin se posaron en la espalda de Jungkook, su erección clavándose en el muslo del pelinegro, Jungkook lo empujó un poco contra la pared sus manos a cada lado de la cabeza de Jimin mientras una de sus piernas estaba entre las del rubio.

Una muy caliente batalla de lenguas surgió, de forma sensual el vapor envolviéndolos, Jungkook se tomó la libertad de tomar ambas manos de Jimin y ponerlas sobre la cabeza del rubio, sosteniéndolas con una de sus manos y con la otra recorrió de manera lenta la cintura y el vientre de Jimin mientras dejaba besos húmedos en su cuello.

— Eres tan delicioso Jimin — susurro en oído del rubio para morder su lóbulo y sacarle un muy sonoro jadeo.

Jimin miro los ojos llenos de deseo de Jungkook y simplemente se perdió en ellos, la mano de Jungkook subió tentativamente por el vientre del rubio acariciando sus pezones, Jimin gimió encantado, los labios de Jungkook volvieron al cuello del rubio para lamer la mojada y tersa piel, subió con su lengua a su oreja dando lamidas.

Jimin se estremeció sintiendo sus piernas como gelatina, Jungkook sí que sabía cómo descubrir sus puntos débiles, tuvo que soltarse y abrazar el cuello de su novio para no caer, cuando la mano de Jungkook acaricio su miembro.

—¡Ah Jungkook! — gimió Jimin para atraer de nuevo los labios del pelinegro a los suyos.

Imposible mantener sus lenguas quietas, buscaban invadir la cavidad bucal del otro mientras sus miembros se rozaban, sus pulsos acelerados, Jimin fue volteado su rostro ahora estaba contra la pared mientras los húmedos besos de Jungkook recorrían su espalda —Kookie, quiero…

—Yo sé lo que quieres amor y te lo daré— susurró con voz ronca Jungkook en su oído.

Podía sentir la dureza de Jungkook en su trasero y se moría de ganas por estar unido a su novio de nuevo, sintió los dedos de Jungkook juguetear en su entrada, haciendo exhalar  con rapidez la respiración de Jungkook en su nuca era pesada y cargada de deseo la lujuria los envolvía, Jimin sentía un cosquilleo en su vientre bajo.

En ese momento los dedos de Jungkook fueron reemplazados por el miembro del pelinegro, Jimin arqueo la espalda por el ardor de la primera embestida, Jungkook no se movió por un momento, dejando besos en el cuello y hombros de Jimin.

Los movimientos lentos, un vaivén rítmico que tenía a Jimin en las nubes pero todo fue al tripe de placentero cuando sintió la mano de Jungkook rodear su miembro y masturbarlo al mismo ritmo de las embestidas.

Jimin gimió con la boca abierta sin cesar y sin pudor — Oh si, Jungkook más así—

Jungkook embistió más profundo encontrando el punto de Jimin, haciendo al rubio gritar de placer —¿Así te gusta? — Pregunto en el oído de Jimin su aliento caliente penetró hasta lo más profundo.

—Sí, más ahí—  jadeaba con la boca abierta

Unas estocadas más y Jimin supo que no soportaría más sucumbió al orgasmo siendo sostenido por Jungkook su cuerpo tembloroso contra el pecho del pelinegro dejo llevar por todas las sensaciones, Jungkook llegó al clímax segundos después llenando el condón que afortunadamente había dejado en el baño.

Salió del rubio, volteándolo para mirarse el rostro, juntando sus frentes  con una sonrisa satisfecha, unieron sus labios de forma lenta dejaron que el agua los siguiera mojando mientras se besaban, dentro de unas horas tendrían que regresar a la ciudad, pero ambos siendo consciente de que esos momentos vividos juntos en la cabaña permanecerían en sus mentes por siempre.

                           ♡

Estando en la puerta de su casa Jimin pronunció los labios en un puchero, regresar a la ciudad no era lo que deseaba, le  gustaría haberse quedado en esa cabaña al menos unos días más, disfrutando de la compañía de Jungkook sólo los dos.

Así que sin importar si los vecinos y los que pasaban por allí lo veían, pasó sus brazos por el cuello de Jungkook y roso sus narices juntas, su amor no era crimen para seguir ocultándolo, el amor es algo puro, que te llena de fe y esperanza, el amor es algo por lo que vale luchar y Jimin estaba dispuesto a dejar todos esos estereotipos de lado y jugársela toda por el amor que Jungkook le ofrecía.

—No quiero que te vayas— Dijo Jimin con toda sinceridad

—Tampoco quiero irme— respondió Jungkook bajando sus manos de la cintura de Jimin a su trasero.

Jimin soltó una risita —Creo que mi cintura está un poco más arriba—

—Lo sé, pero me encanta tu trasero, es enorme y perfecto —

Jimin se puso rojo, el rubio se preguntaba cuando dejaría de sonrojarse por los comentarios de Jungkook —Quédate ¿Si? — susurro para No seguir con el tema de su trasero.

—Lo haría bebé pero creo que debo ir a casa por ropa limpia—

Jimin enterró su rostro en el pecho de Jungkook —Esta no huele tan mal—

Jungkook se rio acariciando descaradamente los glúteos de Jimin, él  tampoco quería irse pero si necesitaba ropa, se lamentó no haber tenido tiempo ayer para buscar prendas adicionales antes de irse con su novio  y estaba comprobado que la ropa de Jimin le quedaba demasiado pequeña.

—Qué tal si voy a mi casa, regreso para llevarte al trabajo y te ayudo a atender la barra – Le propuso a Jimin, el rubio era demasiado adorable.

—Está bien  pero, traes ropa para quedarte a dormir después que salgamos del club—

—Trato hecho — acordó Jungkook para acercar sus labios, besarse de forma lenta y profunda, cuando la lengua de Jungkook invadió la boca de Jimin este se derrito contra el pecho del pelinegro.

Jungkook lo sostuvo mientras sonreían entre besos, al separarse se dieron un mirada cómplice, el pelinegro le dio una nalgada a Jimin, —Lleva tu sexy trasero adentro— Dijo Jungkook pícaro

Jimin le dio una mirada de reproche — aún me duele —

—Después de trabajar te lo besare todito — Jungkook le guiño un ojo para subir a la moto.

Jimin entró de inmediato a casa encontrándose con TaeHyung sosteniendo una cámara, no dejo ni siquiera que el rubio hablará cuando subió corriendo las escaleras gritando — ¡Jinnie princesa! ¡Quiero mis 500 dólares tengo pruebas de que gane la apuesta!—

Hola creaturas hermosas mías, quiero decirles que los amo muchisisimo y que aquí estoy dejándoles este capítulo lleno de amor para mis bebes.

Espero que lo hayan disfrutado nos leemos pronto preciosuras.