💎98
La oscuridad lo envolvía por completo y su cuerpo temblaba por el manto frío de la noche que lo iba consumiendo, caminaba como perdido sin rumbo fijo alguno y solo sabia que debía caminar y encontrar la luz.
La luna quería brillar para él pero no podía, ¡Maldita Luna! Se quejó internamente, ella tan hermosa pero oculta lo torturaba lo desgarraba y lo castigaba al no brillar para él recordandole que Yoongi no estaba a su lado.
Extendía sus manos hacia la sombra de Yoongi pero era imposible, su pelinegro no podía verlo pero Jimin sabía que lo estaba buscando enmedio de esa bruma espesa.
"¿Yoon...?"
La silueta de Yoongi retrocedía, volvía sobre sus pasos y se alejaba y Jimin trataba de correr hacia él pero sus pies pesaban como si estuviese atrapado en brea pegajosa no se movía nada. Podía ver sus manos extendidas pero no lo alcanzaba aún así no se rendiría lucharía, si Yoongi no lograba verlo él si e iría tras el aunque le llevase una eternidad, aunque la locura de verle y el deseo de tenerle de nuevo y estar a su lado le agrandara a cada paso el dolor en el pecho.
Jimin veía su sombra a lo lejos alejandose de él y extendía sus manos. "Yoonie...amor". Jimin no tenía esperanzas pues sus manos no lograban alcanzarlo o si quiera tocarlo, estaba totalmente perdido.
Cayó de rodillas sin fuerzas de tanto luchar contra la fuerza oscura que lo acechaba. Sólo la soledad era su compañía ahora, era la única que le hacía sombra, la única que lo consolaba ahí tirado en el suelo mientras lloraba por su amado.
"Yoonie te necesito"
Unas manos lo movieron de su sitio donde estaba sentado, abrió sus ojos y comprobó que había llorado en sueños.
Sus pies y manos seguían atadas y ya le dolía el cuerpo entero de estar así.
—¿Cariño llorabas por mi? Tranquilo ya estoy aquí contigo, y no te dejaré ir nunca Jimin.
El fuerte cuerpo lo abrazó duro y él se permitió llorar de nuevo.
—Yoonie... mi Yoonie. —Se lamentaba mientras era abrazado. —D-dejame... ¡Dije que me dejes! ¡Maldito!
El fuerte cuerpo lo soltó con brusquedad.
Desde que esa puerta se había abierto y por ella había entrado Namjoon su estancia ahí era la peor, no paraba de tocarlo y obligarlo a verle a la cara mientras le hacia cosas sucias.
—Auch bebé, estas tan uraño pasar tiempo con Min te hizo daño pero no te preocupes en cuanto vuelvas conmigo serás aquel Jimin que no recriminaba nada y a todo decía "si".
Namjoon se acercó a él y lo besó a la fuerza, Jimin apretaba los labios cada vez que Namjoon lo besaba y Namjoon lo jalaba del cabello para obligarlo a abrir la boca para introducir su lengua.
Es verdad habían sido novios en la universidad pero ahora no eran nada y Jimin estaba casado y aunque sea en esas circunstancias él debía serle fiel a Yoongi no quería besar otros labios si no eran los de Yoongi y por ello sentía arcadas cuando era besado a la fuerza por Namjoon.
—¡A ver bonito levántate! —Namjoon lo obligó a ponerse de pie. —Ya que estas atado será más divertido. —Lo pegó a la pared y comenzó a tocarlo, pasaba sus manos lascivamente sobre su cuerpo mientras lo besaba en el cuello. —Mmm mi Jimin, lindo y delicioso Jimin te deseo no sabes cuanto. —Sus manos bajaban por su pecho hasta sus caderas y las apretaba con fuerza.
Jimin mantenía sus ojos cerrados mientras era tocado sin piedad, con brusquedad y salvajismo por Namjoon.
—¿Lo vas a disfrutar ahora si cariño? —Lo pego hacia la pared viendo hacia ella mientras le desabrochaba el pantalón y comenzaba a tocar sus partes íntimas.
¿De que le servía rogar? ¿Pedir por que se detuviera? Si la última vez lo había hecho y a Namjoon poco le había importado y lo había ultrajado sin piedad ahí en el frío suelo. Así que solo podía cerrar su mente y bloquear sus sentidos y no pensar, no sentír... no podía pelear pues sus manos estaban fuertemente atadas.
