Publicando estos con un corazón y etiquetando su cuenta para enmascarar lo que realmente sucede en su relación. Habla de 'mi bebé me hizo este sombrero' y 'tengo que apoyar a mi princesa como pueda' hacia sus amigos, pero en el momento en que se van, él está encima de ti, agarrándote la cadera y escupiéndote en la cara por dar una pequeña mirada a uno de sus amigos.

Eres mía, cariño... Te susurra al oído. Ni siquiera pienses en mirar a otro hombre. Y tú no, gemidos y gritos de promesa de no hacerlo más si él quiere, por favor, deja de burlarse de tu coño reluciente y empapado. Pliegues maltratados esperando esa dulce y eufórica liberación, caderas que se balancean en sus manos mientras sonríe y se ríe de ti.

¿Qué es eso? Te susurra al oído. Grita mi nombre. Muéstrale a todo el mundo que eres mía. Sus dedos se burlan de tu entrada por lo que parece ser la centésima vez esa noche. Lleva su corazón en la manga cuando se trata de ti, vistiendo ropa que le hiciste, llevando joyas que le compraste. ¿Por qué no puedes al menos tener la decencia de mantener tus ojos solo en él?

¡Y-yeonjun! Lloriqueas, las lágrimas caen por tus mejillas mientras él te abofetea el coño lo suficiente como para causarte un ligero dolor. pero no puedes evitar querer más. más de él, incluso si eso significa más bordes. ¡Perdón por mirarlo!

¿Eres una puta? Te molesta, esta vez golpeándote el muslo, viendo cómo tu cuerpo se retuerce debajo de él. Le encantaba esta sensación. la sensación de verte tan vulnerable y sin embargo pedir, suplicando que te ayude~ la sensación de escucharte sonar tan desesperada. ¡Sí, lo soy! ¡Yo soy... yo-yo..! Gritas mientras sus manos trabajan rápidamente contra tu clítoris, el orgasmo se acerca rápidamente y no puedes detenerlo esta vez, los jugos salen volando por todas partes contra él. todo está mojado. sus manos, su cara y hasta ese sombrero tonto. buena chica.. Él te alaba, besándote con tanta lujuria y deseo, haciéndote perder el aliento tan pronto como intentabas atraparlo.

Y le encanta lo maleable que eres, lo leal que eres. Qué obediente. Una chica tan dulce como tú, comprándole regalos a tu novio egoísta y él tomando tu atención para sí mismo. Porque incluso si le compras el mundo, todo no significa nada si tus ojos no están puestos en él.

                                                 ©𝕋ℝ𝔸𝔻𝕌ℂℂ𝕀𝕆ℕ 𝔹𝕐 @ℍ𝕨𝕒𝕟𝕘ℙ𝕦𝕡𝕡𝕪_𝟘𝟚𝟛