¿Ben me estaba... Abrazando...? Sus brazos rodeaban mi cuerpo dándome una calidez que... Me hacía sentir... Conforme... Correspondí de apoco, mientras me escondía en su pecho aún con lágrimas.

-___... Lo siento...Creo... Por... No hacer nada al respecto... Sabiendo cómo... Te sientes... O una parte de cómo te sientes.... - negué leve.

—No te disculpes... Sabía perfectamente que no soy nada incluso para mí madre...— el acarició mi espalda y se apoyo en mi hombro.

-Sí, pero, no digas eso...-

— Ben... ¿No me Ibas a matar...? Hazlo ahora... Por favor...— Se mantuvo callado por un tiempo y sacó un cuchillo, la punta de esta tocaba mi espalda, lo miré esperando a que me apuñalara.

Guardó el cuchillo y me miro - No... No, voy a hacerlo...- se mantuvo serio.

— ¿Por qué no lo haces? Hazlo... Por favor... — Le miré suplicando

-No, no lo voy a hacer, ___... Quiero matarte cuando estés del todo bien... ¿Te puedo hacer una pregunta?- hice un sonido de aprobación -¿Cómo te sientes...?-

— ¿Cómo me siento...?— asintió —... Ni yo lo sé... Todo es tan monótono, parece que fuese un mismo día, no hay un día que no esté... Triste... Y... Insegura... Mirarme al espejo para mí es un castigo, siento tanta rabia por ser tan impotente... ¿Sabes? A veces... Las lágrimas salen solas, sin esfuerzo... Otras veces, salen y no terminan, no sabes cuantas noches... He llorado en mi cama, intentando saber que me falta... Me siento tan vacía...— mis lágrimas no paraban de salir ante esa declaración— ¿Qué me falta? ¿Amigos que me acepten y no me critiquen por como soy...? ¿El amor de mi madre? ¿Un padre quizás? No sé... Todo se volvió tan... Blanco y negro...— me quedé callada— me siento tan agotada... Ben... Esto... ¿Esto es una etapa, verdad? Dime que esto se me Pasará... — sentí como apretada el brazo algo fuerte, aun así, tenía su cara de siempre.

-Si... Esto... Tan solo es una etapa... No te preocupes... Te ayudaré a superar esta etapa... ¿Ok?- asentí leve, por un momento vi como su cara tenía una sonrisa maliciosa pero esta desapareció en menos de un segundo.

—Gracias... Ben...— el negó leve

-No debes de dármelas...- me dejó de abrazar y se levantó para luego hacerme levantar a mí también.

Me tumbé en la cama, miré al techo pensativa, seguramente se hartara de mi... Todos se aburren de mí, yo me cansé de mi al no poder comprenderme, todos me aborrecen, yo me aborrezco, la gran mayoría tienen amigos, yo no los tengo, todos se siente llenos... Yo no...

Mis lamentos empezaron a salir nuevamente, me tape los ojos con mi brazo mientras seguí lloriqueando.

—m-me siento tan... Débil... —susurré levemente, sentí como la otra mitad de la cama estaba Ben, me volvió a abrazar y me apoyó en su pecho. —Me odio...—

Pasaron los segundos, minutos, horas, días, que se repitió esta situación, casi siempre me la pasaba llorando en el pecho de Ben recostada en la cama de mi cuarto, otra veces, me lamentaba tumbada en el suelo de mi cuarto, solo sé llorar y llorar...

Esta vez, me hallaba sentada en el regazo de Ben, en el suelo, mis ojos tenía unas pequeñas lágrimas, estaba todo tan silencioso, Ben acariciaba mi espalda con suavidad.

—Ben... Me he dado cuenta de algo... Hay una línea muy fina entre.. "Quiero desaparecer" y "me mato en esta noche"...— Ben se quedó en silencio e hizo que le mirará a los ojos.

-___, tu no te vas a suicidar... ¿Vale? No soy bueno en dar charlas de estos estúpidos temas, pero, este caso, lo requiere, y mucho- me iba a garrar de las mejillas pero, se quedo un momento quieto para luego no tocarme la cara- tú tienes a gente que te quiere, y mucho, aunque no se nota-

—Nadie me quiere... Y si te refieres a mis hermanas y madre. Mira... Ya sabes qué pasó con mi madre y mis hermanas me echaron la culpa a mí, el único que se "preocupa" por mí... Eres tú... Pero, lo haces por pena, Admítelo...—

-no lo hago por lástima -

—Eso díselo a otra... — me abracé a mi misma —No sé qué quieres exactamente con esto... Seguramente me quieres más rota de lo que estoy... Admítelo...— ya empecé a llorar nuevamente, no soy buena ni para aguantar las lágrimas— ¡Venga! ¡Matadme! ¡O L-lo haré yo misma!— Ben secó mis lágrimas y me acarició la cabeza.

