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Ambos levantaron la vista al mismo tiempo, y en sus miradas encontraron sus respuestas, los dos querían continuar, inconscientemente se fueron acercando a paso lento, no sabían porque sentían el impulso de estar junto al otro, cuando estuvieron lo suficientemente cerca, que podían sentir nuevamente su respiraciones juntas, se volvieron a besar, pero esta vez de forma lenta, demostrando cariño, ninguna sabia a que se debía el revoltijo de emociones que se concentraban en el estómago de ambos cada vez que estaban así de cerca, o como sus corazones se aceleraban y empezaban a palpitar más rápido de lo normal, o porque Jimin se sentía protegido cuando estaba cerca del cuerpo de jungkook, o porque jungkook sentía la necesidad de proteger al chico que posiblemente lo meta en problemas, no le importaba, él quería protegerlo y lo iba a hacer.

-me gustas- rompió el silencio jungkook después de separarse del beso, no sabía porque lo dijo, solo sintió el impulso de hacerlo-

-tú también- respondió Jimin, mostrando seguridad en sus palabras-

Sonrieron y volvieron a unir sus labios, a muchos se hubiera parecido una cosa totalmente loca, ya que, ¿qué clase de persona sentía atracción por otra el mismo día que la conoció?, y digamos que, en este caso, no se conocieron de la mejor manera, ellos lo sabían, pero solo paso, se sentían atraídos por el otro, sentían que debían estar juntos, ambos estaban enamorados, fue un amor a primera vista.

Jungkook poso sus manos en la diminuta y bien definida cintura de Jimin y lo apego más a su cuerpo, Jimin envolvió sus brazos en el cuello de Jungkook y llevo sus manos a los cabellos de este, tirando hacia adelante para profundizar más el beso, de un momento a otro las lenguas de ambos hicieron aparición jugando entre ellas, ambos lo estaban disfrutando, degustando el sabor del otro, y para ambos fue una sensación increíble.

Jungkook bajo sus manos de la cintura a los muslos de Jimin y los levanto un poco, Jimin al instante entendió y pego un pequeño salto para enrollar sus piernas en la cintura del contrario, jungkook camino de vuelta la cama sosteniendo firmemente a Jimin del trasero y aún sin cortar el beso se fue inclinando, hasta el punto donde quedo encima de Jimin entre sus piernas, rosando sus erecciones y haciéndolos gemir a ambos, se separó de los labios de Jimin para bajar a su cuello para besar, lamer y succionar dejando nuevamente chupones en el, pero esta vez eran mucho más notorios, ganándose unos cuantos gemidos por parte de Jimin, que eran como una hermosa melodía para sus oídos, luego de terminar su trabajo allí volvió a sus labios dejo en un pequeño beso y levanto la vista para mirarlos a los ojos y preguntar.

- ¿estar seguro de esto? – era verdad que estaba caliente, pero aún le quedaba un poco de cordura, más porque se habían conocido apenas ese mismo día y habían fingido ser novios frente a su hermano-

-si- dijo un la voz ronca- pero hay un pequeño detalle- su voz salió apenada-

- ¿Cuál? –

-soy… soy virgen- dijo con un evidente sonrojo, que hizo que el corazón de jungkook se detuviera, se veía realmente adorable-

-yo también- admitió, jungkook, y era verdad, era cierto que tenía muchas mujeres tras de él, pero ninguna le logro llamar la atención lo suficiente como para acostarse con alguna-

En ese momento los dos se sintieron realmente afortunados, iba a ser la primera vez de ambos y estaban felices de perderla con la persona contraria, volvieron a unir sus labios, esta vez de forma más necesitada, soltando pequeños jadeos, jungkook recorrió todo el cuerpo de Jimin aun con ropa, empezó por piernas hasta llegar a sus pezones, tomo uno entre sus manos y lo masajeó, escuchando a Jimin gemir de placer, luego a paso al otro y repitió la acción, tiro de él, lo masajeó, todo aun con la ropa puesta.

