La madre de Jimin ya tenía todo listo para celebrale el cumpleaños a su hijo antes de irse de nuevo a trabajar por mucho tiempo, el cumpleaños de Jimin era el domingo y ella se lo estaba celebrando el viernes no tenía opción así que con el permiso de Yoongi realizó una reunión pequeña con pocos invitados en esa gran casa, los invitados consistían solamente en Taehyung y un par de personitas más. 

Primero porque se trataba de una celebración muy sencilla solamente algo simbólico al no  poder estar presente en el cumpleaños de su hijo, y segundo porque no era su casa.  Así que no podía disponer de la instalación e invitar a infinidad de personas a un lugar donde no era su casa,  de todos modos iba a ser  una celebración muy bonita muy íntima y tranquila solo faltaba que bajara Jimin para poder comenzar con la celebración que consistía en una cena.

Luego de lo que había sucedido en la mañana aquel asunto que involucraba a Yoongi y a la chica esa impertinente y que finalmente hubieran encontrado a Jimin en la casa de Tae la señora Park pudo tener una conversación con su hijo,  ella le dio su punto de vista y la perspectiva de lo que había visto desde afuera y le aseguro lo furioso que estaba Yoongi y del  cómo le exigía a sus guardaespaldas que se la llevaran a la chica y que llamaran a la policía.

Que su madre le haya dado la versión de lo que había sucedido de cierto modo dejaba un poco más tranquilo a Jimin,  que aunque haya arreglado la situación con Yoongi y le haya creído, la versión de su madre también ayudaba mucho y afianzaba todo.

      —No quiero verte así mi amor, levanta el ánimo. Si Yoongi no te quisiera no habría salido corriendo detrás de ti como un loco, yo vi su rostro  cielo, y lo que vi es sus ojos era miedo.

      —¿Miedo?

      —Así es, tenía miedo de perderte.

Luego de esa pequeña platica el castaño había sonreído, sin duda su madre haría cualquier cosa por verlo bien y feliz, incluso apoyarlo en su relación homosexual con Yoongi. 

     —¿Jimin querido ya estas listo?

La puerta de la habitación fue suavemente tocada, el castaño se miró por última vez en el espejo, no sería la gran cosa pero él estaba precioso.

Abrió la puerta y su madre entró a la habitación observando de pies a cabeza si hijo.

     —No cabe duda de que hice bien mi parte cielo, eres un hombre muy guapo.

Jimin se sonrojó un poco y sonrió ante el halago de su madre.

     —Gracias Mami,  estoy seguro seguro saqué tu belleza.

Yoongi quien en ese momento iba entrando también en la habitación sonrió, recordó el primer día que vio de nuevo a la señora Park y comprobó la similitud de ambos, Jimin sin duda se parecía a su madre.

     —Eres precioso Jimin, yo que tu madre estaría orgulloso. 

La señora Park sonrió. —Lo estoy querido, lo estoy. —Contestó dando una mirada a Yoongi sin perder la sonrisa.  —Bien, abajo esta todo listo cariño ¿Vienes?

Jimin asintió y bajó al lado de su madre tomado del brazo de Yoongi. 

Cuando bajó se sorprendió de ver a Taehyung ahí, y más cuando la madre de Yoongi y Hoseok estaban ahí platicando con Taehyung.

     —¿Amor...? —Jimin apretó el brazo de Yoongi suavemente.

     —Mi madre insistió y tu madre aceptó bebé, pero se coló  Hoseok.

Jimin sonrió tímido. 

Cuándo llegaron al final de la escalera la madre de Yoongi lo vio y salió corriendo a su encuentro para envolverlo en un enorme abrazo.

     —Hijo querido, ¿Así que el domingo es tu cumpleaños?

Jimin asintió sonriendo sin soltarse del abrazo de la madre de Yoongi. 

     —Que gusto verte Madre Yonji.

La señora Park miraba aquello y se regocijo al ver que Jimin era querido y aceptado en la familia de Yoongi así que más convencida de que su hijo estaría bien se iría tranquila de nuevo.

      —Hola Hoseok. —Saludó Jimin al su cuñado.

     —Hola Jimin que gusto verte, feliz no cumpleaños. —Jimin sonrió y Hoseok le tendió la mano, luego se dirigió a su hermano. —¿Yoongi podemos hablar un momento?

El mayor de los Min asintió.

     —Ya vuelvo cielo.

Jimin asintió y fue directo a saludar a su amigo Tae al que hacía unas horas había visto y con el cual se había desahogado con lo que había pasado en la mañana. 

     —Tae Tae traidor. —Dijo mientras lo abrazaba.

El piel canela sonrió abiertamente, no le pesaba haberlo traicionado, no cuando sabía que  gracias a eso Yoongi y Jimin estaban juntos de nuevo.

     —Me alegra que se hayan reconciliado Mimi, odio verte mal y no es que el Yoni sea santo de mi devoción pero si te hace feliz lo acepto.

     —Gracias Tae, por tu apoyo y tu amistad. —Jimin lo abrazo y beso varias veces sus mejillas. —¿Y Jungkook? —Preguntó bajito mirando a su alrededor, pero su madre y la madre de Yoongi estaban enfrascadas en una platica amena. 

Taehyung suspiró un poco cabizbajo.

