Acabo de llegar a la tienda ya que mi turno hoy comienza más temprano.

No dormí muy bien la noche anterior, no he podido sacar de mi cabeza esos ojos negros que me miraban tan intensamente.

Se que está mal, que debería pensar solo en mi novio pero no puedo evitarlo, se está adueñando de mi mente y no recuerdo darle permiso a eso.

La tienda está a reventar de gente, lo que es bueno ya que el día está pasando rápidamente.

Tuve algunos clientes un tanto complicados, una de las desventajas de trabajar aquí, además de que la paga, que es pésima.

Estoy pensando seriamente en buscar un tercer trabajo, aunque suena complejo, ya que el tiempo con los dos que tengo apenas me alcanza.

A veces pienso que si no hubiese dejado mis estudios tendría la posibilidad de postular a una mejor paga, pero hubiese sido imposible conseguir el dinero necesario para el tratamiento de mi madre, por eso tuve que hacer sacrificios, pero no me arrepiento.
Mamá lo vale.

Hoy Minjae no estará en el bar, es su día libre y planeo sorprenderlo al visitarlo en mi descanso, ya que no hemos pasado mucho tiempo juntos últimamente.

Si bien trabajamos en el mismo lugar, aún así no tenemos mucha interacción ahí.
Generalmente el trabajo es mucho y estamos en diferentes sectores del bar.

Una vez que salí de la tienda me fui directo a su departamento.

Espero esté feliz con la sorpresa y tal vez esto mejore un poco la relación, porque hemos tenido varias discusiones últimamente, ya que Minjae insiste en querer que tengamos sexo, aún cuando le he dicho que aún no estoy listo.

Si soy sincero, la verdad aún no siento la necesidad de hacerlo con él.

Le dije que sería mejor terminar la relación, pero él insiste en que puede esperar.

Dice que no me presionará, pero lo hace cada vez que tiene oportunidad.

Creo que el problema está en mí.

Yo siento que lo quiero mucho, pero no siento que lo amo.

Es la primera relación que tengo y no quisiera que se dañara por mis inseguridades.

Entré al departamento con la llave que me dió para que pudiese ir cuando quisiera, aunque está es la primera vez que la ocupo.

Al entrar escuché sonidos extraños y mi inocente cabecita pensó que estaba haciendo ejercicio.

Me sentí realmente estúpido cuando me acerqué a la habitación.

Al abrir tuve un primer plano de Minjae y una chica sobre el.

Ella estaba literalmente saltando sobre su pene, ambos completamente inmersos en lo que hacían que no notaron que yo estaba de pie observandolos.

- ¿Te diviertes?- le dije.

Apenas me escuchó bajo a la chica de su regazo y se comenzó a vestir rápidamente.

- Am-amor no me dijiste que vendrías. Yo... esto no es lo que estás pensando-dijo.

"¿Se puede ser más idiota?"

Claro que es justo lo que estoy pensando , si acabo de verlo.

Debería estar molesto, pero solo estoy desilusionado.

Pensé que me respetaba.

Aunque algo dentro de mí sabía que esto tarde o temprano esto pasaría.

- Iluminame, porque no se que más podría ser lo que pasa aquí si te vi teniendo sexo con alguien más.

- E-Es tu culpa, tu nunca querías y yo tengo necesidades.

"¿Siempre habrá Sido tan tonto?"

Cómo no lo noté antes.

-Claramente no lo es.
¿En serio tratas de culparme por algo que es tu responsabilidad?, Si me engañaste es solo culpa tuya.
No trates de hacerme sentir mal para excusar tu falta.

-Tae amor, esto solo fue un desliz, podemos superarlo.

Acaba de decir que fue un desliz teniendo a la chica aquí mismo, no tiene respeto por nadie.

- Se acabó, no hay excusa que valga para lo que hiciste y no voy a seguir contigo - dije lanzandole la llave del departamento-Me largo.
Suerte en tu vida Jae.

No lo dejé seguir hablando por qué la verdad no quiero escuchar sus tontas explicaciones.

Me engañó, fin del tema.

Se termina la relación y ya está, tampoco es como si estuviésemos enamorados.

Cuando decidí aceptar una relación con él, lo hice porque me hacía ilusión tener un novio.

Pero lo cierto es que no hubo mariposas ni fuegos artificiales en ningún momento.

Tal vez por eso mismo, esto no me afecta tanto como debería.