En cuestión de minutos ambos ya estaban totalmente desnudos, jungkook aun acariciaba la suave piel de Jimin, sintiendo como esta se estremecía bajo su tacto, jungkook no tenía lubricante, por lo que llevo tres de sus dedos a la boca de Jimin, este pareció entender ya que los chupo lubricándolos con su saliva, cuando jungkook sintió que sus dedos ya estaban lo suficientemente lubricados, los saco de boca de Jimin y viajo a su trasero, acariciándolo a su paso, mientras busca su entrada, cuando la encontró masajeó los costados sintiendo a Jimin removerse buscando más contacto, no lo hizo esperar y poco a poco introdujo el primer dedo, lo hizo lento para no lastimarlo, movió su dedo de adentro hacia afuera, hasta que sintió que ya estaba lo sufisientemente preparado para recibir un segundo dedo, y repitió la acción, estirando la estrecha entrada de Jimin, luego metió el tercero e hizo los mismos movimientos, todo mientras escuchaba pequeños gemidos provenientes de la boca del rubio, cuando sintió que ya estaba lo suficientemente preparado saco sus dedos, empezó a lubricar su miembro con los mismos, y Jimin por fin tuvo la oportunidad de verlo, inconscientemente se relamió los labios, sí que es grande pensó, subió su mirada para encontrase con la de jungkook, quien tenía una pequeña sonrisa burlona, y Jimin lo miro como diciendo >enserio crees que eso quepa dentro de mi<, jungkook lo noto y solo dijo >lo disfrutaras<.

Cuando sintió que su miembro estaba lo suficientemente lubricado, se agacho tomando los labios de Jimin en beso suave, uno que mostraba cariño y confianza, bajo sus manos a sus piernas y lo acomodo mejor, alineo su miembro en la entrada del rubio y poco a poco fue entrando, Jimin arqueo su espalda por él dolor mesclado con un poco de placer, soltando un gran gemido se aferró a los brazos de jungkook y apretó su agarre hundiendo un poco sus uñas en la piel del pelinegro, mientras se escapaba una pequeña lágrima, que fue limpiada inmediatamente por los labios de Jungkook, quien después de haber entrado por completo dentro de Jimin no se movió, para que el rubio se acostumbrara a su tamaño.

Cuando Jimin sintió que el dolor fue reemplazado por placer una inmensas ganas de obtener más, enrollo su piernas en las cadera de Jungkook para luego decir >ya puedes moverte<, jungkook no se hizo de rogar y empezó con un vaivén lento, quería que Jimin lo disfrutara, el rubio sentía que estaba tocando el cielo con cada envestida que daba, apresaba sus labios con sus dientes para evitar soltar grandes gemidos, pero al sentir que jungkook toco con la punta de su pene su prostática no pudo evitar emitir un grito de palcer.

- ¡ah! Jungkook… justo hay- gimió-

Ante esto jungkook fue acelerando sus envestidas arremetiendo una y otra vez contra la próstata del rubio, logrando hacerlo gemir de placer, ahora las envestidas eran rápidas y profundas, sin llegar a ser rudas, en toda la habitación y quizás hasta fuera de esta solo se podía escuchar el sonido obsceno de pieles chocando debido a las fuertes envestidas que daba jungkook.

Jimin sintió un cosquilleo en su estómago que le aviso que estaba a punto de correrse, jungkook lo noto así que acelero un poco más sus envestidas, una, dos y tres envestidas más bastaron para que ambos se corrieran al mismo tiempo, jungkook se corrió dentro de Jimin y este último es su abdomen manchando a su paso el de jungkook, ambos estaban sudados con el cabellos húmedo pegado a sus frentes, jungkook se dejó caer sobre el cuerpo de Jimin sin aplastarlo, mientras ambos intentaban regular sus respiraciones.