Soltó un jadeo lastimero cuando Namjoon lo mordió con fuerza en el cuello.
—¿Qué pasa cariño? Antes te gustaba ¿No?
Las manos de Namjoon tocaban sin parar, Jimin creyó que volvería a hacerlo cuando la puerta se abrió con violencia.
—¡Kim!
La figura de Maximiliano se hizo visible, Namjoon hizo gesto de molestia al ser interrumpido por el hijo del jefe.
—¿Qué quieres Maxi?
El rubio ojiazul entró en la oscura habitación y sus ojos recorrieron a Jimin quien lloraba en silencio y luego a Namjoon.
—¿Qué haces idiota?
—Me divierto un poco ¿no ves? —Río con sorna.
El rubio se acercó lo suficiente como para que Jimin lo viera al rostro, se veía enojado.
—Tienes que ir a vigilar, Min no tarda en llegar y debemos estar listos. —Le Ordenó.
Namjoon hizo mala cara.
—¿No puede ir otro? Estaba ocupado. —Se quejó sonriendole a Jimin.
—Maldita sea Kim por una vez haz caso, sabes que puedo hacer que te saquen del clan si quiero imbecil no me retes y obedece.
Namjoon lo miró mal, en realidad él no quería estar en el estúpido clan, solo quería vengarse de Yoongi y tener a Jimin para él otra vez.
Así que les dió una última mirada y salió de ahí.
Jimin se dejó caer Al suelo de nuevo sin fuerza para si quiera arreglar su ropa, el rubio lo miraba desde arriba.
—¿Te ha hecho algo bonito? —Preguntó.
Jimin no respondió.
—Dime. —Su voz ahora sonó más demandante.
Jimin asintió apretando los labios para no llorar.
—¿Qué te hizo? —Maximiliano se agachó a su lado y apartó unos cabellos de su rostro y limpio sus lágrimas.
Jimin tembló sin contener más el llanto, Jamás pensó que iba a vivir esa pesadilla, Namjoon lo había violado.
—E-el m-me m-me...
—Entiendo, ya no hables más, lo haré pagar no te preocupes bonito.
Maximiliano se levantó no sin antes acomodar bien la ropa del castaño y luego salió de ahí dejándolo de nuevo solo.
Kim era un imbécil, cuando su padre le dijo que sería parte del plan para atrapar a Min se rehusó, sabía el tipo de hombre que Namjoon era, podía ser una rata si quería, traicionero y rebelde. ¿Y ahora se había atrevido tocar a Jimin? ¡Mierda! Esto se estaba saliendo de control. ¿Qué cuentas iba a entregar de ello?
Golpeó fuerte la mesa, ya Min se estaba tardando demasiado y debía llevarlo a Italia a su padre.
Se sentó y sacó un cigarrillo, estaba estresado.
De pronto las Luces se apagaron abruptamente.
Se levantó y sacó su teléfono para iluminar.
A la habitación entró uno de sus hombres corriendo y tropezando con todo por la nula visibilidad.
—¡Ya está aquí! —Gritó.
—¿Crees que no me había dado cuenta idiota? Vayan y atrapenlo lo quiero con vida y que no toque a Park Jimin.
El hombre asintió y volvió a salir, entonces Maximiliano se fue en busca de Jimin lo encontró también desorientado porque afuera se había escuchado una explosión.
¡Era él! ¡Era Yoongi! Había llegado por él su esposo lo iba a rescatar.
Las manos de Maximiliano lo ayudaron a levantarse y con una navaja le corto los amarres en las manos y luego en los pies.
—Vamos bonito.
—P-por favor déjame ir con él. —Pidió Jimin con la esperanza de ser liberado así de fácil.
Afuera sonaban disparos por todos lados.
Al parecer Yoongi se la estaba poniendo difícil a los hombres de Giordano.
—No bonito lo siento pero no puedo, Min debe venir por ti.
—¡Por favor!
Maximiliano lo sacaba de la habitación pues Yoongi se acercaba, caminaron por un largo pasillo y entraron a otra habitación era una bodega más amplia.
Otra explosión se oyó más cerca y gritos por todos lados.
—¡Señor, Min viene armado hasta los dientes, eliminó a más de la mitad! —Gritó un hombre que corría hacia él con el rostro ensangrentado.
Maximiliano sonrió, era lógico Min quería salvar a su chico y nada iba a impedirlo, nada podía pararlo.
