Bakugou ha estado muy callado y serio últimamente, no había lanzado maldiciones en el día eso ya preocupaba a Kaminari así que iba a aprovechar que hoy estudiarían para hablar con el.

En la habitación de Bakugou, ambos se encontraban sentados en la cama estudiando los temas vistos recientemente así que decidió preguntar.

—¿Katsuki que tienes?
has estado muy serio y distante últimamente.

—.....

— dime

Bakugou suspiro dejando sus cosas de lado para comenzar a hablar.

— He estado pensando que yo no soy lo mejor para ti. No te merezco, podrías haber escogido a alguien que se la pase diciendo lo mucho te ama a diario, que todo el tiempo te diga cursilerías, que no se dejé dominar por su maldito orgullo; vivo con la idea de que me dejes y te vayas con ese tal Shinsou, aunque talvez es la mejor opción el te tratara como se debe, talvez... el te merezca más que yo.

Iba a llorar de la impotencia, Denki no se merecía una basura como el.

Seguiría diciéndo más de no haber sido porque una bofetada lo detuvo.

—¡deja de decir idioteces! - gritó Kaminari.

— ¿ehh?...

— Escucha pueden haber millones, infinidad de personas en el mundo pero yo te escogí a ti, ¡te quiero a ti! así que limpia esas lágrimas Bakugou Katsuki porque te amo con cada uno de tus defectos, con ese carácter que te cargas y no me importa si no eres cursi por que aunque no sean palabras lo demuestra con tus acciones, me gustas tal cual entiéndelo.

Kaminari que ya se encontraba llorando lo abrazó fuertemente guardando el rostro en su hombro.

— jamás te dejaría ni cambiaría por nadie — susurró.

Bakugou conmovido levantó una mano para acariciar su cabello.

— eres lo mejor que me ha pasado,
te amo rayito — le dió un beso en la coronilla.

— yo también te amo.

Juntaron sus frentes y se quedaron un rato así, viéndose a los ojos y disfrutando de la cercanía.