Jimin jamás en su vida había deseado tanto que el entrenador Watson se callara y lo dejara ir, el partido de hockey había empezado hacia ya 10 minutos, y Jimin estaba seguro que Jeon se decepciono al no verlo allí, el si iba a ir pero su coach lo llamo y empezó a darle consejos sobre el partido que sería dentro de pocos días, ¡Estaba en un jodido dilema!, no quería ser grosero con su mentor e irse sin escucharle, pero tampoco podía faltarle a Jungkook después de haberle dicho que estaría ahí para verlo jugar.

-Llevamos 3 años seguidos ganando nuestra conferencia, tenemos todo para triunfar en la pacific-12 este año también, y pasar con buen ánimo para la NCAA Park, ¿Me estas escuchando Park? - Pregunto el entrenador.

-Sí, si claro coach-Respondió algo aturdido Jimin.

-Bueno y respecto a lo de White, no lo cambiaré de flanco el es un excelente jugador pero sólo se acostumbró a jugar por derecha quiero que sea más autónomo y versátil en el campo, es por su bien se lo que hago Park-

-Lo se coach, por eso hemos estado trabajando en ello los últimos entrenamientos y Jeremy ha mejorado bastante - dijo mirando su reloj por inercia.

Cosa que no pasó desapercibida por el coach - ¿Tienes un compromiso Jimin? -

-No, bueno si, es que le dije a un amigo que iría a ver el partido de hockey- Dijo Jimin, aunque su mente gritaba que la palabra "amigo" estaba mal en la frase demasiado mal.

-Ah, ¿Jeon?, he escuchado a los chicos decir que eres muy amigo del chico, es el capitán de ese equipo muy buen deportista- Dijo el coach.

Jimin se quedó rígido por un momento, ¿Sus compañeros hablaban sobre su cercanía con Jeon?, a tal punto que el mismo entrenador estaba al tanto de eso, sintió su estómago revolverse, no estaba preparado para "salir del closet" como decían coloquialmente.

-Park pareces un poco distraído hoy, ve a ver ese juego de hockey, el partido está cerca pero no te estreses es lo peor que puedes hacer, ten una buena noche muchacho- le dijo despidiéndose

-Usted igual coach- respondió Jimin mordiéndose el labio inferior al caminar por los pasillos rumbo a la pista de hielo, negó con la cabeza ante los pensamientos que rondaban su mente, no era importante ahora lo que pensara la gente de su cercanía con Jeon, lo que era importante era llegar y verlo jugar.

Cuando entró vio como todas los puestos estaban llenos de gente alentando al equipo, a pesar de ser sólo un partido de preparación, no sabía dónde ubicarse hasta que vio a TaeHyung y Jin con pompones en las manos haciéndole señas al parecer habían reservado un puesto para el, se acercó mirando el partido hasta llegar donde el par de chicos.

-Creíamos que no llegarías Jimin, tu Chico a estado bastante distraído desde que el juego inicio lo han mallugado un poco, esas bestias con la que están jugando, al parecer no saben lo que es un juego amistoso- se quejó Tae.

-Su carita era muy triste cuando el juego dio inicio Jungkook miro a todos lados y tú no estabas- le contó Jin.

Jimin se maldito a si mismo en su interior al imaginárselo, debió decirle desde un principio al coach que estaba ocupado y no podía hablar, había decepcionado a su guapo jugador de Hockey, y se sintió terrible por ello, el juego siguió su curso, Jimin vio como Jungkook lanzó el puck a la portería, y fallo, se mordió el labio inferir.

~Mírame, por favor mírame~ pedía de manera mental, quería que Jungkook supiera que el estaba allí, aunque llegó un poco tarde, estaba allí para apoyarlo.

Otra jugada más y Jungkook casi pierde el equilibrio contra uno de los defensas contrarios, el había visto las prácticas de hockey Jungkook era de los mejores, pero había algo mal hoy ¡Maldición Jungkook mírame! Casi grito, en ese momento.

Y tal vez funcionó porque el pelinegro poso su mirada en ese momento hacia esa parte de las gradas, Jimin de puso de pie y lo saludo levantando ambos pulgares, Jungkook le sonrió amplio y algo en su mirada cambio.

Jungkook empezó a jugar como es debido, como el rey de la pista, marcando anotaciones o asistiendo a sus compañeros, y cada vez que tenía oportunidad miraba hacia Jimin que le brindaba una sonrisa y celebraba sus anotaciones, el rubio estaba muy atento al juego, para ser más precisos atento a su chico.

Al final el partido termino a favor de Stanford, Jungkook como era su costumbre hizo una reverencia hacia su público y se fue al camerino con sus compañeros, Jimin no sabía dónde esperarlo así que iba al estacionamiento como era su costumbre, pero escucho a SeokJin gritar su nombre, se dio la vuelta y el chico venía una hermosa sonrisa en los labios y le lanzó unas llaves.

-Salón de disfraces de teatro, recompensa a tu Chico por haber ganado y discúlpate por llegar tarde- le dijo sonriendo pícaro y le guiño un ojo para seguir caminando.