—Envía a Marco, que pelee con él hasta darnos tiempo de alejarnos más, Min tiene que caer en la trampa.
¿TRAMPA? ¿cuál trampa? Jimin tembló sin control y su corazón comenzó a bombear con fuerza.
Estaban atrayendo a Yoongi hacia una trampa. ¡Dios! No podía ser.
Jimin sintió desfallecer mientras era arrastrado por Maximiliano Giordano, no quería que nada le pasara a Yoongi por su culpa.
Su corazón estaba dividido en emociones encontradas, quería ser rescatado pero no quería que Yoongi sufriera por hacerlo.
—¿Qué pasa bonito? Estás pálido ¿Es por Min verdad? Jajaja, déjame decirte que Min Yoongi es un tipo necio no se rinde nunca. Min es mi boleto cariño, gracias a Min podre demostrarle a mi padre que puedo ser el sucesor en el clan, cuando mi padre me deje su puesto podre hacer las cosas a mi modo y en eso Min me va a ayudar mucho, cuando mi padre vea que le entregue a su peor enemigo en bandeja de plata se sentirá orgulloso, sabes pequeño mi padre no te quiere a ti, lo quiere a él será el negocio perfecto. —Soltó sin más.
Jimin negó, se sentía desesperado y quería poder decirle a Yoongi que se fuera y lo dejase ahí que huyera lejos y se pusiera a salvo. Jimin estaba dispuesto a dejarse morir por salvarlo a él.
Namjoon entró a la habitación y Maximiliano le hizo señal para que agarrara a Jimin.
—Hay que llevarlo a la torre, rápido. —Gritó y Namjoon asintió y condujeron a Jimin para afuera de las bodegas, pasaron cerca de una hilera de toneles que contenían combustible para traficar.
Llegaron a una especie de bodega de varios niveles parecía una torre y entraron, adentro habían varios hombres fuertemente armados.
—Cuando entre Min déjenlo avanzar, luego esparcen el humo para dormir a los que vienen con él, debo ganarme su confianza para que se entregue él sólo.
Todos asintieron y se pusieron en posición para esperarlo.
Subieron al piso cuatro a esperar, no pasaron unos 10 minutos cuando se oyó abajo una serie de disparos.
—Vaya, Min Yoongi no juega. —Susurró Namjoon con burla. —¿Qué haría si se entera que tú y yo nos hemos divertido en su ausencia?
Jimin quería asesinarlo pero, obviamente aunque supiera hacerlo no podía sin salir lastimado.
Maximiliano en cambio miraba a Namjoon con recelo no lo soportaba así que los dejo en pasillo solos mientras Min Yoongi llegaba.
—Cuando Min este aquí no iras a ningún lado cariño tú eres mío y min será de ellos. —Susurró en su oído.
Los disparos dejaron de sonar y todo quedó en silencio, Jimin rezaba en la mente por que Yoongi se alejara, para que se fuera de ahí. Pero no fue así, al poco rato Yoongi estaba frente a ellos, su rostro mostraba sus facciones endurecidas, sus ojos grises estaban totalmente dilatados por la rabia que sentía.
Habían desatado a un mounstro.
—Un paso más Min y le vuelo los sesos.
Una rabia profunda lo invadió en ese momento, cuando vio a Namjoon apuntando a la cabeza de Jimin con un revolver.
—¡Yoon! —La vocesita de Jimin le llegó flotando en el aire, suplicante y dolida, ansiosa por verlo. El corazón de Jimin se partió en dos al verlo, Yoongi saldría herido si no se iba de ahí.
—¿Namjoon? —Habló Yoongi con voz dura.
—El mismo.
Yoongi miró a su castaño parecía examinarlo, le miró cada golpe y cada herida. Jimin no quería decirle que estaba más lastimado de lo que aparentaba, no tenía el valor.
—Déjalo libre y pelea imbécil.
Namjoon soltó una carcajada cargada de maldad.
—¿Qué te hace pensar que lo haré? Es mío te lo advertí.
—¿Qué demonios haces con el Clan de Giordano?
Namjoon se encogió de hombros como si aquello no fuera importante.
—Me uní a ellos solo para vengarme de ti, me prometieron a Jimin a cambio de entregarte a ellos.
Yoongi quería asesinarlo, pero no podía hacer nada sin que Jimin saliese herido de ahí así que estaba conteniendo todas sus ganas de dispararle a Namjoon.
La puerta del final del pasillo volvió a abrirse y Maximiliano hizo su acto de presencia.