     —Esta de viaje, hable con él hace unos instantes tuve que esconderme en el baño de visita, dijo que le habría gustado estar aquí pero que el trabajo lo tiene ocupado.

     —Que mal, ¿Cómo van ustedes dos?

Taehyung jaló a Jimin hasta estar lo suficientemente muy alejados por si las dudas.

     —Nuestra situación es un poco complicada Jimin ya lo sabes, no me hago demasiadas ilusiones con el galleto. 

Jimin arrugó el ceño. —¿Galleto?

Taehyung inmediatamente se puso de un rojo brillante y trató de cambiar de tema.

     —¿Tae? No me digas que se han metido galletas por el c.....

     —Cállate Jimin no seas asqueroso Ewww, deja de leer historias en Wattpad.

     —Lo siento. —Susurró Jimin sin poder contener la risa.

     —Bueno el caso es que con su suegra aquí todo habría sido tan incomodo, además cuando vuelva le diré definitivamente que dejemos esta aventura, no quiero acabar enamorado de él y que luego se divorcie o algo así para después usarme y  dejarme como un juguete sin valor y decida al final que siempre quiso a su esposa y nunca  me amó. —Taehyung jugueteaba con sus dedos mientras Jimin lo veía atentamente con la frente arrugada. ¿De donde sacaba Taehyung esas ideas?

     —Tae Tae, el que debe dejar de leer historias eres tú, yo creo que si Jungkook no te quisiera ya te habrías dado cuenta,  los hombres como él y Yoongi están acostumbrados a tener muchas aventuras y demasiado sexo tú mismo lo dijiste, si Yoongi no me quisiera no habría llegado hasta tu casa a buscarme para explicarme el mal entendido, tu ya te has acostado con Jungkook muchas veces y aún sigue llamándote y buscándote a pesar de estar casado con mi cuñada y sabemos que Lisa es una bruja así que ten un poco de paciencia, si quieres cuando Jungkook vuelva de viaje dile esas inquietudes.

Taehyung reflexionó por un momento las palabras de su mejor amigo.

     —¿Tú  crees?

Jimin asintió, así como Tae estaba para él en momentos críticos en su vida amorosa así mismo Jimin siempre iba a estar para Tae.

     —Ah Jimin cariño vamos tenemos una comida especial para ti. —Llamó su madre interrumpiendo la conversación de los dos amigos.

Jimin y Taehyung se levantaron de sus cómodos asientos en el sofá y se dirigieron al comedor donde la madre de Yoongi colocaba una bandeja con una Paella en ella que  olía de maravilla.

     —Mmm huele bien. Me dio hambre.  —Dijo Taehyung acercándose.

     —Jimin hijo ¿podrías llamar a mis dos dolores de cabeza?  Creo que están en el estudio o en la biblioteca. 

     —Claro Madre Yonji. —El castaño se alejó para ir en busca de su novio y su cuñado.

La puerta de la biblioteca estaba cerrada, así que abrió lentamente. Era una habitación en forma circular de altos estantes de libros en todos los idiomas, tapizada con una alfombra verde esmeralda y dos pasillos, era increíble que algo tan grande cupiera en el Penthouse. 

Buscó a Yoongi y a Hoseok y los oyó más allá, en una pequeña habitación que servía como oficina. Los dos hermanos aún hablaban  pero Jimin no podía entender. Se acercó para hacer hacer ruido no quería escuchar conversaciones ajenas.

Dio un par de pasos pero luego se detuvo al oír su nombre, salir de los labios de Hoseok. ¿Por qué?

     —Deja de decir eso Hoseok, él no tiene nada que ver en esto. Me lo has dicho muchas veces y mi respuesta siempre será la misma.

     —Pero nuestro mundo no es el indicado para alguien como Jimin, reconsideralo, si dices que lo amas.

     —Claro que lo amo, y como tal no dejaría que nada malo le pase. Pero creo que debo hacerte caso y hablar de esto con él. 

     —Yoongi eres mi hermano...

     —Y Jimin mi novio y daría hasta la vida por él.

Muy bien fue suficiente para Jimin, no sabía por qué discutirían por él pero decidió no entrar ni preguntar. Así que simplemente salió de la biblioteca.

Iba de camino hacia el comedor de nuevo cuando la mano de Yoongi lo atrapó.

     —Jiminie ¿Qué haces aquí?

Jimin no podía poner excusa así que simplemente dijo la verdad  aunque omitiria el resto.

     —Vine a llamarlos  pero creí que estarían aún ocupados así que preferí no molestar.

Hoseok paso a su lado regalandole una sonrisa a Jimin quien correspondió.

No quería preguntar pero aún así se moría de duda.

     —¿Vamos? —Instó a Yoongi para ir detrás de Hoseok.

Yoongi negó, lo pegó a la pared y lo beso con hambre. —Jimin juro que cuando todo el mundo se haya largado de aquí te haré el amor toda la noche bebé.

Jimin se puso rojo de sus mejillas, quizá se estaba preocupando de más, había oído a Yoongi decirle a Hoseok que lo amaba y daría la vida por él. 

     —Te amo Yoongi y en cuanto ellos se vayan hazme tuyo, quiero sentirme más tuyo que nunca.

Yoongi volvió a besarlo apasionadamente aprisionándolo contra aquella pared.