Jimin miro las llaves en sus manos y se mordió el labio inferior, ¿Qué se supone que harían allí?, las imágenes de lo que podían hacer llegaron a su mente haciéndolo sonrojar.

Saco su celular le mando un mensaje a Jungkook diciéndole donde estaría y que lo esperaba allí, en el salón de disfraces de teatro había un espejo, reviso su apariencia y aprobó como se veía, su corazón empezó a latir rápido y fuerte, por la expectativa, además estaban en la Universidad, Jimin se sentía ansioso pero quería hacer esto enserio deseaba hacer esto.

Este era su momento de ser valiente, cuando la puerta se abrió dejando ver a un Pelinegro con el cabello enmarañado y unos Jeans rasgados y una camiseta negra, el impulso lo llevo a jalarlo hacia adentro cerrando la puerta con seguro, Jimin sabía que si hablaba su valentía se esfumaría y terminaría echo un manojo de nervios, Jungkook lo miro confundido y arqueo una ceja estaba a punto de decir algo pero Jimin, se puso de puntitas y estampo sus labios juntos, sorprendiendo a Jeon que tardo exactamente tres segundo en reaccionar de la misma manera ansioso posando sus manos en la cintura.

El beso era perfecto, sus labios moviéndose al compás, suspiros de ambos, los brazos de Jimin rodearon el cuello de Jungkook para profundizar, sus lenguas jugando poco a poco fueron retrocediendo hasta que Jungkook quedo entre un mesón y Jimin, simplemente disfrutando del otro, solo cuando les fue imposible respirar se separaron jadeantes.

-Jimin- Dijo Jungkook sonriendo encantado- siento que tus besos cada vez son más deliciosos y adictivos -

Jimin se sonrojo como lo hacía siempre e hizo algo tan cursi que jamás pensó que haría, escondió su rostro en el cuello de Jungkook abrazándolo fuerte, -Perdón por llegar tarde el coach me necesitaba y felicidades por ganar - dijo bajito.

Jungkook sonrió de forma adorable y le abrazo atrayéndolo más a su cuerpo si eso era posible -No tienes que pedir perdón, y gracias por estar allí para verme ganar -

-Mereces un premio- susurro Jimin incapaz de mirar a Jungkook a los ojos.

-Tengo mi premio entre mis brazos, eso es más que suficiente - dijo Jungkook con tanta ternura, su voz sonó tan cargada de ¿amor?, Jimin se estremeció ante esa idea de Jungkook amándolo, porque realmente se sentía bien con ello, tal vez era muy apresurado pensar en eso, pero no pudo evitar hacerlo.

Saco su rostro del escondite y miro a Jungkook a los ojos, ¿Cómo ese chico de cabello negro y hermosa sonrisa adorable, había logrado reducir a Park Jimin capitán del equipo de soccer a sonrojos, nervios de un colegial, y sentimientos cursis?, el rubio no tenía idea, pero ya Jungkook se había escabullido, derribando todos los obstáculos y prejuicios y estaba haciéndose un lugar en el corazón de Jimin.

Sus rostros se acercaron de nuevo para un beso, las manos de Jimin sostenían el rostro de Jungkook serrando los ojos para disfrutarse mejor, el beso inicio lento y suave pero a medido que pasaban los minutos, sus cuerpos querían más, sus lenguas se rosaron de una manera demasiado caliente, haciéndoles sacar un gemido, las manos de Jungkook se escabulleron bajo la camisa de Jimin.

Pero el rubio seguía teniendo el control de la situación, sus cuerpos empezaron a rozarse en los lugares correctos haciendo que la habitación se sintiera demasiado caliente de pronto, los besos de Jimin bajaron por la mandíbula de Jungkook, hasta su manzana de Adán, mordisqueando un poco aquí y allá, simplemente dejándose llevar.

Sacándole gemidos a su chico pelinegro, diablos esto se estaba saliendo de control rápidamente sus caderas empezaron a moverse y frotarse hasta sentir la dureza dentro de sus pantalones, Jimin sabía lo que quería hacer, su mano estaba temblando pero los gemidos rotos de Jungkook lo animaban a seguir, llevo la mano al broche del pantalón de Jeon, acariciando la dureza por encima de la tela, sacando jadeos roncos de boca de Jungkook.

Jimin llevo ambas manos para liberar la erección por completo, tomando por sorpresa Jungkook que lo miro con pupilas dilatadas, sus ojos oscuros vidriosos y llenos de deseos, ¡Diablos! Jungkook la tenía bastante grande era de esperarse, su miembro estaba completamente erguido y goteante.

-Ji-Jimin -Jadeo cuando el rubio envolvió su mano en su erección, y empezó a masturbarlo lenta y tortuosamente delicioso.

Jimin estaba feliz viendo como Jungkook estaba hecho un mar de jadeos y gemidos su cabeza hacia atrás y sus ojos cerrados mientras se sostenía del mesón, el miembro de Jungkook estaba caliente y tan duro como roca, Jimin miro el rojo glande y se pasó la lengua por los labios, realmente no lo pensó, el jamás en su vida había hecho una mamada y nunca se imaginó hacer una, pero ahí estaba pasando un primer lengüetazo.

