JOHANSI

Existen dos tipos de sociedades y personas en la vida. 

El león, quienes vienen a ser los dueños de las empresas más grandes del mundo, son valientes, audaces, fuertes, no importa quien se les interponga en el camino, los barre como si de polvo se tratase.

Las gacelas, aquellas criaturas que en cuanto ven al león, le temen, pues su presencia en cualquier lugar impone respeto y son temidas.

Poco antes de la llegada de Jhonatan, sus padres y mi padre, April, Amber y yo nos cambiamos a una mesa más grande que estaba cerca a la que estábamos anteriormente, mesa que Holden también atendía, y cómo rato antes Holden nos había traído la comida, le pedimos que la trasladara a la otra mesa, al principio nos miró extrañado porque era una mesa muy grande para tres personas, pero sin reproches ni quejas, él accedió.

Al rato ya habían llegado los ya antes mencionados, papá cuando nos vio enarco una ceja extrañado.

— Amber le dijo que íbamos a llegar antes que ustedes, hasta nos adelantamos con nuestros pedidos. — Miré a mi papá risueña sosteniendo mi rostro con ambas manos.

— Bueno entonces, tomen asiento. — Invitó mi papá a la familia de Jhonatan.

Sentí mi teléfono vibrar y cuando encendí la pantalla vi un mensaje de Jhonatan, por lo que decidí abrirlo.

[De este lado no atiende Holden, ¿Verdad?]

[Era la única mesa grande que quedaba]

[¡MIERDA! Acaso me quieres ver muerto, además, no pudieron ir al segundo piso]

~ ¿Hay un segundo piso? ~ Me cuestioné en mis pensamientos.

[¿Hay un segundo piso?]

[Menuda idiota]

Dejé en visto a Jhonatan un momento para abrir el chat de Holden y escribirle para darle las buenas nuevas.

Ahora verás quien es el menudo idiota, Jhonatan Gardner.

[Hola Holden]

[Veo que llegó tu prole, supongo que por eso cambiaron su mesa, no te preocupes, ahora voy a atenderlos]

Pero no había analizado la vestimenta de Jhonatan, vaya, pero que astuto, usa gorra para que Holden no lo reconozca.

[Debes venir pronto, hay algo muy interesante]

[¿Ha sí?]

[Vino Jhonatan]

[Ahora me las va a pagar todas redonditas ese idiota]

[No hay de que]

[Cierto, gracias por el dato. Cerebro de nuez]

[Idiota]

[Tu idiota😉]

*Mensaje eliminado*

¡¿Qué fue eso?!

[No sirve de nada, lo vi de todas maneras, 'Mi Idiota']

Cerré el chat con Holden y volví a abrir el chat con Jhonatan.

[Menuda idiota]

[Creo que alguien quiere verte Jhonatan, ¿Por qué no das la cara?]

Holden se estaba acercando a nosotros, en su rostro se dibujó una sonrisa asesina, oh vaya Jhonatan, sí que estás muerto.

Pero su expresión cambió por completo cuando vio a mi padre.

~ Jhonatan tiene razón, eres una menuda idiota ~ Me insultó mi subconsciente.

— ¡USTED! — Holden se exaltó al notar la presencia de mi padre.

Demonios, olvidé que ayer papá le cerró la puerta en la cara a Holden.

— ¡TÚ! — Papá volteó en cuanto escuchó su voz. — ¿Qué haces acá niño? Acaso no te dije anoche que te alejarás de mi hija. — El entrecejo de papá se frunció hasta más no poder, después de todo, no fue buena idea cambiarnos a esta mesa.

Debí ir a buscar mesa al segundo piso.

~ Floja ~ Me reprendió mi subconsciente.

— Pues no señor, yo solo recuerdo que me cerró la puerta en la cara, además, yo trabajo acá. — Holden se señaló a sí mismo con el entrecejo fruncido.

— Pues largo. — Dios mío, ampáranos.

Hasta donde me permití conocer a Holden el año anterior y mi convivencia con mi padre de toda la vida, se que estos dos van a terminar peleando peor que perro y gato.

— Por lo visto no sabes quién es él, verdad Connor. — Interfirió el padre de Jhonatan.

— Porque tendría que conocerlo.