-Ya, tranquila. - Se levanto, para luego levantarme a mi - Vístete y dame tu móvil-

— ¿Para qué...?—

-Vas a salir con tus amigas, voy a hacer que te la pases bien- agarró mi móvil con una sonrisa leve.

—Ben... P-pero— me interrumpió para decir:

-¡Nada de peros! Vas a divertirte, con una salida lo pasaras bien- miro los contactos de mi móvil, no había ninguno, ya que, los bloqueé y borré todos, no quería saber nada de ninguno de ellos... - Eh... ¿No tienes ningún contacto...? Eres más antisocial de lo que pensé...- susurró eso último pero lo escuché perfectamente. Me tumbé en mi cama, y cerré mis ojos, dispuesta a dormir pero Ben me agarró como princesa.

-No vas a dormir, vas a salir conmigo, no conozco el lugar que estamos o que pueblo es, pero vamos a salir y voy a hacer que te lo pases bien- me sentó en la silla del escritorio y abrió la puerta de mi armario, donde empezó a buscar ropa que le gustase, luego de minutos, agarró una camisa de tirantes gris oscuro, unos pantalones vaqueros Largo rotos, y una chaqueta corta de color rosa grisáceo.

-Hm... Ponte esto, yo ahora vuelvo- sonrió leve para luego desaparecer, me quite la ropa para después ponerme esta, y recostarme en la cama.

—No creo que pueda si quiera salir de mi cuarto... Estas semanas ni si quiera salí de mi habitación... No comí casi nada, aunque... Ben me hacía comer, es tan molesto....—

-Más molesto seré, ____, vas a ser una persona normal, O un intento de esta.- Mire a Ben que estaba apoyado en las puertas del armario, esta vez con ropa diferente, seguía con su gorro largo verde, pero, esta vez con una camiseta verde claro con el símbolo de la trifuerza de Zelda, seguramente un jersey o algo parecido debajo de la camiseta, era de color verde oscuro, pantalones vaqueros de color algo apagado, y unas converses verdes-¿Te gusta? Estoy más acostumbrado a llevar mi ropa de link y eso- Sonreía mientras me miraba esperando mi respuesta.

—...Te ves igual de feo que nunca, la fealdad no cambia si te cambias de ropa—

-... Ay.... Que insensible eres- dijo mientras una gota de sudor le resbalaba por su mejilla -Y yo creyendo que te gustaría...- Hizo una pose dramática mientras hacía el que lloraba, vaya lagrimas de cocodrilo...

—Sí, si... — Me acomodé en mi cama mientras me tapaba, Ben se acercó, y de un movimiento rápido, me sentó en la silla del escritorio, me comenzó a peinar con un cepillo que no sé de donde lo sacó... —¿De dónde sacaste el cepillo?—

-¿Sabes que yo también tengo casa, no?- Dijo con un tono burlón mientras peinaba mi cabello -¿Eres más de coletas, moños o qué?-

—Casi siempre lo tengo suelto...—

-Oh, vale.... Un momento, ¿Al menos te lavas el cabello?- Me quedé callada y el dejo de peinarme -Ve a ducharte, ahora-

—Eso implica moverme... No quiero...— me miró de una forma un tanto asesina

-Ve a ducharte ahora- suspiré leve, agarre unas bragas y un sujetador y me dirigí con cansancio al cuarto de baño. Entré para posteriormente cerrar la puerta con pestillo, llené la bañera con agua caliente para luego meterme.

—No sé por qué quiere que me bañe... O que coma... O salga... ¿Qué gana el con eso...?— me recosté en la bañera mientras cerraba mis ojos lentamente, nuevamente tenía sueño...

Hasta que un segundo a otro, me quedé dormida, al principio estaba tan cómoda, el agua caliente me relajaba mientras me dormía, pero, sentí una sensación de ahogo, sentí como el agua empezó a llenar mis pulmones rápidamente, Quería salirme de la bañera, pero no podía, me estaba ahogando, ¿Así moriré? ¿Moriré de una forma tan... Patética cómo yo?

///Fin del capítulo///