"Hermanos taza hunden un barco ¿Estos son nuestros héroes? Léalo aquí"

La noticia se esparció como humo en el aire, ahora todos los periódicos tenían eso en su portada compuesto por fotos de varios momentos vergonzosos o veces en las que hicieron algo dudoso.

Era como si hubieran estado el momento perfecto para publicarlo y sin duda este lo era.

No todos los días alguien conocido como un héroe empeora las cosas, aunque siendo honestos fueron muy dramáticos con ello y los medios habían decidido sacar ventaja de ello de la peor manera, lo cual sin duda estaba afectando psicologicamente a la taza azul, que no podía parar de leer el artículo que tenía en sus manos.

Era muy distinto soportar el hecho de que el diablo poseyera tu alma y que todo el mundo estuviera en tu contra.

Lo segundo lo recordaban todos los días, durante cada minuto de cada hora y él no entendía porque si intentaron hacer lo correcto, mientras que lo primero a pesar del gran pesar algunos te podían llegar a apoyar a su manera al tomarlo como una mala toma de decisiones y ya tenías la idea de lo que hiciste para merecerlo.

De ser por ellos no saldrían siquiera de casa para no verse en primera plana siendo expuestos, pero no contaron con que el Sr Kettle siempre escuchaba o leía el periódico para ponerse al día de los temas actuales.

Fue gracias al pedido de los jóvenes que dejó de hacerlo y tomaron la desición de quemarlos en la chimenea, aunque para el mayor era algo exagerado desde su punto de vista, pero estaba determinado a comprender a sus nietos, así que aceptó sin oponerse.

Así que si ellos se sentían más cómodos así, dejaría que lo hicieran siempre y cuando no terminen provocando un incendio o un desastre mayor al que estaba haciendo Cuphead

-¡Mugs! ¡Reacciona de una vez por todas!-

Le gritó arrojando un montón de papeles a la chimenea causando una fuerte llamarada que por suerte no llegó a algo inflamable.

Su hermano no se movía, sus ojos estaban puestos en el noticia que acababa de leer mientras sus manos apretaban con más fuerza el papel arrugándolo a tal punto que ya nisiquiera se podían leer las letras.

-Yo tomaré esto... ¿Sí?- Trató de sacárselo de sus manos, no pudo lograrlo hasta que el contrario finalmente aflojó el agarre

Tocó el fuego y se encendió a igual que los demás para ir degradándose hasta quedar solo cenizas oscuras, un buen alimento para que las llamas sigan creciendo y eliminen el resto a mayor velocidad.

-Mugs ¿Seguro que estás bien?... ¿Mugs?-

-¿Q-que?... yo... voy a tomar un descanso, no me sigas- 

No dijo mucho más que eso antes de caminar directo a la habitación que compartían y cerrarla de un golpe, su abuelo de inmediato alzó la voz preguntando de que estaba pasando, por lo que la taza roja solo menciono que necesitaban un espacio para pensar mejor las cosas.

Observó la enorme cantidad de papeles botados por la habitación, a pesar de haber quemado la mayoría aún quedaban restos y algunos artículos de noticias que habían salido volando. 

Era todo un desastre, pero almenos no podía ver sus propias noticias entre todo aquello.

No podía creer que una simple acción causara todo esto, literalmente les habían salvado el pellejo de Devil y el hecho de que ahora los traten de esa forma se sentía vacío, por no decir que mal.

Conocía como eran los habitantes de Inkwell, a veces podián actuar de forma apresurada con ciertas acciones que vieran incorrectas, pero esto ya parecía demasiado. 

El lado positivo era que gracias a ello su mente estuvo más clara, podría parecer algo extraño pero el hecho de que no lo vieran un héroe le quitaba un peso de encima como si algo de su libertad le fuera devuelta.

Ya no los miraban como los salvadores que todo lo arreglan y gracias a ello dejaron de convocarlos a la mayoría de los problemas matutinos, lo cual le dio más tiempo para averiguar sobre el paradero del demonio.

Aunque no podía decir lo mismo de su hermano.

Había cerrado la puerta de la habitación con llave, así que no podía saber como estaba exactamente, pero dejándose llevar por lo que ocurrió hace unos minutos, podía interferir que ahora el afectado era él.

¿Y como podría no serlo?

Aunque muchas de las noticias hablaban de ambos, algunos se enfocaban más en la taza azul dando alución a extraños comportamientos o posible locura que debería investigarse más a fondo.