— ¿Te suena el apellido Rooney? — Al escuchar la pregunta del padre de Jhonatan, el rostro de mi padre se palideció.

— ¿Qué idiomas hablan señoritas? — Preguntó Holden.

— Amber y April hablan español, yo no hablo ningún idioma. — Respondí, a lo que April y Amber asintieron.

— Bien. — Hizo un pausa y volvió su mirada hacia mi padre.

Holden empezó a hablar en lo que supongo, era alemán, puesto que la noche anterior me había comentado que él hablaba español y alemán, sabía reconocer cuando alguien hablaba en español, pero otros idiomas, Dios, siento que estoy escuchando un ritual satánico.

La discusión entre los dos continuaba, las únicas palabras que entendía eran Holden Matheo Rooney Müller, Crashwood, Yaramoshi y el nombre de mi padre, no sé porqué, pero esto me trae mala espina.

Conforme avanzaba la conversación, la intensidad subía, conociendo el temperamento de ambos, roguemos porque esto no termine en una carceleta pública.

Pasó ya un rato y mi padre se ha quedado callado con su rostro palidecido, mientras Holden seguía hablando con un semblante siniestro e intimidante.

Recuerdan cuando use el refrán del león y la gacela en un principio, pues en mi familia los leones somos mi padre y yo, siempre obtenemos lo que queremos a costa de todo sin importar nada y las gacelas April y Amber son quienes obedecen con tal de complacer a los demás y obtener la aprobación en nuestro entorno.

Holden, él era un líder y león innato, desde que colocaba un pie en la escuela, las miradas siempre se dirigían hacia él, el recreo, podría ser un nerd, pero era un nerd temido, solo bastaba su presencia para hacer que ellos pusieran una cara de horror.

Pero, los papeles se vieron afectados, tal parecía que ahora las gacelas somos mi padre y yo, la razón, pues mi padre parece tenerle miedo a un mocoso de 16 años que apenas acaba de convertirse en adolescente y está descubriendo y explorando sus emociones y su cuerpo, aunque dudo que él haga eso.

~ Puerca ~ Me reprende mi subconsciente.

Si la alta sociedad se enterara que uno de los grandes líderes empresariales, le tiene miedo ahora mismo a un mocoso de 16 años y que no es de nuestro estatus social, pues, créanme, no se lo creen, es como pedir que crean en Narnia.

Siempre obtuve lo que quería, podría ser que Amber y April fueran las mayores, pero siempre seguían órdenes de los demás para tenerlos satisfechos y luzcan perfectas ante la mugre aristocracia, mientras que yo era un espíritu libre, cada que entraba a algún lugar, las miradas se dirigían a mí, era el centro de atención, imponía respeto y temor en cada paso que daba, será porque siempre hacía lo que se me venía en gana, supongo que admiraban mi valor para hacer ello, porque en la aristocracia, créanme, todos son muñecos de plástico moldeados y diseñados para la perfección, tienen un propósito desde que nacen, yo también lo tenía, pero decidí romper los hilos que me tenían atada, reglas de etiqueta, moda, comportamiento, 'ser una buena esposa y madre'.

¡Váyanse a la mierda todos!

Yo no quiero eso, en cambio April y Amber siempre siguieron órdenes de mis padres, las lecciones para todo lo ya antes mencionados, preparadas para sentar cabeza y abandonar sus sueños, pero ahora no era así, nunca fui ignorada, nunca fui intimidada, ahora el hecho que el chico que me gusta me ignora e intimida a mi padre y que se fija en mi hermana mayor, la gacela que está yendo contra toda corriente a todo lo que le enseñó papá, me aterra a mi.

La noche cayó, mi padre y los padres de Jhonatan solo charlaban, Amber y Jhonatan peleando, April con su teléfono, y yo, frustrada por ser ignorada.

Lo repito, nunca fui ignorada.

— Me disculpan, me retiraré un momento y volveré. — Me levanté de mi silla y tomé mi bolso para poder salir de la cafetería un momento.

Emprendí camino a la esquina de la calle. Mi teléfono timbró, encendí la pantalla y me di cuenta que había un mensaje.

[Oye, ¿Estás bien? ¿Ya te vas? Si gustas puedo pedir permiso para llevarte al paradero]

— Idiota. — Susurré.

