Bradley va hacia su lugar donde está sepultado y busca su ramo de novio.

- Rosas para el amor eterno- las arranca del ramo- lilas para la dulzura...- suspira- nube blanca...- tira el ramo y se sienta en su ataúd.

Aparece la pequeña araña que le había ayudado a encontrar a Max.

-¿Por qué tan triste bonito?- le dice dulcemente.

-Creo que Max tiene razón, tal vez somos diferentes- hace un puchero.

- Tal vez deberían revisarle el cerebro- de nuevo el gusano, Bradley lo saca de su cabeza- Yo me sacrifico-.

- Tal vez si debe estar "con la señorita viva"- lo dice en tono de burla- la de rosadas mejillas y...- se pone una mano en su mejilla- corazón latiente-.

- Oh esa chica no vale la pena, tu eres mucho más que ella...tu tienes...tienes...- se queda pensando la araña- ¡Una maravillosa personalidad!-.

Bradley niega con la cabeza y sigue con su cara de tristeza.

-¿Qué es lo que tiene esa malcriada que tú no lo tengas?- el gusano mira a Bradley.

-Lo bello de tu risa no se puede comparar- y la pequeña araña no mentía, algunos alfas cuando Bradley vivía habían hecho de todo para escucharlo reír.

-Pero tiene pulso- deja al gusano cerca de la araña.

- Valorado sin razón, excesivo y sin valor- tratando de alzarle el ánimo.

-Si el pudiera conocerte mejor- sonríen ambos hacia Bradley.

Bradley niega con la cabeza ante la idea.

La araña se mueve hacia la mano donde estaba el anillo- Y el anillo no lo lleva donde debería estar-.

-Ni siquiera toca el piano, ¡mucho menos cantar!, no se puede comparar-.

Bradley les da la espalda- Pero aún respira....-.

Los animalitos se volvieron a mover para estar cara a cara con Bradley- ¿Y qué?, no es importante, es excesivo, sin valor, si solo viera lo especial que puedes ser, si el pudieran conocerte mejor....-.

Bradley suspira y se levanta del ataúd- Si me quemó con la vela no siento el calor...si un cuchillo me atraviesa no hay dolor...- comienza a caminar por el lugar- Y su corazón palpita y yo muerto se que estoy...y el dolor que siento en mi, anda y dime qué no es real- se sienta en una esquina- pero aún tengo una lágrima que dar...-

-Lo único exclusivo que tiene algún sentido es que viva esta- se acerca de nuevo a Bradley.

- Excesivo, sin valor, pasajero es ese estado todos sabemos muy bien y la muerte es el remedio que nos llega sin saber-.

-¿Y que?-.

- Excesivo, sin valor, si tan solo pudiera ver lo especial que puedes ser...si el pudiera conocerte mejor-.

Bradley vuelve a negar con la cabeza y se levanta para ir de nuevo hacia su ataúd.

-Si me quemó con la vela no siento dolor, en el hielo o en el sol todo es igual...- se acuesta y se pone las manos cruzadas- Y mi corazón me duele...aunque no palpite...siente el dolor que tengo aquí- señala el pecho- anda dime no es real y yo muerto se que estoy...pero aún tengo una lágrima que dar- cae al instante la última lágrima que tenía en su sistema y sus amigos suspiran para irse de ahí.

Bradley necesitaba estar solo unas horas y ellos lo entendían.

Mientras tanto en el mundo de los vivos Roxanne estaba como loca gritando por toda la casa que ayuden a Max.

- Es cierto madre, Max está casado con un omega muerto, ¡yo lo ví!, estuvo justo aquí con Max- desesperada por qué alguien le creyera.

- ¿Estuvo en tu habitación?- indignada de que se atreviera a entrar a la alcoba de su hija.

-Tenemos que ayudarlo madre- la mira suplicánte.

- Pero que escándalo - niega con la cabeza la señora Rover.

La sirvienta se acerca a Roxanne para intentar calmar la- Ven siéntate cariño, estás temblando, te traeré una frazada-.

La señora Rover gruñe y saca a la sirvienta de la habitación- Mejor tráele una camisa de fuerza, se ha vuelto loca- vuelve a gruñir y saca una llaves.

Roxanne mira horrorizada a su madre, la iba a encerar en su habitación y así lo hizo.

La joven peliroja busca una manera de ayudar a Max y recuerda que no estaba cerrado su balcón.

Sale y trata de hacer un plan para bajar a la calle sin que nadie la vea, agarra las sábanas y hace una cuerda con ellas.

Al bajar corre rápidamente hacia la iglesia, si alguien sabía sobre los muertos y los matrimonios es el pastor, tocó y tocó la puerta.

-¿Ahora quien es?- dijo el pastor yendo hacia la puerta de la iglesia, al abrir la puerta ve a la señorita Roxanne- Señorita Rover debería estár en casada postrada por la pena-.

-Debo preguntarle algo por favor- lo mira suplicánte.

-No es buen momento- tratando de cerrar la puerta de la iglesia.

- Por favor se lo suplico- tratando de entrar a la fuerza- es el único que sabe lo que hay más allá de la muerte-.

- Un terrible tema para una novia- suspira.

-Es un novio al cual temo, debo saberlo...- lo mira segura de lo que iba a preguntar- ¿Los vivos se casan con los muertos?-.

El pastor la mira confundido- ¿De que está hablando usted?-.

-Hablo de Max, se casó con un cadáver, su novio es un cadáver...debe a ver alguna manera para deshacer lo que ha hecho- lo mira nerviosa.

El pastor aún un poco confundido decide que lo mejor es seguirle la corriente a la señorita Roxanne, la perdía de su novio la había dejado así.

- Creo que se lo hay que hacer- sonríe y le toma la mano para llevarla a su casa.

Toca la puerta una y otra vez hasta que la señora Rover abre por fin la puerta.

- ¡Roxanne!, ¿Qué haces afuera?- gruñe la madre de la pelirroja.

-Esra hablando incongruencia , sobre uniones profanas, temo que ha perdido la razón- suspira cansado.

-¡No es verdad!, ¡Suelteme!- tratando de safarse del agarra del pastor.

-Gracias pastor, muchas gracias- sonríe forzadamente y agarra a su hija para cerrar la puerta.

-Madre, padre, ¡Max necesita mi ayuda!- los sirvientes se la llevaron hacia su alcoba mientras los señores Rovers suspiraban preocupados por la boda.