Sentía que estaban en una delgada línea entre volver a la vida que conocían o que manden psicólogos para después enviarlos a un manicomio ignorando todo lo que quisieron por ellos.

Aunque Cups quisiera continuar la investigación con su mano derecha, no podía sacarlo a la fuerza del cuarto, así que tomó la ariesgada decisición de avanzar solo. Sería como un agradecimiento por también tenerle paciencia cuando estaba en condiciones parecidas.

Estaba preparado para irse, tampoco era como si necesitara muchas cosas, ya tenía un mapa trazado y el como seguirlo, estimando volvería a lo mucho en seis horas si es que en verdad encuentra al demonio y tuviera que luchar con él o de otra manera el tiempo podría variar.

Para no preocupar a su hermano le gritó desde el otro lado sobre su idea:

-Encontrar al demonio

-Eliminar todo rastro de su existencia

-Tranquilizar a las masas

-Volver a la normalidad

Era simple y fácil de seguir, así que la tomo como la mejor manera de volver a la normalidad.

Tenía la misma estructura que el que hizo para vencer a Devil y dado que en ese tuvo éxito lo más probable era que en este también.

Dejó una nota debajo de la puerta en el caso de que Mugs estuviera durmiendo ya que no escuchó nada de él mientras le hablaba, asegurándose de que el mensaje era lo suficientemente comprensible:

Una vez seguro de todo se dirigió a la cocina donde su abuelo se encontraba escuchando su radio como siempre, brindándole un fuerte abrazo y comentarle sobre su idea.

Su reacción fue la esperada, se notaba muy nervioso preguntándole si estaba seguro de lo que hacía, Cups le asintió nombrándole que había vencido al mismo diablo, la otra vez no estaba preparado pero ahora sí y estaba más que listo para darle una lección.

Su abuelo no se opuso aunque pareciera querer hacerlo, podía interferir que Cups iría solo por la falta de su hermano. Aunque lo último ya lo tenía en mente tras escuchar el sonido de la puerta, él también sabía lo delicado que estaba la taza azul frente a ese asunto desde el primer periódico que agarró.

Solo se despidió de su nieto en la puerta, no podía hacer más, ya no tenía la misma fuerza o energía que cuando era joven y aunque se lo podría haber negado tenía en cuenta que sería capaz de saltar por la ventana para seguir con su plan.

Al igual que la vez en la que se fueron para luchar contra el diablo, solo pudo rezar por él y rogar que vuelva como la última vez o que al menos no termine en una peor situación en la que podría perder su alma.

Pero el hecho de verlo tan determinado le dio la certeza de que estaba preparado para esto y que si llevaba un mapa era porque ya tenía pensado en donde pisar para no terminar cayendo, sin duda había mejorado.

Con ese pensamiento cerró la puerta.

-A ver, pude hacerlo una vez, así que esta también debe de ser correcta.... ¿Verdad?-

Estaba inseguro.

En cuanto se alejó lo suficiente sintió como un montón de dudas se multiplicaba en su cabeza.

"¿Y si en verdad no estaba preparado?", "¿Y si muere?", "¿Y si este era el plan de Devil desde el principio?", "¿Y si la anterior vez fue pura suerte?"

-NO, Devil está en el infierno y el que estoy buscando se trata en un demonio común y corriente como los demás. No te preocupes Cuphead, vas a salir ileso de esta, claro que sí Cups...
yyy estoy hablando solo.... vaya-

Se dió un golpe en la cabeza. En serio que necesitaba a su hermano, al menos para no morir en medio de este ambiente de soledad.

Hizo aparecer su mapa y lo abrío para mentalizar el camino que seguiría, si sus cálculos estaban correctos el demonio estaría... ¿En el agua?

Bueno, si el pasado él lo escribió así no podía oponerse, aunque primero iría al lugar donde todo empezó, el casino, con el objetivo de recoger más información que podría serle esencial antes de embarcarse en alguna balsa para llegar a la mitad del océano.

Estaba cansado por no decir que totalmente agotado después de correr por su vida en cuanto llego a la ciudad, ¡nisiquiera eso! apenas miró a alguien y ya sintió que lo criticaban con la mirada, no tuvo de otra que salir despavorido cuando alguien en voz alta dijo su nombre.

Fue como ser el único frasco de agua en una maratón. Todos se abalanzaron, desde periodistas hasta personas normales tratando de que les responda algunas preguntas aunque más que eso parecía que querían que escuchara la opinión que tenían hacia su persona. 