Lo dejé en visto, de verdad cree que le voy a responder.

Menudo idiota. Lo odio.

— AHHHHHHHHHHH — Grité desfogando todo el coraje que contuve cuando estuve en la cafetería, acaso ese imbécil cree que con una simple, tonta y tentadora pregunta - propuesta caería y así poder charlar con él. Pues se equivocan.  — ¡Johansi Brown tiene dignidad! — Las personas que transitaban la calle voltearon a mirarme con rareza.

~ Que sutil eres mi estimada. ~ Me reprende mi subconsciente.

Después de que mi subconsciente me reprendió, solo apreté los puños con fuerza queriendo golpear a todos. Saqué mi maquillaje y mi espejo para tirarlos al suelo y pisotearlos hasta romperlos por completo.

— No creí que fueras tan caprichosa, cerebro de nuez. — Esa voz.

Volteé instantáneamente al escuchar su voz, ahí estaba él, tapando su sonrisa con su puño.

— ¡TÚ! — Lo miré con enojo, cree que con su sonrisa hará que me olvide que dentro de esa cafetería coqueteaba con mi hermana mayor.

— Que ridicula eres cerebro de nuez, hacer un berrinche frente a todos en la acera pública, vaya que no tienes dignidad. — Hijo de

— Callate antes que te golpee donde el sol no entra estúpido.  — Sentencio.

— ¿Me estás amenazando? — Me pregunta divertido, acaso este chico quiere morir siendo tan joven y buen mozo.

— Mira Rooney, mejor vuelve a tu trabajo que yo vuelvo a mi casa — Me volteé cruzada de brazos.

— No quieres que te acompañe — Escuché su interrogante a mis espaldas.

Me volteé solo para sacarle la lengua y enseñarle el dedo del medio.

:— Pero que infantil eres cerebro de nuez — Comentó extrañado, mientras volvía a darle la espalda.

— Si el joven me lo permite, me retiro. — Dije sarcástica para después alejarme lentamente de él.

— No, no lo permito. — Escuché nuevamente su voz, sonaba imponente y autoritario.

— ¿Disculpa? — Pregunté volviendo al mismo lugar para enfrentarlo.

— Disculpa aceptada. — Contestó divertido.

Todos en la calle voltearon a mirarnos después de la cachetada que le di a Holden, este solo se sujetaba su mejilla con un gesto sorpresivo.

— Tú a mi, no me das ordenes, no me permitiré sumirme a alguien tan insignificante como tú — Lo empujé

— ¿Qué quieres decir con 'Alguien tan insignificante como yo'? — Preguntó entre comillas.

— Quiero decir que no seré tan estúpida como mi padre, que se dejó intimidar por un mocoso de 16 años con un estatus socioeconómico que está muy por debajo de los subsuelos.

— No escupas al cielo que te caerá en la cara. — Sentenció para luego voltear para regresar a la cafetería.

HOLDEN

— Tks, con alguien insignificante como yo, por favor, ni que fuera buena merca. — Empecé a susurrar en lo que me dirigía de vuelta a la cafetería, mientras sostenía mi mejilla enrojecida por la cachetada que me dio Johansi, sabía que sus golpes dolían, pero no creí que fuera tanto.

Cuando llegué, seguían ahí los padres de Jhonatan, las hermanas mayores de Johansi y su padre, sí, el tipo que me cerró la puerta en la cara anoche.

Al ingresar a la cafetería tuve que hacer una sonrisa fingida para los clientes y mis compañeros de trabajo, pero mi gesto volvió a cambiar cuando ingresé a la cocina.

— ¿Johansi te golpeó verdad? — Me preguntó Adam llegando repentinamente.

— ¿Cómo sabes tú eso? ¿Acaso me espiaste cuando fui a verla? — Responder una pregunta con otra pregunta, un clásico.

— Tu mejilla enrojecida y los gritos que se escucharon hasta acá, lo delatan — ¿Tan enrojecida está mi mejilla?

— La verdad no entiendo porque te gusta si es, caprichosa, engreída y ... — No lo dejo terminar por mi interrupción.

— Hermosa — Lo interrumpo, mientras suspiro.

— Tonto — Vi como rodaba lo ojos en señal de desagrado.