—Ahhh Min es bueno verte.
Yoongi miró a Maximiliano y éste a él, para Jimin era algo extraño porque podía ver como si se comunicaban solo con verse.
—Max... tal y como pensé el cobarde de tu padre jamas vino él mismo.
Maximiliano sonrió y asintió como si aquello fuese una reunión de viejos amigos.
—Sabes que le gusta guardar su pellejo, mis condolencias por tu gran pérdida, que lastima que murió tu padre esto no estaría pasando si siguera vivo.
—Ahorra tus Palabras Max, esto pasaría tarde o temprano. Dame a Jimin y los dejaré vivos.
Namjoon y Maximiliano rieron al mismo tiempo.
—Verás Min, abajo tu equipo fue neutralizado.
Jimin pudo ver como Yoongi se tensaba de pies a cabeza.
—Tranquilo, no los mataron están vivos pero atrapados sólo los dejaremos irse si tú te entregas. Dejaré ir a Jimin a cambio.
—¡N-no Yoon vete! —Jimin deseaba decirle que era una trampa y que se fuera que no importaba lo que pasara con él.
Namjoon vio a Maximiliano con el entrecejo fruncido.
—Me dijiste que me podia quedar con Jimin si hacia que Min viniera a ti, Maldito traidor.
Maximiliano bufó, podría al fin deshacerse de Namjoon además estaba furioso por lo que le había hecho a Jimin el hijo de puta, así que sacó su arma y le disparó a Namjoon sin más.
Jimin soltó un chillido al ver como el cuerpo de Namjoon caia a su lado arrastrándolo con él al suelo, luego miró a Maximiliano quien le hizo una seña con la cabeza para que fuera con Yoongi y él se levantó rápido y corrió a los brazos del pelinegro.
—¡Yoonie! —Rápido lo apretó contra si. Lo había extrañado tanto a pesar de haber pasado pocos días ahí, era reconfortante verlo y sentirlo a su lado pero la felicidad seria empañada en pocos minutos.
Varios hombres salieron detrás de Maximiliano y las armas los apuntaban a los dos.
—Vamos Min, mi padre sólo te quiere a ti. Dejaré ir a Jimin y tu vienes conmigo.
Yoongi miró a Jimin quien lloraba y negaba al mismo tiempo. No quería que Yoongi cayera en esa trampa, él jamás quiso que Yoongi siempre tuviera que arriesgar su vida para salvarlo.
—Jimin... mi pequeño.
—¡No Yoongi maldita sea si te vas con ellos te van a matar! —Jadeo el castaño aferrándose a su cuello.
—Te amo Jiminie. —Le dio un beso y devolvió a Jimin a Maximiliano quien lo agarro fuerte ya que Jimin pataleaba y Gritaba para no separarse de Yoongi. Sentía como si eso fuera una despedida definitiva y eso le dolía en demasía.
—Buen chico. —Murmuró Maximiliano mirando a Yoongi. —Pierre llévalo abajo con los demás, y prepara el avión iremos a casa.
Gean Pierre tomó a Jimin y bajó con él a donde estaba el equipo de Yoongi, no dejaba de gritar ni llorar. Lo estaban alejándo del amor de su vida un pedazo de su alma le estaba siendo arrebatada en ese momento. El tipo lo tenía agarrado fuerte y aunque el peleaba por volver con Yoongi le era imposible.
—¡Jimin!
Todo el equipo con el que había llegado Yoongi estaban en una habitación donde el hombre los llevó.
Sonrieron aliviados al verlo entrar con vida.
Hoseok parecía herido así que Jimin corrió hacia él rápidamente.
—Dios Hobi estas herido, todo es culpa mía. —Lloró. —¡Debes impedir que Yoongi vaya Hobi por favor!
Hoseok miró a Jimin largo rato y luego asintió, claro por supuesto que no iba a dejar a Yoongi, debía seguirlo hasta donde Yoongi fuera. Era su hermano.
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Hola mandarinitas no saben lo que me costó subir este capitulo porque Wattpad esta peleando conmigo, no me dejó actualizar ayer la historia de Yoongi Marry me 🥲 era un capitulo especial por el cumpleaños de Mimi, por cierto yo también estoy cumpliendo años 👉👈 compartimos día con Mochi Jeje.
Besitos I love all 💕 ♥.
¿A alguien más le está fallando la plataforma? Porque no me deja subir mis historias.
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