Extra.

Un día común y corriente en el año, la cafetería trabajaba como cualquier otro día pero, Jake que tenía una enorme sonrisa en su rostro les mostraba a quien se parara frente a él la felicidad más grande que jamás hayan visto.

Sonreía a más no poder, el ambiente de la cafetería cambió drásticamente por uno más cálido y amable desde que Jake entro por la puerta.

Sus amigos y compañeros de trabajo estaban extremadamente felices por él, no sabían con certeza como las cosas se habían solucionado entre Jake y Sunghoon pero al notar su ánimo y actitud radiante supieron que este se encontraba mejor.

—Jakey tu macho te busca.—Soobin interrumpió su sonrisa.

—Hyung, ya te dije que eso suena muy grotesco.

Soltó una risa—Anda, Sunghoon está esperando por ti.

Jake que estaba cambiándose en el cuarto de empleados, termino y salió corriendo a los brazos de Sunghoon que lo esperaba parado en la entrada de la cafetería.

Estaba lleno así que no pudo sentarse a esperar en una mesa y afuera estaba muy helado, ni siquiera quiso quedarse en el auto.

Los presentes observaron la escena pintoresca de los dos jóvenes enamorados saludándose con un beso.

—Hyung, nos vemos mañana.—grito Jake desde la puerta, como si de su casa se tratase.

—Con cuidado, ¡cuida de nuestro Jake! ¡Nada de cosas malas en la noche!

—HYUNG.—Jake estaba rojo a más no poder, las personas de la cafetería reían de diversión con las palabras de Hoseok. "Trágame tierra"

—No se preocupe hyung, lo cuidaré y siempre será con consentimiento y protección. —Sunghoon contestó amablemente, jalando a Jake fuera del establecimiento.

—¡Hey! —Hoseok estaba por salir detrás de ellos enojado pero Niki lo detuvo.

Soobin lo calmaba mientras le decía que no hiciera una escena en la cafetería.
Hoseok se prometió darle la "platica" a la pareja cuando los vuelva a ver.

Mientras tanto, ajenos a los planes de Hobi, Jake sonrojado y Sunghoon riendo salían tomados de la mano hacia el coche del alto.

Pero antes de llegar un par de personas detuvieron su caminar.

—Hyung.

Ambos pararon, ninguno sabía que hacer o decir.

Frente a la recién pareja se encontraban personas que Jake quisiera no recordar.
Jay y Jungwon incómodos estaban frente a la pareja que los miraban con sorpresa.

—Hyung, se que es incómodo y que no quieres tenernos cerca pero...—su voz se quebraba.

—Escucha, Jake, de verdad lo sentimos, yo lo siento mucho. Siempre me arrepentí de lo que te hice.—Jay salvo a Jungwon, hablando él y tomándole la mano a su novio.

De verdad, Jay planeaba decir una narración entera de más de 3 horas pero por los nervios le salieron solo un par de palabras.

Jake apretaba la mano de Sunghoon claramente alterado, este lo pegó más a su cuerpo mientras masajeaba su espalda con pequeños círculos y palmadas tratando de calmar el agitado ser de Jake.

—Hyung, nosotros fuimos unas pésimas personas contigo, yo... yo fui un pésimo amigo, tú siempre estuviste para mi y yo...—
Jungwon dejaba salir lágrimas mientras Jay se las limpiaba y lo abrazaba.

—Enserio, queremos tu perdón aunque no lo merecemos.

—Si, no lo merecen, en realidad son muy egoístas, cuando por fin soy feliz vienen y me arruinan de nuevo recordándome lo mierda que me hicieron sentir.

—Jake...—Sunghoon de verdad trataba de calmarlo pero Jake se negaba, Sunghoon estaba a punto de cargarlo y llevárselo de allí al verlo derramar lágrimas sin parar, pero lo dejo ser, esto era algo que necesitaba, un cierre.
Un final para todo el dolor que tenía acumulado.

—Es valido, es válido que me sienta miserable al ver sus caras, es válido que los odie, es válido que no los quiera recordar, es válido...—sus manos temblaban y su voz se rompía cuando pronunciaba las palabras—que no los quiera perdonar.

Jay y Jungwon miraban al suelo con lágrimas en sus ojos aún envueltos entre los brazos del otro.

Jake ahora sabía que ellos habían sido el uno para el otro desde que sus ojos se conectaron, sabía que se amaban a más no poder, él solo fue una pequeña piedra de tropiezo en su camino de historia de amor.

Si las circunstancias y decisiones hubieran sido diferentes, Jake los hubiera perdonado, los hubiera dejado ser feliz juntos sin ninguna complicación o resentimientos, pero su corazón fue roto cuando decidieron herirlo a él por el bien de su relación. Aún así Jake quería salir adelante.

—Pero lo haré, los perdono.

Las dos personas frente a él levantaron la vista en sorpresa mirando con ojos abiertos la cara de Jake que estaba toda mojada de lágrimas y mocos. Sunghoon enseguida a él dejó salir un suspiro de alivio.

En realidad Jay y Jungwon llevaba meses tratando de pedirle perdón, asistían a la cafetería con regularidad en "incógnito"
para poder estar cerca de Jake, pero siempre terminaban huyendo, de hecho el día del infortunio rompimiento de Sunghoon fue presenciado por Jay haciéndolo sentir una mierda, aquel chico sonrojado que huyó del establecimiento apenas tuvo un intercambio de palabras con Jake deseaba con todo su ser pedir perdón.

