MINI-MARATON 2/2

Dedicado a -Lullabae- espero que te guste 😉

Todo empezó sin que le diera la menor importancia.

Si T/n vomitó el café un día por la mañana, antes de ir a trabajar, sólo fue porque a veces tenía el estómago mas delicado de lo normal y el café le había salido especialmente cargado ese día.

Y cuando pasó lo mismo la noche siguiente y acabó arrodillada junto al váter expulsando la pizza que acababa de comer, pensó que se trataba de algún virus estomacal.

Los días siguientes sobrevivió a base de arroz y sopas y los síntomas desaparecieron, por lo que no le dio mayor importancia.

Pero cuando los días pasaron y volvió a sentirse mal y cuando los síntomas empeoraron cada vez que vomitaba venían acompañados de mareos sin causa aparente... Empezó a preocuparse de verdad.

Habían pasado casi diez días desde que empezó a sentir los síntomas y decidió que era hora de acudir a un chequeo médico y con todo la discreción que pudo le pidió ayuda a Banner.

Unos simples análisis de sangre y orina revelaron la causa de su malestar.

Tenía una leve anemia debido a que estaba embarazada de unas cinco semanas.

Al principio no supo como reaccionar.

Tenía una relación estable con Scott Lang desde hacía dos años y medio, vivían juntos desde hacía un año y trabajaba para los Vengadores desde hacía siete años.

Nunca hablaron de hijos, ni siquiera de casarse.
Pero sabía que a Scott le gustaría la idea de tener otro hijo, le encantaban los niños, el problema era la hija que tenía Scott.

Cassie era adorable, una niña amorosa, risueña y el ojito derecho de Scott.

Pero tú nunca te planteaste la idea de tener que decirle que iba a tener un hermanito.

Es decir, eras la pareja de su padre, os llevabais bien, incluso habíais ido juntas de compras y habías descubierto gracias a ella que te encantaba el helado de pistacho y las palomitas de colores.

Esa misma noche tú y Scott estaban viendo la última comedia romántica de Netflix.

Scott se estaba desternillando de risa porque la protagonista se había quedado embarazada de su jefe y éste tenía una hija pequeña que le hacía la vida imposible. Tú sólo eras capaz de pensar que Cassie no sería así. Hasta que viste a la niña poniéndole polvos pica pica dentro de la ropa de la mujer y le salía un horrible sarpullido por todo el cuerpo mientras tenía una importante reunión delante del hombre del que estaba enamorada.

Cassie sí podía ser asi de traviesa... Pero no contigo verdad...?

Apagaste la televisión y te giraste a mirar a Scott.

  - Estoy embarazada.

  - Espera... ¿Qué? ¿Cómo a pasado... Como es...?

  - Scott, no creo que necesites que te dé la charla de las flores y las abejitas.

  - Mo me refiero a eso, tomamos precauciones.

  -¿Recuerdas la fiesta de cumpleaños de Rogers, que todo se nos fue de las manos y nos despertamos al día siguiente en cama desnudos y con varios preservativos rotos... Ahora no estoy tan segura de si llegaste a ponerte alguno...

  - Entonces... Un bebé? De cuánto estás? Tenemos que decírselo a todos! Tienes que pedir la baja, no puedes trabajar...

  - Estoy embarazada no tullida, Scott.

  - ... Tenemos que comprar la cuna, pintar las paredes, elegir un nombre, pañales, biberones, ropa, un carrito, elegir el padrino, eso será muy importante, hay que decírselo también a Cassie, le hará mucha ilusión tener un hermano con quien jugar y...

  - Scott, por favor acuérdate de respirar. - Él sólo te mira y sonríe mientras se acerca a abrazarte mientras susurra "un bebé" - me da miedo decírselo a Cassie, no quiero que me odie.

  - ¿ Por que iba a odiarte?

  - Por que vamos a tener un bebé y un bebé siempre requiere mucho esfuerzo y tiempo y no quiero que piense que tú la dejas de lado por nuestro hijo, adoro a Cassie pero no quiero que se sienta desplazada.

  - Bueno, pues hablemos con ella haber que opina y luego decidimos que hacer.

Mantener el secreto del embarazo hasta el fin de semana para Scott casi fue imposible, quería decirselo a todo el mundo con el que se cruzaba y por suerte, tú conseguiste distraerle el tiempo suficiente para que no soltase la lengua.

Ahora estabais sentados en el sofá con Cassie viendo como se lo dirías, queríais que ella fuese la primera en saberlo.

  - Hormiguita, vas a tener un hermanito - Ya está, sin filtro, sin paños calientes, Scott lo había soltado sin más. A ti te entraron calores por el cuerpo esperando que Cassie se pusiera a gritar o cualquier cosa, lo común en una niña de su edad, no te esperabas lo dijo.

  - ¿ Puedo elegir el nombre? Y el color de la habitación? ¿Y la cuna?

Al final no había nada de lo que preocuparse, estabas segura de que Cassie sería una increíble hermana mayor.

En el GIF : Bridget Regan