— Dime tú, ¿Qué harías si alguien te gustara? — Soy menso o me parió un teletubbie, ese alguien soy yo.

— De verdad quieres una respuesta — Sugiere.

— Mejor no, tú eres un ser completamente asocial.

— Simplemente desistiría, porque si el sentimiento no es mutuo, desistiría, no puedo obligar a alguien a amarme, no puedes mandar en su corazón. — Eso quiere decir que ya se rindió conmigo. — Porque todo acaba cuando se lo dices. — Ok, no, aun no desistió conmigo, me equivoqué.

— Vaya, pero que gran consejo amigo, pero ni loco me declaro, mi orgullo por delante. — Sonreí triunfante, ante esta acción Adam solo se golpeó la frente con la mano.

— Y después porque ella no te hace caso. — Y yo tampoco te hago caso y aquí estamos amigo mío.

— No importa — Alcé los hombros restándole importancia.

Ya habíamos cerrado la cafetería y estábamos en camino a nuestras casas con Aidon, Justin y Adam.

— Oye Holden, dinos, ¿Qué tan cierto es que vas a salir con la hermana mayor de Johansi? — Pregunta Justin. Mierda, cierto, alto ¿Acaso Johansi se fue porque estaba celosa porque iba a salir con su hermana? 

— Pues sí.

— Eres todo un enigma Holden, primero dices que te gusta Johansi y luego dices que vas a salir con su hermana mayor. — Sentenció Aidon.

— Ella se puso celosa — Dije para luego sonreír como un tonto.

— ¿Y eso que Holden? — Pregunto Adam

— Que le gusto, sino, porque ella se hubiera enojado conmigo porque voy a salir con su hermana mayor, se supone que no le debería interesar. — Respondo la interrogante de Adam.

— Sí claro, y mi padre es rey de Inglaterra — Aidon, Adam y yo volteamos a ver extrañados a Justin por su patético comentario. — Ves, así de patética es tu afirmación Holden.

— De hecho, le encuentro lógica. — Comenta Aidon

— Desgraciadamente, yo también concuerdo con Aidon y Holden. — Le sigue Adam al comentario de Aidon.

El resto del camino fueron bromas y risas entre nosotros, al final de todo, fue una noche bastante tranquila, a mi parecer.

JOHANSI

Mi padre y hermanas llegaron a casa a la medianoche y luego cada uno a su cama, pero adivinen que, son la una de la mañana y no puedo dormir, pues solo pienso en como Holden puede ser tan estúpido en desafiarme, además de escuchar risitas en el cuarto de April, acaso no se puede callar, no se puede retener la risa o que.

Me levanto decidida de mi cama para ir al cuarto de April y cuando llego, ella está acostada en su cama con el celular encendido.

— Oye, Podrías callarte, hay quienes tienen que levantarse temprano. — April se sienta para luego mirarme de arriba - abajo.

Ay por favor, estoy en pijama, ni que fuera delito vestir así siendo la una de la mañana.

— Pues fácil, solo ponte tampones en las orejas y duermes, busca soluciones, no crees más problemas.

Me lanzó a su cama y le arrebato su teléfono y vi con quien hablaba.

Holden

[Vaya que tu hermanita tiene un carácter de temer]

[Ni te sorprendas, ella ha sido así desde siempre]

[Hacer berrinche en la calle es demasiado vergonzoso 

y patético, ¿Acaso es adoptada?]

[Ya quisieramos, es la vergüenza de la familia]

[¿De verdad? Los compadezco]

[Tuvimos que irnos de Manchester por su deshonra]

[¿Qué hizo?]

[Se acostó con varios muchachos de una escuela vecina]

~ Fue suficiente ~ Intervino mi subconsciente para luego apartar mi vista empañada por las lágrimas, no creí que mi mejor amiga y confidente pensara eso de mí.

— No - me - vuel - vas - a - ha - blar — Dije sílaba por sílaba para después tirarle una cachetada e irme a dormir.

Este día fue muy agotador, mentalmente agotador, quisiera no seguir en este mundo, pero en mi vida no mando yo, sonará religioso, pero si me intentara suicidar, seguro no moriría, porque como dirían muchos, 'Su hora no ha llegado'.