Haciendo que el cuerpo de Jungkook temblara y abrieron los ojos con el pecho subiendo y bajando por lo irregular de su respiración -Jimin, no tienes por qué hacerlo- dijo entrecortada, su voz sonó rasposa, maldición casi se corre con solo sentir la lengua de Jimin sobre su extensión.

El rubio lo miro decidido, -No tengo, pero quiero hacerlo- dijo extasiado, volviendo a su trabajo, le dio otra probada.

El sabor no era desagradable, y tomo todo lo que cupo, intento lo mejor que pudo, lamiendo y succionando imitando los movimientos de Jungkook aquella noche, el miembro de Jungkook en su boca se sentía bien, Jimin descubrió que le gustaba lo que estaba haciendo, empezó a sacar y meter el miembro en su boca a un ritmo excitante, fascinado por tener a Jeon a su merced, no pudo evitarlo y llevo una de sus manos a su propia entrepierna.

Para Jungkook no había nada mejor en ese momento, la imagen más excitante que guardaría en su memoria, Jimin con mejillas sonrojadas, y labios rojos e hinchados por los besos engullendo toda su extensión viendo el rostro de satisfacción del hermoso rubio concentrado.

Estaba haciendo un gran esfuerzo por no empujar sus caderas contra la boca de Jimin, quería dejarle el control al rubio, su cuerpo ardía como si estuviera en medio del fuego, no podía evitar jadear.

Jimin sentía un poco su mandíbula cansada al no estar acostumbrado, volvió a masturbar a Jungkook, mientras lamia el glande y cada gota de presemen, era tan excitante, que estaba a punto de correrse con solo ver el rostro lleno de lujuria de Jungkook.

Jeon estaba así por él, el cuerpo del pelinegro empezó sentir una corriente -Ah, Jimin yo...-Jungkook No termino de decirlo porque ya estaba corriéndose.

Jimin sintió toda la esencia caliente de Jungkook pasar por su garganta, y la degusto en su paladar, y le gusto un poco demasiado lamio hasta la última gota, viendo satisfecho como Jungkook se recuperaba de su orgasmo, se levantó mirando a Jungkook a los ojos este pego sus frentes juntas, mientras guardaba su miembro en los pantalones -Estuvo increíble- dijo jadeante.

Jimin sonrió orgulloso - ¿Realmente no estuvo mal?, yo nunca...

-Estuviste perfecto -

Jimin no pudo evitar sonrojarse más -Creo que necesito ir a mi casillero por ropa interior y otro pantalón de repuesto- confeso avergonzado

-Eres adorable- Jungkook beso la punta de la pequeña y respingona nariz de Jimin -Eres lo mejor que me ha pasado Jimin, y creo que es el momento, hemos avanzado, nos conocemos un poco más, me gustas demasiado, y te aseguro que la palabra "gustar" ya no es suficiente, yo no creo que existan palabras para describir lo que siento cuando miro tus ojos, sé que muchas chicas de esta universidad me odiaran pero- Jungkook tomo aire había practicado cientos de veces en el espejo.

Jimin lo miraba atento su corazón latiendo a un ritmo acelerado tenía idea de a donde quería llegar Jungkook con lo que estaba diciendo, y estaba muy emocionado, el pelinegro se veía demasiado tierno estando nervioso. Cómo si Jimin fuera a decirle que no, al contrario el rubio estaba un poco desesperado esperando la pregunta.

Jungkook continuo - He estado esperando el momento perfecto, algo planeado, pero creo que solo perdí tiempo, tenemos el ahora no es lo más romántico pero... Jimin se mi novio ¿por favor? -

Jimin sonrió de manera tierna ante las palabras de Jungkook, no tenía nada que pensar, es cierto a veces pasamos nuestra vida esperando un momento perfecto para hacer algo, y al final nunca se llega a realizarlo, es mejor vivir un día a la vez y disfrutarlo al máximo, ¿Qué pasara mañana? Quién diablos sabe, el momento es ahora, ellos estaban juntos en ese instante encerrados en un salón de disfraces, después de hacer algo muy caliente y para ambos no existía un lugar o momento más perfecto que este -Claro que si Jeon, quiero ser tu novio- Respondió escondiendo su rostro en el pecho del pelinegro.

Se quedaron por un momento abrazados, sintiéndose cálidos en los brazos del otro, Jimin dejo por un momento de pensar en lo que dirían los demás, porque cada vez estaba más convencido de que estar con Jungkook era más que lo correcto, era lo que realmente lo hacía feliz.

-Me cambio y vayamos al cine, quiero ver una película animada- Pidió Jimin después de un rato.

- ¿Enserio quieres ir a ver una película infantil después de lo que hicimos aquí? - Pregunto riendo.

Jimin solo hizo un puchero y se encogió de hombros -Solo quiero ir a ver una película con mi novio -

Y la sonrisa de ambos no pudo ser más grande ante esas palabras, ellos eran novios realmente ahora lo eran.

Holi mis amores lindos amándolos más que nunca

Att: Su loquita Potter...

Besos bebés gracias por leer