Cuando estuvieron recuperados, jungkook salió de Jimin y se tiro a un costado, atrayéndolo por la cintura apegando sus cuerpos aun sudados, Jimin gustoso se dejó hacer bajo los brazos del pelinegro.

Estaban en un silencio cómodo, jungkook acariciaba la espalda desnuda de Jimin, mientras este estaba recostado sobre su pecho escuchando el sonido relajante de corazón de Jungkook.

- ¿quieres ser mi novio? – rompió el silencio jungkook- pero de verdad-

Jimin se emocionó y sonrió, era las palabras que estaba esperando.

-claro que quiero- aseguro levantando la vista-

Jungkook sonrió ante la respuesta mostrando sus dientes de conejo, y esa sonrisa hizo que el corazón de Jimin se derritiera, ese hombre era hermoso, y no solo él lo pensaba, jungkook también consideraba a Jimin el ser más hermoso del mundo, ambos estaban “enamorados”, se dieron un último beso, para después quedar dormidos en los brazos del otro.

Pero, no todo en la vida el color de rosa, y Park Chanyeol se iba a encargar de hacérselos saber a ambos chicos.

El hombre se encontraba en su gran mansión, insultando a los guardaespaldas de su hijo, por haberlo dejado escapar.

- ¡¿Qué carajos tienen en la cabeza?! – grito el hombre enfurecido, dando un golpe a su lujoso escritorio de madera- ¡¿cómo mierda se les pudo escapar?! ¡¿saben lo que pasara si no lo encuentran imbéciles?! –

Los 7 hombres bajaron la cabeza con el miedo recorriendo sus cuerpos.

-lo sentimos señor- hablo uno de ellos- el joven Jimin nos dijo que iría al baño, y cuando estuvo lejos empezó a correr y no nos dio tiempo de reaccionar-

El hombre sentía aún más furia, por lo que sacó su arma que estaba en uno de los cajones del escritorio, apunto la cabeza del hombre y disparo, matándolo al instante.

-desaparezcan el cuerpo- ordeno guardando su arma-

Los demás asintieron ya que no querían terminar igual, dos de ellos se llevaron el cuerpo sin vida.

-encuentren a mi hijo- hablo Park cuando bio que se habían llevado el cuerpo- y matan al hijo de puta que lo ayudo a esconderse y también a su familia- sentencio sentándose en su escritorio-

Los 4 guardaespaldas asintieron, y salieron del lugar.

Park Chanyeol un hombre de 40 años, se dedicaba a la comercialización de "alimentos enlatados", su empresas era una de las más reconocidas de Busan, claro solo era una fachada para tapar sus negocios ilícitos, ya que a lo se dedicaba era al contrabando de armas, droga incluso personas, todo bajo la máscara de un empresario responsable, tenía casi a todos los policías comprados y estos eran los que dejaban pasar sus cargamentos sin ser registrados, también tenía socios que al igual que el utilizaban sus empresas como fachadas para sus negocios ilícitos, pero él era el de mayor poder, todo lo respetaban y temían, pero tenía un enemigo, el cual vivía en Seúl, Jeon Min Ho, su rivalidad se debía a que hace 10 años atrás, había encontrado a Jeon revolcándose con su esposa Park Shin Hye, desde ese momento le declaro la guerra a Jeon y mato su esposa, y también mando matar a la esposa de Jeon, Kim Yungsun de Jeon, quería matar también a su familia, pero después ya no supo nada de él ni de sus dos hijos, investigo y supo que se había mudado a Seúl, pero que estaba solo, busco a sus hijos, pero le fue imposible dar con ellos, ahora tenía otro problemas, su hijo, por mucho tiempo tuvo que mentirle diciendo que su madre había muerto por un accidente, y ahora que por fin el muchacho le iba a ser útil ya que si se casaba con la hija de su socio Kim Woojin, tenía aseguradas muchas ganancias gracias a la unión, por eso tenía que encontrarlo y de eso se encargaría el mismo si llegase a ser necesario.