Necesitaba aire fresco, por lo que salí del lugar rápidamente.

Estaba tan distraído que no me fijé cuando choque con alguien.

-Perdón, no lo vi-dije sin levantar la cabeza.

-Mira a quien tenemos acá. ¿Si no es la hermosura del bar?

Al mirar a la persona que me estaba hablando, pude ver qué se trataba del azabache de la otra noche.

Sigue siendo aún más atractivo a plena luz del día.

-Oh, Bu- buenas tardes y perdón por lo de recién.

-No hay problema Taehyung -dijo.

Dios, que bien se escucha mi nombre salir de esos labios, con esa voz tan ronca.

Este hombre provoca cosas que no debería en mi, y necesito alejarme de él antes que esto se salga de control.

No soy de los que salta al cuello de un chico, pero por él, estoy seguro que lo haría.

-Me tengo que ir, fue un gusto volver a verte Jungkook, nos vemos.

Cuando pasé por su lado para irme, tomó mi muñeca y me mantuvo en el lugar.

-Te invito un café, ¿Puedes darme unos minutos de tu tiempo? Prometo que será agradable para ambos.

Sé que debería irme, pero siento la necesidad de aceptar la invitación.

-No tomo café -me encontré respondiendo- Tal vez podría invitarme un chocolate caliente-estoy sonrojado, puedo sentirlo.

& Chocolate será, acompáñame.

No soltó mi muñeca en ningún momento.

Tiene un aura autoritaria, que lejos de asustarme por alguna extraña razón, me gusta.

Fuimos hacia un café cercano al lugar donde estábamos.

Al entrar pude ver el nombre "My Time".

Me pareció agradable.

Conseguimos una mesa y realizamos nuestro pedido.

-Taehyung... No he dormido nada bien estas últimas noches ¿Sabes porque?-preguntó.

-N-no lo sé, insomnio tal vez-pero que respuesta acabo de dar.

- No , la verdad no es eso.
El problema es que hay un chico castaño que no sale de mi mente, y tampoco estoy haciendo el esfuerzo. Prefiero mantenerlo ahí- Dijo sin apartar sus ojos de los mios-Tae.. tengo una propuesta que hacerte.

Un poco dudoso de lo que pudiese decirme, asentí dándole a entender que podía continuar .

-Me haré cargo de todo lo que tenga que ver contigo.
Pagaré tus deudas, los medicamentos de tu madre y tú universidad- dijo.

"¡Me estoy volviendo loco!"

"¿Porque este tipo haría tal cosa si recién me conoce?"

- De qué estás hablando, no entiendo porque me dices esto- dije.

- No me interrumpas, escucha lo que te diré y solo responde cuando te lo pida - hablo de forma demandante-¿Has escuchado alguna vez de sumisos y amos?, ¿Que opinas de ese estilo de vida?
Es bastante interesante sabes y podríamos salir ambos beneficiados con esto.
Respóndeme-dijo con voz grave.

Tardé unos minutos en procesar lo que estaba escuchando.

A ver si entendí bien...

"¿Este tipo me está ofreciendo hacerse cargo de todos mis gastos a cambio de sexo?"

El enojo se apoderó por completo de mi y no me iba a quedar sin decirle unas cuantas cosas.

- ¿Qué crees que soy? ¡¿Una puta?! ¿Planeas darme todo lo que me ofreces a cambio de mi cuerpo? Lo siento pero no sé por quién me has tomado.
Me voy- dije furioso.

No dejó que me levantara de mi lugar.

Puso una mano en mi hombro haciendo una leve presión.

-Quieto- dijo con voz grave y demandante- Yo en ningún momento he dicho eso de ti y me está molestando mucho que te refieras así de ti mismo.
Te estoy ofreciendo un contrato, todo tiene sus reglas.
Si me das la oportunidad, te lo mostraré, pero no aquí, vamos a mi oficina.
Necesitamos hablar en privado.

- No iré a ningún lado contigo y no sé que te hace pensar que yo podría aceptar algo como esto. ¡Estás loco!.

- ¿La enfermedad de tu madre quizá? Los medicamentos para el cáncer tienen un valor muy elevado y no creo que con los sueldos de tus dos trabajos te dé correctamente la cantidad para darle un tratamiento como corresponde.
Yo podría hacerme cargo de eso, pero te repito, vamos a mi oficina y hablamos esto calmadamente.