Obviamente no tenía tiempo para eso así que se fue utilizando varias bombas de humo para así finalmente perderlos de vista. Viéndolo del lado positivo, esto había hecho que llegara más antes de lo previsto gracias a la pequeña carrera que tuvo, así que podría ir a la mar y regresar a casa más temprano.

Por ahora tenía un excasino destruido que explorar.

Y como esperaba estaba tal cual lo había dejado, la entrada cubierta de piedras por el derrumbe de hace tiempo, simplemente utilizó otra bomba de humo para traspasar sin problemas.

No hubo daños además de que se resbaló y cayó de cara al suelo al no contar con que no era un terreno completamente plano gracias al tiempo y el derrumbe de la última vez.

El ambiente se sentía pesado, literalmente era como estar en frente de una mansión embrujada, una que llevaba años abandonada y en donde había habitado el mismo diablo en su tiempo.

Si así era por fuera, no querría saber cómo era más adentro, aunque si no hallaba nada por los alrededores no tendría de otra que entrar.

A pesar de ese pensamiento caminó sin miedo, ni preocupaciones. No podía ocurrir otro derrumbe debido a que no había más rocas que podían caerse, así que tampoco se tensó por el ruido que hacían sus pies.

Observó el entorno tratando de hallar alguna pista o muestra del posible paradero del demonio, si había salido del infierno o había sido invocado por Devil debía de haber algo, un centro demoniaco, portal, cualquier cosa que le podría dar alguna pista de su procedencia.

Pero simulaba que estaba perdiendo el tiempo al estar ahí. Lo único que encontró diferente fue en el área donde ese diablillo fue aplastado por una roca, lo que parecía su sangre ahora estaba en todas partes siendo uno con el suelo.

Lo tomó en cuenta de igual manera y sin duda fue de las mejores desiciones que pudo haber tomado, porque cuanto lo tocó se dio con la sorpresa de que era algo líquido, un tanto pegajoso pero maleable o en otras palabras, tinta.

Ya tenía una pista, ese demonio estaba hecho de ese material y si unia los puntos podía llegar a una conclusión. 

La explosión que pasó cuando lo vio por primera vez fue porque era inflamable, lo cual significaba que era de un material antiguo, ya que la tinta que hoy utilizaban estaba diseñada para impedir esos accidentes.

Siendo la razón más probable por la que también mantuvo sus distancias con el fuego del barco ese día y no sé acerco a Cups a pesar de tener la az de ganar en una pelea, prefiriendo dañarlo con sus palabras.

-(Pequeño astuto)-

Sin contar que también debía tomar en cuenta que parecía poder cambiar de forma pero no el color de esta, siendo esos colores el blanco y el negro.

Era obvio lo que era ese demonio, se trataba de una invocación hecha a mano probablemente por Devil, razón por la que tenía esos errores obvios a comparación de aquellos que solo teletransportaba del infierno para ordenarles lo que le plazca.

Y al parecer ya había estado en el casino hace un buen tiempo ya que no parecía haber sido creado especialmente para ir en contra él o de Mugs, eso se percibía ya que recibía demasiado daño por una simple bala gracias a la tinta que lo conformaba.

¿Como no se dio cuenta de su presencia en el casino?

Probablemente la respuesta sea ese poder que tenía que cambiar su aspecto físico, pero aún así debería recordar algo suyo de ser el caso.

-Auch-

Se agarró la cabeza por un dolor repentino, demasiada información y razonamiento le estaba afectando. No sabía si debía sentirse orgulloso o humillado por el hecho de que estaba resolviendo el puzzle o que su cerebro había llegado a su límite de la búsqueda de una lógica.

Sin duda Mugs estaría orgulloso de él si lo viera en este momento, aunque al principio se burlaría de su infortunio y después le repetiría lo débil que es mentalmente.

Al parecer no fue del todo una pérdida está investigación, cuando llegara a casa los anotaría para no olvidarse.

Por el momento todo lo demás estaba tan vacío y miserable como debía ser, siendo una señal de que debía adentrarse más al casino.

Aunque hubiera preferido encontrar algo desde afuera que le mostrara en donde se encontraba ese demonio para no hacerlo

-¿Hay alguien ahí? ¿Jefe? ¿Maestro?-

-(¡¿Pero que?!)-

Una voz extraña se escuchó entre las paredes, sonaba como... ¿Esperanzada? 