Pero simplemente no podía, no tenia la suficiente valentía como para pedirlo.
Hasta que por fin, Jungwon encontró la poca valentía en su alma después de convivir por unos minutos con Jake después de ese picnic.
Si no lo hacían ahora jamás lo harían, así que caminaron decididos directo a Jake  y Sunghoon cuando los vieron salir de la cafetería.

Aunque quisieran ser perdonados y volver a ser amigos, sabían que era mucho pedir. Solo querían recibir perdón para poder partir caminos sin arrepentimientos.

Jake seguiría su vida y los olvidaría, eso partía el alma de Jungwon que, todos los años en navidad recordaba como su amigo le regalaba un oso de peluche para su pequeña colección, pero ahora su colección dejó de añadir más peluches. Se arrepentía todos los días las malas decisiones que tomo, las malas decisiones que tomaron, pero no podía devolver el tiempo atrás.

—Gracias...

Jay y Jungwon se abrazaban ambos en celebración a la cual obviamente Jake no se uniría a ellos.

—No me agradezcan. Los perdono por mi bien.
No quiero vivir con rencor, alguien me enseño que debo empezar de nuevo con un corazón sano, y deseo ser feliz a su lado.
Ustedes también, perdónense a ustedes mismos, una y otra vez, todas las veces que sean necesarias hasta que encuentren paz, que yo seré feliz con la mía. —tomó un pequeño respiro antes de irse —Y aprendan a valorar, porque la vida sigue y las personas no vuelven.

Jake abrazo a Sunghoon, le rogaba internamente que siguieran caminando.
Sunghoon les dedicó una última mirada para seguir su camino con Jake a su coche.

Sunghoon respiro ondo, al final Jake podría descansar de aquel corazón roto, podría comenzar de nuevo reconstruyéndolo junto a Sunghoon y ayudarle a él a reconstruir el suyo.

Una vez dentro del auto Jake dejo salir todo lo que tenia guardado, su cara se convirtió en un mar de lágrimas, no aguantaba tener que soportar el dolor de una ruptura así, la historia de su mejor amigo, terminó así, sin más.

"Tal vez es así como se sintió Sunghoon"

El alto abrazaba y consolaba a Jake, le daba repetidos besos en la cara y le susurraba cosas lindas al oído.

Jake suspiro profundo y levantó la cabeza. Miro a Sunghoon y le dedico una linda sonrisa aun con las mejillas mojadas.

—Ya estoy bien. Solo fue un momento de debilidad.—Jake suspiraba aliviado en su asiento.

—Mmm, ven aquí.—Jalo a Jake de su asiento para acercarlo y besar sus labios. —Buen chico, todo estará bien, aquí estoy para ti.

—Lo se, gracias por eso.

—De nada amor. ¿Ya te sientes mucho mejor?

—Si, ahora quiero una malteada de fresa con donas glaseadas y un brownie —decía limpiado sus mejillas con los puños.

Sunghoon río preocupado, Jake tenía un problema con esos brownies—Muy bien, iremos a tu café favorito—Jake festejo, visitaría de nuevo a los cachorros—pero antes tenemos que ir al centro comercial.

Detuvo su festejo—¿A qué?

—Tengo que comprarte algo.

—¿A mí? ¿Qué es? Dime, dime, dime, anda, ¡quiero saber!—Jake movía a Sunghoon de un lado para otro.

—Es algo que debo comprarte...—Sunghoon no dejaba su actitud misteriosa.

—¿Qué es? —Jake ya en un berrinche se sentó en el asiento con los brazos cruzados.

Sunghoon arrancaba el auto con una sonrisa.

—No creas que no te conozco, se que ese suéter de osito ha estado en tu mente por meses. Siempre que pasamos por esa tienda quedas anonado admirándolo.

—Ah, ¡el suéter de osito! ¿me la vas a comprar? Pero, yo lo iba a hacer en cuanto me pagarán.

—Lo haré, te la compraré pero a cambio de que hoy me dejes dormir del lado izquierdo de la cama.

—Ay no, en ese lado no da la calefacción.

—¿Suéter de osito o calefacción?

—¡Osito! Pero me abrazas para que no me de frillito.

—Claro que si amor.—Sunghoon sonreía cumpliendo su cometido, que era dormir abrazado a Jake.

—Hablando de la calefacción, debería llamar para que la arreglen.

Sunghoon rápidamente habló—Mañana llamamos, hoy no trabajan.

—¿Y como sab- Ah, ¡mi chaqueta! —rápido recordó a su chaqueta que seguía de rehén en las malévolas manos de Sunghoon.

Sunghoon rio a todo pulmón, Jake se había olvidado de su querida chaqueta—Yuni, tú chaqueta está atrás en la cajuela, cuando bajemos te la daré.

—¿La tuviste allí todo este tiempo?

—Si, pero si te la entregaba ya no tendría pretexto para hablar contigo—hizo un puchero estacionando el carro en el aparcamiento del centro comercial.

Jake, saco su cinturón de seguridad y se acercó a Sunghoon en cuanto el carro paró, beso sus labios en un beso largo y profundo.

Se despego de sus labios por solo unos pequeños milímetros—No creo que nos hubiéramos dejado de hablar, me gustaste desde que te vi en esa silla tomando de rehén a mi chaqueta.

—Ya lo sé, me amas. —Sunghoon río, molestando un poco a Jake.

—Mmm te amo.—contestó rápido no molestándose para nada.

Le dio otro beso, preparándose para bajar de auto.

Sunghoon lo detuvo tomando su brazo—Yo también te amo.

Ahora si, ya llegamos al final, muchas gracias por llegar hasta aquí conmigo 😭💕
Les aprecio mucho, también el apoyo, nos leemos en la próxima historia 💕💖