Eso fue un golpe bajo, yo haría cualquier cosa por mi madre, incluso vénderme a mí mismo, qué es lo que está a punto de pasar.

No me gusta dónde nos está llevando esta conversación, pero si existe la más mínima posibilidad de hacer que mamá mejore su calidad de vida, lo escucharé.

- Está bien-dije a regañadientes-Hablemos.
Vamos a tu oficina.

Jungkook pagó lo que consumimos y salimos de la cafetería.

Unos metros más allá estaba su automóvil, el cual se veía muy lujoso.

Yo no sé en realidad mucho de autos pero si estoy seguro que este debe haber costado una cantidad considerable de dinero.

Al subir noté el olor a cuero mezclado con un exquisito olor varonil, que asumo se debe a la colonia de Jungkook.

Huele divinamente.

No dijo nada durante el camino, solo condujo lo más rápido posible hasta que llegamos a unos edificios altísimos, hermosos e imponentes.

Lo seguí tratando de igualar su ritmo.

El entró a la recepción a paso firme.

Las personas que estaban ahí lo observaban cómo si fuese prácticamente un dios, mientras él no saludó a nadie, solo agarro mi muñeca y nos dirigimos hacía el ascensor.

Llegamos hasta el último piso y cuando las puertas se abrieron, pude ver una enorme oficina rodeada de ventanas gigantes que daban una completa vista de la ciudad.

Era sorprendente.

- Siéntate Taehyung -dijo.

Hice lo pedido sin ningún tipo de objeción.

Las últimas veces que se ha dirigido hacia mí, lo ha hecho en tono demandante, lo cual no me molesta, es más, me siento cómodo.

Estoy seguro que algo debe estar mal en mi o tal vez se debe a qué necesito darle el control de mi vida a alguien más y por fin soltar las riendas de las preocupaciones, esas que me matan de estrés.

Puso unos documentos frente a mi y me acercó una pluma.

- Bien, pondrás atención a esto Tae.
Vas a leer atentamente estos documentos y luego me dirás si no te sientes cómodo con alguno de los puntos y lo modificamos, pero ten en cuenta que el cambio que hagamos debe ser beneficioso para ambos, de lo contrario no servirá.

Asentí en silencio, sin hacer ningún sonido.

- Palabras Tae, respóndeme con palabras.

- S-si Jungkook- dije.

Leí cuidadosamente el contrato que me estaba ofreciendo.

Mis ojos se ampliaron en cada párrafo, pero solo de sorpresa, no es normal que esto no me asusté ni un poco.

- Déjame ver si entendí... Si firmo esto, pasaré automáticamente a ser de tu propiedad.
Durante 6 meses tú decidirás todo sobre mí y yo no podré poner objeciones.
También tendré que tener sexo contigo.
A cambio de eso, tú te encargas de la enfermedad de mi madre- pensé por unos segundos-¿Le darás el mejor tratamiento posible?

-Así es y te lo explicaré mejor para que entiendas.
Una vez firmado ese contrato, estarás a mi entera disposición, lo quiere decir que tu cuerpo y todo tu ser me pertenece por el tiempo que dure el contrato.
Seré tu amo y todo lo que hagas o digas pasará primero por mi aprobación.
Tu bienestar y todo lo que te rodea también estará bajo mi responsabilidad.
Universidad, tratamiento de tu madre y cualquier cosa que necesites.
Pagaré a los mejores médicos para que atiendan a tu madre y tendrá los mejores medicamentos más una total atención ante cualquier problema que pudiese surgir producto de su enfermedad.
También me haré cargo de todos tus gastos.
Lo que quiere decir que ya no tendrás que trabajar en esos lugares en los que estás, y sin discusión alguna volverás a la universidad.
Con eso no transaré, debes retomarlo.
Solo ten en claro una cosa, no podrás estar con nadie que no sea yo, detesto la idea de compartir.

Todo esto es tan irreal... Se lo que me propone, lo tengo claro.

También se la respuesta que debería darle.

"¿Entonces por qué estoy dudando ahora mismo?"

-Yo no sé qué responder... ¿Porque harías todo eso por mi?

-Simple, porque te deseo, quiero poseerte y sé que para conseguirlo necesito darte algo a lo cual no puedas negarte.

- ¿Qué pasa después que termine el contrato?