La taza se agacho a la altura del suelo detrás de la enorme roca que estaba investigando esperando que sea quién sea no lo encontrara, no cargó ni una bala ya que sabía que al hacerlo una luz aparecía en su dedo y revelaría su escondite.

-Aaaah, no tengo tiempo para esto-

Se pudo escuchar varios pasos que rápidamente se sumergieron dentro del casino hasta dejar que escucharse, lo cual le dio la señal para asomarse y poder ver antes de que desapareciera en la oscuridad la identidad del dueño de la voz.

Era ese demonio que les estaba haciendo la vida imposible.

Por la forma en que buscaba a alguien, interfería que sus teorías estaban correctas y que era una creación de Devil ¿Pero que hacía aquí? Se suponía que todos ellos se habían ido y no iban a regresar, algo andaba mal.

-"Primera parte hecha... falta la segundo, eliminarlo de toda la existencia"

Se susurró haciendo desaparecer el mapa y ahora sí alistó una bala para ir hacia donde había visto dirigirse al contrario y de esa manera completar uno de los pasos necesarios para que todo volviera a ser como antes.

De igual forma iba a meterse para explorar, solo que está vez tendría que tener cuidado de que no se note su presencia o que sea lo contrario para así poder terminar lo antes posible.

Cuando entró se topó con todo destruido, lo que alguna vez fue un lugar elegante y objetos de clase ahora hacía que pareciera un enorme sitio abandonado a su suerte.

Algunas cosas estaban llenas de telarañas y otras hechas trizas al caerse de una cierta altura. Como era el caso de algunas mesas o platos.

Se notaba que Devil se desquitó con muchas cosas antes de retirarse, aún se podían ver garras y quemaduras en algunas áreas a pesar del tiempo en el que debían haber desaparecido o al menos ser fáciles de pasar desapercibidas.

A decir verdad era sorprendente el hecho de que todo estuviera en ese estado después de solo seis meses de su pelea.

O en otras palabras cuatro y medio desde que se vio por última vez.

Y si se lo preguntan, sí. Se mantuvo aún en la superficie un tiempo, en el que realizaron vanos intentos de volver a atraer público, antes de darse cuenta que por día no llegaba nadie.

Muchos habían quedado heridos o fuera de servicio, así que muchas atracciones estaban inactivas, no siendo lo suficientemente entretenidas para visitarlo.

Devil no pareció actuar en consecuencia y solo se mantuvo entre esas cuatro paredes durante ese mes y medio o eso es lo que teorizaban los ciudadanos.

Otros dijeron que había vuelto al infierno y después se llevó a todos los demás integrantes del casino, reclamando sus almas para recuperar parte de su fuerza perdida.

Había pocos se iban al extremo con ideas sacadas de alguna película se terror, lo bueno era que nadie las apoyaba.

Ahora que lo pensaba no se sorprendería si durante todo ese tiempo se hubiera enfocado en hacer algo para vengarse y recuperar lo perdido.

Suponía que ahí es donde salía ese diablillo que los miraba entre las sombras, mostrándose en el lugar y tiempo correcto para hacerles perder la cabeza.

Mientras más se adentraba, más habitaciones descubría, áreas en las que no pudo entrar al principio al tener carteles de:

"Solo personal autorizado"

Siendo bien rigurosos con eso para llegar al punto de que aquel que tocara la manija perdía el alma instantaneamente por romper las reglas.

Pero ahora que la presencia de Devil se había esfumado pudo entrar sin miedo y explorar todo, lo cual solo pudo describirlo con unas palabras.

-Es extraordinario...-

Un enorme espacio con escaleras que llevaban a varios pisos arriba, desde el punto en el que estaba notaba varias puertas, algunas cerradas y otras abiertas y hasta parecían estar conectadas a otras salas igual de grandes que esa.

No por nada se veía tan imponente desde afuera.

Tal vez tenga que cambiar sus planes después de todo, no va a ser sencillo investigar todo mientras buscaba al diablillo.

Al menos no tendría que rentar un navío para ir al medio del mar.

Continuará---

Dudas---

Algo random:

-Adoro hacer esos detalles en las notas o planos como se vio en la parte anterior con el mapa de Cuphead, por si acaso esta era la leyenda:

(Algo así era si mi memoria no esta mal)

-Estuve escuchando canciones de Steven Universe y derepente encontré una que relata exactamente como se está y estará sintiendo Cuphead en unos capítulos más, gracias a ello tuve ideas para que esta parte tuviera sentido y estuviera ligada a las próximas.

Ahora sí, nos vemos mis pesadillas.