-Me aseguraré de que puedas vivir cómodamente al menos por un año, eso te dará tiempo para organizar tu vida.
La universidad y el tratamiento de tu madre quedan costeados completamente, solo ten en cuenta que una vez firmes el contrato, pasas automáticamente a ser mi sumiso, de mi propiedad, no podrás poner objeción en cualquiera de las cosas que te pida hacer.

Esto me condenará directo al infierno, pero es lo correcto si quiero que mamá tenga más tiempo a mi lado.

Sólo lo firmé.

¡Diablos! yo haría cualquier cosa por mi madre y él me está ofreciendo encargarse de su tratamiento.

Que tenga que entregar mi cuerpo solo será el precio que pagaré por el bienestar de ella.

Además Jungkook es un tipo atractivo y no me desagrada en lo más mínimo la idea de que sea él a quien me entregue.

Estaba a punto de decir algo pero en cuanto solté la pluma, Jungkook me tomó por mi cintura y me levantó rápidamente, girando mi cuerpo, dejándome con mi espalda pegada a su pecho y poniendo su mano en ella, susurro con el tono más sensual que he escuchado alguna vez.

- Inclínate hacia adelante, muéstrame todo lo que me pertenece desde ahora.

Lo hice.

Quedando con mi pecho sobre su escritorio y mi trasero en alto a su entera disposición.

Pasó su mano desde mi nuca y descendió lentamente por mi espalda hasta llegar a mi trasero, donde amasó y estrujó a su antojo, con dominancia y experiencia.

No pude evitar soltar un jadeo debido a la acción que realizó.

Acercó su pelvis a mi trasero y presionó su miembro totalmente duro en el lugar, restregando y haciéndome sentir su dureza.

- ¿Sientes lo ansioso que estoy por probarte?, Siente mi ansiedad Taehyung... ¿Te gustaría que me adentrará tan profundo en ti que te hiciera gritar de placer? Porque eso sería algo que vengo deseando hace días- hablo descarado-espóndeme Tae.

- S- si.

Una nalgada resonó en el lugar, una que probablemente me dejara marcas, la cual en vez de asustarme logro exitarme más de lo que ya estaba.

-Amo... desde ahora y en cada sesión me llamarás amo. ¿Está claro?

- S- si amo...

Es curiosa la facilidad con la que accedo a todo lo que quiere que haga y a todo lo que él quiere hacer conmigo.

Minjae trato muchas veces de que estuviéramos juntos pero cada vez que me acariciaba o me tocaba íntimamente no me sentía cómodo y lo aparte todas y cada una de las veces que lo intentó.

En cambio Jungkook...Dios estoy completamente excitado en este momento y sé que debido al contrato no puedo apartarlo ni negarme a lo que quiera hacerme.

Pero lo cierto es que no quiero hacerlo.

Me gusta lo que estoy sintiendo en mi cuerpo, me gusta lo que provoca.

-¿Eres virgen verdad?- preguntó.

- Lo s-soy a-amo.

- Me lo imaginé, por las reacciones tan exquisitas que tienes ante mi toque.
No voy a tomarte en este instante, solo voy a explorar un poco y tú también lo harás.
Quiero que conozcas mi cuerpo y yo el tuyo, te dejaré tocarme libremente solo por esta vez.
De aquí en adelante recuerda que cada acción que quieras realizar debe ser autorizada por mi.

- Sí amo.

Siento que soy como un robot al responderle, pero es lo único que tengo permitido al parecer y no me molesta, no pensé sentirme tan cómodo con esto.

Jungkook me giró, dejándonos así frente a frente, quedando tan cerca de mí, que sentí su respiración sobre mi rostro.

Un suave olor a menta se coló hasta lo más profundo de mi cuerpo, haciendo que sintiera ganas de probarlo.

-Quítate la polera, déjame ver tu piel.

Acaté la orden inmediatamente y
mientras lo hacía él desabrochaba su camisa lentamente sin apartar la vista de mi.

Santo infierno, tiene el cuerpo perfecto.

Su blanca piel está adornada con los tatuajes más sexys que he visto en mi vida.

Sus clavículas están marcadas y hacen resaltar sus anchos hombros, los cuales quisiera tocar en este momento.

Su abdomen está completamente marcado, tonificado y perfecto.

Mis manos están picando en este momento por explorar cada centímetro de él, pero debo esperar su autorización para hacerlo.

También puedo adivinar por la forma en que me mira, que las vistas para él son de su agrado, lo cual me deja muy conforme conmigo mismo.

Tomó mi mano y la pasó lentamente sobre su pecho, como si hubiese adivinado lo que yo quería en ese instante.

Su piel se siente suave bajo mi tacto y su cuerpo es condenadamente duro y perfecto.

Dejé mis manos ahí, paseando libremente sobre su torso y toqué todo lo que pude, hombros espalda y abdomen.

El comenzó a hacer lo mismo conmigo.

- Tu piel es deliciosa Tae
Totalmente suave y lisa.

Su toque me está nublado la razón e inconscientemente cerré mis ojos y dejé que las sensaciones me invadieran.

Sus labios fueron a dar sobre mis clavículas, chupando y lamiendo, mientras sus dientes rasparon con la presión exacta sobre el lugar.

No pude detener los pequeños gemidos que salían de mis labios, los cuales con sus sonidos roncos estaban haciendo estragos en mi.

De un momento a otro atacó mi boca con un beso demandante y profundo.

Su lengua se adentro de una forma demoledora, que traté de responder lo mejor posible, pero se me hacía casi difícil debido a la intensidad con que lo hacía.

Sus manos se paseaban sobre mi, tratando de tocar todo lo que estuviese a su paso sin dejar de besarme.

Me levanto por los muslos y me sentó sobre el escritorio, introduciéndose de inmediato entre mis piernas.

Una vez ahí comenzó a rozar nuestras erecciones haciendo la presión justa para sacarnos jadeos a ambos.

El aún ni siquiera me ha penetrado y me está consumiendo completamente.

Mueve su cadera en círculos mientras sigue frotando nuestros miembros y da falsas embestidas haciendo que las sensaciones se intensifiquen.

Sus besos descendieron hacia mi cuello bajando hacia mis pezones, dónde lamió y mordió hasta dejarlos completamente erectos.

Siento la presión posarse en mi abdomen bajo y estoy a punto de correrme debido a la sobre estimulación.

Lo cual debería informarle si no quiero tener problemas debido al contrato.

- Me voy a correr amo...¿ Puedo por favor hacerlo?-dije tembloroso.

Recordé que no puedo hacer nada sin su autorización, si no recibiré un castigo y la verdad soy demasiado nuevo en esto para querer saber tan pronto de que se trata eso.

- Hazlo, córrete para mí...Déjame ver tus expresiones cuando te hago llegar al orgasmo.

Automáticamente solté mi esencia dentro de mis pantalones, quedando totalmente sucio y débil, mientras su mirada hambrienta no se perdía ninguna de mis reacciones.

Cerré mis ojos, mientras mi la io era maltratado fuertemente por mis dientes, me sentía tan expuesto y vulnerable, tan fuera de mi que me asustaba un poco.

Jungkook me tomó por la cintura y me acerco hacia el sillón.

- ¿Ves toda la diversión que tendremos con este acuerdo? ¿Sentiste lo mismo que yo? La manera perfecta en que encajan nuestros cuerpos...
Somos totalmente compatibles en el ámbito sexual y te aseguro que serán los mejores seis meses de tu vida.
Yo me encargaré de eso.
Terminamos está sesión aquí por hoy.
Te espero mañana en mi penthouse, para arreglar ese pequeño problemita que tienes...

- ¿C-cuál problema? -Dije tratando aún de regular mi respiración.
Estoy seguro que estoy vuelto un desastre-

-Tu virginidad precioso.

Bien, no me esperaba que dijera eso y me hace sentir nervioso debido a la anticipación.

La idea no me desagrada ni me asusta en lo absoluto ya que acabo de saber lo que él es capaz de hacer con mi cuerpo.

Se que si le entrego mi virginidad a él, cosa que pasará, será un encuentro inolvidable.

El sabe perfectamente lo que hace.

- Está bien.... Amo.

-Mi chófer te llevará a tu casa para que puedas cambiar tu ropa-dijo abriendo el cajón de su escritorio y sacando una caja con un pequeño moño.

- Esto es para ti, lo necesitarás para retomar tus estudios.
De ahora en más no puedes rechazar nada que venga de mi.

-Lo sé, gracias por ésto amo.

Me sonrió coqueto y acarició mis mejillas.

Salí de la oficina y fuera de esta me esperaba su chófer, el cual me llevó hasta mi casa y me dijo que pasaría por mi al día siguiente.

Gracias por leer 🌸

🌸 ErLith_ 🌸